Sunshineland, 2010.
YJ🦊, 10 años. SB🐰, 9 años.
El avión aterrizó en una gran plataforma flotante en el cielo, justo donde había un campo de girasoles.
Desde ese lugar, el cielo se percibe de colores anaranjados, y si se asomaban por la plataforma podían ver gran parte del mundo, incluido el mar, que en vez de agua tenía zumo de melocotón.
Hoseok se levantó de su asiento y volteó a ver a los menores━. Niños pasajeros, me enorgullece informar que aterrizamos sin problema en Sunshineland. Esperamos que hayan disfrutado del vuelo con Hobi-Flies, su compañía de vuelos más confiable~ ━soltó con una gran sonrisa, hablando con un pequeño megáfono que sacó de los grandes bolsillos de sus pantalones. Aunque no era necesario, los tres podían escucharle perfectamente.
Yeonjun y Soobin bajaron juntos por una de las alas del avión de papel, simulando que era una especie de tobogán.
Gracias a que aún seguían tomados de la mano es que Soobin no tropezó nada más tocar el suelo.
El pelinegro resultaba ser muy torpe, pero cuando estaba con Yeonjun este lograba sujetarlo o jalarlo antes de caer. Aunque habían veces donde ambos acababan cayendo, y se reían mucho en esos momentos a pesar del daño.
━Mmh, señor sonrisitas, ¿puede llevarme de vuelta a la escuela? Quería dibujar en clase de la señorita Lisa ━pidió Hueningkai.
━Por supuesto~. Niños pasajeros, abróchense los cinturones que se viene otro viajecito~
━¿No vienes? ━preguntó Yeonjun luego de haberse quitado el casco.
Hueningkai negó━. No, pero nos vemos luego. Saluden al solecito de mi parte.
Yeonjun levantó el pulgar para darle a entender que lo haría.
━¡Hasta luego, Kai! ━gritó un Soobin, quien no podía ver por tener el casco tapándole la cara. Él no pudo quitárselo, pero Yeonjun le ayudó, y al destapar su rostro se encontró con la gran sonrisa de agradecimiento de Soobin, dejando ver sus hermosos hoyuelos. Tan radiante y lindo como siempre.
El avión despegó y se fue volando por donde mismo había llegado. Al desaparecer del campo de visión de los menores, estos empezaron a caminar por el caminito de baldosas amarillas que llegaba hasta el gran castillo de oro.
Sunshineland era el lugar más cálido del mundo, probablemente debido a la nula existencia de colores fríos. O más bien porque es literalmente la ciudad del sol, siempre calentita, pero no lo suficiente como para que alguien se quejara del calor, siendo esta la razón por la cual nuestros protagonistas amaban ese lugar.
Se podría decir que el clima ahí era el mejor del mundo, incluso los rayos de sol no pegaban tan fuerte. Aunque ahora que el sol estaba triste había menos rayitos de luz, dejando varias zonas completamente oscuras, algo que sorprendió a Yeonjun pues nunca había visto oscuridad fuera de su casa, solo que esta vez sí le daban miedo.
━¿Le habrá pasado algo malo al sol? Es la primera vez que lo veo deprimido ━murmuró al volver a ver la carita triste que este tenía, pero de un momento a otro, su vista fue invadida por un gran girasol que había sido colocado en frente suyo, haciendo que detuviera su andar. Luego, este fue movido a un lado dejando ver a un alegre Soobin.
━¿Sabías que los girasoles se llaman así porque giran hacia el sol?
Yeonjun rió divertido por el dato tan aleatorio━. Creo que es obvio.
━¡Pero tienes que fingir que no lo sabes!
━Wow, no lo sabía ━dijo con fingida sorpresa para satisfacer al menor━. Soobin es muy inteligente~
El pelinegro sonrió orgulloso━. Bien, ¿ahora sí te puedo decir que soy un sol y tú eres mi flor? ━soltó sin pensar━. Espera, era al revés.
Yeonjun rodó los ojos━. Tienes que dejar de robarle los coqueteos baratos a Beomgyu ━comentó divertido para luego pasar al lado de Soobin con el fin de seguir caminando. No hizo falta decir nada para que este lo siguiera.
