03 de 05

-Aaghh, me encanta, me encantas Yibo-decía Zhan mientras yo estaba sobre él autopenetrándome. Sus manos acompañaban el movimiento de mis caderas haciendo que esté cada vez más profundo.

-Mghh Zhanie- digo y me escondo en su cuello, dejando un rastro de saliva sobre este -vente para mi.

Un par de movimientos más con mi cadera y siento cómo este se libera dentro de mí, necesitando solo unos movimientos más para venirme yo también. Salgo de él y me recuesto, sintiendo cómo el semen se desliza por mis muslos cuando él lo limpia con una toallita húmeda y se acuesta sobre mi pecho.

-Podría vivir en tu interior- dice y yo sonrió contento, acariciando su cabello.

Con el pasar de los meses mis sentimientos hacia mi psicólogo se fueron intensificando a niveles que no considero común ni para nada buenos. Cada vez que estaba a punto de acabar, la palabra te amo estaba a punto de escaparse, teniendo que retenerla en todas las ocasiones.

No dudaba de cierto cariño que el azabache me tenía, ya que después de un par de citas él comenzara a buscarme a la universidad para tener citas reales, o eran incontables las veces que dormí en su departamento diciéndole a mis padres que iba a la casa de alguna chica.

Pero que ese cariño sea el mismo que el que yo sentía, lo dudaba.

Zhan era un hombre maduro, con trabajo, independencia, un corazón enorme, entre otras cualidades más allá de su evidente belleza física. ¿Y yo? Por más fidelidad que le haya dado en estos meses, seguía siendo inmaduro, egoísta, vivía con mis padres, por más que ya casi alcanzaba una cifra para mantenerme al menos 3 meses mientras conseguía trabajo.

De igual manera, era muy evidente que no lo merecía.

Jiyang pasó de la etapa de recriminarme a querer que esté con Zhan, diciendome que me veía más feliz desde que él estaba en mi vida al igual que al azabache. Era muy evidente incluso para mi que Zhan y yo fuimos hechos el uno para el otro, ya que entre nosotros no había discusiones, nos entendíamos, compartíamos gustos, opiniones, sentido del humor, éramos perfectos juntos.

Pero, ¿y si solo yo lo notaba y él quiere algo carnal solamente? Era mi mayor temor.

-¿A que hora sales de tu última clase mañana? - me pregunta una vez que nuestras respiraciones están más calmadas.

-A las 18,¿Por qué?

-Solo quería ir a buscarte y... ¿salir a caminar y tomar algo? -yo sonrió con eso como siempre que me invitaba a una cita y sin molestarme en ocultarlo nos di vuelta y lo abracé por los cuello asintiendo repetidas veces,

-Me encantaría Zhanie.

Él sonríe y besa mi cabello mientras lo acaricia-recuerda que el viernes también voy a buscarte para que duermas en mi departamento.

Yo vuelvo a asentir y ambos quedamos así hasta que llega el momento en que tengo que irme.

Mis padres cada vez molestan menos, convencidos de que estoy recuperando mi heterosexualidad dejaron de preguntar y yo dejé de hablar. Nuestra relación se basa en este momento simplemente en compartir vivienda, y me agrada que así sea.

Al otro día estoy en la cafetería de siempre junto a Jiyang, contándole lo sucedido el día anterior y la cita de ese día.

-Deberías decirle, Bo...

Yo saco y meto el sorbete de mi licuado pensativo y lo miro -¿no crees que me rechazará? Aghh, es tan bueno que aseguraría que me rechazará de una forma tan tierna y linda.

-Antes lo creía, pero Xuan y yo hace semanas dejamos de creerlo así.-yo lo miro con un poco de interés, invitándolo a que continué- verás, Zhanie habla mucho de tí cuando no está.

-Eso no significa que me ame de vuelta.

-No estas buscando que te diga que te ama, quizás lo hace o quizás recién está empezando a sentir algo. Lo importante es que lo sepa porque no es bueno involucrar sentimientos a una relación canal y tu desde un principio los involucraste.

-¿Entonces qué es lo que busco?

-¿Una oportunidad? Saber si eres el único que siente más, no lo sé, Bo, pero dile, no está bien que te lo sigas guardando.

Suelto un suspiro y asiento, antes de perder el valor le mando un mensaje a Zhan diciéndole que tengo que decirle algo muy importante ese día.

Cuando salgo de mi última clase voy por el pasillo de camino a encontrarme con Zhan cuando escucho que me llaman y volteo para ver que es HaiKuan, quien se acerca corriendo hacia donde estoy.

-Bo- dice algo agitado, poniendo una mano en su pecho para calmar su respiración-quería saber si quieres estar en mi entrenamiento de mañana y luego... ya sabes, cuando los chicos se terminen de bañar quedarnos en los vestuarios.

