Mientras pagaba su latte en la cafetería que estaba a dos calles de su universidad

 —Hey princesa —alguien le habló a su derecha.Ella miró de reojo a la persona que la llamó pero no le contestó y luego cuando estaba por salir del lugar, ya no había nadie a su lado.

—Hey cariño —volvió a escuchar al otro día la misma voz a su lado. Ésta vez, ella si se dió vuelta y la miró. Era una chica pelinegra, tenía un piercing en la nariz y usaba una chaqueta de jean. La vió sonreír y se fue.

—Hey preciosa —escuchó sabiendo de quién era la voz. Pasaron tres días de la última vez que ella la había visto, no es como si contara de todos modos. Vió como le guiñaba un ojo, retiraba su pedido y salía por la puerta de la cafetería.

— Hey ángel — apareció la voz a su izquierda. No estaba en la cafetería, ella estaba en la biblioteca de la universidad. No se había dado cuenta que la chica que siempre la saludaba con un apodo/cumplido iba a la misma universidad que ella. Se fijó como la chica buscaba un libro y se retiraba.—Hey linda — escuchó bajito ésta vez detrás de ella. Estaba en la clase de Diseño de Imagen Empresaria I, no se había dado cuenta que la "chica apodos/cumplidos" estaba ahí. Al escucharla giró un poco su cabeza y la vió, le estaba sonriendo.Después de eso, el profesor Z la llamó preguntándole sobre el tema visto; pensó que no sabía y que iba a responder cualquier cosa pero le sorprendió cuando la escuchó decir exactamente la respuesta que buscaba el profesor.

—Hey guapa.—escuchó cuando sintió que alguien pasó a su lado, sacando la vista de su celular.Se encontraba en la puerta de una pizzería, la cual estaba muy cerca de su departamento. El motivo por el cual estaba ahí, era que estaba esperando a que Lalisa, su amiga, saliera con su pizza vegana porque de repente tenía antojos. Ella estaba con alguien más ésta vez y se dió cuenta de que le estaba susurrando al oído mientras se reía. La otra chica cada tanto le miraba. No pasó mucho, porque luego salió Lalisa y se fueron.

—Hey belleza — le susurraron al oído, casi que se pegó un susto, si no fuera porque ella reconocería esa voz. Salió a fumar un rato por el parque más cercano que quedaba entre la uni y su departamento. Necesitaba despejarse después de tanto estrés con los exámenes finales.Le iba a responder pero ella siguió su camino en su skate mientras le guiñaba un ojo, otra vez.

—Hey amorrrr —sintió que alguien le hablaba de cerca con aliento a alcohol.Era ella. Al parecer había tomado bastante, bueno, estaban en una fiesta no se de que se sorprende.De todos modos, vio que le sonreía y sospechó que le iba a decir algo más pero su compañero la llamó, entonces se fue.

— Hey cenicienta — la escuchó dándose cuenta que se estaba sentando a su lado.Se estaba quedando dormida en la clase de Comunicación Estratégica mientras esperaba a los demás porque había llegado temprano.Estuvo sentada a su lado como dos horas, las cuales se pasaron las cosas que les pedía la profesora y eso fue todo.

— Hey chica chocolate — escuchó, viendo que optaba sentarse frente a ella.Ella estaba sentada leyendo el libro Mujercitas de Louisa May Alcott, en una de las mesas de cerámica que se encontraba en el parque de la universidad. Ésta vez, le sorprendió el apodo y le habló. 

—¿Uh, qué?

—¿Qué pasa? —le preguntó mientras agarraba su libro sin perder la página y chusmeaba en él.

—¿Chocolate? — preguntó sin más.

— Ah, sí, chica chocolate — respondió ella sonriéndole. Le interesaba la razón. —¿Por qué?- ¿Acaso no te gusta el chocolate? — sintió como la miraba de golpe, esperando su respuesta.

— No-quiero decir, si pero...—necesitaba saber el porqué.—Pero - le interrumpió para que siga.-

—¿Por qué soy chocolate hoy? — dijo curiosamente. Ella dudó si contestar o no, por unos segundos. 