━¿Ah? ¡Noo, sus frases de coqueteo son geniales~!
━Que Taehyun siempre le acabe dando patadas me hace pensar todo lo contrario ━recordó intentando reprimir una carcajada━. Soobinnie, sólo crea tus propias frases. Mírame y di lo primero que se te venga a la cabeza ━se detuvo frente al menor estando completamente expectante a lo que este podría decir.
━E-eehh... ━ver los grandes ojitos del rubio atendiéndolo por completo lo puso nervioso hasta el punto de ruborizarse y tener que apartar la mirada━. T-Tus ojos parecen dos ruedas br-brillando en el cielo... ━murmuró tímido.
Yeonjun rió con ternura━. ¡Ese fue un buen intento! Extraño, pero válido. Por favor, sigue creando tus propias frases a partir de ahora~
━¿T-Tan fácil?
El mayor asintió con una gran sonrisa━. Todo lo que dices o haces es lindo para mí~ ━admitió antes de dejar un fugaz beso en la mejilla del pelinegro y seguir por el camino a pasos más rápidos, dejando a Soobin completamente rojo.
Soo muchas veces coqueteaba con Yeonjun con completa confianza, pero una vez Yeonjun le respondía de vuelta o lo atacaba justo como ahora, se ponía muy tímido. Da igual si llevaban tiempo siendo pareja, cada acto lo vivía como si fuera la primera vez, y eso le encantaba.
Una vez se calmó, corrió hacia Yeonjun y tuvo el valor de tomar su manita━. ¿D-deberíamos tener una cita por aquí? ━propuso.
━Me encantaría~, pero primero hay que arreglar el sol.
Motivado por la propuesta aceptada, Soobin aceleró el paso hasta entrar en el castillo, jalando de Yeonjun en todo momento, quien reía por el repentino entusiasmo del menor.
El lugar era enorme, casi laberíntico, pero ellos lo conocían bien así que no fue difícil llegar a la habitación del sol, cuya puerta tenía un gran cartel de 'Prohibido el paso'.
Se había colocado para evitar que alguien interrumpiera mientras el solecito estaba durmiendo, pero ambos tenían el permiso del mismísimo dueño de la habitación para irrumpir siempre que quieran, por lo que eso hicieron.
Se sorprendieron con la imagen del pequeño sol llorando junto a una especie de niño lobo y el príncipe de hielo.
━¿Qué ocurrió aquí? ━preguntó Yeonjun con el ceño fruncido. Ahora mismo es el mayor de esa habitación, y por cómo estaban los contrarios debía actuar como un verdadero hyung para solucionar lo que sea que haya pasado.
━Miren que les dije que tuvieran cuidado ━regañaba el pequeño Sunghoon aún sin notar a los recién llegados.
En cambio, Sunoo volteó hacia la puerta━. Yeonjunnie hyung, Soobinnie hyung... ━llamó entre lágrimas y sollozos. Riki, a su lado, se encontraba llorando de la misma manera.
━Sunito, debes animarte, ¡estás oscureciendo el mundo! ¿Y si salen monstruos? ━avisó Yeonjun con un tono de voz muy suave pero preocupado. Tampoco era cuestión de hacerle sentir culpable, y Sunoo tendía a ser muy sensible. Debía tratarlo con cuidado.
El pequeño y lindo pelinegro se limpió las lágrimas sin éxito, pues no paraban de salir. Ahí Yeonjun pudo notar que los rayitos de sol que Sunoo siempre tenía alrededor no estaban.
Por eso volvió a preguntar: ━¿Me dicen ya que ocurrió? ━esta vez más preocupado que antes.
Riki bajó sus orejas de lobo━. L-Lo shientoooo ━se disculpó en vez de responder. Le faltaban dos dientes de arriba, así que su forma de hablar era un tanto divertida, aunque la situación no estaba para pararse a reír, así que no hubo reacción alguna por ello.
━Traje helado de chocolate de menta para Sunoo, y Riki se puso a jugar con él hasta que el helado cayó al suelo ━explicó Sunghoon notoriamente molesto por lo ocurrido.
