Harry despierta con un familiar sonido de pequeños pies corriendo por el pasillo.

Bueno, tal vez ya no tan pequeños.

Sonríe un poco, adormilado y sin abrir los ojos, disfrutando de lo debe ser uno de sus sonidos favoritos. No importa el paso de los años.

Solo escucharlo hace que su corazón lata más fuerte en oleadas de amor para repartir y una parte de él, demasiado enterrada que apenas tiene fortaleza suficiente para resurgir, anhela más. Aumenta cuando se percata de lo cómodo que está atrapado bajo el cálido cuerpo de Louis apretandolo cerca. Él es un gran abrazador al dormir, eso es seguro, lo aprieta fuerte en cada momento de la noche y Harry no podría amar más el confort que ese confinamiento le otorga.

Aun cuando lo tiene, justo ahí, resulta abrumador lo mucho que añora ser contenido. Sonrie, siendo cada vez un poco más consciente de su entorno saliendo del estado de obnubilación, y se aprieta un poco más, tanto como puede, contra el pecho desnudo de Louis. Esto solo es mejor, el contacto piel con piel- mierda. Aún tiene demasiado miedo de abrir los ojos y descubrir que Louis es parte de un sueño.

Pero tiene su mano enterrada en su cintura, un lazo fuerte y un poco bruto porque sus manos son algo rasposas recondandole que es real.

Así como un tenue y aún así presente ardor en sus pezones que derrite sus entrañas más allá del libido. Porque es señal de que Louis se ha prendido de él durante la noche calentando con su boca y constantes succiones la piel de Harry. La idea se ser tan anhelado, tan deseado por alguien que no puede esperar a estar despiertos, de estar en contacto de forma tan íntima aún al dormir. De ser tal fuente de confort.

— Uhm, demasiado temprano — murmura Louis contra su piel. El sonido de su voz ronca apaciguado por el hecho de que no se han separado en absoluto. Por el contrario, Harry acaricia el cabello naciente en la nuca de su novio, se está haciendo largo y pronto necesitará un corte, pero le gusta como se siente. Y le gusta poder ser tan táctil con él.

Porque apenas se acerca esa inocente caricia dirige el rostro de Louis hasta sus clavículas y en ese abrazo perpetuo comienza a besar su escote de forma perezosa en un estado que Harry solo puede definir como devoción.

Louis se mostró vulnerable anoche. Aún sin decirlo directamente, Harry quiere ser capaz de abrazar esa vulnerabilidad, cuidarlo también.

— Te amo, cielo — lo dice, solo porque si, porque lo siente tan intensamente y Louis merece escucharlo. Si palabras de afirmación y contacto físico es lo que quiere, lo que necesita, se encuentra más que gustoso de proporcionarlo. Porque Louis lo ha querido todo este tiempo en el idioma y el ritmo que Harry ha necesitado y solo quiere que sienta -porque lo sabe, lo mutuo que es.

Puede sentir como los labios de Louis se curvan en una sonrisa sobre su piel antes de marcar otro peso. — Te amo también, bebé. — Harry acaricia pasa los dedos entre su cabello, Louis acurrucandose un poco más cerca de su pecho. — ¿Qué te despertó tan temprano? — pregunta, aun medio dormido pero siempre alerta de su chico.

Él deja más besos, justo en medio de esternón arriba de su mariposa. Es solo un consuelo que tiene por objetivo volver a arrullar a Harry para que lo acompañe en su sueño. Louis solo quiere acurrucarse un poco más. Preferentemente dándose la vuelta para poder hacer cucharita con él, ama la manera en la que Harry disfruta de hacerse tan pequeño.

— Elio esta despierto.

Eso hace que salga por completo del estado de sueño. Levantándose para mirar a Harry. — ¿A esta hora, que sucede?

— No lo se. — Responde, si bien está algo preocupado se muestra tranquilo. Se para de la cama y toma su bata de seda para cubrirse, en caso de que sea necesario salir. — Estaba por ir a ver.

