//Volvemos a el punto de vista de Nolan, disfruten y denle en la ⭐ porfa ^^\\

Otra vez aquel muñeco imperfecto se encontraba en el hospital, no estaba dañado ni nada, pero había estado pálido y parecía estar traumado en aquel momento. Debía ser llevado a el hospital para revisarlo. Nolan no despertaba del desmayo. Estaba en una camilla en una habitación blanca y limpia. Los familiares y conocidos se encontraban afuera súper preocupados por Nolan. Al menos sabían que él estaba bien, su respiración continuaba y su corazon latía constantemente. Los padres del pecoso preguntaron que es lo que había pasado. Charles se atrevió a contar, sabía que el pecoso no hubiera dicho la verdad. Pero, de que él se quiera suicidar no era nada bueno y era necesario que los padres supieran para que hicieran algo al respecto.

- Nolan intentó quitarse la vida. - Los mayores quedaron pasmados y súper confundidos. Siempre se habían considerado buenos padres entre ellos, pero, ¿Quizás estaban equivocados? O, seguramente, Nolan habrá querido llamar la atención. Si, es la teoría que habían decidido tomar en cuenta los padres.

La doctora que estaba al lado de la puerta que era de la habitación en donde estaba el pecoso, escuchó la conversación. Se preocupó por aquel chico que había sido mencionado. Abrió la puerta de la habitación y vió al chico despertando. En ese momento, Nolan levantó un poco y levemente sus párpados. «¿Qué hago aquí?» Fue lo único que preguntó dentro de esa grande habitación, donde había un silencio eterno que parecía que su voz se escuchaba como si estuviera en el vacío.

- Tranquilo, joven Dubois. Estás aquí de nuevo tras un intento de suicidio. - La chica se acercó a él y se puso a un costado de la cama, parada mirándolo. Sintió pena por él, así que decidió preguntar debido a su intento. - Si no te molesta que te pregunte... ¿Por qué querías quitarte la vida?

El pecoso abrió bien los ojos y la observó, estaba un poco preocupado. Él no sabía si debía confiar en ella. Quizás sus padres querían tener información de eso y la doctora contaría todo. Y no quería que sus padres lo supieran.

- ¿No le dirás a mis padres, verdad? - A la doctora le parecía aun más preocupante de que el chico no quisiera que le diga a sus padres. Quizás la culpa la tenían ellos. Le dijo que no diría nada, podría confiar en ella. - Saqué un ocho en mí prueba. Rogé a sacar algo mejor, pero no pude.

Quedó pasmada. Nunca imaginó lo tanto que podía afectar una nota. Era un poco normal entre los adolescentes la preocupación por la puntuación, pero no creía que quisieran suicidarse, esto debía ser gracias a sus padres.

- ¿Y por qué tanta la preocupación por la nota?

- Mis padres me obligan a siempre sacar un diez... Si saco menos ellos me gritan de todo, me dicen: "idiota", "inútil" "no sirves para nada.", "debes esforzarte más." Y yo estoy cansado de eso. - Agachó la cabeza y un nudo se le había armado en la garganta. Resistió las ganas de llorar porque está ya sería la quinta vez en la semana. La doctora le dijo que estaba bien llorar, que no debía porque aguantarse a hacer algo normal. Nolan solo rompió en llanto.

- Oye, tranquilo. Tu haces tu esfuerzo y eso está bien. Ignora todo lo malo que te dicen. Concéntrate en lo bueno, no haz reprobado, osea que tú futuro va bien. No todo sale como queremos. - El pecoso sonrió con sus lágrimas cayendo sobre sus mejillas pecosas. Abrazó a ella con todo el cariño que pudo dar. Le agradeció por todo y se soltó del abrazo. - ¿Quieres que llame a algunos de los que están afuera? Están muy preocupados.

Nolan preguntó quién se encontraba afuera. Aquellos eran Lou, Lydia, Mandy, Amelia, Esteban, Charles, Naoy y Akira. Él no quería que sus padres entraran, sabía que ellos lo retarían por hacer eso. Pero, aún así, los dejó pasar.

- ¡NOLAN! ¿Te sacas un ocho e intentas quitarte la vida? De verdad que no sabes hacer bien las cosas. Y esa decisión no estuvo nada bien. Lo tienes todo, ¡¿por qué te quieres suicidar?! Tu padre y yo nunca logramos entenderte. - El pecoso los miró con los ojos llorosos y rostro enojado. Sabía que su madre diría eso. Los demás miraron al chico y se sentían fatal al ver cómo los padres trataban a Nolan. La doctora no aguantó las ganas de pegarle una cachetada a la madre en su cara, pero no podía, perdería su empleo y ella podría terminar denunciada por Amelia. Además de que no puede decir como ella tiene que educar a su hijo, sería de mala educación.