— Bueno, la otra vez me di cuenta que estabas intentando abrir tu taza con chocolate caliente y al hacerlo, la tapa voló y tu cara quedó empapada con chocolate —al final, le respondió normalmente.

— Mierda, ¿cómo me viste? —se sentía una imbécil, pensó que nadie se había dado cuenta

—Siento que pienses que soy una acosadora, yo estaba sentada en el árbol de naranjas y vos estabas a dos más adelante, en el de ¿uvas? — le decía, preguntando para ver si tenía razón en lo último.

— Si— afirmó.

—Bien, yo sólo estaba leyendo apuntes cuando te escuché quejarte y luego vi todo ese momento —le comentó ocultando una risita.

—De ahora en más no uso esa taza después de eso. —admite.Se ríe. 

—Parecen difíciles de abrir, pero no lo son.

—Yo no ví que sea fácil —se quejó.

— Cuando quieras te enseño, adiós chica chocolate —respondió mientras se iba.Creo que después de ese día, no la vio, ni escuchó su voz. Y ni siquiera sabía su maldito nombre, a veces, sólo a veces permitía admitirse que la voz de su cabeza tenía razón con su estupidez.

—Hey chica brillante —escuchó de la nada haciendo que se diera vuelta de golpe y chocara con ella. Se encontraba debajo del árbol de naranjas, era gigante y estaba a punto de sentarse en la hierba cuando apareció. Se sentó antes de que ella lo hiciera y le volvió a hablar.-

—¿No te vas a sentar? —La miró y le asentía con la cabeza.

— ¿Te incomodo? Si es así, me puedo ir... —le dijo esperando a que terminara su oración.

—No, para nada, sólo me sorprendí — respondió sentándose bien.

—¿Por?

—Bueno...no apareciste en mucho tiempo —dejó saber.Le vio su expresión, una clara mezcla de sorpresa y algo que no supo como tomar.-

— Aw, chica brillante, me extrañaste.—le dijo con seguridad.Soltó una risa.

— Estas muy segura de tu respuesta, yo no cre-Espera ¿chica brillante? —cayó en cuenta.

— Si. ¿Qué pasa chica brillante? ¿En qué nube estás? —pregunta mirando hacia arriba.

— En ninguna. Me decís brillante porque hace tres semanas atrás tenía como cinco kilos de glitter en la cabeza? —se acordó. Ella se ríe, suave.

— Exacto, debió ser divertido el experimento, sólo que me parece que olvidaste el detalle de que tenías clases al día siguiente.—Se quejó. 

—¡No fue mi culpa! Fue Lili—Frunció su ceño, levemente, pero notó que intentó pasar de eso.

—Lalisa, una novia que te tortura ...¿con experimentos de glitter?

—¿Es en serio? Está bien, odio el glitter, no fue un experimento y dios, amo a Lisa pero jamás saldría con ella. —aclaró. Creyó ver que su comisura se elevó un toque como si quisiera sonreír.

—¿Entonces que demonios hacías con tanto glitter en tu cabeza, chica brillante?

—La tonta de Lisa me dijo que se iba a salir fácil, no sé porqué le creí — dijo volviendo a quejarse.

— ¿No sabías que existe internet? — se le burló.

— Ya, si pero bueno. No sé, supongo que quise ser buena amiga y dejar que me usara para algo, nunca la dejo.Sonríe. 

—Ya se puede ver el porqué. 

— Si...—ella le quería preguntar algo, pero se quedó mirando a la nada.

—Chica brillante, ¿pasa algo?

—Si-no, bueno, en realidad, tu nombre. —dijo.

— ¿Qué pasa con él?

—Bueno...que no lo sé - ella dice, esperando a que finalmente se lo diga.

— Pero chica brillante, se perderá la magia. —le comenta sonriendo de lado.

—¿Cuál?

— Me ofendes. La magia de no saber quién soy, sólo alguien en tus días que aparece de la nada saludando. — le habló como si de una historia se tratara.Ella vuelve a reír.