— Te acompaño. —  Louis, por su parte, es algo desastroso. La mitad de su cabello despeinada hacia arriba y con la vista borrosa por el sueño se enreda en las sábanas al levantarse y estas caen al suelo destendiendo un poco la cama. Batalla por dar brincos y entrar en un par de bóxers lo suficientemente largos como para que sea decente salir.

Louis aún no termina de dar tropezones cuando Harry se percata de una nota que fue deslizaba para su puerta. La toma y se sienta en la cama para poder verla con Louis sentándose a su lado.

— ¿Qué es eso?

Como respuesta, abre el papel doblado.

Mami
Lo siento, no quería gritarte :(
¿Me perdonas?

Sus ojos se llenan de una capa tan pequeña de lagrimas que no pueden ser derramadas, pero no es proporcional al apretujon en su pecho.

Pues en la repisa izquierda de su closet tiene una caja con todas las pequeñas
notas y dibujos (que no fueron conservados en cuadros) que Elio le ha dado a lo largo de los años. Y es que Harry lo sabe, una disculpa de un adolescente es un gran asunto, sobre todo ante sus padres. Requiere mucho valor.

El mismo Harry en su edad adulta aún tiene problemas para disculparse de frente.

— ¿Sabes? — el pone una mano sobre su pierna en un consuelo silencioso. —  Aún cuando cambie por fuera, el sigue siendo el mismo chico por dentro. Siempre será tu niño.

— Nuestro niño. — Louis toma el rostro de su novio y une sus labios en un corto beso de buenos días. Harry sonríe, más y más oleadas de amor desprendiéndose de él, y es que Elio escribió su nota con crayón azul.

Su crayón azul favorito.

Es más tarde, a la hora del desayuno y una vez pasada la incómoda pero necesaria charla sobre el conflicto de ayer que ellos le dan la noticia a Elio de que si podrá asistir a la fiesta de Jhony pues Louis se encargará de cuidarlo. Todo se siente bien de nuevo.

・。。・゜🥞 ゜・。。・

Preparar las cosas para su partida es, sin duda, estresante. Debe confirmar su asistencia, comprar pasajes de manera repentina para Niall y para él, mantener la producción de sus productos al mismo tiempo que destina parte de los recursos a lo que será su demostración y pruebas gratis para el congreso. Y preparar su ponencia, sin descuidar el resto de las áreas de su empresa ni su hogar. Hacer las maletas, elegir que diablos va a vestir cuando presente, preparar su discurso y aguantarse las ganas de llorar porque es tan jodidamente tímido y odia la idea de atraer tanta atención en un escenario.

— Lo vas a hacer increíble, amor. — Louis intenta consolarlo, Harry ni siquiera sabe como lo logra. No han dicho nada en horas, pues Louis esta demasiado ocupado resolviendo una guia de estudio para sus examenes de certificación.

Si, hay que sumar eso a la lista de preocupaciones de Harry.

En un mundo ideal, el preparia té y masajaria el cuello de Louis para disolver las contracturas que el estrés provoca; porque aunque no lo dice oscuros circulos comienzan a aparecer bajo sus ojos, esta despierto antes que Harry y se duerme tiempo despues de él.

Solo quiere cuidarlo pero es que están tan ocupados todo el tiempo que es tan dificil encontrar tiempo para ellos.  Así que por ahora, esto es lo que tienen. Louis sentado en su cama mientras Harry usa sus muslos como almohada y ve un programa con subtítulos para que el ruido no interrumpa a Louis con su estudio.

Sabe que es temporal. Que solo se ira por unos pocos días y que en realidad Louis es más que capaz de cuidar a Elio solo. Es solo que el desearia no poner más peso sobre su espalda.

— Vamos, dime que te angustia bebe. — dice de nuevo. Harry intenta reprimir una sonrisa.

— ¿Cómo, siquiera, sabes que algo me pasa? — pregunta con hoyuelos formándose en sus mejillas. Como respuesta, escucha a Louis cambiar de página antes de meter los dedos entre sus rizos y masajear su cuero cabelludo.

