𝟯𝟳.
Amelia miraba como Billy dormía, sin duda alguna sabía que su padre era capaz de hacerle daño al rubio pero no sabía cuánta maldad tenía aquel hombre en su corazón hasta ahora.
— Me vas a desgastar de tanto verme —Dijo Billy abriendo poco a poco los ojos, Amelia sonrió levemente al verlo, el rubio agarró la mano de la castaña y la beso—. Todavía no puedo creer que estés aún a mi lado después de todo lo que te hice.
— Todavía tengo la absurda idea de que te tatuaras mi nombre en tu nalga izquierda —Billy carcajeó para luego mirar a la chica—. Quizás estoy soñando demasiado.
— Te prometo que después de que salga de esta mierda iré y me tatuare tu nombre.
— ¿En la nalga izquierda? —Dijo Amelia emocionada y Billy asintió sonriendo, la castaña le extendió el dedo meñique y el rubio frunció el ceño—. No es una promesa si no lo juras por la garrita.
— ¿De verdad? —Amelia asintió sonriendo, el rubio levantó su dedo meñique y lo junto con él de la chica—. Lo prometí, ahora merezco un beso por eso.
— No te besare tu nalga izquierda, que asco —Billy carcajeó para luego agarrar la cara de la chica y besarla—. Estás helado.
— Es que necesito tus besos para calentarme —Billy la volvió a besar para luego besar su frente—. Te amo Amelia.
— Yo también te amo —Amelia se levantó de la silla para luego abrazarlo, la chica inhalo su característico aroma perdiéndose entre tantos recuerdos, pero de repente sintió como Billy la dejó de abrazar—. ¿Billy?
La chica despegó del rubio y vio como este no respondía, Amelia lo movió nuevamente pero simplemente no reaccionó.
— ¡Billy! Por favor despierta, ¡Billy por favor!, ¡Ayuda! —Amelia tocó el botón rojo que se encontraba al lado de la camilla del chico y unos segundos después entró el doctor y muchas enfermeras—. ¡No responde! ¡No se que hacer!
— ¡Necesito que se retire por favor! —Le gritó el Doctor a Amelia y está simplemente no reaccionaba—. ¡Lo estoy perdiendo!
— La acompañó afuera señorita —Una enfermera se acercó a la castaña y está simplemente se apartó bruscamente.
— ¡No, necesito saber que él estará bien! ¡Billy por favor despierta! —La enfermera trató de sacar a la chica pero esta se rehusaba a salir—. ¡Por favor Billy!
De repente la máquina emito un pitido y Amelia observo como él rubio ya no tenía pulso.
— Hora de muerte 9:55 AM —Dijo el Doctor viendo su reloj para luego tapar el cuerpo de Billy con la sábana que cubría la mitad de su cuerpo—. Lo siento mucho señorita.
— ¡No! ¡Billy, por favor despierta! ¡No me puedas dejar sola con este bebé! ¡Mi amor, por favor abre los ojos! —Amelia se aferró al cuerpo del rubio tratando de asimilar lo sucedido—. Estoy embarazada amor, eso era lo que quería decirte y ahora simplemente no puedo...
— Amelia.. —La castaña se volteo y vio a su hermano con sus brazos abiertos, la chica corrió a él para luego aferrarse a sus brazos cayendo al suelo en el proceso—. Lo siento mucho Meli.
— Se fue Stevie.. Se fue para siempre y no pude decirle que estaba embarazada, simplemente no pude —Amelia sollozo en el hombro de su mellizo, tratando de ahogar sus penas pero sabía que simplemente eso no iba a suceder.
Y aquella mañana, a las 9:55 AM se fue la persona que Amelia más amaba...
Penúltimo capituló.
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