Una disculpita si te hace llorar pq a mi si

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SeokJin se despierta junto a un cuerpo caliente envuelto a su alrededor y sonríe sin abrir los ojos, se arrima más cerca y suspira con satisfacción mientras los brazos alrededor de él se aprietan.

Entonces escucha un movimiento que no viene de la cama, y abre los ojos, siente el pánico a través de su pecho y después por todo su cuerpo.

TaeHyung está ahí, a los pies de la cama. Mirándolos a ambos pero su mirada esta, asombrosamente, muerta y vacía.

- TaeHyung...

TaeHyung le da la espalda y se aleja, sin decir nada, SeokJin sale de la cama a toda prisa y en su urgencia golpea con el codo a JungKook en el pecho, lo que le hace gruñir a este y sentarse con un gemido.

SeokJin no se preocupa por el dolor que JungKook puede estar sintiendo. Él está intentando ponerse sus pantalones. Toma al azar una camiseta sobre la silla en la esquina de la habitación de JungKook y dice-: SeokJin, espera. ¡Mierda! - JungKook mira a su alrededor confundido, tratando de averiguar qué coño está pasando.

-Él estaba aquí -explica SeokJin-. Nos ha visto.

Todo el color se desvanece de la cara de JungKook en un instante e inmediatamente sale de la cama, desnudo y eso representa todo lo que está mal en esta situación.

-Yo iré tras él.

-No -dice SeokJin con firmeza-. Iré yo. Yo provoque esto. - Termina de meterse la camiseta por la cabeza y sale de la habitación, escucha a JungKook decir su nombre.

No tarda mucho en encontrar a TaeHyung. Este parque es donde siempre viene cuando él necesita un poco de paz, cuando necesita un momento para pensar. Está sentado en un banco, con los codos sobre las rodillas, mirando a la nada hasta que escucha la llegada de SeokJin, y luego lo mira, con ojos brillantes llenos de furia.

Cualquier cosa es mejor que la mirada vacía de antes.

-Aléjate de mí, SeokJin.

-No -dice SeokJin en voz baja. Pero no trata de sentarse-. Necesitamos hablar.

TaeHyung lo mira con disgusto. -¿Te has bañado siquiera? ¿O todavía sigues cubierto con él?

SeokJin se traga su vergüenza. No sólo está cubierto en la evidencia de haber estado con JungKook, también está usando la ropa de JungKook. No podría ser menos sensible ante la situación aun si lo intentara. Su cara arde. -Lo siento.

TaeHyung resopla con una risa amarga, mira hacia el suelo, moviendo la cabeza. -¿Cuánto tiempo ha estado sucediendo? -Le pregunta-. ¿Por cuánto tiempo has estado follando con él en nuestra propia casa?

-No lo hice. Solo.... Solo fue anoche -da un paso más cerca-. Nosotros, tuvimos una discusión, y nos dejamos llevar. - Quisiera decirle que no significó nada, pero no quiere mentirle, no ahora.

Hay una pausa antes de que TaeHyung hable de nuevo. -Sin embargo, no se te ocurrió así nada más, ¿cierto? Tú no decidiste de repente simplemente follar con el mejor amigo de tu prometido.

Su voz es áspera, cruel, y corta a SeokJin como una cuchilla.

SeokJin piensa en irse, pero TaeHyung no se merece eso. -No, -admite-. No sé qué decir.

-Sería bueno si me dijeras la verdad, -dice TaeHyung mirándolo, la furia en sus ojos es tan intensa que es casi difícil creer la tranquilidad en su tono al hablar.

-Las cosas se han estado desarrollando... desde hace un tiempo -retuerce las manos, se agacha frente a TaeHyung, a un metro de distancia. No piensa que TaeHyung pueda soportar que se siente junto a él-. Me siento atraído por él, -dice en voz baja, mirando a los pies de TaeHyung para no tener que ver la reacción que esas palabras provocan-. No debería ser así, pero lo es, no puedo evitarlo.

-Todo el mundo se siente atraído por él, -escupe TaeHyung-. Es el puto Jeon JungKook. Pero no todos caen en la cama con él dos días antes de casarse con otra persona, vas a tener que decir algo mejor que eso.

SeokJin asiente, toma una respiración tratando de encontrar un poco de coraje y la fuerza que necesita para decir esto en voz alta-: Yo siento algo por él.

-¿Qué? - TaeHyung reacciona realmente sorprendido. A pesar de haber confesado sentir atracción al igual que todos sienten hacia JungKook, la idea de que la conexión entre él y SeokJin podría ir más allá de eso, parece superar su ira.

-Lo siento.

-¿Sientes algo por él, como amor...? -Lo mira incrédulo-. ¿Lo amas?

-Yo... - SeokJin siente calor ahora que se lo pregunta de forma directa, siente pánico pero eso no tiene nada que ver con esta confrontación-. Estoy muy confundido en este momento. Mi cabeza es un desastre.

-Eres un idiota, SeokJin, -dice TaeHyung después de un momento. SeokJin no está seguro de si se está imaginando la compasión en su tono-. ¿De verdad crees que alguna vez él podrá corresponderte? Ese hombre no conoce el significado de la palabra amor.

TaeHyung suena muy seguro, y SeokJin piensa en sus anteriores conversaciones con JungKook, en la certeza absoluta que JungKook tiene al decir que el amor es para los tontos.

