NamJoon…NamJoon…

Jungkook observó al enano que estaba mirando cosas sin sentido.

— ¿Estás inconsciente? — Jungkook entro en pánico cuando el enano seguía murmurando. — ¡Oye, cálmate, no te pegué tan recio! — Jungkook soltó un suspiro.— ¿Que paso con toda esa actitud peleadora que pusiste en el hotel? — Jungkook lo sostuvo para preguntarle— ¿¡Me puedes escuchar!? — al momento de tocarlo SeokJin soltó un jadeo, Jungkook olió muy bien además de esa reacción solamente podía ser por una cosa, un celo, por lo tanto Jungkook abrió las piernas de seokjin quien seguía inconsciente.

Jungkook utilizaba su lengua para lamer los pezones y partes sensibles de seokjin además de bajarle un poco la bata de noche donde noto algo extraño era un círculo, poco a poco SeokJin despertaba se sentía húmedo y suave pero a la vez picaba además de sentirse un poco incómodo; cuando despertó por completo SeokJin noto al lobo entre sus piernas.

— ¿¡Qué haces!? — Preguntó alterado aunque el lobo no se alejó empezó a moverse para que se alejara de ahí pero lo único que hizo fue Jungkook agarrara con fuerza la cintura y cadera de seokjin para que dejara de moverse.

— Quédate quieto, o te arrancare tú cosa.— SeokJin sintió tanto miedo era tan diferente a la primera vez que conoció a NamJoon la diferencia estaba en que NamJoon era más suave y lindo mientras que él ese hombre lobo no lo hacia sin un cuidado alguno y no le gustaba, SeokJin empezó a derramar lagrimas.

— S-salvame NamJoon…— SeokJin abrió los ojos asombrado, era verdad, NamJoon estaba en peligro por su culpa, no vendría por él, SeokJin tenía la esperanza porque viniera por él a su rescate, estaba llorando. Ahora entendía a los omegas que habían perdido a su alfa en accidentes o simplemente una enfermedad los atacó. SeokJin quiso de verdad patear al lobo como muchas veces había hecho con los alfas que intentaron tocarlo cuando estaba en celo pero era imposible tal parece que el veneno de la karina te debilitaba por completo porque ahora se encontraba temblando.— S-sueltame.— su voz empezaba a ser rota por las lágrimas y sus sentimientos, el lobo empezó a lamer su entrada haciendo que SeokJin soltara un jadeo.— ¡Ah!, ¡Ahí no!

— Eres un hombre y te exitas solamente porque lamo está parte, solamente libérate ya.— SeokJin miro como ese lobo estaba ahí lamiendo una cosa que era íntima para él.

— ¡Basta, no quiero, te dije que no quiero! — SeokJin no quería a ese lobo en sus piernas, él quería a NamJoon pero Namjoon no estaba.— ¡No, NamJoon! — SeokJin miro el techo tal vez debería rendirse ya, no quería y seguía pensando en NamJoon. Y un fuerte sonido se escuchó la puerta siendo destruida después de quitarle al lobo y lo aventaron haciendo que derrumbo una pared. SeokJin se sentó como podía viendo a NamJoon estaba de espaldas y sin ningún rasguño hasta que volteó a verlo.

— ¿¡Estás bien!?, ¡SeokJin! — Su rostro mostraba preocupación hasta que se acercó a SeokJin para quitar la soga haciendo que este lo abrazara.

— NamJoon, NamJoon.— SeokJin se había soltado a llorar mientras también lo abrazaba y se aferraba a él.

— Lo siento SeokJin, asumiré la responsabilidad de todo, traté de apurar las cosas y cometí demasiados errores en el caminó que le pusieron en una posición difícil.— SeokJin se alejó un poco mientras negaba aún sollozando.

— No, es mi culpa, es mi culpa que estuvieras en peligros.— NamJoon tapo los hombros de seokjin con la prenda casi en el piso.— Preocúpate menos por mí, ¿Estás bien, NamJoon?, ¿Estás lastimado? — SeokJin busco alguna herida aunque nunca la encontró.

— No te preocupes, como puedes ver estoy luchando en forma.— NamJoon lo dijo con orgullo, tal vez así SeokJin se quedaría a su lado, NamJoon quitó las pequeñas lágrimas en sus mejillas y sus ojos.— Te lo dije, soy el caballero más fuerte de los titanes.— NamJoon se quitó la capa que tenía para ponérsela a SeokJin estaba haciendo frío y lo único que tenía SeokJin era una bata de noche.

— Le dijiste a Siwon y a los demás que no, y luego viniste aquí?.— Él lobo habló mientras se sentaba.— ¿Que clase de monstruo eres? — SeokJin miro a NamJoon este miró al lobo con enojo.

