O9 ⌇ WHAT?

━━━━━ 𝐍𝐄𝐈𝐆𝐇𝐁𝐎𝐑𝐒;
❛¿QUÉ?❜

𝐃𝐄𝐃𝐈𝐂𝐀𝐃𝐎 𝐀
lvslahey












     —¿TE ADELANTAS A ENTRAR AL CLUB? NELLA ME VA A SACAR UNAS FOTOS.

Sophie le pidió a su hermano menor que las miro sin entender pero terminó por asentir, besó la mejilla de Nella y entró al lugar, mientras que Nella seguía completamente quieta por la sonrisa que Arthur le había dedicado antes de entrar al club. Sophie espero que su hermano se adentrara al lugar, para tomar la mano de su mejor amiga y mirarla con completa efusividad.

—¡Nella!

—¿Qué?

—Ya sé que me vas a regañar, que no quieres hablar sobre él, que es un ciclo cerrado y yo lo entiendo perfectamente ¿sabes? —siquiera tenía que preguntarle de qué estaba hablando porque perfectamente lo sabía— pero ¿¡No te parece que es demasiada coincidencia que Arthur y tú se encuentren en todos lados?!

—Cinco segundos.

—¿Cinco segundos de qué?

—Tardaste en no gritar —le mencionó divertida, mientras que Sophie soltaba una carcajada y pasaba a verla con una ceja alzada.

—¡Te estoy hablando en serio!

—Sophie... ya basta con el tema de Arthur —pasó ambas manos sobre su cara—. Te lo pido de verdad, no quiero hablar sobre él.

—Pero está mañana...

—Ya sé lo que he dicho esta mañana ¿vale? Ya no quiero hablar de eso, en serio te lo digo. Mi etapa adolescente enamorada de Arthur fue bonita, claro, las interacciones y todo eso —la miró— hasta que me di cuenta de que él no va a hablarme, y yo tampoco lo haré. Es deportista, está más que claro que él tiene otras chicas que le interesan, como la rubia que vimos la otra vez por su casa... y bien sabes que eso me rompió el corazón, yo ya no quiero hablar de él.

«—Si me sonríe, vale está bien, si me guiña está bien también, pero yo ya no tengo quince años para ilusionarme sólo por un gesto de él. Quiero centrarme en conocer a otras personas, no voy a estar siempre esperando a que él tenga las ganas de acercarse y hablarme, yo quiero conocer a otros chicos porque mi etapa con él ya la cerré.»

Sophie soltó un resoplido.

—Y yo te entiendo, y te respeto, en parte porque no es precisamente Arthur quién tiene que dar el paso, Antonella. Si te gusta ¿por qué no vas y le hablas?

—¿Me estás aconsejando que parezca una desesperada?

—¡No vas a parecer una desesperada solo por ir a hablarle!

—Sí pero es que yo... ya sabes que no soy ese tipo de chica Sophie ¡No lo puedo ni mirar a la cara!

—¡Y yo sí, y te quiero ayudar y no me dejas!

—Porque ya no me gusta él, ya no estoy enfocada en él, si estas interacciones con Arthur hubiesen pasado cuando yo tenía quince años te decía que sí, pero yo siento cosas por otra persona Sophie —bajó la mirada, para sonreír de lado mientras que jugaba con sus dedos y la veía— siento cosas por tú hermano y yo...

Sophie asintió.

—Vale, vale, lo entiendo —alzó sus manos en son de tranquilidad—. Créeme que lo entiendo perfectamente, por un segundo pensé que las interacciones con Arthur habían generado cosas en ti y pretendía ayudarlos porque está más que obvio que bueno, que... los dos son idiotas y eso que estoy hablando de manera decente —Nella soltó una carcajada— pero ya no quieres hablar del tema y lo respeto.

—Sí claro —ella empezó a caminar hasta el club mientras que rodaba los ojos con diversión— en menos de cinco minutos si el tonto ese se me queda mirando vas a empezar a gritar, es que ya te conozco perfecto.

—¿Cómo sabes que sí?

Las dos soltaron una risita divertida. Nella no podía creer que los Leclerc no solían pasar año nuevo en el club donde ella y su familia asistían, pero justamente en ese momento ¡Habían decidido asistir! Pero era algo a lo que no iba darle importancia.

Y si era sincera, no le sorprendió ver cómo ya sus padres tenían la mesa junto a la de los Leclerc y estaban todos hablando animadamente. ¿Desde cuándo eran tan amigos? Es decir, sí, eran vecinos y se saludaban, pero de ahí a mantener una conversación por horas y reírse como amigos de siempre, eso no solía ser común.

Pero no iba a darle atención a ese rubio en específico, que desde que la vio entrar no le despegaba la mirada.

Y Nella iba a ser sincera consigo misma.

Muy a pesar de que negase que ya no le pasaban más cosas con Arthur, era obvio que cada interacción que estaba teniendo con el rubio desde la cena de navidad —y después de tanto tiempo sin tener una interrelación con él— le afectaba; le afectaba en plan que obviamente sentía cosas por él.