-No eres el primero, ¿sabes? -le dice TaeHyung, casi brutalmente-. Ha tenido un par de chicos como tú a lo largo de los años. Se acerca a ellos, los hace enamorarse de él. Pero después, se aburre, y los desecha como basura. Al igual que hará contigo.

Hace una pausa, y SeokJin no puede hacer nada más que tragar la bilis que sube por su garganta.

-Te he dado todo. Te he dado un hogar, una empresa, incluso he pagado la universidad de tu maldita amiga. ¿Qué más tengo que hacer?

-Nada -murmura vagamente. Apenas logra escucharlo.

Su cabeza al igual que todo su sistema se ha inundado con la verdad en las palabras de TaeHyung. No tiene idea de qué hacer con esta información, con lo que las palabras de TaeHyung están haciendo a su pecho, a su corazón. -Nunca fui detrás de tu dinero, TaeHyung.

-¿Qué te ha prometido? -Pregunta TaeHyung-. Nada. Ni una maldita cosa. Él ya tiene lista su maleta para volver a América. Ya tiene un pie fuera de la puerta. Y tú estás lanzando todo por la borda, ¿por él?

SeokJin quiere vomitar, siente náuseas llegando a su garganta, siente el estómago revuelto. Hay demasiado conflicto en su cabeza, hay una batalla de emociones, sus nervios están alterados no pueden hacer frente en este momento. -No sé lo que estoy haciendo -admite, y las palabras le saben ácidas en la boca.

TaeHyung suspira. -Bueno, necesitas averiguarlo, -dice-. Porque si me dejas plantado de pie allí, frente a todas esas personas MAÑANA...

SeokJin lo mira fijamente, la sorpresa le hace olvidarse un momento de JungKook. -¿Todavía te quieres casar conmigo?

TaeHyung lo observa, sin siquiera una pizca de amor. SeokJin no lo puede culpar. -Todos cometemos errores, -dice llanamente-. Y sé cómo es él, cómo consigue ser deseado. -El dolor se manifiesta en sus facciones por un instante antes de desvanecerse. -Podemos superar esto, -dice con deliberación, casi como si estuviera hablando para sí mismo- mientras nunca vea su rostro de nuevo.

-Pero él es tu más antiguo amigo - SeokJin no puede permitirlo, ser la causa que ponga fin a esta amistad, no quiere esa responsabilidad, no quiere tener esa sangre en sus manos. Prefiere alejarse de los dos.

Pero al parecer, TaeHyung ya tomado una decisión. -Ahora, él no es nada para mí -dice con tono oscuro y doloroso. Se levanta de repente, y SeokJin continua mareado con la brusquedad de la situación, la forma en que paso de despertar, cálido y seguro entre los brazos de JungKook a esto, tiene el estómago revuelto por tanta confusión, el pecho dolorido a pesar de saber que, de alguna manera, la balanza se ha inclinado a su favor, cuando eso no tiene ningún sentido en absoluto.

-Tengo que ir a casa a cambiarme, -dice TaeHyung, mirando a SeokJin de tal forma que le hace sentir sucio-. Y tú necesitas bañarte. Vamos.

SeokJin no tiene tiempo ni oportunidad de oponerse. TaeHyung camina en dirección a su apartamento, y SeokJin le sigue. Cuando llegan al apartamento, SeokJin teme entrar. Si JungKook todavía está allí, esta pesadilla va a ir de mal en peor y no tiene ni idea, ni puta idea, de qué lado tomara.

Pero no tiene por qué preocuparse. TaeHyung hace un barrido rápido por el lugar antes de volver con SeokJin que espera en la sala y con una expresión de triunfo le dice-: Él se fue.

El mundo derrumba bajo sus pies. -¿Se fue cómo en...?

-Tomó todas sus cosas y se largó, sí. -Sonríe, es la sonrisa más fría que SeokJin ha visto-.Te lo dije, esto es lo que hace.

SeokJin se aleja entumecido, pero resguarda cuidadosamente todos sus sentimientos, conteniéndose, incapaz de expresar nada con TaeHyung tan sofocantemente cerca. Se mete en el dormitorio, el dormitorio que comparte con su prometido, abre un cajón para sacar ropa limpia.

Y ahí, debajo de una pila de camisetas, hay un sobre, y el corazón de SeokJin salta hasta su garganta mientras lo saca. Mira por encima de su hombro para asegurarse de que todavía está solo y luego lo abre.

Dentro hay un fajo de dinero y una nota que dice simplemente: Ganaste.

Se deja caer en el borde de la cama, no puede respirar, algo araña sus entrañas y quiere gritar. Recuerda que una vez, hace no mucho, hizo una apuesta con JungKook, le apostó mil libras a que se enamoraría en el futuro cercano, era una apuesta que JungKook estaba muy seguro ganaría. Y aquí esta SeokJin ahora, sentado con un puñado de dinero y una nota, concediendo su victoria, escrita por la mano de JungKook.

Sólo que no se siente como una victoria en absoluto.

En medio de una oleada de ira, dolor y confusión, regresa todo dentro del sobre y sus dedos rozan algo de metal.

Oculta en la parte inferior del sobre, encuentra la cruz de JungKook.

Esconde todo de nuevo dentro del cajón, y se va a la ducha, y el agua caliente enmascara sus lágrimas, así puede pretender que no se está cayendo a pedazos, que todo dentro de él se derrumba por la pérdida.