Capítulo 12: Mi historia
NARRA KEN
Al llegar a la casa de Kazuki nos separamos. Jenru y Sawaki fueron a mi casa, Takeshi y Desuka se fueron juntos, y yo me quedé un rato con Inori en la casa de Kazuki.
─¿Entonces es un niño?─ preguntó Yui alegre.
Hoshiko asintió.
─En esta casa reina el patriarcado─ bromeó Gakuto.
Nos reímos, pero Inori seguía un poco afligida.
Ahora que lo recuerdo, ¿por qué se habrá puesto a llorar en el hospital luego de decirle a Hoshiko que cuide del bebé? Ahora me entraron las terribles ganas de averiguarlo.
Pero sea lo que sea, siento que es algo muy profundo.
Merendamos en la casa de Kazuki, y fui a acompañar a Inori a su casa, la cual ya tenía las persianas bajas. Estuvimos hablando un rato afuera antes de entrar.
─¿Se acuestan muy temprano?─ le pregunté.
─Sí. Mi madre dice que es bueno acostarse temprano, porque así puedo dormir más tiempo y levantarme al día siguiente con energías para empezar el día.
─Pero tampoco es necesario acostarse a las ocho de la noche. Yo me acuesto a las diez, y me despierto bien, pero Jenru apenas se despierta─ reí─. La alarma no la despierta, los gritos de papá no la despiertan... Tengo que decirle: "Jenru, el desayuno está listo".
─Típico─ carcajeó.
─Pero cuando éramos niños solía despertarla golpeando dos cacerolas entre sí. Era divertido─ volví a reír.
─Debe ser lindo tener hermanos, ¿no?
─Sí, y más si no tienes una buena relación con tus padres, al menos tienes a alguien con quien desahogarte.
─¿Tus padres te maltratan?
─Mi madre no. El problema es papá: no nos dejó a Jenru y a mí tener una infancia normal, era homofóbico hasta hace poco, machista y sólo le importa el karate.
─Yo no sé lo que se siente tener un padre.
Esa oración retumbó en mi mente.
─¿Estás diciendo que no tienes padre?
─Nos abandonó a mamá y a mí cuando apenas podía caminar.
─¿Por qué hizo algo así?
─Supongo que al nacer yo no tuvo otra opción más que irse. Tanto para mi padre como para mi madre, fui no deseada─ vi que cerró ambos puños─. Mis padres me tuvieron por accidente a los quince años, y mamá no quiso abortarme porque pondría en riesgo su vida, y me dijo EN LA CARA, que no me puso en adopción porque sino sería mal vista por el vecindario y todos los que la conocían. Por eso no le quedó de otra que aguantarme en su vida─ bajó la mirada. Vi con atención sus ojos: se cristalizaron. Ella intenta aguantar el llanto.
Ya entendí por qué le dijo a Hoshiko que cuidara bien de su bebé y que no lo abandonara; no quiere que alguien más viva esa experiencia. Y también veo a qué se refería Kazuki cuando me dijo que el primer día que ella vino parecía deprimida, y recuerdo que Kiyoko le dijo: "Sal de ahí, no seas cobarde".
Todo el tiempo pensé que era una mujer buena, que tenía una buena relación con su hija, pero debajo de esa personalidad estricta pero comprensiva se esconde esa mujer que no le tiene ni un poco de afecto a su pobre hija, que necesita más atención.
─Inori... ¿te sentiste muy sola?
─Sí─ me miró. Tenía las mejillas humedecidas por las lágrimas.
─¿Eres feliz con todos nosotros?
─Sí.
─Ya veo─ hice una pausa, y volví a hablar─: Entonces haremos todo lo que esté a nuestro alcance para hacerte feliz─ le sonreí y la tomé de los hombros.
Ella sonrió entre lágrimas.
─Arigato, Ken─ se pasó un hombro por su ojo derecho para quitarse las lágrimas, y luego repitió lo mismo con su ojo izquierdo─. Me alegra tenerlos como amigos, ya que son los únicos que me respetaron por ser creyente en los milagros.
─¿No tuviste amigos en la escuela?
