NARRA TAKESHI

Me quedé dormido sobre mi escritorio anoche. ¡No saben el dolor de espalda y cuello que tengo! Me tomé un Actrón 600 para aliviarlo. El punto es que estuve alrededor de dos horas sentado en mi escritorio analizando los dibujos que Desuka ha hecho en la escuela estas semanas (les saqué foto con mi celular, obviamente. No los iba a robar porque no soy un ladrón, además tendría que arrancar la hoja de su cuaderno, y después va a sospechar de que su cuaderno se está quedando sin hojas, jaja. (1)

El último que hizo parece ser de ella, llena de cortadas y heridas en su cuerpo, y de fondo había una mujer rubia clara de ojos rojos (muy atractiva, a decir verdad, pero en el dibujo daba mucho miedo porque sonreía diabólica, como si quisiera hacerle daño a Desuka). El dibujo parece esos pósters de películas donde el héroe es el de adelante, y por lo general es de tamaño pequeño o mediano, y el villano principal es el del fondo, bien grande. Este dibujo vendría a ser de Desuka y una mujer (que no sé quién es aún), atormentándola. Comienzo a pensar que Desuka sufre violencia en su casa, sin embargo no estoy seguro de quién es el responsable de todas esas heridas.

Entre muchísimo sueño, he decidido hablarle hoy mismo. 

Llegué al colegio a tiempo. Busqué a Desuka con la mirada entre este mar de gente que no dejaba de ir y venir.

La localicé caminando con la mirada cabizbaja, triste. 

Tomé coraje y fui a hablarle.

─Ho-hola.

Ella levantó la mirada al escuchar mi voz.

─Oh, tú eres el nuevo, ¿no?─ sus ojos verdes recuperaron un poco de brillo.

─Síp. Soy Takeshi Sawada─ dije con una sonrisa.

─Mucho gusto. Yo soy Desuka Tanaka─ sonrió levemente.

─Etto... Te vi muy sola estas últimas semanas, y quería ser tu amigo, digo, yo también estoy un poco solo sin ser por mis amigos de tercero. Tú me entiendes, ¿no?

Ella asintió.

─Es entendible, tranquilo─ rió leve─. Yo también estoy un poco solita. Tengo dos amigas en otra clase, pero no soy mucho de socializar.

─Lo he notado. ¿Entonces te gustaría ser mi amiga?

─Claro que sí, Takeshi-kun─ sus ojos recuperaron aún más brillo, y sonrió como una persona alegre. Pasó de ser esa chica depresiva a una totalmente opuesta, llena de brillo.

─¡Qué bien! Podríamos hacer un montón de cosas juntos, como salir EN MODO AMIGOS─ recalqué por si después se ponía nerviosa a mi lado.

─Entendí─ rió.

─También podríamos hacer trabajos en clase juntos, o incluso ir a mi casa o la tuya a pasar la tarde...

─Okey, eso lo arreglamos después─ me frenó con la mano─. Lo que a mí me interesa primero es conocerte aquí y ahora.

El timbre de entrada sonó.

─Upps, tendremos que esperar a que empiece el primer recreo─ reí.

─Okis, jaja. Con ahora me refería en realidad a hoy. 

─Ah, jaja. Eso sí te lo puedo garantizar. Pregúntame todo lo que quieras, yo te responderé todas tus preguntas─ tomé su mano. Noté un leve sonrojo en sus mejillas.

─Takeshi-kun, todos nos miran─ susurró entre dientes.

─¡L-lo siento!─ la solté. Ahora yo estaba rojito.

NARRA SORIMACHI

¡Diablos! ¡Este examen sorpresa de Matemáticas está brutal! ¡¿Por qué demonios ponen exámenes sorpresas?! ¡¿Los profesores pretenden que todos perdamos sus materias?!

Ya pasó más de la mitad de la clase y no he resuelto ni dos de las seis ecuaciones de segundo grado que aparecen en el examen.

Muerdo mi lápiz mientras mis ojos palpitan por los nervios. Estoy apunto de agarrar mi banco y romper la ventana.

¡Hoshiko ya terminó! Entregó la hoja y se fue a sentar de nuevo a su banco. ¡Ella es tan inteligente! ¡Te resuelve doce ecuaciones en una clase y yo apenas hago una, que siempre está mal el desarrollo o la solución!

─Pssh, Sorimachi─ me susurró Koike detrás de mí.

─¿Qué?─ le dije de igual forma.

─Toma─ me entrega una de esas gomas largas. Estaba abierta, y adentro tenía un papel con las fórmulas de las ecuaciones─. Una ayudita porque te quiero─ me guiña el ojo.

─Yo más─ le tiré un beso con los ojos entrecerrados.

Cabe recalcar que mi amor eterno será Kenny por siempre.

¡Ja! ¡Apenas me dio el tiempo para hacer todo! 

Entregué el examen con la esperanza de que al menos me saqué un aceptable.

Entonces entra nuestro adscrito.

─Perdón que los interrumpa, pero el docente de Visual faltó el día de hoy. Saldrán dos horas antes.

─¡SÍIIIIIIII!

Cualquier cosa buena que nos digan y ya es motivo suficiente para que empecemos a tirar sillas y avioncitos de papel por todo el salón de la felicidad, jaja. Pero no lo hicimos porque sino todos seríamos suspendidos.

Apenas sonó el timbre, Hoshiko tomó su mochila y salió corriendo del salón, del colegio. La perdimos de vista.

La próxima vez que lo haga, tenemos que seguirla. Muy pronto llegaremos al fondo de esto.

NARRA HOSHIKO

Rápidamente abrí la puerta de mi casa, y corrí hasta arriba, donde abrí la puerta de aquel cuarto.

Él seguía ahí. Esa persona a la que le oculté a todo el mundo desde hace casi tres años.

─Regresé, hermanito─ dije agotada después de todo lo que corrí.

─Hola, hermana─ sonrió levemente.

Este es mi secreto.

Mi hermano menor cuadripléjico, Tatsuki.

DATOS:

(1): El Actrón 600 es una pastilla grande de color verde que se toma para aliviar los dolores musculares.