- ¿Escuchas al menos lo que dices? ¿Acaso piensas? Nunca les da nada bien a lo que hago. Siempre buscan el lado malo de lo que hice... Y de verdad me cansa. Ustedes son parte de la mayoría de la culpa para que yo tenga el deseo de desaparecer de la faz de la tierra. Doctora, ¿Puede hacer que salgan, por favor? - Decía esto llorando, pero con una voz seria. Los padres de aquel estaban muy enfadados y confundidos. La chica asintió con la cabeza y echó a Amelia y Esteban. Los cuales no querían salir. Pero no pudieron quedarse ya que ella los empujó con fuerza hacia afuera.

- Hermano... De verdad lo siento... Siento todo lo que estás pasando. - Charles lo abrazó con fuerza y el pecoso le limpió las lágrimas al castaño. Los demás se acercaron y abrazaron a Nolan también, se quedaron los cinco un rato en el abrazo hasta finalmente salieron todos.

Había un silencio mientras quedaban ahí esperando a que el pecoso diga algo. Pero Lou se acercó a él y sentándose a su lado le dijo al oído «Mañana, después de la escuela, ¿Podrías ir a mí casa, para hablar?». Nolan aceptó con gusto, pero... ¿Por qué quería charlar con él? ¿Había hecho algo mal? Tal vez quería terminar la amistad... No estaba muy seguro pero debía averiguar que era.

El pecoso preguntó si él podría salir del hospital, si se encontraba todo en orden. Claro que estaba bien, podía salir si era de su gusto. La doctora decidió hablar con los padres del chico, así que todos tuvieron que quedarse dentro del lugar ese. Ella salió y los mayores salieron disparados a la chica enfadados. Estos padres no sabían aceptar que su hijo no estaba bien y que necesita ayuda.

- ¡Usted no tenía ningún derecho de quitarnos de la habitación en donde está nuestro hijo! - Amelia echaba humo de la cabeza. Gritaba fuerte y se escuchaba en medio hospital. La doctora le dijo que se calmara, que ella no debía faltarle el respeto de esa manera. El paciente tenía el derecho de echar a cualquier invitado que estuviera en la habitación.

Empezaron una leve discusión, le decían que la denunciarán. Esto a la chica le preocupó, claramente eran capaces de hacerlo.

Nolan escuchaba todo. ¿Otra vez estaban discutiendo con alguien? Esto era injusto. Se sentía tan débil y fatal, que empezó a llorar. Su hermano y sus amigos se preocuparon.

- Nolan... ¿Todo bien? - Charles lo observó con susto. No era normal que llore muy seguido. El pecoso lo miró, no dijo nada y quitó su mirada de él. - ¿Quieres irte? Si es así, vamos.

El de ojos bicolores, asintió con la cabeza y se sentó a un costado de la cama, se paró y caminó hacia la puerta con sus conocidos atrás. Nolan respiró profundo, su paciencia estaba por explotar, llamó a sus padres para irse. Aquellos lo miraron enojado. Le dijeron que espere porque estaban tratando de arreglar un problema. Finalmente se dirigió afuera con su gente. Decidieron sentarse en el piso del estacionamiento del Hospital. Esperar a que vengan a buscar a cada uno. Y a Nolan le dijeron que cuando todos se vayan y sus padres sigan discutiendo, sería mejor que vaya adentro ante cualquier peligro.

Y así fue, se iban todos a su casa, uno por uno. Mientras el pecoso observaba cómo se alejaban. Recibía un saludo de cada amigo. Pero Charles no quiso dejarlo solo, le dijo que se quedaría con él el tiempo que fuera necesario. El de ojos bicolores sonrió tiernamente, lo abrazó y le agradeció por todo.

- ¿Ves que hay razones para que te quedes? Siempre hay personas que van a estar para ti, en las buenas y en las malas... ¿Acaso cuando subiste... TE OLVIDASTE DE MI? ¿Me ibas a dejar llorando? - Claramente lo decía en broma, pero no quería que Nolan lo abandone así como si aquel no fuera importante. Él nunca sintió o supuso que tenía un hermano, desde chico creyó que era hijo único y que siempre fue así. Recordó que algunas veces escuchaba las conversaciones de sus padres, siempre hablaban de lo arrepentidos que estaban de abandonar a un chico. En aquel tiempo, era obvio que no entendería nada, pero las cosas se descubren y no estaba nada molesto de tener un hermano tan bueno, él le había agarrado cariño muy rápido.

