La noche había llegado y Jongho se sorprendió de que Yunho se tardará todo el día en hacer lo que sea que hizo.

Hace un rato había entrado a pedir que se arreglará y antes había mandado a sus hijos a bañarse, así que mientras Jongho estaba arreglándose, él arreglo a sus hijos y los llevo al patio para que esperarán con ciertas cosas, puso toda su confianza en sus conejitos.

—Yunho— El mayor sonrió al ver a su novio— ¿Estoy usando la ropa correcta?

—Claro, iremos a la playa así que estás perfecto— Se acercó a acariciar su mejilla y beso su frente— Vamos porque deje a los conejitos a fuera.

—Yunho— Regaño— Espera ¿Cómo que iremos a la playa?— Yunho sonrió y lo jalo de forma delicada fuera de la habitación.

Al salir de la casa ahí estaban sus  conejitos sosteniendo unas cajitas, los seis caminaron hasta la playa que en realidad no quedaba lejos de la casa, ahí Jongho notó como habia luces al rededor de una gran manta sobre la arena, además de que había demasiadas almohadas y cojines, que era cubrida por una carpa de la cuál colgaban luces que tintineaban y justo podrían ver la puesta de sol, al llegar se detuvieron.

—Conejitos— Su hijo miraron a Yunho y después corrieron algo lejos pero aún así podían verlos.

—Yunho— El menor lo miró curioso.

—Sabías que desde que te conocí has sacado partes de mi que no creía tener— Jongho asintió lentamente mostrándose tranquilo, aunque por dentro se estaba emocionado demasiado— A pesar de todo siempre me tuviste fe, no te esperaba en mi vida y en cierta forma agradezco que Mingi haya pensado que regalarme un conejo era buena idea, amo todo esto que forme contigo— Tomo sus manos— Estoy completamente seguro de que mi vida sería miserable si tú no hubieras aparecido, así que gracias por quedarte juntó a mí a pesar de que parecía que tu presencia me molestaba, gracias por quedarte conmigo a pesar de no saber nada de híbridos, gracias por darme la oportunidad aún cuando no la merecía, gracias por escucharme, gracias por esta familia.

—Yun— Acaricio su mejilla— No me tienes que agradecer, si me lo preguntarán yo volvería a pasar por todo eso con tal de volver a escucharte decir que estás enamorado de mí.

—Yo cambiaría algunas cosas, pero aún así estaría enamorado de ti— Jongho sonrió— Te amo Jongho, te amo más de lo que creí, te amo como jamás ame a alguien, porque jamás había amado a alguien como a ti, y es por eso que estoy completamente seguro de que quiero compartir toda mi vida junto a ti y nuestros conejitos, los cuatro llegaron cuando menos me lo imaginé, los cuatro siempre serán mis conejitos sorpresa.

—¡Sopresa!— Escucharon a Jinha.

—La sorpresa está lista— Ambos comenzaron a caminar hasta donde estaban sus conejitos.

Ahí Jongho pudo ver perfectamente como sus hijos habían escrito en la arena «¿Quieres casarte conmigo?» miro a Yunho y esté lo miraba con una linda sonrisa.

—Jongho, creo que nunca lo dije pero me di cuenta de que estaba enamorado de tí esa noche— Jongho notó como Jongho habría la cajita en sus manos la cual tenía una foto de luna llena— Y lo confirme cuando me encontré tus juguetes en la cama— Está vez Yoobin abrió su cajita y estaba una de sus pelotas— Tenía miedo de confesar lo que sentía por tí, pero cuando te escuché decir que estabas enamorado de mí no pude evitar emocionarme fue de los mejores días, nos hicimos novios y semanas después nuestros conejitos llegaron— Ahora Kyungho abrió su cajita dónde había otra foto, su primera foto familiar— Y así llegamos a este momento, dónde te pregunto ¿Quieres casarte conmigo?— finalmente Jungwon abrió su cajita dónde se encontraba otra cajita que Yunho tomo y abrió dejando ver un anillo.