— Quédate aquí.— le dio un beso en sus hebras oscuras.— Yo me encargó— NamJoon se levantó para ir a la dirección del lobo elevó su mano donde sacó un aura mágica blanca haciendo un círculo.— Este es un círculo mágico de detención, en preparación para el peor de los casos, grabé esto en toda la ropa y cosas de seokjin.— NamJoon se le acercó hasta estar unos pasos cerca del lobo.— Eres una bestia, esté es tu país que se originó a partir de sus deseos, engañar a los demás para su propio beneficio es la forma normal aquí, ese es el tipo de lugar que es esté; en este asunto si quisieras pensar en un plan para engañarme sin que yo supiera, podrías haberme vendado los ojos pero te llevaste a SeokJin, lo asustaste y trataste de ensuciarlo.— NamJoon estaba bastante furioso y SeokJin lo noto al ver las venas del cuello y sus manos.— Ese crimen es digno de muerte.

— Maldita sea…

— Puedes pagarlo con tu vida.— NamJoon apresó sus manos en el cuello del lobo, SeokJin se levantó para ir hasta NamJoon. SeokJin agarro el brazo de Namjoon negando aquella petición y lo que iba a hacer.— No puedes hacerlo.

— ¿Por qué me estás deteniendo?, Deberías saber lo horrible que es su crimen, Jin, él te asusto y quiso tocarte, esto se debe a muerte.— SeokJin negó ante ello.

— Lo sé NamJoon pero la muerte para ese tipo de personas es como un premió y sobre todo ya me a pasado, cuando vienes de un mundo corrompido y dónde eres omega vives cualquier tipo de peligro y lo peor es que no hacen justicia, NamJoon no seas como ellos dale un castigo en la cual se vaya a arrepentir de tocarme.— NamJoon miro a SeokJin, ¿Acaso ya habria sido tocado sin su consentimiento más veces?

— Jin...¿Tú…?

— Soy un omega Namjoon vivo con peligros todos los días, años y meses, supe como controlar eso y que hacer pero él me gana en fuerza así que no te preocupes por ello, se mejor ellos, por favor no te alejes de mi.— SeokJin abrazo al moreno, aunque cayó al suelo.

— ¡SeokJin! — Grito preocupado, lo cargó mientras miraba a jungkook.— SeokJin a bebido el veneno de karina y necesita el antídoto.

— Entonces es eso, fue envenenado.

— Jungkook, ¿Dónde está la fruta raisa?.

— La raisa es el fruto del sol, crecen en lugares de mayor altura, donde puedan bañarse en la luz más cerca del sol.— Jungkook señaló una montaña.— En la cima de esa montaña, hay solo un árbol de raisa allí.

— ¿Cuánto tiempo llevará ir allí, conseguir uno y volver? — Preguntó NamJoon mientras sostenía a SeokJin.

— Si te apuras alrededor de una hora.

— Bien.— Dio un beso en la frente de seokjin.— Entonces, ve y tráeme uno en treinta minutos.

— ¿Que es-? — Jungkook calló cuando algo le puso el titán en la frente era el sello que tenía en la bata de seokjin.

— Siempre y cuando tengas ese círculo mágico de detención no importa donde estés, con esto voy a poder encontrarte.— Explicó.— Vuelve aquí en treinta minutos con la fruta raisa, si no puedes, te mataré ¿Entendido?, ¡Ponte en marcha! — el lobo se fue corriendo.

— NamJoon.— SeokJin lo llamó, haciendo que volteara a verlo.— Estoy muy caliente y estoy asustado, no me dejes NamJoon.— SeokJin recibió un beso en su cabello.

— Esta bien, SeokJin, estoy aquí siempre estaré aquí.— NamJoon lo beso para después sentarse en el pasto para ayudarlo con su calentura como frotar el pene de SeokJin y calmarlo con caricias. Finalmente NamJoon solamente sacó su polla donde solamente acomodó a SeokJin de atrás agarró sus piernas para poder bajarlo con cuidado.— ¿Se siente bien SeokJin?, ¿Hay algo más que quieras que te haga? — Preguntó NamJoon.

— ¡Ah! — SeokJin se retorció cuando NamJoon los tocó.

— Esta parte es la más sensible de tí.

— Siempre los tocas de alguna u otra forma se acostumbró a ti.— dijo en voz baja.

— Entonces los tocaré aún más.— NamJoon pellizco sus pezones haciendo que SeokJin grité por la sensación.

— No puedes.

— ¿Por qué no puedo?

— Si juegas con ellos por mucho más tiempo voy a perder la cabeza.— SeokJin estaba temblando, sus piernas lo estaban y NamJoon seguía adentro golpeando.

— No me importa, no me importa como puedas cambiar, siempre te voy a amar.

— NamJoon…— Él siempre hace lo que quiere, es agresivo pero también es dulce y era genial cuando SeokJin deseaba que estuviera con él siempre lo abrazaba y lo amaba, todo el cuerpo y alma esa piel morena y cabello dorado de los tirantes.— Yo también te amo NamJoon.— SeokJin le dio un beso haciendo que NamJoon se sorprendiera y se sonrojara por primera vez en su vida.