—Bueno, hay algo de razón, capaz. Pero quiero saber. 

— Pss, también quieres saber¿ porqué no aparecí durante semanas a pesar de haberte visto con glitter? —le pregunta en broma.

— De hecho, si. —ella la mira.

— ¡Aw, chica brillante! !Te importo, me amas, me extrañas, me anhelas! — le contestó exageradamente molestándola.Riendo, ella dice que quiere saber de verdad.

—Está bien, primero, no aparecí porque estuve con problemas personales y toda la sanata. Segundo, Jisoo. —le revela. Ella sonríe satisfecha.

—Lamento que hayas tenido problemas. Entonces...Jisoo.— pronuncia ella.

— Exacto, esa soy yo, ¿estás contenta chica brillante?

— Por supuesto.—Jisoo, la mira, esperando algo pero a la vez, dudando.

— Mmh...

—¿Qué? ¿Mi nombre? —ella pregunta sin saber si era eso. Pero Jisoo asiente.

—¡Oh mierda! ¡NO LO SABES! — gritó ella.

—Calma chica brillante, me gusta darte apodos. Yo sólo te dije una vez que no soy tu acosadora o algo parecido, asi que no, no sé tu nombre. —le confirmó Jisoo.

—Cierto, es sólo que no lo esperaba, siempre apareces donde quiera que yo esté.—Jisoo piensa.

— Bueno, eso es verdad. Nunca le di mucha importancia, yo te veía, te veo y sólo saludo.

—¿Entonces haces eso con todas?

—¿Ow, estas celosa? — le pregunta Jisoo, riendo. Ella intentaba ocultar todo rastro de su cara que revelaba que estaba molesta.

—No. Ni siquiera te conozco.

— Pero chica brillante, soy Kim Jisoo. —se burla. —Por dios, ni que fuera una celebridad.

—¿Por qué lo dices?

— Porque piensas que tengo tanto levante y saludo a todas las chicas con las que me cruzo. —le suelta Jisoo.Ella la mira como si le estuvieran haciendo una broma de mal gusto.

— Jisoo...¿no sabes lo que son los espejos?

—Esta bien, pero no soy Megan Fox coreana,o una Yoona,o Irene ni nada por el estilo. Ahora, dime tu nombre. —le ordena con diversión.

—Park Chaeyoung Roseanne .

 —¡Aw, chica brillante! - le dice.

—¿Qué? —la mira Rose, dudando.

—¡Tu nombre es tan hermoso como vos! —afirma Jisoo sonriendo.Chaeyoung se sonroja a más no poder y mira hacia otro lado.

—No.

— Si cariño, lo es Rosie, ¿tienes hora?

—Bueno...gracias. — Rose al levantar su celular vuelve a hablar. —Acá dice que son las tres de la tarde..—Jisoo hace una expresión que lo decía todo.- 

—Mierda, lo siento chica brillante, me tengo que ir. —se disculpa.

—Esta bie—¡La próxima no aparezcas con tatuajes falsos en la cara! —se despide Jisoo, riendo.Rose sonreía y  se quedó pensando en ella.

— Hey chica estrella —escucha detrás de ella.Sonríe mientras se da vuelta.

—Estrella por... —quiere saber Rose.

—¡Porque te graduaste! ¡Sos la estrella del momento!—le dice Jisoo adorablemente.

Sin mentir. Es verdad que se estaba graduando o bueno, lo hizo. Estaba feliz por haber terminado su carrera, ahora venía lo más complicado pero era algo que siempre supo que tarde o temprano venía. Al mirar aJisoo, se dió cuenta de que ella no se estaba graduando, no tenía idea sobre eso así que decidió preguntar.

—¿Jisoo, vos..?

—¿Yo...qué? — la mira con confusión. Lena la señala de arriba a abajo y Jisoo se da cuenta de lo que quería decir.

