♡.•.*

Byun BaekHyun era un chico de pueblo, que aspiraba a algo más que criar animales y no era que viera algo malo en ello ya que de pequeño fue amante de todo ser vivo pero amaba cantar mucho más que cuidar a las vacas o cerdos.

Cuando su mamá enfermó decidió irse a la ciudad junto a ella para buscar un mejor futuro, y lo encontró en una buena empresa.

Su voz dulce conquistó a varios chicos y chicas de la ciudad posicionándolo como un cantante conocido, no demasiado famoso aún pero tenía algunos álbumes de los cuales se sentía orgulloso.

Los paparazzis aún no lo seguían y se sentía tranquilo de que no ocurriera, eso le dejaba una vida mucho más tranquila y normal.

Después de varias relaciones amorosas fallidas, su corazón pedía a gritos recibir un amor sincero y duradero.

Hasta el momento había tenido tres relaciones formales, no terminó ninguna por algún engaño o discusión, simplemente el amor se acabó con todos. Después de semanas junto a algún novio ocurría eso, la llama del amor se apagaba y todo se volvía aburrido.

No era exigente en el aspecto físico, sabía muy bien qué todo lo hermoso en un momento de la vida se iba, sus tres novios pasados eran completamente distintos física y psicológicamente porque le gustaba experimentar y no se cerraba a ninguna opción.

Por eso mismo era bastante picaflor en las fiestas que asistía de sus amigos, noches de pasión de una sola noche, coqueteos que no terminaban más allá de pedir un número telefónico y jamás llamar.

Pero tomó el camino fácil, para muchos lo era, crearse un perfil en una página de citas y buscar a alguien con quien poder estar, un día, una semana, un año, daba igual porque aunque él quisiera una relación estable, los chicos no buscaban eso hoy en día.

Mientras practicaba la nueva canción en la empresa, decidió tomar un descanso de diez minutos, fue a la máquina de café y sacó el celular del bolsillo para ver su perfil.

Al principio pensó que no funcionaría pero cuando vio los diez mensajes sin responder, dejó el café a un lado y comenzó a ver los perfiles de los chicos que le hablaron.

Algunos eran mayores, casi le triplicaban la edad y no andaba buscando eso, uno le envío varios fotos de su miembro mientras lo masturbaba.

BaekHyun acercó la foto y luego bloqueó al usuario —No, no, no, que desubicado, al menos una cita primero.

Se quedó sin aire cuando miró la foto de un chico con gorra negra, si bien lo físico no le importaba, todo el mundo tenía en mente a su persona ideal.

Ojos claros, lindas facciones, cara de bebé, además en su descripción decía que buscaba una relación formal.

Inmediatamente le contestó su mensaje y estuvieron hablando durante todo el día, incluso en la noche antes de dormir SeHun le envío una foto de él acostado en la cama, solo la cara, nada extraño, ni para traumarse.

Quedaron en reunirse al día siguiente, BaekHyun pidió permiso para faltar al trabajo y SeHun ocuparía su horario de almuerzo para estar en la cita.

BaekHyun ordenó su cabello en el reflejo del ventanal del restaurante antes de entrar, buscó con la mirada a su cita pero no lo encontró, miró su reloj de muñeca y aún faltaban diez minutos.

Esperaba que no lo dejara plantado porque le interesaba conocerlo.

El restaurante quedaba cerca de su casa, la mayoría de las personas que iba era gente de su edad, la música ambientaba el lugar para hacerlo más agradable y liviano junto a sus colores llamativos era perfecto para tener una cita. Pidió una malteada y se sentó en una mesa a esperar.

A los cinco minutos entró un chico alto, de cabello castaño y lentes oscuros, los grupos de amigos que estaban en el lugar se sintieron intimidados por el uniforme de policía.

Pero SeHun se acercó al mesón pidiendo su almuerzo. Sacó su celular en lo que preparaban todo y miró una vez más la foto que había guardado en su galería, un chico rubio, con lindas mejillas y ojos picarones.

—Como me lo recetó el doctor —Murmuró SeHun sonriendo al ver la foto de BaekHyun. Era su tipo ideal físicamente, solo faltaba conocer su personalidad aunque se notaba que era alguien bastante extrovertido.

Cuando le entregaron su almuerzo, el cual consistía en una gaseosa, un plato de papas fritas junto a salchichas y puré de papas, sí, SeHun podía comer papas en cualquiera de sus preparaciones en el mismo plato. El postre de frutas no podía faltar.

—Lo que debo hacer para entrar en el uniforme —Dijo SeHun tomando el pedido, estaba a dieta, normalmente comía mucho más.

Cuando se volteó estuvo a punto de tirar la comida, era como si los rayos de sol que entraban por la ventana los hubiesen puesto los ángeles y escuchó el canto de ellos cuando vio a BaekHyun tomando una malteada.

Era hermoso, mucho más que en las fotos que vio de él.

—Bebé —Sonrió embobado, ese apodo quedaba perfecto aquel chico rubio.

Colocó su rostro serio, según él, atractivo, caminó hacia la mesa con aire de grandeza y se sentó frente a BaekHyun.

