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"¿Por qué? "

Su pierna se mueve con intensidad. No es capaz de detenerla.

Mira a sus pies y el como sus zapatos dejan caer rastros de arena sobre la alfombra del auto a cada golpeteo, con ello la presión parece demasiada.

Intenta mirar a la ventana en busca de algún escape.

" ¿Por qué? "

No hay ningún escape.

No cuando ya había recorrido toda la ciudad a su lado.

Cada rincón parecía tener grabado su nombre, y es que al momento en que su taxista se detiene frente a la señal de un crucero, una ligera oleada de dolor se expande por su pecho al momento en que el taxista se detiene ante un crucero.  Pues sin siquiera intentarlo, una risa amortiguada al explicar una nueva historia se reproduce en su cabeza.

Y niega con su cabeza. Ejerciendo un poco más de fuerza sobre su parpadeo en el vago intento de mantener las lágrimas adentro.

" ¿Por que? "

— ¿Lou? ¿Estas bien? — pregunta Lottie, dejando caer su cabeza sobre el hombro de su hermano en un vago intento de reconfortarlo. Pasa sus brazos sobre pecho y esconde el rostro cerca de su cuerpo.

— Si, creo que algo que he comido me ha dado alergia. No es nada, cariño.

— Has pasado tanto tiempo buscando la verdad que te has olvidado de cómo mentir, tontito. —  su hermana le abraza con cariño.  — Lou, ¿que ha pasado?

— No es nada cariño. Estoy un poco frustrado, es todo. Mi... Mi artículo no está quedando como esperaba.

" Bueno, eso era mitad cierto "

— Eres demasiado talentoso Louis, seguro que sólo necesitas un empujón. Uh, ¿tal vez algo que te inspire? Eso podría ayudar. ¿Sabes que me inspira a mi cuando no tengo idea de que rumbo seguir?

— Presiento que de todas maneras me lo vas a decir.

— Pero claro: toma nota. Lo que inspira a esta Tomlinson, es la voz de Harry Styles. Tiene este tono, tan calmado y alargado que hace sonar como que todo va a estar bien. Me hace creerlo, en serio. ¿Tal vez si escuchas algunas de sus entrevistas... O tal vez una de sus canciones?
Te juro que es mágico. Estoy segura de que las palabras llegarán a ti sin pensarlo dos veces.

Ella tiene razón en ese punto. Pero el recuerdo tan fresco de su voz pronunciando su nombre, riendo en conjunto, gimiendo a su oído solo logra provocar un sollozo.

Louis no tiene corazón para decirle que ha sido esa melodiosa voz lo que le ha afectado tanto.

¿Como podría?

Ni siquiera debería.

— Si, tal vez lo haga.

— Te ayudaré a decirle a mamá y a papá lo del auto de la abuela. Algo nos inventaremos, después de todo he tenido parte de la culpa también.

Ella le abraza aún más fuerte.

— Se que te he arrastrado a mis locuras en estas vacaciones y te he quitado tiempo valioso para tu artículo. Lo siento mucho Lou... No, no sabía que era tan importante para ti. Me quedaré despierta contigo hasta que lo termines.

— No tienes que hacer eso cariño. Ha sido cosa mía que saliera tan mal.
Me he confundido y creí ver señales donde no las había.

— Igual me quédate a tu lado. Te traeré café y compraré tus estúpidos cigarros. Pero solo porque odio verte triste. 

— Gracias Lottie. — Louis se aferra a ella intentando alejar todo lo demás.

Por un momento su respiración parece calmarse.

— ¿Lou?

— ¿Si cariño?

— Hoy hueles particularmente bien. — se ríe — Así que, ¿a que no todo es tan malo?

Louis intenta sonreír pero solo puede contener otro sollozo.

" ¿Por qué? "

Ese olor no le pertenece.







Tardan un poco en llegar hasta Hollywood. 
Y el conductor cobra una tarifa extra por el horario en el cual ha tenido que conducir.

Todo parece tropiezo tras tropiezo.

Incluso debe de sobrevivir a un pequeño argumento por los dólares empapados.