— Porque te conozco. — el continua con sus cariños. Harry siente el sueño llegando hasta el con el constante arrullo.

—  Se que solo son unos pocos días pero aún así... No quiero ir, tengo que ir. Y odio sentirme obligado a hacerlo.

Louis marca su página y deja su guía de estudio sobre la mesilla de noche. Harry debe voltearse un poco y el ángulo es extraño.

Vaya, Louis tiene una nariz realmente bonita, piensa. Por un segundo, como una fugaz rafaga, su mente desvaria a bebés con narices diminutas y preciosas. Tan rápido como llega, se va. Y no sabe que hacer con eso.

Wow, ¿es acaso algo que quiere?

— ¿Es algo en particular? ¿Es... uhm, soy yo lo que te preocupa? — Louis interrumpe su hilo de pensamiento y la sorpresa se reemplaza por preocupación

— ¡No! — se apresura a decir ante la voz levemente cortada de su novio. — No, para nada. Es la fiesta... es, definitivamente la fiesta.

— Es una pijamada por un cumpleaños número trece. Se que Jhony no nos agrada mucho pero es un evento importante.  Su primera fiesta.

— Justamente eso me preocupa. — Louis da un trago a su te y después usa su mano libre para acariciar el rostro de Harry.

Si no supiera mejor, casi diría que es una clase de estrategia para manterlo dócil y tranquilo, para ceder al permiso de su hijo.

— La primera vez que yo fui a una fiesta quede encinta. — suelta de repente. El rostro de Louis se colora en segundos y hay pliegues de preocupación por todos lados.

— Oh

Silencio.

Si bien lo toma por sorpresa, Louis no se siente inseguro ante la mención del ex-novio de Harry, si es que puede considerarse de esa manera. Pero si lo envuelve una sensación extrañamente familiar a posesión.

Él no importa. Debe repetirse ante la extraña oleada de celos. Louis es el padre de Elio, no el.  ¿Y honestamente? La mayoría del tiempo olvida que el no engendró a Elio.

— Bueno, yo—¿tu crees...? Es decir. — respira abrumado, las palabras atoradas en conjunto. — ¿Quieres hablar de eso? ¿Tu quisieras contarme?

— No hay mucho que decir. — Harry toma la palma de Louis. Se toma un segundo para admirar los detalles de sus dedos y la tinta que decora su piel. Después besa sus nudillos. — Tenía un novio. Eso ya lo sabes. Teníamos un par de meses juntos, me dijo que quería más y yo accedí. Estaba muy emocionado, para ser honesto pero fue... ¿decepcionante? No se. No esperaba un cuento de hadas pero tal vez ¿algo? ¿especial...? No lo se. Ahora me parece algo estupido pero entramos al baño de invitados, me dilate solo con lubricante barato, me inclino sobre la taza del baño y dos minutos después todo había terminado. — Cuenta sin darle mucha importancia. — Lo único bueno de eso fue que meses después tenia a Elio, pero no fue memorable en absoluto.

Louis toma su mano y repite el gesto que Harry antes tuvo con el, besando sus nudillos con devoción y piensa, tal vez, lo hermoso que sus dedos se verian con un anillo de bodas en él.

— Lamento que no haya sido el recuerdo que esperabas tener, amor. Como he dicho, mereces especial en cada gesto.

— No importa, estamos creando nuevos recuerdos ahora ¿no es así? Suficientes para reemplazar una vida llena de malos recuerdos. 

Louis debe curvar su espalda, tal vez demasiado, pero quiere besarlo y va a besarlo ahora. Lidiara con la contractura después. Así que sonriendo junta sus labios apenas un segundo y sin separarse murmura para él — Y una vida entera no me alcanzará para tratarte como que mereces, amor. Pero será la misión de mi día a día.

La besa un poco más, profundizando porque quiere saborearlo y suspira porque nunca deja de sentirse tan bien. Porque los besos cotidianos no son suficientes para dejar de anhelarlo.

