Oliver esta preocupado.

En parte era el hecho del regreso de Slade Wilson y sus amenazas ante la ciudad y su familia y su inminente muerte.

Pero lo que rondaba su cabeza noche tras noche era Barry Allen.

A la mañana siguiente de su partida, los noticieros se llenaron de la explosión del acelerador de partículas en Central City.

Los daños, perdidas y muertes no eran mas que números en aumento.

Y Barry no atiende el teléfono.

Oliver esperaba lo peor, y aun así algo le dolia en su interior. Cada vez que sonaba la contestadora era como si le clavasen una flecha.

De hecho, cree que una flecha duele menos.

A cada oportunidad se alejaba de su compañia y marcaba el contacto agendado como Mocoso

Una de esas veces, después de tres timbres. Respondió

- ¿hola? - preguntó una voz femenina

Y esa preocupación se expandió en un enojo sin motivo aparente

- ¿quien habla? - pregunto pausadamente, con esa voz grave que sólo usa cuando porta la capucha.

- Iris West, ¿quien eres?

Oh, esa Iris West

- Un amigo - se limita a responder - ¿donde esta Barry?

- ¿No lo sabes? - su tono de voz cambia a uno triste - Barry entro en coma

Y eso detono lo que habia querido hacer desde hace un tiempo.

Pidió a Felicity investigar sobre Barry, y a pesar de las preguntas de la rubia, el arquero se limito a exigir el trabajo y partir tan pronto como pudo.

Dejo a su familia, sus amigos, su deber y su ciudad solo para conducir a Central City y visitar a Barry.

Porque la situación podia estar muy mal. Pero aun asi se sentía como si ese niño lo necesitase más.

Al llegar a Central, se dirigió a Laboratorios Star. Enojado entró ignorando toda seguridad

¿Como podia haber dejado que lo tratasen las mismas personas que lo habian puesto comatoso en primer lugar?

- ¿Pero que ca...? - un chico de cabello largo y camisa con estampado que Oliver no reconoció retrocede en su silla, poniendose de pie a tropezones y dando una señal de alto con su mano

- Soy Oliver Queen

-Si, se quien eres

- ¿Donde esta Barry?

- ¿Porque el CEO de Queen's Consolidated quiere visitar a Barry Allen? - pregunta una chica pelirroja sosteniendo una taza de cafe

- Creo que la pregunta es porque lo cuidan ustedes y no un hospital. Voy a traer a los mejores doctores, al menos ellos no le lanzan un rayo- dice, comenzando a subir el tono de voz

- Amigo, tranquilo. Cisco Ramon - se presenta - Caitlin Snow. Te aseguro, cuidamos bien de Barry. Es hospital ya no sabia que hacer, nosotros si. El Doctor Wells...

- Quiero verlo

- ¿Que eres de el?

- Soy su amigo - contesta con un tono grave

- Te llevare con el - la pelirroja lo conduce a una habitación, y al entrar, no sabe como reaccionar.

Desde un inicio, Allen le ha provocado ese efecto. Para un hombre tan controlado y dominante como Oliver, ese no se que es inexplicable. Pero al verlo en esa camilla, incapaz de despertar y dedicarle una de sus sonrisas. Ese no se que, le produjo un apretujon en el pecho.

-  Oh, Barry

- Seguimos sin saber porque no despierta. Te dare unos minutos. - la mujer se va de la habitación, Oliver deja su chaqueta y jala una silla para sentarse a su lado.

Lo mira, por primera vez se detiene a ver cada detalle sin temor a que el o alguien mas lo descubra.

Sus cejas, sus largas pestañas. Cada pequeño lunar en su cara y cuello, incluso aprecio esos labios delgados.

Tan bueno e inocente. Oliver no fue capaz de salvarlo

Con ese pensamiento de culpa, busca su mano bajo la sabana. Y la sostiene.

No sabe cuanto tiempo pasa en esa posición.

Pero cuando Caitlin entra por cuarta ocasión y cierra las persianas, se da cuenta de que es más tarde de lo que esperaba.

Suelta su mano, y le da una media sonrisa. Aunque sabe que no puede verla

- Necesito volver a mi ciudad. Volvere en cuanto pueda - Cisco y Caitlin asienten - No le digan a nadie que estuve aqui

Se pone su chaqueta y camina a la salida

- Gracias por cuidar de Barry

- ¿Crees que no quiera que sepa que estuvo aqui por que le hizo algo malo...? - dice Cisco una vez que Oliver se fue

- Creo que no quiere arruinar su reputación - bromea Caitlin - De todas formas, ire a revisar a Barry

Aunque ninguno de ellos supo, ni siquiera el mismo Oliver, que era algo más que solo eso.