—Arrestado por belleza extrema en la vía pública, deberá acompañarme —Dijo SeHun quitándose los anteojos oscuros pero todo el momento falló cuando sus lentes cayeron en la comida.

BaekHyun comenzó a reírse y SeHun se sonrojó limpiando sus lentes, decidió comportarse lo más normal posible y no volver a pasar otra vergüenza.

Normalmente era chistoso con los chicos que salía, y era una de las razones por lo que jamás llegaba a una segunda cita.

Lo consideraban más un payaso que un posible novio.

Pero la risa y sonrisa de BaekHyun le parecieron adorable, tanto como para querer volver a verlas.

—Tú debes ser SeHun —BaekHyun acomodó sus brazos sobre la mesa mirando al lindo chico que tenía frente a él.

Su uniforme lo hacía ver sexy pero su carita de bebé queriendo ser un chico grande y maduro lo hacía ver lindo.

Una combinación que amaba.

—Sí —Contestó comenzando a almorzar, tenía un tiempo asignado para comer por lo que no podía perder mucho tiempo —¿A qué te dedicas?

—Soy cantante —Dijo orgulloso BaekHyun viendo cómo SeHun devoraba su comida —No te preguntaré porque con tu ropa respondes esa pregunta.

SeHun asintió y le sonrió mirándolo a los ojos, BaekHyun tomó una de las servilletas y le limpió la salsa que se caía de sus labios.

—¿Y qué buscas en un chico? —Preguntó SeHun haciendo caer un trozo de papa cerca de la malteada de su cita, se quedó quieto apenas lo notó rogando porque BaekHyun no se diera cuenta.

Era la primera vez que le importaba tanto la opinión de alguien, BaekHyun no parecía ser cualquier chico, había algo en él que le atraía demasiado y no era sólo su físico.

Tenía una mirada encantadora que lo hacía sentir único, quería pensar que no miraba a todos los chicos de esa manera y su sonrisa, lo dejaba sin palabras.

Pero BaekHyun tomó una servilleta y cogió el trozo de papa dejándolo a un lado de la mesa, como si estuviera acostumbrado a hacerlo desde siempre.

Cosa que le impresiono a SeHun.

Porque la única persona que hacía eso, era su mamá pero ya no estaba a su lado.

—Alguien divertido —Contestó BaekHyun juntando sus manos frente a él.

—Entonces... ¿Quieres algo de una noche? —Preguntó algo desanimado.

—No, no me mal entiendas —Movió sus manos negando —Me encanta la gente divertida pero me gustaría tener una relación más seria.

—¿Un novio formal? —Preguntó SeHun con una sonrisa.

—Claro, si es que aparece esa persona —Se encogió de hombros y llevó su espalda hacia atrás mirando coquetamente a SeHun.

—¿Divertido y que más?

—Ojos claros —No podía negar que SeHun era ideal para él, aunque comiera como si el mundo se fuera a acabar en cinco segundos —Lindas facciones, que le guste comer...

—¿Con un traje de policía?

BaekHyun asintió y SeHun dejó a un lado su comida para ponerle toda la atención a su cita.

Pudieron conocerse mejor, saber de sus trabajos y familias, conocer sus gustos y disgustos, hablar de cosas cotidianas hasta de temas como los ovnis, tema que colocó SeHun.

—Debo volver a la empresa, pedí permiso para salir solo un momento y me he demorado —Dijo BaekHyun levantándose, SeHun miró la hora dándose cuenta que había pasado su tiempo de almuerzo hace dos horas y no se había dado cuenta.

Su radio estaba apagada por lo que ahora entendía cómo es que estuvo tan relajado junto a BaekHyun pero no se arrepentía de nada.

—Tengo el auto de policía estacionado afuera, puedo poner las sirenas y llegaremos rápido —Sugirió SeHun.

—¿En serio? —Preguntó BaekHyun emocionado por subirse a un auto de policía —¡Eso sería genial!

Al llegar a la empresa, SeHun se bajó del auto quitándose los lentes y llegó hasta BaekHyun quien sostenía su abrigo.

—La pase muy bien en la cita —Dijo SeHun mirando a BaekHyun.

—Yo también.

—¿Podemos vernos de nuevo mañana? —Jamás había esperado tanto por un sí de respuesta para ser feliz.

—Mañana a la misma hora ¿Te parece? —Preguntó BaekHyun con una sonrisa.

—Claro —SeHun se alejó del rubio cuando se volteó entrando a la empresa.

Sus ojos bajaron hacia su trasero, dos enormes nalgas moviéndose con ritmo al caminar.

BaekHyun tenía el atributo que más le gustaba en un chico.

A la semana siguiente, BaekHyun comprobó lo excitante que era desvestir a un policía en su auto, el cual no servía solamente para llevar arrestadas a las personas.

Y SeHun comprobó que BaekHyun tenía el mejor trasero que había conocido en su vida

♡.•.*

gracias a quien sigue, el sig cap ya es el final, omg.
(｡･ω･｡)ﾉ♡