━━━━━ 𝐌𝐀𝐃𝐑𝐈𝐃𝐈𝐒𝐓𝐀;
❛MI MEJOR AMIGA.❜

𝐃𝐄𝐃𝐈𝐂𝐀𝐃𝐎 𝐀
girlofmyidolss

     TENER UN MEJOR AMIGO DESDE QUE SE ESTABA PEQUEÑO ERA BASTANTE INCREÍBLE, y era algo que justamente le pasaba a Fiorella Fernández con Pedri González; desde que tienen memoria los dos son mejores amigos ya que sus familias se conocen desde hacía muchísimo tiempo. Sus madres —Rosy y Amelia— compartían la misma pasión por la cocina y ambas se dedicaban a los restaurantes que tenían, más que sólo amigos, eran familia. Fiorella se llevaba bien con todos los González, pero tenía un vínculo más cercano con quién era su mejor amigo, el jugador del Barcelona, Pedri.

Fiorella era un año menor que Pedri, siempre se había sentido de una manera especial cuando estaba con él, protegida, amada, feliz. El canario siempre había sido muy atento con ella desde que estaban en el kinder, se la pasaban juntos todo el tiempo, tanto que todos decían que eran inseparables, hacían pijamadas juntos, salían juntos, todo lo hacían juntos, la confianza que los padres de Fiorella le tenían a Pedri González era tremenda.

Y siempre lo había querido como un mejor amigo, hasta que llegó a su etapa adolescente. Fiorella siempre había acompañado a su mejor amigo al fútbol, ya que ambas familias eran bastante aficionadas al deporte, lo único que los diferenciaba era el club, ya que Pedri y su familia eran del Barcelona, y Fiorella junto a su familia eran del Madrid.

Su padre —Federico— era madridista, y su madre también apoyaba al equipo, así que desde muy niña también, Fiorella era fan del club merengue.

Había visto jugar a las leyendas del Madrid, y tenía autógrafos de las mismas. Las fotos en su habitación eran con su mejor amigo y sus jugadores favoritos, claramente Pedri con su camisa de apoyo al Barcelona, sobretodo a Andrés Iniesta ya que era su ídolo, y el de Fiorella; Cristiano Ronaldo.

Ver los clásicos de La Liga era divertido, ya que Fiorella y Pedri se la pasaban discutiendo todo el tiempo sobre quién ganaría. La castaña empezó a desarrollar más que amistad por su mejor amigo, justo en el momento preciso en el que en el colegio, uno de los niños que estaba jugando fútbol con ella en Educación Física, quiso buscarle problemas y Pedri la defendió, golpeándose con el niño y llevándose una sanción por eso.

Y Fiorella sabía que su mejor amigo la protegía porque la quería demasiado, pero en ese momento de secundaria, con sus plenas hormonas en desarrollo a los casi trece años, había sido inevitable empezar a sentir cosas por él. Desde entonces, era un sentimiento que mantenía oculto y se le daba bien.

Casi nadie, en realidad, nadie sabía que a Fiorella le gustaba Pedri González, y nadie lo sospechaba porque desde que son unos niños se tratan con mucho cariño en plan, estar abrazados todo el tiempo, besos en la mejilla, miraditas, sonrisitas... y por más que la gente se pensara que ahí hubiese algo más que sólo amistad, la verdad es que no era así, por parte de Fiorella sí, pero ella sabía perfectamente que Pedri la veía como una hermana.

Y no rompió su racha de que nadie se enterase de que estaba enamorada en secreto de su mejor amigo, porque apenas se mudó con él a Barcelona —después de Pedri empezar a jugar con el equipo blaugrana y ella ser admitida en la universidad de dicha ciudad y empezar a estudiar ahí— y conoció a a la que sería su mejor amiga —Isabella— la misma se dió cuenta al instante de que ella estaba enamorada de él, y le fue sincera, no le mintió.

Estaba más que claro que Fiorella Fernández no iba a decirle abiertamente a su mejor amigo lo que sentía por él, en primera parte ya sabía que él no sentía lo mismo por ella, y en segunda no quería arruinar la amistad.