Negó con la cabeza.
─Verás, lo que te voy a decir puede sorprenderte.
─Soy todo oídos.
Ella tomó aire y lo dejó salir.
─Tú puedes ver esferas de luz que contienen la felicidad tuya y la de tus amigos, y con esas esferas pediste el deseo de que tus amigos con problemas familiares o de otros tipos no los tenga más, y así vivir felizmente, ¿no?
─Exacto.
─Bueno, yo... Yo soy como tú. Una vez hice eso.
Yo soy como tú. ¿Enserio existe otra persona como yo que puede hacer eso? Vaya, eso lo cambia todo... Entonces la teoría de Kazuki de que existe una raza humana diferente es cierto.
─¿Enserio tienes esa habilidad?
─Sí. Es por eso que nadie se me acercaba. Todos creían que estaba loca, excepto unos niños de un merendero al que iba los sábados. Los niños eran mis únicos amigos, y me querían un montón, y yo a ellos, pero el merendero dejó de funcionar un día y los tuvieron que trasladar a otros sitios a las afueras de la ciudad. De ahí hasta ahora que los conocí a ustedes que estuve sola todo el tiempo. Salía todo el tiempo a sentarme bajo un árbol en el parque (también lo hacía en la escuela), y comía de mi caja de almuerzo. Creía que no era prioridad para nadie, pero ahora que los conocí a ustedes, ahora conozco el verdadero significado de ser feliz.
─Inori... No lo sabía...
─Descuida, ya lo dejé en el pasado─ sonrió levemente─. Bueno, una vez usé ese poder para vengarme de un chico de mi escuela que me hacía mucho mal.
─¿Qué pediste?
─Primero logré hacer ese deseo gracias a la felicidad que sentía yo con los niños en el merendero, y luego pedí que él muriera de cualquier manera...
─¡¿Hiciste que muriera?!
─Sé que está mal matar a una persona, lo sé, lo sé, lo sé, pero yo suelo ser muy vengativa con mis peores enemigos. Un día la directora fue a mi salón a decirnos la "triste" noticia de que él falleció tras ser atropellado por un auto de camino a clases. Y ahí me di cuenta de que poseo una habilidad muy especial.
─Wow... Qué historia...
─¿No estás molesto conmigo por haberlo matado?
─Estuvo mal, pero yo también hubiese sentido esa necesidad de hacerlo si estaba en tu lugar. No te preocupes, que nosotros vamos a respetar tus ideologías y gustos. Si me respetaron al tener esta habilidad, a ti también lo harán─ le sonreí.
─Ustedes valen oro. Prometo pedir un deseo cualquiera que los beneficie en el futuro.
─Ah, con respecto a eso, ¿sabes si hay un máximo de deseos que podamos pedir?
─Eso no lo sé. Ambos pedimos uno, y tendríamos que intentar pedir otro.
─Si es así, entonces tendremos que crear momentos que nos hagan felices a todos─ tomé su mano─. ¿Qué dices, querida mánager? ¿Nos acompañas a crear felicidad?
Ella rió.
─Con mucho gusto.
─Kazuki nos va a llevar a todos a Okinawa en verano. Si tu madre te deja venir con nosotros, puedes ir.
─Lo más probable es que sí, y no importa por cuánto tiempo sea. No le molesta si estoy fuera...
─No pienses en eso, piensa en todo el helado que comeremos allá─ carcajeé─, y en toda la playa.
─Sería genial.
─Si quieres podemos hacer algo con el grupo el fin de semana, como ir al centro comercial, o la heladería favorita de Kazuki. Después arreglamos eso.
─Está bien. Bueno, te dejo, porque sino duermes afuera esta noche─ rió.
─Okey. Buenas noches─ dije y me fui.
Nunca se me cruzó por la cabeza la idea de que Inori haya vivido todo eso, y de que ella también tiene mi habilidad de pedir un deseo mediante esferas de felicidad.
Prometo hacerte feliz, Inori-san. Kazuki y todos los demás vamos a crear buenos recuerdos para ti.
Si tan sólo Hyuga estuviera aquí...
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top