NARRA JENRU

Gakuto entró a la habitación pateando la puerta y apuntando con un revólver a todas direcciones.

─¡¿QUÉ ESTÁ PASANDO?!

Yo me cubrí con la sábana para que no me viera desnuda.

─¡KEI INTENTÓ TOCARME!─ lo señalé con el dedo.

─Qué─ bajó el arma.

─No sé por qué gritó─ dijo el muy inocente.

─¡Estaba durmiendo muy tranquilamente, cuando me despierto y me encuentro con este niño apunto de tocarme los pechos─ lo volví a señalar.

─¿Hice algo malo?─ preguntó. Casi me dan ganas de tirarlo por la ventana.

─No, Kei─ suspiró su padre─. Tenemos que hablar contigo una cosa para que te quede claro. Ven─ le hizo un ademán con la mano para que lo siguiera. Kei salió de su habitación, y enseguida entró mi hermano.

─¡¿Qué pasó?! ¡¿Por qué gritaste?!─ me preguntó alterado─¡¿Acaso entraron a robar?!

─Kei casi me tocó.

─¡¿Qué?!

─Estaba durmiendo desnuda y con la sábana y de repente me despierto y ¡me lo encuentro queriendo agarrar mis pechos como si fuesen dos boligomas!

─Uff, creí que había hecho otra cosa...

─Es un niño de nueve años, no sabe ni lo que es el sexo. ¿Cómo crees que va a hacer eso? Hizo esto porque es muy inocente, pero fue traumatizante...

─Espera... ¿Por qué estabas desnuda?

Shit, me descubrirá.

─Pues porque hace calor, ¿por qué más?

─Bueno, pero tampoco es para estar totalmente desnuda.

─Si no entiendes a Izzy, problema tuyo.

Izzy es un apodo que solía ponerme en la primaria, y por el que todos me conocían, en especial Kojiro...

Ay, yo creyendo que era Kojiro el que me tocaba (vaya que estaba soñando), y me encuentro con Kei.

No puedo creer que casi fui tocada por un niño de nueve años. Esto no se me irá más de la cabeza, ¡ayyy!

A la mañana siguiente fui a servirme un jugo de naranja a la cocina, y entonces siento que me abrazan de la pierna. Bajé la mirada y me encontré a Kei, quien me miraba con los ojos brillantes.

─Perdóname, Jenru─ dijo con esa vocecita dulce. El pobrecito está muy arrepentido. 

Sonreí y acaricié su cabeza.

─Tranquilo, Kei-chan. Sé que no lo hiciste queriendo. Estás perdonado.

Él sonrió. 

─Estaba soñando que Sawaki se moría─ dijo Takeshi. 

─¡OYE!

Yo me reí

─Hasta que tu grito me despertó. 

─Perdón, es que sentí mucho miedo─ me rasqué la nuca─. Pero bueno, ya quedó en el pasado.

─Dejemos de pensar en el pasado─ intervino Hoshiko─, y enfoquémonos en el presente, y pensar que tenemos que aprovechar este tiempo que nos queda de vacaciones antes del inicio de clases.

Kazuki escupió el jugo.

─¡No me lo recuerdes!─ se golpeó la frente contra la mesa.

─Y bueno, algún día iba a llegar el día─ le dijo─. En ese tiempo ya estará por nacer Hisao─ acarició su panza.

─Es verdad─ dije─. Ya quiero que nazca, y así cantarle hasta que se quede dormidito─ junté ambas manos y apoyé mi mejilla derecha en ellas.

─¿Kenny y yo podemos ser los padres?─ le preguntó Kazuki.

─Claro que sí, después de todo vivimos juntos, y Hisao necesita un padre que reemplace al negro insignificante de Kojiro─ dijo con desagrado. Realmente está enojadísima con él.

Yo siempre quise ser quien tuviera un hijo con Hyuga. Soñaba con ser la señora Hyuga, la tigresa, y tener un cachorro de tigre igual de poderoso que su padre... Ese sueño se heló para siempre, porque Hoshiko ya tomó mi lugar...

─Lo voy a criar lo suficiente para que no crezca igual de desgraciado que su padre─ dice.

Kojiro no es un desgraciado. Lo que hizo estuvo muy mal, indiscutiblemente, pero no es una mala persona, luchó toda su vida para sacar a su familia de la pobreza, y lo hizo teniendo que cargar con el dolor de perder a su padre tan joven. Es digno de admirar. Si tan sólo pudiera regresar...

NARRA SORIMACHI

¡Maldita seaaaa! ¡Hoy nos vamos a casa! Quería quedarme en la muy hermosa Okinawa. 

Queda una semana para que comiencen las clases. Tengo que ir al colegio para ver con quién me tocará en la clase. Ojalá que me toque con Kenny, Inori y Hoshiko. Aunque Hoshiko no estará mucho presencialmente por el tema del embarazo... Y mañana voy a ir al centro comercial con Kenny a comprar todos los útiles. Por una parte estoy muy emocionado de empezar otro año con mis amigos, pero por el otro quiero seguir durmiendo en mi cama e ir a la playa. Se me hizo muy corto el verano, ay, lloro.

Hoy vino Kenny a mi casa. Estamos en mi cuarto, a oscuras, y con el ventilador prendido por el insoportable calor. 

─¿Entonces Jenru se va a transferir al Toho?─ le pregunté.

─Sí. Quiere estar más cerca de nosotros, aunque Sawaki se quedaría solo─ rió.

─Sólo espero que este año sea igual de bueno que el anterior, y que sigamos juntos los dos─ lo abracé del brazo.

─Nosotros estaremos juntos hasta que la muerte nos separe─ me dijo─. No me importa en qué situación estemos, nunca te voy a dejar.

─Eres el mejor, Kenny. El año pasado fue el mejor, ya que pude tenerte después de estar pensando constantemente en ti.

─Debí haber correspondido tus sentimientos desde el primer momento en el que te vi.

Recosté mi cabeza en su hombro.

Quiero vivir más de cien años al lado de Kenny, no quiero que la muerte nos separe. Ya lo intentó una vez, y no lo hará de nuevo.