Caminar es pesado, aun teniendo a Lottie bajo el brazo. Y con cada paso el respirar se vuelve más complicado.

El olor de Harry impregnando en su ropa se vuelve demasiado. No entiende como duele demasiado. Pero solo quiere entrar a casa y darse un baño esperando que el agua se lleve todo rastro de los besos compartidos.

Pero poner un pie dentro es enfrentarse a otro obstáculo.

Su madre les espera con la manos en la cadera y la ceja alzada una vez pasada la puerta.

— ¿Ustedes dos donde creen que estaban y que les hizo creer que podían llegar a esta hora?

Lottie ladea cabeza y ofrece una de sus adorables sonrisa.

— Mami. — canturrea alargando la última letra.

— Ah-ah. Nada de mami, señorita. — ella mira a su hijo mayor — ¿Y bien?

Louis no se atreve a mirarla.

Ella siempre había sido capaz de adivinar lo que le sucedía con sólo una mirada. Y en ese momento, no se sentía listo para afrontar su verdad.

No quería admitir lo que había sucedido.

Y como se había rendido tan fácilmente ante un hombre que no quiere saber nada de él.

Del cómo había sido usado. Y después desechado.

Y como ahora debía pretender que nada de eso había pasado.

— ¿Y bien? Espero una respuesta. No me hagan preguntar dos veces, jovencitos.

— Ha sido cosa mía. — dice Louis. — Quería terminar mi artículo y he convencido a Lottie de ir a Malibu.

— ¿¡Malibu?!

— Se que es más lejos de lo que habíamos pensado pero, necesitaba algo de lo que escribir. Y entre eso, he perdido el paso del tiempo mamá.
En realidad, he perdido un par de cosas. Estaba distraído, no estaba pensando y tuve un accidente.

— ¿¡Un accidente William?! ¿Que ha pasado? ¿Están bien? ¿Porque no has llamado a casa?

— Caí en algo como arenas movedizas con el auto. Mi teléfono se ahogo y... Uh, el auto de la abuela también. Aunque ese no lo pude recuperar. Y tuve que caminar de regreso por toda la ruta.

— ¡Es cierto, mamá! ¡Incluso se ha moreteado! Le he visto las marcas

— ¡Lottie! — exclama él. No le apetecía revelar más detalles que pudiesen descubrir su mentira.

— Oh, no. ¿Te has lastimado, cariño? ¿Te duele algo?

" Solo el pecho, mamá..."

— No... No es nada. S-solo ha sido un susto. — intenta hablar y su voz se rompe a medio diálogo. Se convierte en un hilo y de repente, no puede más.

" ¿Qué es esto que duele tanto? "

Pues ella le mira con sus grandes ojos y abre sus brazos en busca de un poco de contacto con su hijo.

Johannah no sabe que ha sucedido, pero ciertamente su hijo lucia diferente.

— Cariño — susurra.  Acariciando su cabeza y escondiendole contra su pecho de la forma más maternal posible.

Aún cuando Louis es ligeramente más alto que ella, parece esconderse hasta hacerse pequeño y encajar en los brazos de su madre en busca de un consuelo que no consigue.

— Lo siento, lo siento mucho mamá. No sé, que estaba pensando. No sé cómo pude ser tan tonto... Yo lo siento. No quería, no quería.... Carajo, ¿como pude? ¿por que?

Ni siquiera sabe que decir.
Solo sabe que duele demasiado.

— Shh, cariño. Esta bien, esta bien. Ya estas con mamá, sacalo todo. — susurra a su oído dejando suaves besos en su sien. — Estas bien.

Pero nada está bien.
No se siente bien.

Parecía estar en el cielo, y ahora se estaba ahogando.

" ¿Por que? "

— Mamá, por favor, por favor. Haz que se detenga.... Duele. Por favor.

Jay le abraza con más fuerza.

— Por favor, que se detenga.

— Ojalá pudiera, amor. Ojalá pudiera.





Lottie observa la escena sin comprender como un artículo de papel ha logrado romper tanto a su hermano.

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