Yo ruedo los ojos porque llevaba semanas insitiendo con los mismo y yo seguía rechazándolo.

-No HaiKuan, no puedo ni quiero.

Él se encoje de hombros y voltea, hablándome aún de espaldas -como sea, tienes mi número por si cambias de opinión.

Al llegar a la entrada de la universidad veo a Zhan sentado en la banca donde siempre me espera y me acerco a él sonriente rodeándolo con mis brazos y dejándome mimar por él un rato.

Mi actitud aniñada con Zhan pasó de ser algo extraño a algo habitual. Era hermoso, como si por primera vez me sintiera protegido, y amaba que no solo era yo el aniñado, había veces en las que él se comportaba como un niño y el que lo cuidaba era yo.

Sin separarme de su pecho él se levanta y toma mi mano, dirigiéndome a su coche, donde subimos y el conduce mientras yo canto lo que está en la radio, él siguiéndome la canción un poco más despacio.

Una vez ambos fuimos a un karaoke y Zhan no se animó a cantar hasta casi al final, dejándome sorpendido con su angelical voz. Fueron tantos halagos que recibió de mi parte que hasta hoy se siente apenado de cantar frente mio.

Luego de un rato él baja el volumen y me mira de reojo -¿Qué es lo que querías decirme?

Yo me pongo nervioso automáticamente y juego con mis manos -te lo diré después.

-Está bien,¿es algo malo?

-Espero que no.

-Eso no me deja más tranquilo.

-A mí tampoco.

Ambos cambiamos de tema y comienza a contarme cosas sobre su familia, yo le cuento de mis clases hasta que llegamos a una galería comercial donde compramos licuados y caminamos.

-Entonces, quedan solo cuatro meses hasta que cumplas tu mayoria de edad,¿pensaste en lo que harás?

Yo asiento y le cuento sobre que estaba ahorrando y tenía pensado alquilarme algo mientras busco un empleo. Él me apoya en todo lo que le cuento y me recomieda sitios para que pueda buscar alquiler.

-Mira Zhan, podemos ir al arcade...

-¿Zhanie?- ambos volteamos y veo a una rubia tirarse encima de Zhan.

-¿LuLu? Hace casi un año que no te veo,¿Cómo haz estado? -Zhan parece muy emocionado también y ambos se meten en una charla sobre sus años de universidad y trabajo actuales, haciendo que me sienta fuera de lugar inmediatamente.

LuLu no parece ni siquiera haber notado mi presencia y Zhan no se molesta en presentarme tampoco. Ruedo los ojos y me dirijo al baño que estaba a unos pasos de donde ellos se encontraban y me encierro en un cubículo.

Ni siquiera entiendo el por qué a mi cambio de humor, si no estoy celoso. Estoy decepcionado, decepcionado de mi.

¿Cómo pude haber sido tan idiota? Tenía que seguir mis propias reglas sobre no enamorarme desde un inicio, no tenía que haberlo dejado entrar tanto porque ahora no sé como sacarlo.

Siempre fuí una persona carnal, raramente sentía un poco más hacia alguien, muchas veces por ese motivo se debían mi relaciones fallidas además de no querer nada por más de unas semanas.

Sí sabias que era así, que no sirvo para estar en una relación,¿por qué quería una? solo arruinaria al pobre Zhan si él se involucra sentimentalmente conmigo también.

Mando un mensaje rápido diciendo que allí estaré a HaiKuan, después de todo es la clase de persona que soy y salgo de los baños, notando que Zhan me estaba buscando y se acerca al momento de verme.

-¿Dónde estabas? Quería presentarte a Lu.

Yo me encojo de hombros y señalo la puerta donde acababa de salir -solo fuí al baño.-él asiente y toma mi mano para seguir caminando-¿dónde esta LuLu ahora?

-Se tenía que ir, solo estaba de paso.

Yo asiento y caminamos nuevamente, esta vez yo más serio que antes, no viendo el momento en regresar a mi casa por lo increíble que parezca.

-Creo que deberíamos volver, tengo examen pronto.

Él suspira y nos detiene-¿Estás así por LuLu?Era una compañera de la universidad,éramos muy amigos y solo eso.

-Está bien, no me debes una explicación.-vuelvo a darle la espalda y él no muy convencido me sigue por detrás.

Llegamos a su coche y en silencio nos conduce hacia mi casa, una cuadra antes se detiene y me mira-¿Qué es lo importante que querías decirme?

Yo lo quedo mirando unos segundos, viendo el interés en sus ojos, interes que no se compara con nada al que mostraba a la rubia hoy.

-Nada importante


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