「❛ ⁰¹ Cazadora de Fuego ❜」'

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La brisa nocturna soplaba fría mientras ajustaba la correa de mi armadura ligera. Estábamos en una cueva cerca de un acantilado, donde Daylight descansaba tranquilamente junto a la fogata. Pero mi mente estaba lejos de la tranquilidad. Había escuchado rumores de un campamento de cazadores en las cercanías, y si esos rumores eran ciertos, no podía dejar que esos miserables siguieran capturando dragones

- Vamos nena, tenemos trabajo que hacer - dije mientras acariciaba suavemente las escamas brillantes de Daylight. Ella abrió sus ojos y soltó un bufido, claramente molesta por ser despertada

Subi mi máscara y monté sobre la espalda de Daylight y despegamos hacia el cielo nocturno. Volamos toda la noche en silencio. Daylight no era de muchas palabras - si pudiera hablar, claro - pero compartíamos un lenguaje secreto. Ella estaba dispuesta a acompañarme a donde fuera, aunque a siempre refunfuñara con esos pequeños gruñidos

Cuando la primera luz del alba comenzó a asomar, aterrizamos en una pequeña isla. Dejé que Daylight descansara mientras revisaba el perímetro. Encontré rastros claros de un campamento abandonado: cenizas aún tibias, herramientas rotas y marcas de jaulas en el suelo. Pero lo que llamó mi atención fue un mapa arrugado, olvidado como si fuera basura

- Idiotas. No puedo creer que sean tan descuidados - murmuré para mí misma, recogiendo el papel y estudiándolo. Había una ruta marcada, una pista clara hacia su siguiente destino

Volví rápidamente a Daylight - Encontré algo, nena. Es hora de terminar con esto -

Despegamos de nuevo, siguiendo la ruta marcada en el mapa. No tardamos mucho en encontrar a los cazadores; estaban aún en el mar pero estaban muy cerca de una isla, de seguro irían por más dragones, el ruido de sus risas y gritos llenaba el aire

- Bien, nena. Vamos a darles un espectáculo que no olvidarán -

Nos lanzamos en picada. Daylight disparo sus llamas azules contra los barcos, destruyendo todo a nuestro paso. Los cazadores entraron en pánico, corriendo en todas direcciones y lanzando flechas, rocas y redes hacia nosotras. Pero no se los iba a poner fácil

- ¡Eso es todo lo que tienen! - grité, sintiendo la adrenalina correr por mis venas mientras destruíamos un barco tras otro

Sin embargo, la balanza comenzó a inclinarse. Más barcos llegaron y nos rodearon. Antes de que pudiera reaccionar, una cadena voló hacia Daylight, atrapando una de sus patas

- ¡No! - grité, intentando desatarla, pero otra cadena nos envolvió a ambas, inmovilizándonosen el aire

Por primera vez en mucho tiempo, sentí verdadero miedo. Estábamos atrapadas, rodeadas, y no había escapatoria. Los cazadores nos atraian poco a poco ya que Daylight no dejaba de tratar de volar para escapar, las risas burlonas se hacian cada vez más fuertes, de repente, un rugido ensordecedor rompió el caos

Desde el cielo, un dragón negro como la noche descendió, disparando explosiones de plasma que hicieron retroceder a los cazadores. Un Furia Nocturna

- ¿Qué demonios...? - murmuré, sorprendida al verlo en acción

Aproveché la distracción para desatar las cadenas y liberar a Daylight. Ella lanzó un rugido de ira y atacó con aún más ferocidad. Juntas acabamos con los barcos restantes, forzando a los cazadores a saltar al agua para salvarse

Cuando el último barco fue destruido, descendí en la cubierta de uno de los restos, lista para enfrentarme a quienquiera que hubiera intervenido. Pero no estaba preparada para lo que vi

Dos dragones aterrizaron frente a mí. El primero era el Furia Nocturna, con un jinete que saltó ágilmente de su lomo. Era un chico delgado, con una prótesis de metal en la pierna y una expresión preocupada en su rostro. Su cabello castaño desordenado y sus ojos verdes lo hacían parecer más inofensivo de lo que probablemente era