Además, sabía que se le pasaría, y sí, probablemente desde sus trece años estaba diciendo lo mismo, pero estaba segura de que en algún momento Pedri iba a dejar de gustarle. Había salido con algunos chicos, si, claro que lo había hecho, pero ninguno le interesaba, al menos no como le interesaba Pedri y como era en el ámbito amoroso, ya que, ninguno de los dos había tenido una pareja.

Es decir, Fiorella sabía que Pedri había tenido citas con varias chicas y se habían dado besos y toda la cosa, pero nada en plan de relación oficial, a diferencia de ella que no pasaba de la primera cita y eso significaba que no se había dejado besar por ninguno de los tontos chicos que le seguían.

Los únicos besos que había dado habían sido en la secundaria con un niño que le gustaba, de manera tierna e inocente, ya había pasado mucho tiempo de eso así que no contaba como experiencia amorosa en sí.

Fiorella tenía una hermana menor, Mía Fernández; sólo era dos años menor que ella y le faltaba poco para asistir a la universidad. Mía quería estudiar marketing mientras que Fiorella estaba estudiando lo que le apasionaba: periodismo. Más específicamente se quería ir a la rama del deporte, era fan de todo lo que tenía que ver con el fútbol.

Aunque le parecía injusto la manera en la que el periodismo actualmente estaba siendo ejercido, polémicas, chismes, con quien salían los jugadores y con quién no, cuándo habían mejores temas de qué hablar. Y era gracioso que quisiese ser periodista teniéndole vergüenza a las cámaras.

Fiorella no era una chica que amaba tener los flashes, páginas de chismes y periódicos encima de sí, de hecho, era de las cosas que más odiaba, y tristemente de las cosas que mas tenía encima, ya que el hecho de ser mejor amiga de uno de los centrocampistas jóvenes del Barcelona conllevaba a chismes, inventados, pero chismes al fin y al cabo.

Así que ella evitaba a la mayoría de periodistas, de hecho, Pedri siempre pedía que respetaran su privacidad y era algo que ella valoraba.

Para todos los medios, Pedri González y Fiorella Fernández eran más que sólo mejores amigos, pero todos sus cercanos sabían que los dos eran eso, amigos y nada más.

—¿Qué? ¿Ahorita? —Fiorella puso en silencio el televisor mientras que su mejor amigo carraspeaba a través de la línea, en señal de que emitir un "sí"— ¿De verdad, Pedri? ¿Me vas a hacer ir hasta el Joan Gamper?

La castaña se quejó, apagando el televisor mientras que soltaba un resoplido.

—¡No te cuesta nada venir un segundo!

—¡Claro que me cuesta Pedri! ¡La serie que estaba viendo está buena!

—¿Estabas viendo series sin mi? —soltó un sonido de indignación que la hizo carcajearse— eres una falsa.

—¡Hey! Más respeto por favor.

Pedri se rió, agregando: —Lo que mi niña diga —Fiorella no pudo evitar sonreír ante el llamado, y siempre solía llamarla así, pero es que a ella le gustaba tanto que cada apodo bonito que el pelinegro le ponía, le encantaba— ¿Vas a venir apenas acabemos de entrenar o quieres hacer la cena?

—Eres un manipulador —le dijo, el canario soltó una carcajada.

—También te quiero mi niña, nos vemos en el estacionamiento.

—Pero—

—Te quiero.

Pedri cortó la llamada, Fiorella soltó un resoplido. Fue a darse una ducha rápida, la mayoría de las veces después del entrenamiento los dos se iban juntos a comer. Cuando se mudaron a Barcelona lo hicieron juntos, y de hecho, vivían en la misma casa.

Mía y Fernando solían visitarles cuando no tenían nada que hacer, de igual manera sus padres que se habían quedado en Tenerife, pero estaban orgullosos de ambos.