━Aquí está la prueba del crimen ━Soobin se agachó en donde se hallaba el helado medio derretido en el suelo━. O más bien el crimen entero ━rió.
━M-Mi helado... ━el llanto de Sunoo se volvía cada vez más fuerte, y como consecuencia, el de Riki también. El japonés se sentía muy culpable, y Yeonjun no dudó en acariciarle la cabecita a ambos mientras les regalaba una gran sonrisa para que se calmaran.
━Sunoo, ¿si te traemos otro helado volverás a brillar? ━cuestionó Soobin.
El mencionado asintió frenéticamente luego de moquear y auto obligarse a detener sus lágrimas.
Con esa afirmación Yeonjun empujó a Soobin hacia la salida━. Entonces volveremos en un rato~. Sunghoon, distraelos hasta que lleguemos.
━¿Eh? ¿Por qué yo?
━¿Ves a alguien más aquí?
Sunghoon respondió con un puchero frustrado. Amaba jugar con Sunoo y Riki, pero en ocasiones ellos tenían tanta energía que era difícil seguirlos. Tampoco tiene ganas de lidiar con dos bebés llorones, aunque los quería demasiado como para simplemente ignorarlos. Por eso, soltó un fuerte suspiro.
━Está bien, solo regresen rápido ━respondió rendido, a lo que Yeonjun sonrió satisfecho y finalmente salió del lugar.
Soobin y él volvieron a hacer todo el recorrido para salir del castillo, y una vez fuera, el pelinegro recordó algo.
━¿Dónde hay helados en Sunshineland?
Yeonjun abrió mucho los ojos. En ese reino ni siquiera existían heladerías. Tendrían que buscar por ahí a ver si con suerte alguno de los que estaban de visita tenían helado, sea del sabor que sea. Todo para no tener que bajar al mundo de nuevo, tardarían mucho si hicieran eso y no quieren que Sunito siga triste.
El rubio iba a proponer que andaran hasta encontrar a alguien, pero al divisar una cosita amarilla caminando muy distraído cerca de ellos no fue necesario.
━¡Pollito Lix! ━exclamó Yeonjun gustoso de verlo.
━¡¡Waaah!! ━el pequeño pollito dió un brinquito del susto para luego transformarse en un hermoso niño de pecas con tan solo un 'puff', quedando sentado en el suelo con varias plumitas amarillas por su cabello━. ¿Yeonjun? ¿Soobin? Qué susto, ¡casi me da un infarto!
El rubio lo ayudó a pararse y quitarle las plumas a modo de disculpas.
━Lo sentimoos, Félix ━dijo Soobin hablando por ambos━. Solo queríamos preguntarte si de casualidad tienes helado.
━No, pero tengo brownies curativos ━dicho eso, movió hacia delante la mochilita de pollito que llevaba en su espalda y sacó un táper donde habían muchos brownies━. ¿Quieren? ━ofreció, y por supuesto que no negaron.
Se comieron un trozo y al momento se sintieron muy ligeros. No se esperaban menos de los brownies curativos del pollito Lix, deliciosos y llenos de energía, mejor que cualquier chuche.
━¡Me siento como nuevo! ━exclamó Soobin.
━¡Yo siento el poder del chocolate! ━Yeonjun alzó los puños como una especie de guerrero.
━Ustedes son muy loquitos y lindos cuando están juntos ━admitió Felix con una risita━. ¿Para qué quieren helado?
━Es para Sunoo. Está triste porque su heladito se cayó al suelo.
━Con razón notaba el día más apagado... ━observó con algo de temor las pequeñas zonas de oscuridad que habían alrededor. A nadie les gustaba, así que trató de pensar rápido para que puedan solucionar eso━. Mmmhh... Me pareció ver a Beomgyu comiendo helado.
Yeonjun se emocionó al escucharlo━. ¿Gyu está por aquí? ¿Dónde?
Lix señaló hacia los coloridos jardines del castillo━. Creo que iba para allí.