El segundo jinete bajó de una Pesadilla Monstruosa. Era un tipo musculoso, con el cabello negro y una actitud de "mírenme, soy el mejor". Llevaba una gran sonrisa de autosuficiencia mientras cruzaba los brazos

- ¡Vaya espectáculo, eh, Hipo! - dijo el pelinegro, claramente con un tono de sarcasmo

El chico con la prótesis solo rodó los ojos pareciendo, supuse era Hipo. Luego dirigió su mirada hacia mí - ¿Estás bien? -

Retrocedí unos pasos, manteniéndome alerta mientras Daylight gruñía en dirección a los desconocidos. No estaba del todo convencida de que fueran aliados, incluso después de que el chico de la pierna metálica alzó las manos en señal de paz

- No queremos hacerte daño, lo prometo - dijo con una voz calmada, aunque algo nerviosa. Sus ojos verdes parecían sinceros, pero eso no era suficiente para mí

- ¿Ah, sí? Entonces van a demostrarlo - dije, cruzándome de brazos. Señalé los restos de los barcos. - Si quieren quedarse, van a ayudarme a liberar a los dragones capturados -

El chico asintió de inmediato - Por supuesto. Eso también es lo que buscamos -

El pelinegro, Patán, soltó un bufido. - ¿Nos estás dando órdenes? Yo no tomo órdenes de nadie -

- Perfecto, porque no te estoy dando una opción - respondí con una sonrisa sarcástica, lanzándole una mirada que lo hizo callar

Sin esperar más, baje a la bodega y empecé a abrir las jaulas que retenían a los dragones. Daylight me ayudaba para que los dragones no se pusieran agresivos, seguí así con otros dos barcos

Cuando todos los dragones estuvieron a salvo, volamos hacia una isla alejada. Necesitaba un lugar tranquilo para tratar a los heridos. Allí, instalé un campamento improvisado mientras revisaba uno por uno a los dragones que habíamos rescatado

- Vaya... Sabes mucho sobre dragones - comentó el chico de la pierna metálica, observándome con una mezcla de admiración y curiosidad - ¿Cómo aprendiste todo esto? -

- Años de práctica y experiencia - respondí, concentrada en vendar la pata de un Gronckle herido

- Aun así, es impresionante... Eira, ¿verdad?

- ¿Cómo sabes mi nombre? -pregunté, levantandome dirigiendo mi vista a el con el ceño fruncido

- Bueno, es que... Eh... - titubeó, claramente nervioso - He oído hablar de ti. Eres la "Cazadora de Fuego", ¿no? -

Solté una carcajada corta -Supongo que la fama me precede. ¿Y tú quién eres, pierna metálica? -

-Ah, soy Hipo. Hipo Haddock -

- ¿Ese es tu nombre real? -pregunté, alzando una ceja

- Sí, ya sé que suena ridículo, pero es lo que hay - respondió con una sonrisa algo tímida

Patán intervino, cruzando los brazos -Y yo soy Patán Jorgenson, por si te interesa. Soy conocido por mi fuerza y habilidad en batalla -

- Claro que sí, campeón - le respondí, rodando los ojos

Mientras tanto, Daylight, que normalmente no confiaba en nadie, empezó a jugar con el Furia Nocturna y el Pesadilla Monstruosa. La escena era surrealista, y no pude evitar sonreír al verla tan relajada

- Parece que se llevan bien -comentó Hipo, mirándolos con una sonrisa pequeña

- Eso es raro. Daylight no confía en nadie, pero supongo que estos dos se lo ganaron -

Después de un rato termine de curar a los demás dragones, me acerqué a ellos - Gracias por rescatarnos. ¿Qué hacían por aquí, de todos modos? -

Hipo suspiró, su expresión se volvió más seria - Estábamos atacando unos barcos de cazadores de dragones. Pero las cosas salieron mal... El resto de mis amigos fueron capturados, junto con sus dragones -