Y se odiaba.

Se odiaba por ser tan vulnerable con los gestos, miradas, guiños y/o sonrisas que le daba el rubio.

Se odiaba por fingir delante de todos que lo había superado, cuando sabía perfectamente que si Arthur se le acercaba, le hablaba y le pedía ser amigos, ella le decía que sí.

Se odiaba por lo mucho que Arthur Leclerc le gustaba, y lo odiaba a él.

Lo odiaba a él por todo lo que causaba en ella con una sola mirada, y ni en cuenta.

Lo odiaba, porque sabía que aún teniendo algo con cualquier chico, si él llegaba y le proponía ser algo, ella dejaba todo y aceptaba estar con él.

Lo odiaba por ser un idiota, por coincidir en cualquier lugar.

Lo odiaba por tener la capacidad de dejar de gustarle, de al fin admitir que era un "ciclo cerrado" pero que en unas horas y con sólo un par de sonrisitas y un estúpido guiño, la tuviese a sus pies otra vez.

Lo odiaba por todos los sentimientos que un chico con el cuál no tenía ningún vinculo en común más que el sólo ser vecinos, causaba en ella más que cualquier chico que le pudo gustar en el pasado.

Y se odiaba.

Por ser una idiota.

Y lo odiaba.

Por ser un idiota también.

Pero no iba a prestarle atención a Leclerc y a sus miradas en ese momento, no lo haría. Giovanni de verdad le importaba, incluso más que sólo su mejor amigo, así que toda su atención estaría centrada en él.

En un par de horas sería año nuevo y el club estaba decorado muy bonito, transmitía un lindo ambiente de fiesta pero a la vez uno muy familiar.

Nella tomó asiento al lado de su mejor amigo, y agradecía a Dios que no estaba enfrente de Arthur, que encima de todo, no despegaba la mirada de sí. Tenía a Less y Sam enfrente, Sophie estaba en medio de ella y su hermano, los padres de los Rose apenas habían llegado, y en la mesa de al lado, los Leclerc.

—Disculpen la demora, es que...

—Sophia se tardó un año arreglándose, ya sé porque tú eres así —Gian se quejó señalando a Sophie con sus labios, mientras que todos en la mesa soltaban una risita divertida.

Gian y Sophia eran los padres de los mejores amigos de Antonella, que para ella eran como sus segundos padres, eran muy divertidos, amables y atentos.

—No hay problema, todavía no nos sirven la cena —Andre informó con una sonrisa—. Por cierto les presento a la familia Leclerc, ellos son los Rose, padres de Giovanni y Sophie.

Se presentaron amablemente mientras que los padres de los chicos se sentaban, Nella estaba hablando con Giovanni que estaba más cariñoso de lo normal y si era sincera, eso le gustaba demasiado.

La cena no tardó mucho en llegar, eran aproximadamente las nueve de la noche, la música que estaba sonando en ese momento era bailable. Cada quién comió de su comida, mientras que los Leclerc juntaban más las mesas y se integraban en la conversación que todos mantenían, todos menos Giovanni y Nella que estaban hablando a centímetros de sí y riéndose de cosas tontas que Giovanni le decía a la castaña.

—De verdad, fue muy gracioso —el castaño le dijo en un susurro, para luego los dos quedarse viendo fijamente y él proceder a acariciarle la mejilla— ¿Ya te dije que te veías muy linda hoy?

—No...

Arthur quería ignorar la escena de ambos, pero es que no podía, y se sentía como un mismísimo idiota, en algún momento se llegó a pensar que Nella y él se hablarían, se harían buenos amigos, pero resultaba que no, no se habían hablado cuando ella era soltera, menos ahora que tenía novio. ¡Novio! ¡Y estaban casi que besándose enfrente de él!

Y le daba coraje, apretó su puño, mientras que veía de reojo la escena de ambos riéndose a centímetros del otro, y odiaba a Giovanni, porque era quién estaba cerca de ella, casi rozandole los labios, admirandole las lindas facciones que la de ojos claros tenía...

—Y bueno ustedes ¿ya son novios o qué? —preguntó el padre de los Rose, mientras que todos se reían en la mesa y veían a los dos chicos que se sonrojaron completamente avergonzados, y Arthur no quería escuchar la respuesta de eso, se puso de pie.

—¿El baño dónde es...? —le preguntó a Less que estaba a su lado.

—Primer pasillo a la izquierda.

—Gracias, Less —le sonrió amable, mientras que ella le devolvía la sonrisa.

—No es nada, Arthur.

—Yo voy contigo —Charles se puso de pie, mientras que los dos salían de ahí para empezar a caminar al baño.

Apenas entraron al pasillo el menor de los Leclerc se dió la vuelta para ver a su hermano.

—Ya sé lo que vas a decir, y sí, ya sé que soy un idiota Charles —se quejó, mientras que él ojiverde soltaba un resoplido y lo veía, los dos entraron al baño.