━Seguro que está con Taehyun viendo las flores ━teorizó Soobin. No era la primera vez que esos dos daban paseos por Sunshineland con el fin de disfrutar la naturaleza del lugar━. ¡Vamos! ━exclamó para luego correr hacia los jardines.
━Gracias, Lix, nos vemos luego ━Yeonjun hizo una reverencia rápida que Felix respondió, y siguió a Soobin cuándo vió que Lix volvió a transformarse en pollito.
Ambos iban bastante rápido gracias a la energía que le dieron los brownies. Y es por eso que Soobin, siendo el que iba por delante, no se estaba fijando bien por donde pisaba.
Alguien ajeno a ellos se dio cuenta de ello y exclamó: ━¡Cuidado con el escalón! ━tarde. Soobin ya había tropezado, y cómo Yeonjun también iba rápido no le dió tiempo a frenar, cayendo de igual manera al lado del menor━. Con lo torpes que son y aún así se arriesgan a correr por ahí sin mirar.
Ambos levantaron la vista al escuchar finalmente esa linda voz, encontrándose con un Taehyun de 6 añitos mirándolos con el ceño fruncido y mejillas infladas. A esa edad no estaba tan fornido, así que se veía más adorable, especialmente gracias a sus tiernos ricitos llenos de plantitas. Sin duda alguna, su apariencia le hacía justicia a su puesto como 'hada del jardín'.
━Jaja, tontos~ ━se burló Beomgyu detrás de él, quien estaba tranquilamente sentado en el césped.
Los mayores simplemente lo ignoraron y dejaron que Taehyun los ayudara a levantarse, notando como ahora tenían unos pequeños raspones en sus rodillas a causa de la caída.
━Deben tener más cuidado para la próxima ━Tae sacó varias curitas de su bolsillo y se las colocó con cuidado.
Yeonjun admiró con ternura cada curita de mariquita que fue puesta en sus piernecitas mientras Taehyun terminaba con Soobin.
━Listo. En un rato se las pueden quitar.
Soobin volteó a ver a Yeonjun━. Brownies curativos y curitas sanadoras. Hoy estaremos más sanos y enérgicos que nunca~
━¿Más? Dios mío, si de por sí son unos culos inquietos no me imagino cómo estarán hoy ━se burló Beomgyu.
━¡Hey! Solo dibujamos, estuvimos con el señor sonrisitas, volamos en avión, recorrimos todo el camino de baldosas amarillas y visitamos a Sunoo ━explicó el rubio.
━¡¡Nosotros solo subimos aquí y ya estoy súper cansadoo!! ━el Choi menor comenzó a patalear completamente frustrado. Se sentía viejo por cansarse tan rápido━. Taehyunnie, necesito abrazos sanadores~
━Yeonjunnie, yo también necesito abrazos sanadores~ ━le siguió Soobin aprovechando la oportunidad. Yeonjun no dudó ni un momento en cumplir sus necesidades.
━Lo que hay que aguantar.... ━Taehyun rodó los ojos por la actitud infantil de Beomgyu━. Por cierto, ahora que mencionaste a Sunoo, ¿está bien? El sol está triste.
━Oh, sí, casi lo olvido ━Yeonjun se separó de Soobin para acercarse al mayor de todos━. Beomgyu, ¿tienes helado?
━¿Uh? Ya me lo comí, ¿pero para qué lo quieres si no sueles comerlo?
━Es para que Sunoo se ponga feliz y vuelva a brillar como siempre.
━Lo siento, hyung, no tengo nada ━se disculpó Beomgyu al ver que no puede ayudar a la causa.
━Está bien, no te preocupes ━Yeonjun suspiró cansado y volteó a ver a Soobin━. Me da que al final si tendremos que bajar ━dijo notoriamente preocupado por el pequeño solecito. A nadie le gustaba verlo llorar.
Al notarlo, Soobin rápidamente habló━. Está bien, Sunito tiene a Sunghoon y Riki para distraerlo un poco, nos dará tiempo a conseguirlo antes de que se apague del todo ━animó, a lo que Yeonjun no pudo evitar sonreír por sus palabras. En cierto, Sunoo estaba bien acompañado, no tenía que preocuparse tanto sabiendo que sus amigos no permitirían que este empeorara.