- ¿Y no pudieron hacer nada? - pregunté, sorprendida

- Nos disparaban flechas con raíz de dragón -explicó, con frustración en la voz

- Odio esas cosas, e tenido que curar a varios dragones por esa basura - respondí enojada -¿Y ahora qué? -

- Vamos a una isla donde hay un Screaming Death - respondió Hipo

Fruncí el ceño - ¿Un Screaming Death? ¿Estás loco? -

- Lo necesitamos para construir una armadura resistente a esas flechas - explicó con calma, pero pude ver que estaba nervioso por mi reacción

Me llevé una mano a la cara, suspirando - Ese plan es una completa locura, es un plan suicida -

- Lo sé, pero es la única opción que tenemos - dijo Hipo, mirándome con seriedad

- Entonces, buena suerte -

-Espera... - Hipo me miró directamente a los ojos, con una mezcla de determinación y súplica - ¿Nos ayudarías a liberar a mis amigos y a sus dragones? -

- No -

La palabra salió antes de que pudiera pensarlo. Pero en cuanto vi su expresión de desilusión, y recordé a los dragones capturados, comencé a reconsiderar

- Mira, yo no hago equipo con nadie. Pero si esto significa liberar a más dragones... Está bien, los ayudare -

Hipo sonrió, y por un momento, algo en su expresión me hizo sentir un cosquilleo extraño. Pero lo ignoré. Tenía un trabajo que hacer

- Gracias, Eira. No te arrepentirás -

- Eso espero, pierna metálica. Eso espero -

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Hipo comenzó a detallar su plan con tanto entusiasmo que apenas podía seguirle el ritmo. No dejaba de moverse de un lado a otro, gesticulando con las manos mientras intentaba explicar como llevaríamos a cabo el plan

- Entonces, si la armadura resiste a las flechas, podremos atacar de frente y liberar a mis amigos y a sus dragones - decía, su mirada completamente enfocada en el mapa improvisado que había trazado en la arena

- Ajá... claro - respondí, sin mucho entusiasmo, más entretenida en cómo se rascaba la nuca cada vez que parecía perderse en sus pensamientos

Me apoyé contra una roca y me bajé el neck gaiter que siempre llevaba puesto, dejando al descubierto mi rostro. Necesitaba algo de agua y aire fresco después de todo el caos del día, pero no esperaba la reacción de Hipo

Cuando levantó la vista, se quedó completamente congelado. Sus ojos se abrieron un poco más y un leve color rosa comenzó a extenderse por sus mejillas

-¿Qué? ¿Tengo algo en la cara? -pregunté, arqueando una ceja mientras ocultaba una sonrisa divertida

- ¡N-no! Para nada. Es solo que... bueno... no te había visto bien... el rostro, digo... antes... - balbuceó, sin poder mirarme directamente

- ¿Ah, sí? - pregunté, inclinándome un poco hacia él con una sonrisa traviesa - ¿Y te gusta lo que ves, pierna metálica? -

Su rubor se intensificó, y comenzó a jugar nerviosamente con el borde de su chaleco - Ehh... yo... no... digo, sí... quiero decir, no de esa manera... bueno, sí, pero... -

No pude evitar soltar una carcajada - Tranquilo, chico, solo estaba bromeando contigo -

Él parpadeó, claramente desconcertado - ¿Bromeando? -

- Sí. ¿Nunca nadie te ha coqueteado antes? -

- Eh... no exactamente... - admitió, frotándose la nuca con torpeza

Eso me hizo reír aún más - Eres demasiado fácil de leer, pierna metálica -

Él solo desvió la mirada, murmurando algo ininteligible mientras su Furia Nocturna, Chimuelo, soltaba un sonido que parecía una risa burlesca

- Está bien, está bien. Relájate -dije, dándole un golpecito en el hombro -Ya veremos si tu plan no nos mata a todos -

Aunque intentó ocultarlo, pude notar que seguía rojo como un tomate mientras volvía a centrarse en el mapa. Fue la cosa más divertida que había visto en semanas

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「❛ Nota de la autora ❜」'

Canción. The Baddest - K/DA

Actualización. 06 / 01 / 2025

Tiktok. @Candymots_