—No iba a decirte nada de eso, igual.

—Ah, ¿no?

—No —Charles remarcó—. Sólo quería decirte que es momento de que dejes de ser tímido con Antonella, en la cena de navidad le pudiste hablar y no lo hiciste, ahora tenemos otra cena de año nuevo ¿Sabes lo que eso significa? Que tienes otra oportunidad para hablarle, Arthur.

—¿Te diste cuenta de qué tiene novio, no?

Lo miró con una ceja alzada, abriendo la llave del lavabo mientras que bajaba la mirada para secarse las manos con el pantalón, Charles se recargo de la barra del baño, mientras que se cruzaba de brazos y lo veía divertido.

—Ni siquiera confirmaron nada.

—¡No hace falta que lo confirmen porque ya es demasiado obvio que sí lo son! Además ¿para que hablarle cuándo ya está de novia con alguien más?

Soltó un resoplido, Charles se palmeó la frente.

—Por amor a Dios, Arthur. ¡Vas a hablarle no a pedirle matrimonio!

—Sabes perfectamente que no voy a hablarle con intenciones de amistad porque ella me gusta —le dijo sincero— entonces si ya sé que tiene novio ¿para qué voy a acercarme? Yo creo que ya fue mucho, Charles. Nella y yo no estamos destinados a ser más que sólo vecinos y ya está, no quiero meterme en su relación con el idiota ese.

—Arthur...

—Que sean felices —continuó el rubio, mientras que seguía abriendo la llave del baño y mojando sus manos— que se casen, yo les echo arroz en la boda, les compro las propiedades para que vivan juntos y soy padrino de sus futuros hijos, que sean felices junto a su perrito Tommy, y—

La carcajada de Charles lo interrumpió.

—¡Eres un exagerado!

—¡Es la verdad, se le ve enamorada! ¿¡No te das cuenta de cómo lo mira?!

—He visto que a tí te mira mejor...—le sonrió, mientras que Arthur lo miraba con una ceja alzada, pero sin evitar sentir el cosquilleo en su estómago, negó.

—No me voy a ilusionar con ese comentario.

—¿Crees que lo digo para que te ilusiones? —Arthur no le respondió—. Si lo que quieres es que no te fastidie más con el tema de Nella yo no lo hago, Arthur. Pero como tú hermano mayor y sabiendo que te gusta la chica, quería ayudarte, pero veo que no quieres poner de tú parte.

«—¿Qué rayos te pasa? Entiendo que te guste tanto pero ¿De verdad vas a perder la oportunidad de acercarte, hablarle y quizá formar una amistad? La amistad es el comienzo de todo ¿Qué sabes si después de eso se hacen muy buenos amigos, o mucho más que eso? —le palmeó el hombro— ¿Vas a quedarte con la duda? ¿Qué tal que funciona?

—¿Pero, qué tal que no?

—Pues será una anécdota más Arthur, por favor. Manejas carros a una velocidad increíble pero quién diría que para ligarte a una chica eres un lento.

—¡Oh vamos! —los dos soltaron una carcajada— es que... si está con ese chico...

—Tú y él amigos no son —se encogió de hombros, mientras que le guiñaba un ojo y Arthur soltaba una carcajada.

—Que buen consejo, Charles.

—Gracias, es que soy el mejor.

—Idiota.

Los dos volvieron a reírse para después salir del baño y unirse a la conversación de los demás, mientras que Arthur pensaba en la conversación que había tenido hacía segundos con su hermano mayor. Y por más que Nella en su diagonal estuviese dándose cariñitos ya no tenía tantos nervios de acercarse a ella y hablarle, y buscando la excusa más estúpida, se atrevió a dar el primer paso, tocando su mano ligeramente, y provocando que Nella diese un salto del susto, los dos se vieron fijamente, Arthur agregó:

—¿Estás utilizando la pimienta? —le preguntó, Nella quedó completamente desestabilizada ante la pregunta, sin embargo, no tardó en reaccionar, negó.

—Eh... no, no.

—Vale.

Tomó la misma, mientras que Sophie que estaba viendo la escena junto con Less se aguantaron los chillidos que tenían y Charles estaba de la misma manera junto con Lorenzo. Nella quedó procesando la información pero intentó ser disimulada abrazando a Giovanni.

Arthur...

¿Le acababa de hablar?

Oh por Dios.

Ni ella se lo creía.























━━━━━ bueno cuatro palabras cuenta como hablar, no? JKJKJAJAJAAAKAJAJAAJAJAJAJAJAJA

hubo alguien que me pidió que le dedicara el cap en donde se hablan pero no recuerdo el user, así que quien haya sido dígame de vuelta plsss

si quieren un cap dedicado no duden en pedirlo, no importa que ya les haya dedicado uno:D

Espero que les guste el cap, voten y comenten no les de pena bandaaa! 😜

💌
—girlofmyidols.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top