¿Que hubiera pasado si...

Dai cayó del portal aturdida, solo recordaba que un portal la había succionado, para luego aparecer en un lugar completamente distinto.

La demonio chilló al ver cómo el sol tocaba su piel y cerró sus ojos aceptando su inminente muerte.

__ ¿Ehh? ¿Por qué aún no me hago ceniza?_ se preguntó la peli-celeste a si misma.

Estuvo un par de minutos más, esperando una señal de su próxima muerte.

Vió como la gente alrededor la miraba raro, pero no le importó, había dominado al sol y tenía que decirle a Muzan-sama.

"Él es como mi padre, no me mataría, ¿O si? A quien engaño, seguramente me comería para poder cumplir su loco sueño de "ser perfecto" Pensó la peli-celeste, pero rápidamente se desconcentró al sentir el abrumador olor a humanos.

Sintió el olor exquisito a sangre humana a menos de un kilómetro, no pudo resistirse y terminó en ese lugar en menos de cinco segundos.

Vió a una chica rubia... Estaba matando a un hombre mientras bebía su sangre.

"Ella huele a humana, pero está bebiendo la sangre de ese humano ¿Dónde demonios estoy?" Se preguntó la demonio al ver cómo la chica tomaba la forma del hombre que estaba matando.

__ ¡Tú! Humana cambia formas_ llamó la demonio a la villana.

__ ¿Ehh? ¿No estás asustada? Eres muy linda_ mencionó la villana acercándose peligrosamente a la demonio.

__ Yo no soy la que debería estar asustada_ gruñó la peli-celeste mientras agarraba el cuello de la villana y la ponía contra la pared más cercana.

Liberó su forma demoniaca mientras enterraba sus uñas en el cuello de la villana. La rubia volvió a su forma original.

__ Eres muy linda_ murmuró la rubia con las mejillas sonrojadas.

Dai se sorprendió por sus palabras, ella quería dar miedo, no paracer linda. Pero, extrañamente, no le molestaba para nada ese cumplido.

Le dió un poco de su sangre para convertirla en un demonio como Muzan-sama le enseñó.

__ ¡Ahg! ¡Ahh!_ se quejó la villana.

__ Si sobrevives serás parte de mis subordinados y me contarás todo de este mundo_ ordenó la demonio mientras veía como la chica rubia se retorcía por su sangre.

Luego de unos minutos la chica rubia se levantó, su piel estaba de un color más pálido y sus ojos tomaron un ligero toque carmín.

__ Mira te lo resumo, eres un demonio, te gustará comer carne humana, serás mi subordinada y me dirás exactamente todo lo que sepas_ ordenó Dai mirando fijamente a la nueva demonio.

__ ¡Soy Himiko Toga! Te diré todo lo que se si me das un poco más de tu sangre_ negoció Toga, acercándose peligrosamente a Dai.

ᴛɪᴇᴍᴘᴏ ᴅᴇsᴘᴜés

La demonio peli-celeste se encontraba sentada viendo el espectáculo frente a ella, "Caos" así es como definiría la escena que estaba viendo.

Todo lo que solía ser una sociedad civilizada desapareció, desde el momento en que ella llegó a ese lugar comenzó a reclutar aliados convirtiéndolos en demonios, aún no tenía muchos pero sin duda todos ellos eran de temer.

Tampoco es como si ella convirtiera en demonio a una persona débil, además de que no muchos sobrevivían a la transformación.

Dai buscaba a alguien que pudiera agregar a su "clan", ya que los héroes últimamente la estaban molestando mucho, ellos intentaban matarla para volver a su antigua paz, pero ya no eran alabados por las demás personas.

Una gran explosión llamó la atención de la demonio, saltó por algunos edificios para llegar al lugar donde se originó la explosión.

Eran dos humanos, uno lanzaba explosiónes de sus manos mientras que el otro tenía un extraño brillo verde en su cuerpo.

Ambos parecían fuertes, por eso Dai estaba prestando atención.

La lucha acabó con ambos en condiciones críticas sin ningún ganador en particular, Dai se acercó tranquilamente al lugar, mirando a su alrededor para buscar a algún chismoso que esté cerca.

__ Ustedes dos ¿Qué es lo que desean?_ preguntó la demonio acercándose a ambos con cautela.