No tardó mucho en arreglarse, tomar las llaves de la casa y pedir un auto para llegar hasta dónde su mejor amigo le estaba esperando. Tomar el auto y conducir no era la mejor opción ya que Pedri tendría su auto y andar en diferentes autos si iban al mismo lugar, era algo sin coherencia.

Además de que el estadio no le quedaba tan lejos. No tardó mucho en llegar, le agradeció al taxi y al bajarse, empezó a peinarse el cabello en el espejo.

Sabía que había un montón de gente afuera esperando a que los jugadores salieran para pedirles autógrafo, así que para evitar la ola de personas, entró por otro lugar.

Ya conocía las instalaciones del Joan Gamper a la perfección, no tardó mucho en visualizar el auto de su mejor amigo que de hecho, venía saliendo con otro castaño que no reconoció. Fiorella se acomodó la camisa que llevaba de Portugal con la dorsal número siete de Cristiano, para que Pedri la viese y sonriera.

Ambos abrieron sus brazos, y se unieron en un abrazo, mientras que él besaba su mejilla sonoramente y sonreía.

—Yo sabía que ibas a venir.

—Es que después quién te aguanta —le dijo con burla, separándose de él.

Notando a un castaño que en realidad no había visto, tenía mucho tiempo que no iba a ver al Barcelona entrenar ni a los partidos debido a la universidad, los exámenes finales la habían mantenido bastante ocupada.

Sólo veía los partidos cuando Pedri jugaba y ahorita no lo estaba haciendo debido a una lesión, además de que el Barça estaba atravesando una etapa nada exitosa, estaban en el declive. Ronald Koeman había dejado el club completamente patas arribas, bueno Koeman y sus anteriores presidentes.

La salida de Lionel Messi había sido un golpe demasiado fuerte para los blaugranas, que sí bien apenas estaban intentando mantenerse en los primeros puestos de La Liga, estaba resultando difícil.

Atravesando deudas, salidas de leyendas del club, partidos en empate o perdidos, habían tenido que recurrir a buscar jugadores de la cantera, y Fiorella sabía que había varios nuevos pero la verdad es que estaba tan ocupada con la universidad que no se había tomado el tiempo de conocer a ninguno.

El Bayern Munich había mandando a Barcelona a Europa League, siendo de las humillaciones más decepcionantes que estaba atravesando el Barcelona, después de más de cinco años sin pisar aquella competición, ahí estaban de vuelta.

Sin ninguna idea, esquema de juego, o jugadores... y Fiorella no se burlaba de su mejor amigo por eso para ser sincera lo apoyaba, porque sabía que la situación por la que estaba pasando su club no era lo mejor que se diga, al menos había llegado Xavi y se había retomado la temporada que los culés esperaban con ansias a que fuese mejor de lo que había sido con el holandés Koeman.

—Eres una exagerada.

—Tú y yo sabemos que no es así —los dos se miraron fijamente, de manera divertida.

Pablo carraspeó, cortando con el contacto visual de ambos.

—Si quieres le puedo decir a Dembele que me lleve eh... no tengo problema...

—¡No, no! ¿Cómo crees? Ya te dije que te iba a llevar Pablo —el canario lo miró con una ceja alzada— ¡Ah! Fiore, mira él es Pablo Gavi. Gavi, ella es mi mejor amiga, Fiorella.

El sevillano sonrió a labios pegados, ya la conocía, Pedri se la pasaba hablando de ella todo el tiempo. La tenía de fondo de pantalla y desde que la había visto, a Pablo le había parecido muy guapa. Se había tomado el atrevimiento de buscarla en las redes pero ella las tenía privadas y si era sincero, lo menos que quería parecer era un acosador.

Pero ahora que la tenía frente a frente, confirmaba lo que ya había pensado, era una chica bastante atractiva.

Era más pequeña que ellos dos, sin embargo no tanto, su cabello era castaño claro casi llegando a parecer rubio ya que los rayos del sol le hacían ver así. Tenía los ojos café claro, color miel muy llamativos, unas facciones muy lindas y de igual manera su sonrisa, Fiorella le extendió su mano, todo era lindo en ella menos claramente, la camisa que llevaba.