Los conejitos se asustaron al ver a su papá llorar, pero sólo podían sentirlo feliz, emocionado y algo nostálgico.

—Si quiero— Yunho sonrió tomo la mano izquierda del menor y colocó el anillo en su dedo anular.

—Te amo— Y selló todo con un tierno beso sobre sus labios.

—Tambien te amo— Lo abrazo y los conejitos se les unieron.

Los seis regresaron al lugar que Yunho arreglo para ver el atardecer y de paso comer ya que Yunho compro diversas cosas, mientras comían los conejitos se mostraron curiosos por las cosas que su papá mencionó y ellos respondieron cada duda, bueno casi todas porque les preguntaron cómo es que aparecieron ellos, después miraron la puesta de sol en completo silencio.

Y ahí se quedaron hasta que la noche llegó, sus hijos poco a poco empezaron a quedarse dormidos, sólo que antes de eso se pusieron a jugar hasta que se cansaron.

—Fue hermoso— Yunho lo miró con una pequeña sonrisa— Será algo lindo de contarles a los conejitos más adelante.

—Lo será— Dió un corto beso a sus labios.

—Pero si vamos a planear juntos la boda— El mayor sonrió y asintió— Ya tengo ideas.

—No me sorprende, ¿Crees que deberíamos llevar a los conejitos a la casa?— Jongho miro a sus hijos dormidos, no se veían incómodos, pero no podían quedarse ahí toda lo noche.

—Creo que sí, pero son cuatro y nosotros dos— El pelinegro asunto.

—Entonces primero me llevará a Kyungho, después a Jinha, y luego yo Yoobin y tú a Jungwon—  Jongho lo miró— Perfecto, ya vuelvo— Tomo al menor de sus hijos y se alejó.

Jongho negó con una pequeña sonrisa y tomo lo que quedaba del vino que estaban bebiendo, miró el anillo que adornaba su mano y sonrió, sabía que no necesitaba casarse para pasar toda tu vida junto a Yunho, pero siempre tuvo la ilusión de casarse con la persona que más amará y Yunho ocupaba ese puesto.

El mayor regreso por su hija, volvió a irse y finalmente ambos se fueron a la casa, una vez los dejaron sobre su cama y salieron de la habitación para irse al patio.

—¿Y que haremos para el cumpleaños de los trillizos?— Preguntó Jongho.

—¿Tienes algo en mente?— El menor sonrió— Perfecto porque no tenia nada en mente, mis ideas se fueron con esta propuesta de matrimonio— Jongho rió.

—Valio la pena— Beso sus labios— Te amo, te amo mucho— Comenzó a besarlo repetidas veces.

—Creo que veniste de mas— Jongho volvió a reír— Lo hiciste y según yo estábamos igual.

—Estoy emocionado, Yun, nos vamos a casar— Lo abrazo del cuello— Nuestros padres se van a poner feliz.

—Yo también estoy emocionado, y obviamente se pondrán felices— Beso su frente.

—Pero Yun, no vuelvas a distanciarte de mí— El mayor lo abrazo de la cintura— Quiero estar cerca de ti.

—Te prometo que no volverá a pasar— Se inclino un poco para poder besarlo, está vez siendo un beso mas largo que los anteriores.

Claro no pasaron a más porque Yoobin se despertó y los llamó, ellos obviamente atendieron a su hijo, no sería la primera que ponen sus cosas en segundo plano para atender las necesidades de sus hijos.

Y una vez que Yoobin volvió a dormirse y estando seguros de que sus hijos no se despertarían, aunque cerraron la puerta por precaución, entonces ahí sí ya tuvieron tiempo para ellos dos y procuraron utilizarlo bien.

Algunas veces me gustan como me quedan las propuestas (◍•ᴗ•◍)