Caminaba en tu habitación de un lado a otro, con el teléfono en mano.

Habías llamado a la empresa donde habías comprado tu humanoide, necesitabas alguna explicación para lo que le había pasado a Chifuyu.

— Sus ojos no son los mismos! — exclamaste

Señorita, como le dije, mi jefe no está en estos momentos, así que tendría que llamar después — escuchaste decir

— Ya me dijeron eso varias veces, pasaron tres horas desde que me dijeron lo mismo! Necesito respuestas no excusas!

Ya intento reiniciando su androide? — pregunta desde el otro lado del teléfono

— Ya! Lo reincie, apague y encendí, cambie su rutina, intente de todo...

Mire señorita, no creo que podamos hacer algo al respecto —

— ¿No pueden ver que el lo que pasa desde el centro de controles? Estoy casi segura de que todo esto paso después del apagón

Señorita, usted es la única personas que nos ha llamado por problemas de su humanoide. Dudo mucho que los demás tengan problemas... —

— Y que se supone que haga al respecto, tengo miedo...

Si gusta, puede venir a la empresa, le haré una cita con el jefe para ver si le puede ayudar en algo. —

— Por favor, sería de mucha ayuda...

Arreglaron los asuntos para la cita que sería al día siguiente, colgando la llamada, bajaste a la sala.

Chifuyu estaba con una sonrisa, sus ojos se clavaron en ti, hiciste que te sintieras nerviosa.

Primordialmente por qué Chifuyu estaba encendido, cuando recuerdas haberlo apagado.

— Chifuyu, saldré un rato, por favor termina de limpiar la casa...

— Claro que si, todo lo que desee mi ama! — exclama empezando a limpiar.

Ama, ese apodo que Chifuyu te había puesto, y te ponía nerviosa.

No sabias que era lo que pasaba con Chifuyu, si actitud, había cambiado repentinamente.

Chifuyu mientras tanto, limpiaba la casa de arriba hacia abajo, todo, al igual que revisaba las cámaras de seguridad de la casa.

Cuando volviste encontraste la casa totalmente limpia y a Chifuyu esperándote en la entrada con su sonrisa inocente.

Hasta el día siguiente, que tendrías tu cita para arreglar el problema de tu androide.

Te metiste a bañar, y para cuando querías tomar una toalla, te percataste de que no la traías contigo.

— ¡¡Chifuyu!! — le llamaste una vez, normalmente vendría corriendo pero no lo hizo — ¿Chifuyu?

— Disculpa ama, no la había escuchado — dice apareciendo de la nada

— Ohh, si, me podrías pasar mi toalla por favor...

— Lo que ustedes ordene!

El se fue corriendo y devolviendote la toalla para después volver a irse.

Para cuando saliste, no habías visto a Chifuyu en ningún lado, no le pusiste mucha atención, ya que seguramente estaba limpiando.

Llegaste a la empresa donde habías comprado tu humanoide, pasandote a la cita con el jefe.

— Buenos días... — saludaste.

— Buenos días señorita _____, me dijeron que estaba nerviosa por un problema en su androide — dice el señor de traje

— Así es, vera el que yo compre es el modelo "Chifuyu Matsuno" — el te interrumpió

— Deme cinco minutos, buscaré su modelo, como sabrá no fabricamos humanoides similares...

— Claro...

— Este es su modelo ¿no es así? — dice moviendo la pantalla de su computador hacia ti, asientes con la cabeza — Puede continuar

— Pues verá, el día que volvió la luz del apagón, los ojos color cían de Chifuyu se volvieron rojos, y eso me da miedo, quería saber si tengo o no que preocuparme por ello...

— Mire señorita, no tiene por qué preocuparse por eso, nunca nos ha pasado un caso así, solamente cambia el color de los ojos, más no su funcionamiento, así que valla tranquila — dice el con una sonrisa.

— Okey... Muchas gracias por su tiempo...

Dices saliendo del lugar, no tabas algo nervioso al hombre de traje, lo mas seguro es que estaba lleno de trabajo.

Regresaste a casa, con Chifuyu, tratando de olvidar completamente que algo andaba mal con el.

Tenias que dejar ese tema de lado, después de todo, irías a un viaje de negocios con Taiju.