¿Camisa de Cristiano Ronaldo en el Joan Gamper? ¿Cómo van a permitir dejar entrar a la gente con esa camisa? Por Dios.

Y aparentemente pensó en voz alta porque después de estrechar su mano con la de ella, Fiorella la quitó, haciendo mala cara.

—¿Qué?

Pablo dejó de mirarla como un tonto, carraspeando, reaccionó.

—¿Qué de qué?

—No sabía que ahora había reglas para entrar con una camisa en específico aquí. ¿Tanto daño le ha hecho Cris a tú equipo? —le preguntó alzando una ceja, y Pablo frunció el ceño, dándose cuenta de que había metido la pata.

Oh.

Sí, oh.

Ya sabía que Fiorella era madridista, pero ¡Había pensado en voz alta! ¿¡Por qué reaccionaba tan a la defensiva?!

—¿Pero qué dices? Fue un comentario y nada más... además es verdad —se encogió de hombros, en un intento de arreglar la metida de pata que había tenido— es el lugar de entrenamiento del Barcelona ¿cómo vas a entrar con una camisa de Cristiano Ronaldo?

—Porque quiero y puedo. El que tiene trece champions hace lo que quiere —le guiñó un ojo, Pablo se rió.

—Ah ¿las ganaste tú con el equipo? ¿Y donde jugaste que no te vi? —quiso saber, alzando una ceja.

Fiorella lo miró de la misma manera. ¿Y este? Apenas lo conocía y ya estaba discutiendo con él ¡Por una camisa de Cristiano Ronaldo!

—Las gané yo con el equipo, amigo. ¿Dolor por no ganar champions desde hace más de cuatro años? Mira, aquí cerca venden pañuelos para las lágrimas, no te preocupes por eso.

—¿Dolor por...?

—Ya basta —Pedri se quejó, mientras que los miraba a los dos de mala manera—. Los he presentado para que se conozcan ¿Y ya están peleando? No puede ser, subamos al auto mejor.

—Ella empezó —Pablo se quejó.

—¿¡Yo?! —Fiorella se giró para verlo— ¿¡A caso yo dije que no podía entrar con la camisa de Cris...!?

—¡Pero si lo haz malinterpretado!

—¿Ah es que tenía otra interpretación?

—Chicos, ya —Pedri regañó, mientras que soltaba una risita y se subía al auto—. Pablo ya te dije que Fiorella era madridista, y tú ya sabes que él es culé, no peleen por eso por favor.

—Es que yo no peleo con perdedores —se burló Fiorella.

—Un madridista hablando de perdedores, que risa —Fiorella abrió la boca indignada.

—Trece champions. ¿Tú cuántas?

—¿Única excusa del madridista? No te emociones mucho con la Champions que estoy seguro que el París Saint–Germain los elimina —se rió, Fiorella se puso una mano en la oreja.

—¿Dijiste algo? Es que no escucho a los que juegan en Europa League.

Pablo abrió la boca completamente indignado ahora él, mientras que Pedri la veía de la misma manera.

—¡Eso dolió, Fiore!

Ella soltó una carcajada.

—¡Perdón pero él se lo busco!

—Ya dejen de pelear, por favor.

Pedri pidió, Pablo se encogió de hombros asintiendo, mientras que miraba a Fiorella con interés, le había gustado la manera en la que había respondido a sus argumentos futbolísticos, aparte de linda con conocimientos en fútbol, lo había callado y ninguna otra chica había logrado eso, sonrió de lado sin poder evitarlo.

Mientras que Fiorella sólo pensaba en que ese tal Pablo Gavi era un idiota.

━━━━━ PRIMER CAPÍTULO SEÑOREEEEES

flop? así es *la archiva*

Bueno no me acuerdo quién me pidió el primer cap para dedicación pero lo puedo cambiar JAJAJAJA

So, espero que les guste el cap aunque este medio aburrido y flop, voten y comenten no les de pena, y siquiera un cap dedicado no duden en pedirlo! 💗

💌
—girlofmyidols.