Hace un año

Con el paso del tiempo Jimin había podido entrar a la Universidad de Yoongi, ambos parecían contentos con eso y aunque a veces el chico de piel pálida era un poco posesivo con Jimin nunca le tomó importancia, ellos se querían; dos años transcurrieron rápido.

— ¿Qué tal tus clases? — preguntó Jimin mientras abrazaba a su novio.

— Muy aburridas — revolvió el cabello del pequeño — ¿las tuyas?

— Hmm, interesantes — dio un beso mientras comenzaban a caminar tomados de la mano.

— Hoseok me dijo que fuéramos a comer con ellos después del turno, ¿quieres ir?

— Por mi está bien — sonrió sincero.

Habían aprendido un par de cosas de cada uno como por ejemplo los berrinches continuos de Jimin, los corajes que Yoongi hacia sin sentido alguno, el pequeño Park descubrió que los amigos de su novio lo llamaban Suga; Namjoon y Hobi eran muy amables con él y eso lo hacía sentir pertenecido, por otro lado Yoongi pudo observar que Minnie era demasiado popular entre hombres y mujeres, eso le partía el alma pues de sobra sabía que él era una persona que en cualquier momento podía arruinar lo que sea.

Risas y una larga charla eran presentes en la mesa donde los cuatro chicos comían alegremente.

— Opino que saliendo de aquí vayamos a algún bar — dijo Nam dando un bocado a su pedazo de pizza.

— Opino lo mismo — dijo Suga — un rato de distracción no caería mal — vio a los ojos a su pequeño quién rápidamente se sonrojó — ¿no lo crees bebé?

— Y-yo mientras este a tu lado todo está bien — arrugó nervioso la servilleta que tenía en sus manitas.

— Oh por Dios, cuanta ternura — habló Hoseok — ya digan que si de una vez por todas para reservar un lugar y no llegar a quedarnos parados —.

— Decimos que si — contestó Jimin.

Esa noche se divertirían.

❄

La música sonaba tan fuerte que apenas y podían hablarse, todos traían una cerveza en la mano a excepción de Jimin pues él estaba bailando en la pista, Yoongi podía verlo a la perfección, su pequeño movía sus caderas solo para el chico de cabello color menta.

La noche había caído, el antro estaba que explotaba de adrenalina y euforia.

Personas tomando, fumando, otras bailaban y brincaban, en este punto el peli naranja algo cansado de la pista fue en busca de los mimos de su novio quién seguía sentado con un poco de alcohol de más, tomó lugar en sus piernas, rodeando el cuello de este con sus cortos brazos.

— Mueves muy bien todo eso, ¿lo sabías? — susurró el mayor en su oído, lo que hizo que el contrario se estremeciera.

— Yoongi, basta — Jimin golpeó el brazo de su chico un poco avergonzado — no digas esas cosas —.

— ¿Por qué no? — se hizo el ofendido — acércate —.

El pequeño hizo caso y se acercó de nuevo para escuchar lo que hablaba Yoongi.

— Me gusta más cuando todo eso lo mueves sobre mi — y atrapó entre sus labios el lóbulo de su  oreja, haciendo que Park entrara en una zona que ya conocía, a la corriente eléctrica que le provocaba su amado.

— Entonces seguiré bailando para ti — le regalo un guiño — pero primero quiero ir por un trago — se levantó.

— Perfecto, de paso yo voy al baño a arreglar el desastre que me provocaste — Yoongi sonrió, pero cuando se puso de pie sintió el efecto del alcohol en él.

— ¿Te acompaño? — preguntó Jimin.

— No bebé, puedo ir sin problemas — rio y le dio un beso lleno de deseo al pequeño.

Pasos largos para llegar a su objetivo mientras todo retumbaba, las luces le provocaban más un mareo, maldijo el haber tomado tanto, no quería que alguien se le acercara a Jimin y para eso debía estar atento.

Antes de que pudiera seguir su camino unas manos tomaron su cintura.

— ¿Qué mier.. — y unos labios reemplazaron la última palabra.

Quiso hacerse a un lado, pero esas delicadas manos se paseaban demasiado bien sobre su cuerpo, la excitación de antes había crecido, él también quería tocar, ni siquiera le dio importancia abrir los ojos, un aroma dulce desprendía de aquellos labios y mientras acariciaba a la persona desconocida se dio cuenta que era una chica, pues toco sus pechos.

Se dejó llevar arrastrándola a una esquina por donde nadie pasaba y las luces no hacían mucho contacto, metió sus largas y blanquecinas manos por debajo de su falda jugueteando con su cadera.

— Hmm — suspiró la chica mientras acariciaba por encima de los pantalones de Suga — más, ahhh... — el chico estaba hecho un completo lío, sus ganas de tener sexo lo estaban llevando a la peor decisión de su vida — ¿Seguro qué quieres hacer esto Min Yoongi?

Suga paró todo su acto en seco, ¿dijo su nombre?

— ¿Quién eres? — habló con la voz ronca — ¿me conoces?

Unas pequeñas carcajadas salieron de la chica.

— Por supuesto que me conoces —se hizo un poco más hacia delante — soy JeonGyeon —.

— ¡Mierda! — se hizo rápido a un lado — no puedes venir así como si nada —.

— Si puedo bebé — la chica tomó el cuello de su camisa y lo besó con fervor.

JeonGyeon y Yoongi habían tenido una relación no muy sana tiempo atrás, mucho antes de conocer a Park, la locura de su amorío fue tan grande pero tan enferma que no podían permanecer juntos.

— Puedes servirme para otra cosa ahora — habló entre sus labios — porque ya tengo novio —.

La chica puso cara seria.

— Que asco — arrugó la nariz.

— No digas eso — la estampó fuerte y un sonido agudo salió de su boca.

— Hoy no tengo ganas — lo empujó — llámame después, por lo menos ya sabes que estoy de regreso.

Yoongi suspiro y al dar la vuelta visualizó a Hoseok.

— ¿Qué fue todo eso Suga? — ninguno podía ver al cien por ciento su expresión pero Yoongi pudo jurar que su amigo se encontraba enojado.

— Tu no viste nada, ¿bien? — caminó parándose delante y Hoseok le propinó un puñetazo, el peli menta puso su mano en su mentón — supongamos que lo merezco — dijo.

— ¿Tanto te importa Jimin? — dijo su amigo castaño.

— ¡Él me importa más que nadie en esta vida! — gritó alterado, el alcohol se esparcía por su cuerpo y la poca cordura llegó, sabía que hizo mal.

— No lo vuelvas a hacer — sentenció Hoseok — no te cubriré una vez más —.

Pero Yoongi no aseguraba nada.

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Grax por leer <3 vengo luego xd <3