— ¡Oh Jinnie, tú finalmente! — lo abrazó con fuerza teniendo cuidado aunque SeokJin había perdido la conciencia— ¿SeokJin?, Aguanta un momento SeokJin.

— ¡Treinta minutos! — El lobo llamado Jungkook apareció de la nada, NamJoon lo miro seriamente.

— ¡Jungkook pásamelo! — NamJoon estiró la mano, el lobo lo miró.

— Así tratas a tus sirvientes, eh.— Le aventó la fruta haciendo que NamJoon la atrapará con una mano.

— SeokJin.— NamJoon mordió la fruta para poder sostener una pequeña parte entre sus dientes.— También te amo.— hizo que SeokJin abriera la boca para pasarlo a la boca de seokjin por medio de un beso bajo la atentamente mirada del lobo.

— ¿Sabías Jungkook?

— Karina y raisa fueron una vez gemelos los dos siempre estaban peleando pero no fue porque no se llevaran bien, en realidad, fue porque se amaban, era una relación que no les permitían estar juntos por eso karina se acostó con un grupo de hombres para olvidar su amor a raisa; pero raisa sabía que no podía tocar a karina ella seguía siendo la única a la que amaba. La razón por la que la fruta de raisa trae esos efectos es porque finalmente dentro de tu estómago karina y raisa se convierten en uno juntos posiblemente sea porque finalmente obtuvieron lo que ambos desean.

Jungkook observó como SeokJin recuperaba la conciencia y NamJoon tocar su pecho aliviado después de ver como SeokJin estaba bien y no tenía efecto alguno del veneno, SeokJin miró a NamJoon con una sonrisa y finalmente ambos se besaron.

. . .

SeokJin y NamJoon volvían a su hogar, aquel carruaje ambos estaban felices SeokJin no estaba tapado por completó.

— SeokJin, te sientes bien.— Preguntó NamJoon cuando iban a mitad del Caminó.

— ¡Si!, Me siento tan bien que parece como si no fuera real.— SeokJin miró el camino y se hecho a reír.

— ¿Qué es tan gracioso?, ¿Puedes contarme?— SeokJin asintió para poder mirarlo.

— NamJoon, ¿Aquí hay cuentos de hadas para niños? — NamJoon lo miró un momento.

— ¿Cuántos de hadas para niños? — Volvió a preguntar.— Se qué son cuentos, ¿Hadas?

— Bueno, los cuentos para hadas para niños tratan sobre principes alfas o príncipes omegas se les dice de hadas porque ya no existe el linaje real.— NamJoon lo miró sorprendido.

— ¿No existe?.

— Nop, y si existiera no sería como en los cuentos bueno en un cuento siempre dicen que los omegas príncipes están encerrados bajo llave esperando el beso de su alfa, o algunas veces dicen que la madrastra malvada fue la responsable de envenenar al omega y solamente un beso lo despertará.— SeokJin junto sus manos.— Mi mamá siempre decía que algún día podría conocer a ese alfa, bueno ahora que lo pienso fui salvado por un apuesto príncipe.— NamJoon sonrió.— Y me salvó por medio de un beso y una fruta.

— Eso es bueno, por cierto SeokJin, antes de desmayarte por el veneno de Karina, ¿Por qué solo te preocupabas por mi?, Estabas bajo mucho más estrés que yo.— SeokJin desvió la mirada.

— Oh…mi mamá murió cuando fui noqueado por un resfriado, cuando tenía unos tres años, antes de que mi padre muriera en un accidente mi mamá trabajaba frenéticamente día tras día, hace dos años mientras mi madre estaba en un viaje de negocios, obtuve un resfriado terrible y colapse.— SeokJin suspiró.— incluso si intentaba pedir ayuda, no había nadie en casa, finalmente un amigo vino a mi casa y me ayudó pero cuando desperté estaba en el hospital y mi tío estaba a mi lado.— SeokJin hizo un puchero.— Estaba asustado, y cuando escuché que ibas a ir al país bestia por mí, pensé que me estaba volviendo loco al hacer que alguien fuera a recorrer grandes longitudes por mi.— SeokJin miró el camino.— Cuando desperté de mi sueño de fiebre pensé que tal vez oiria que habías muerto, pensando en eso, no pude evitar estar ansioso.

— El acto de dedicar la vida por un amor es algo que consideró una forma de amor supremo.— NamJoon habló seriamente.— como tu madre que se sacrifico por tí, pero mi querido si vas a llorar por eso prometo que te protegeré de cualquier obstáculo que puedas enfrentar lo haré y viviré más por tí.

— Gracias NamJoon.— NamJoon dio un beso en sus manos.

— Ahora vamos a casa, a tildant.