━Antes de que bajen, ¿me pueden ayudar con algo, por favor? ━pidió Taehyun educadamente━. Mi abejita se perdió entre las flores y no la encuentro.
━Claro, dime dónde la perdiste de vista y te ayudo.
Dicho eso, Soobin y Taehyun se quedaron frente a un pequeño matorral de flores, moviéndolas con cuidado para buscar el insecto sin dañarlas. Taehyun se enojaría mucho si alguna flor sale herida.
Por otro lado, Yeonjun se sentó de cuclillas al lado de Beomgyu. A ambos les asustaban un poco las abejas, así que no podrían ayudar mucho. Simplemente se quedarían ahí observando, o más bien Yeonjun, porque el menor se había acostado y cerrado los ojos para tomar una siesta con ese agradable ambiente.
La atención de Yeonjun iba principalmente hacia Soobin. Da igual como lo mire; si eran niños o adultos; si estaba con los pantalones cortos manchados de barro o no; si tenía curitas; o incluso con algún raspón en el rostro. Soobin se veía lindo de cualquier modo.
Yeonjun sonrió al verlo reír cuándo sin querer se cayó entre las flores. Esa es otra característica de Soobin, su felicidad es muy contagiosa, por lo que estar a su lado le transmitía mucho positivismo y alegraba el día de cualquiera.
Lo amaba, amaba todo de él. Incluyendo sus defectos, como el no saber ligar o su torpeza. Siente que esa era la esencia del menor, y él, como su pareja, las aceptaba y admiraba con ternura. No lo cambiaría por nada en el mundo.
Pudo divisar como varias mariposas salieron de las flores por culpa de la intrusión de Soobin, todas de colores lindos, pero había una en cuestión que se acercó a Yeonjun hasta posarse en una de sus rodillas, justo encima de las curitas de mariquitas.
Yeonjun la observó con detalle, era completamente negra, pero seguía siendo igual de hermosa como las demás, solo que el color la hacía ver más elegante y fuerte.
Puso su dedito con cuidado cerca de esta para que se posara, pero en su lugar, la mariposa voló alejándose de él, aunque no avanzó mucho porque comenzó a dar vueltas, como esperando una señal para poder seguir avanzando.
Yeonjun sentía como si él fuera esa señal, como si el insecto lo estuviera diciendo que lo acompañara.
¿Quieres que te siga, mariposita? Preguntó mentalmente. Y aunque no obtuvo una respuesta, se levantó y fue hacia ella, viendo como finalmente avanzaba, por lo que confirmó que estaba en lo cierto.
La siguió sin saber a donde llevaba. Poco a poco se fue alejando de los chicos, pasando a través de varios girasoles con cuidado de no tropezar.
Él solo siguió caminando, y en algún punto la mariposa se posó en su nariz, haciéndole reír por las cosquillas que le daban sus patitas. Luego volvió a aletear para que el niño siguiera caminando detrás de ella.
━Espera, vas un poquito rápido ━avisó muy alegre━. ¿A dónde me llevas? ━daba pasos un poco más apresurados para tratar de alcanzarla y no perderla de vista.
━¡Yeonjun! ━el temeroso grito de Taehyun y Soobin asustó a Beomgyu, quien se levantó rápidamente para buscar donde estaba el rubio.
Antes de que Yeonjun pudiera procesar que le estaban llamando y voltear a buscar a sus amigos, ya tenía un pie fuera de la plataforma flotante. No le dió tiempo a evitar caer cuando, involuntariamente, llevó todo su peso a su piecito derecho en el aire, pensando que realmente sí había suelo que pisar.
En menos de un segundo, su cuerpito se encontraba descendiendo rápidamente la gran altura que había entre Sunshineland y el mundo de los sueños.
Lo último que Yeonjun llegó a ver fue a Soobin y Beomgyu asomados en la plataforma, observándolo completamente preocupados mientras gritaban su nombre sin parar.
Por otro lado, la mariposa negra aleteaba como si estuviera feliz de haberlo llevado al vacío.
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