—¡Deja en paz a YiBoBo!— lo primero que hizo Zhan al entrar a la sala fue abalanzarse sobre Lin Yi, tirandolo al suelo, Yibo se encontraba sentado sobre el candelabro, lejos de los felinos. Al momento que la cabeza del Barón golpeó el suelo y se desvanecio, los gatos desaparecieron.—¡YiBoBo!— grito levantándose del suelo.

El demonio se sorprendió —Zhan, ¿Que estás haciendo?

—¡Que alivio, YiBoBo, estás bien!

—¡Ey! ¿Que pasa aquí? ¿Por qué tenemos orejas de gato?— YuChen y Lu recién entraban en la sala, ignorando todo el asunto.—¿Ah? Yibo, ¿que haces ahí arriba? ¿Que hace Lin Yi aquí? ¿Por qué estaba en el suelo?

Zhan paso a explicar lo sucedido a los recién llegados.

[...]

—Uhm, lo lamento, me deje llevar un poco. No lo haré más, asi que por favor, quitarme esto.— Lin Yi se hallaba ahora atado en el suelo y con un sello que bloquea sus poderes.
Yibo había bajado y Zhan no deja a de abrazarlo.

—Entonces, está vez, Zhan salvó a Yibo — comento YuChen.

—¿Salvado por el?— miro nervioso a Zhan y este solo sonrío. Lo aparto con la mano.— No, no, no. Aunque él no hubiese venido, lo tenía bajo control.

—¿De nuevo? Se más honesto, Yibo¿Cómo se maneja esto desde arriba del candelabro?

—CALLATE.

—Oye, niño... Oyeeee— alguien le hablaba a Zhan tras la puerta de la sala. Este volteo a ver.

—¿Hao Xuan?

—Shhh... Ven aquí, sígueme y no te pierdas.— pidió. Zhan obedecio.

[...]

—¡Gracias por decirme algo tan importante antes!— ambos estaban en el pasillo. 

—Ah, esto no es nada, puedo decirte más acerca de Yibo.

—¿Que cosa?

— Volvamos a tu cuarto.

—Em... Ok— tan inocente.

[...]

— TE HAS CONSEGUIDO UNA PELEA CONMIGO, ¿ESTAS LINDOS LIN YI?— Yibo pisaba su cabeza en el suelo.

—owowow eso duele....

— ¡Quítame estás orejas!

—¿No quedan demasiado tiernas en el?— Lu comento por lo bajo a YuChen.

—Si...— ambos tapaban sus bocas para no reír. No era burla, Yibo causaba mucha ternura en ese momento.

—Bueno, sobre eso, el hechizo de las orejas de gato aún no esta perfeccionado. No puedo liberar el hechizo sin mis notas, si regresamos al mundo de los demonios por ellas-

—NO BROMEES, BASTARDO— volvió a pisar su cabeza.

—No bromeó, hablo en serio. Auch. Realmente deberías regresar al mundo de los demonios otra vez, Yibo-nim.

—¿Ah?

—¿Olvidaste que día es hoy?

—¡¿El bicentenario de YiBoBo!?

—Sip, está noche haremos una fiesta en su mansión en el mundo de los demonios.

—¡Una fiesta!

—Por eso debe volver lo antes posible.

—Pero es muy repentino.

— No. Envianos una carta antes, pero ese idiota no lo abrió.

—¿Una carta? ¿Dices que el gato negro era una carta?

—Si, aparte del hechizo que liberarte anteriormente, había un hechizo más puesto en el gato. Uno donde la carta se alzaría luego de su muerte.

—Ah, malditos viejos enfermos.

—¡Exactamente! Usando a mi pequeño y lindo gato — dijo algo triste.— como sea, contrario a las expectativas, no mataste al gato.

"¡No lo mates!"

— Asi que hoy vinimos con otra carta. Em... Está e mi bolsillo, por favor, tómala.

—¡No! ¡Ya estás aquí! ¿Para que quiero la carta?

—Oh, y Hao Xuan tiene la invitación.

—¿Invitación? Si soy el cumpleañero, ¿por qué necesitaría invitación?

—Ah,  por qué no es para ti, Yibo-nim. La invitación es dirigida al  joven humano.

—¿Zhan?

Hao extendió una carta al niño.
—¿Estas invitando a Zhan a una fiesta en el mundo de los demonios?— se sorprendió.

— Sip, ¿no quieres celebrar junto a Yibo su cumpleaños?

—¡Si quiero ir! Llamaré a YiBoBo.

—Oh, no te preocupes, Lin Yi llevará a Yibo.— se acercó a la alfombra y levantó una parte que el había cortado.— hay un portal aquí directo a mi mundo.

—¿Cortaste la alfombra?

— Cometi un error y volvi a salir por tu cuarto — se hizo el tonto.— destapó el agujero y se agachó.— Aquí, ven.

Zhan se puso de rodillas y miro el hoyo — es oscuro y aterrador..

—¿Vas a ir o no?— zarandeo la carta frente a el.

Zhan dudo un poco, pero al fin la tomo —¡Voy!

—(jejeje, el confía en mí, ya que le conté cosas sobre Yibo para ganarmelo. Y ahora vendrá por su voluntad, sin tener que secuestrarlo. Esto es un bonus, que inteligente).— pensó.

— Dije que iría — Zhan lo miraba, esperando que lo acompañe.

—(Gane, Yibo)— orgulloso de su mismo, seguía perdido en sus pensamientos.

— ¿Hao?

—¡Ah, si! Toma mi mano.— y el pequeño así lo hizo.

—¡Zhan!— Yibo entro precipitadamente a la habitación. Zhan ya no estaba, en su lugar, había un hoyo oscuro en el suelo. Sin duda, habían encontrado su punto débil. ¿Podría ahora atraerlo al mundo de los demonios?

El señor gato

A los que leen "señor oso" puede que les suba el cap de una vez pueda que no (juju), pero si les voy a tratar de subir el cap el viernes en la noche :).