— Oh, nah, yo me gradué la semana pasada. — confiesa. Chaeyoung se sorprendió.—Si, la universidad ésta es rara pero bueno, al parecer somos muchos y las carreras que tenían más estudiantes se graduaban antes. O sea, por ejemplo, la mía. —explica Jisoo.

—Tiene sentido , ¿cómo te fue?

—¡Genial! Ojalá hubieras estado, pero no tenías idea sobre eso así que tranquila.

—Lo siento, me hubiera gustado —¿Y hoy, qué haces aquí si ya estás libre? — dice Rose con señas simulando rejas.—Jisoo ríe.

—Vine por mi mejor amiga, se llama Jennie. Recién vengo de estar con ella, te vi y quise pasar a felicitarte.

— Muchas gracias, Jisoo. — sonríe Rose.

—No es nada. Por cierto, si quieres puedes ir a la fiesta que hará Jennie en su mansión, sólo está a tres cuadras de la universidad.

—¿Me estás invitando?— Chaeyoung pregunta sonrojándose. Jisoo le sonríe con ternura.

—Por supuesto, puedes venir a la hora que quieras, empieza a las once de la noche. — le dice Jisoo dándole un papel. Rose lo abre y lee.

—Es la dirección y...

—¡El número de la casa de Jen! Uhm, lo siento, rompí mi celular en la fiesta de mi graduación y lo mandé a reparar.— explica Jisoo al notar la desilusión en la cara de Chaeyoung.

—Oh, está bien, nos veremos ahí entonces. — afirma.

—Te esperaré, princesa. —le dice Jisoo guiñándole un ojo.

Rose tuvo que ir a la fiesta con Lisa, porque después de tanto insistir se volvió insoportable y tuvo que llamar al número de Kim Jennie para ver si podía llevar a alguien. Desafortunadamente, si podía.Ella amaba a Lisa pero las veces que le contó sobre Jisoo,y pensó que era una desgraciada que la iba a raptar y siempre la amenazaba con que si la conocía si no le agradaba le iba a dar vuelta la cara. Y honestamente no quería eso, además no es por ser una hija de puta, pero las primeras impresiones de Lalisa nunca son buenas y juro que ninguna se salva.Pero cuando Lisa conoció a Jisoo, no fue como Rose se imaginó en su cabeza.

—Lalisa.

— ¿Qué? —se queja su amiga sabiendo lo que le iba a decir.

—Por favor, compórtate hoy, apenas conocemos a estas personas y con respecto a Jisoo, controlate si no queres que te saque a patadas en el orto de la fiesta. —Rose amenaza.

— Yo sólo vine a divertirme Rosita, si hay algo que me molesta no será mi culpa. — se excusó Lisa.

 —De todas formas estas advertida.

—¡Ugh! — Lisa bufo mientras la empujaba para llegar antes a la puerta.

—¡Mierda, Lalisa!

—¡Diversión Rosie, diversión!— le grita Lisa haciendo señas con sus manos.Antes de que Lisa entrara sin más a la casa, Rose la frenó diciendo que no haga eso y que la dejara a ella, su amiga sólo se volvió a quejar. Entonces tocó la puerta y el timbre por si acaso, pero alguien abrió la puerta con otras intenciones; estaba pensando en esperar pero Lisa la arrastró hacia dentro.

—¡Lili te dije algo!

—Oídos sordos, Rose. Es una fiesta en una mansión, date cuenta. — le dice su amiga.

— Bien.—Y al instante, a pesar de la música, ella escucha su voz.

—¡Hey chica estrella, viniste! —le dice Jisoo sonriendo.Rose también sonríe, olvidando a Lisa .

—¿Me invitaste, no?

— Claro pero podrías no haber ven—

— Ah. Con que ésta es Kim Jisoo.— la interrumpe Lisa haciendo incapié en la palabra 'ésta'. Rose se alarmó y luego puso los ojos en blanco.

— Lo siento por esto, Jisoo, ella es Manoban Lalisa —la presenta Jisoo. Jisoo no sabía si tomar la primer o segunda reacción de Rose.