— ¿Tu...uhm — Louis sospecha lo que serán sus siguientes palabras. No le molesta, pues esta seguro de su verdad, y esta tan listo para besarlo, tocarlo, adorarlo hasta que quede claro. — ¿Tuviste-antes, me refiero...?

Esta tan listo para decirle todas las cosas que no hizo con nadie más y narrar las primeras veces que han construido juntos. Pero la pregunta no se formula en absoluto pues un tenue, casi temeroso toque sobre la puerta, los distrae.

Una sonrisa queda atrapada entre ellos.

— Pasa —  Harry eleva la voz para ser escuchado detrás de la puerta. Abriendo el marco tan lento que la madera rechina, Elio asoma su esponjosa cabeza con una mirada de cachorro perdido.

Louis se está haciendo para identificar esos ojos. Una clásica mirada Styles. Pero reconocerla no hace más sencillo enfrentarla y Louis no sabe que va a pedir, pero si sabe que con ese adorable puchero la única respuesta que va a salir de él es un si.  Mierda, el realmente está dispuesto a quemar el mundo por sus chicos favoritos.

Pero los pasos de Elio son lentos y las grandes pantuflas de cocodrilo contrarrestan con sus extremidades largas y delgadas.

— Yo... — dice con timidez en cuanto llega al pie de cama. Sus padres lo miran con atención. — Se que no es viernes de películas, pero estaba pensando. Se que te iras solo unos días mami, pero voy a extrañarte. Y quería saber ¿si puedo dormir aquí? ¿con ustedes? Solo hoy, lo prometo.

Louis mira a su novio, aun recostado en sus piernas y sabe que no es el unico vulnerable a la mirada de Elio. Harry sencillamente irradia un brillo diferente cuando se trata de su hijo, y esa es una de las tantas razones por las que Louis esta enamorado de él.

— Claro que si, corazón. Vamos. Tal vez tenerte aquí pueda convencer a tu papá de descansar un poco.

Louis, ciertamente, es un hombre con prioridades claras. Así que deja sus guías y en lo que parece una rutina ya memorizada Harry pronto encuentra su lugar cerca de el. En un abrazo que compromete la circulación del brazo de Louis pero que es un precio gustoso de pagar.

Y para continuar su tren de abrazos Harry sonrie abriendo un espacio en la cama para su niño. — Vamos, Eli. — Pero Elio no toma el espacio que su madre le ofrece. En su lugar busca acurrucarse entre las piernas de Harry, recostado encima de él, su rostro bien acurrucado ahí donde está su corazón.

Conmovido, Harry busca la mirada de Louis en un silencioso gesto de "¿Lo has visto?".

Así que lo abraza. Lo aprieta fuerte y Elio se acomoda mejor, comenzando a moldear en esa manía suya cada uno de los rizos despeinados de su niño.

— Mami — dice bajito. — ¿Puedes contar algo hasta que me duerma? Lo que sea. Solo quiero escuchar tu voz, ¿si?

Harry asiente. Y como es tan increíble comienza a recitar palabra por palabra alguna de sus meditaciones guiadas. Louis no sabe en qué momento, pero sucumbe ante su lenta y grave voz.

Poco después Elio se arrulla hasta su sueño, perfectamente refugiado entre el calor y las suaves vibraciones de la voz de su madre. Entre sus latidos y sus respiraciones creando una sensación que sólo puede ser entendida como hogar.

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Si. El capitulo se llama así porque viene pura miel en esta familia. 🐝

Tenia muchas ganas de escribir esta parte porque yo tengo muchos problemas para dormir, y es parte de mi rutina taparme con mi cobija de H escuchando su meditación guiada de la app de calm. (Bien ventaneada pero 10/10. Recomiendo)

Total que quería escribir un capitulo que pudiera sentirse como un abrazo al dormir. Ojalá les haya gustado

¿A ustedes también les da mala espina la fiesta de Elio como a Harry o son team Louis y confian que todo va a salir bien?

Gracias por leer. ♡