- Hey, mi mente estaba en solo pensar en lo que haría, pero perdón jeje... Me alegra de que seamos hermanos, Charles. Siempre tratas de sacarme una sonrisa, y estoy agradecido por eso. - Nolan y su hermano se dieron un fuerte abrazo. De repente, empezaron a escuchar una discusión leve, eran sus padres. Vieron a Nolan y siguieron hablando, en cuanto vieron a Charles, sus palabras se callaron y cuestionaron su presencia. El chico comentó que se quedaría a dormir en su casa, a Amelia y Esteban les dió lo mismo y dijeron que sí. El pecoso y el castaño, saltaron de la alegría.

•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~★~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

Unas horas después de un maratón de películas, comiendo palomitas, viendo memes riéndose con su humor roto, hasta actualmente mirar tik toks desde sus celulares. Eran las 3am, no tenían ni un poco de sueño, bueno... eso decía Charles, pero en cuanto Nolan lo vió estaba durmiendo y se rió de él un poco. Cuando abrió Whatsapp en su teléfono, notó que Michael, Tiffany y Meghan estaban en línea y estaban hablando por el grupo que tenían entre ellos cuatro. Se le ocurrió la idea de hablar con ellos, desde que se mudó no hablaba con sus amigas, solo con su novio. Estaba claro que le gritarían por no hablarle.

Saludó de manera normal. Meghan y Tiffany no pudieron evitar gritar después de todo el tiempo que pasó sin que él les diga una palabra. Después de algunos gritos más, el pecoso comenzó a comentarles a las chicas todo lo que había estado pasando. Hasta llegar al punto más reciénte, haberse intentado suicidar. Meghan y Tiffany no pudieron evitar sorprenderse, pero sabían que, algún día, él lo haría. Siempre lo decía en "broma" según él, pero no parecía ser tan cierto. Además, siempre veían como el llegaba a de su casa a la escuela con la cabeza baja, ojeras y sus ojos demostrando traumas. Eso era preocupante, pero cuando preguntaban si todo estaba en orden, Nolan decía que estaba bien y no necesitaba ayuda. Era muy difícil ayudarlo, ya que él se enojaba cada vez que lo intentaban.

Los amigos lo consolaron y le dijeron que ellos siempre estarían para él. El pecoso sonrió al teléfono y se despidió para dormir, estaba un poco cansado.

A la mañana siguiente...

El castaño despertó de su cama y observaba el techo, tenía sueño. Le había costado dormir, aunque siempre se acostara tarde. De repente, resive un golpe en su cara. Nolan observó hacia al costado de su cama, Charles estaba despierto y lo miraba. «Wua, que susto me haz dado» Dijo aquel riendo al igual que el contrario.

- ¿En quién pensabas? - Una cara picara estaba en su rostro. Este hombre es más random. Ni siquiera estaba pensando en nada. Nolan lo miró con el ceño fruncido y se echó a reír al igual que Charles.

- Tenemos que levantarnos para la escuela. - El castaño asintió con la cabeza y se levantó del colchón del piso y se fue al baño mientras el pecoso se vestía para la secundaria.

Nolan se fue a almorzar y su hermano se ponía una ropa que no era de la escuela, lo iban a regañar en el colegio. Pero no sé había preparado ayer para quedarse en la casa del pecoso. Sin embargo, cuando el de ojos bicolores lo vió sin la ropa de la escuela, le vino la duda de que estarían pensando sus padres al ver cómo él no estaba en su casa.

- Nah, tranquilo... Ellos cuando no vuelvo no les importa. Siempre piensan que estoy bien, vaya donde vaya. - Y después ellos dicen que los padres de Nolan son irresponsable... Ignoró el pensamiento y le dijo que estaba bien, pero que no siga haciendo eso, si no lo echarían de la escuela.

Después de almorzar, salieron de la casa y llegaron a la escuela. Los dos juntos se fueron junto a sus amigos. Los de siempre. Aquellos los saludaron, y Nolan vió que estaba Lou, se acercó a él y le dijo que lo sentía no haberle hecho caso por un montón de tiempo. Lou sonrió y aceptó sus disculpas. «¿Irás a mí casa hoy?» Nolan respondió que si iría y de repente vieron que Naoy se acercaba.

Aquella saludó a los demás como los otros a ella. El pecoso sonrió, pero observó detrás suyo... ¿Quién era él? Es muy... Idéntico a... Lou... Sus trazos eran iguales. Si cabello rubio de exacto color. Sus ojos celestes, iguales, pero eran un poco más oscuros. El mismo color de tez blanca y limpia... Únicamente en diferencia eran sus lentes... Esto era increíble.

- Naoy... ¿Quién es él?... - Apuntó a aquel chico que estaba en el auto de dónde había salido la chica. Contestó que era su hermano. - Es que es... Muy parecido a Lou...

Los demás lo escucharon, miraron hacia el chico y tenía razón...

Fin del Cap 10...

FELIZ NAVIDAD, Q LA PASEN BIEN BONITO🎉🎄😸🫶