—Mmm la famosa Lalisa, quién llenó de glitter tu pelo .—suelta Jisoo .Para sorpresa de Rose, Lisa se ríe.

— ¡Si! ¡Apuesto a que fue divertido verla por toda la universidad intentando tapar su pelo brillante! —dijo Lisa soltando carcajadas. Jisoo quería enojarse con Lalisa por eso .pero no pudo evitar reírse junto a ella, haciendo molestar a Rose. 

— Pf —es todo lo que dice Rose.—Y Jisoo la mira con ternura.

—Chica estrella, eres adorable.

—No.

—Si.—Lisa estaba viendo la escena divertida.

—No.

— Sí.¿Lalisa, te la puedo robar unas horas? —le pregunta Jisoo.

— Por mi ni te preocupes — le contesta.

— ¿Por qué demonios le preguntas a ella si no es mi madre? —se queja Rose.

—Ya, chica estrella, ven, vamos — la arrastro Jisoo hacia uno de los balcones de la mansión. Mientras Jisoo miraba hacia Rosé haciéndole señas sobre que la estaría vigilando. Rosé se burló.— Pensé que Lili te iba a patear la cara — hablo Jisoo. Jisoo muestra sorpresa en su cara y se ríe.

—¿Por qué?

—Ella sólo...es protectora y las veces que te mencionaba decía que vos me ibas a raptar.

— Podría, pero no tendría sentido, ya te tengo a mi merced. —bromea Jisoo.

—Ja-ja —se burla.

—Admitilo.

—No hay nada que admitir.— Sonríe egocéntricamente mientras dice —Bah, ya verás.—Pero entonces a Rose se le viene a la mente algo que no había pensado.

— ¿Jisoo?- ¿Si?- ¿Qué harás ahora que te graduaste?

—Bueno, trabajar más, lamentablemente. Hasta poder tener suerte — le explica Jisoo.

—¿Si, pero te irás a otra ciudad o algo? —dudó Chaeyoung.

—Sí. - susurra Jisoo.

—Oh—.Rose mira directamente a sus ojos.

— Está bien, quizá podría haberme esforzado más y decirte que me gustas mucho, pero es verdad cuando dije que no sabía tu nombre, que no era ni soy tu acosadora y siempre que te veía era de pura casualidad, excepto ahora, claro —admite Jisoo cruzada de brazos, apoyando su cintura en el borde del balcón.Rose sonríe con tristeza.

—Probablemente tengas razón, pero yo tampoco hice mucho así que las dos tenemos la culpa.

—Chica estrella, hoy es tu noche, no deberías pasarla así. ¿Bailas? — Jisoo intentó distraerla de las dudas.

—Soy horrible en eso pero bueno.

— Ah, ps, no importa, yo estoy para sostenerte —presume Jisoo.

Cuando se acercaron al salón donde provenía la música y estaba la multitud de personas, al instante empieza a sonar Blinding Lights de The Weeknd. Los recién graduados empezaron a festejar y bailar.En secreto, Jisoo amaba esta canción y vivía bailandola, pero apenas se hizo la que no sabía delante de Rose. Pero Chaeyoung estaba feliz esta noche y muy cerca de Jisoo.

—Alguna vez te dije que sos muy hermosa, ¿chica apodos? —le susurra al oído de Jisoo.La piel de Jisoo se eriza sin esperarlo.Sonríe. 

—¿Chica apodos? —Y responde egocéntricamente—No, pero sospechaba tu pensamiento, chica estrella.

—Psss, callate. —dice Rose poniendo un mechón de cabello detrás de la oreja de Jisoo.

—Vos sos hermosa— Chaeyoung niega eso y de la nada, la besa.Lentamente y suavemente, Jisoo le sigue.Para cuando las dos precisaban aire, Jisoo sonreía mientras le daba besos cortos.

— Chica apodos.

— ¿Mmh?

— Besas muy bien. —le confiesa Rose, sonriendo, mordiéndose la lengua.Con cariño, Jisoo sonrió, volviendo a besarla.Pero Jisoo no la vió nunca más después de esa noche.