16.
Temprano Jimin había bajado a desayunar, las vacaciones estaban a la vuelta de la esquina y obviamente la felicidad de estar acostado todo el día era tan enorme que no notó a un Jungkook completamente despeinado al final de los escalones, estampando fuertemente con su espalda.
— ¿Por qué tu cuerpo parece una roca? — preguntó molesto sobando su sien.
El par de Jeon miraron sorprendidos a Park y el más bajito se ruborizó.
— El amor, el amor... — dijo Kwan paseando por la cocina con su taza de café.
— Buenos día también — chistó Jungkook tomando de la mano a Jimin y llevándolo al comedor — te hice hot cakes — dijo con un poco de nerviosismo.
— ¡En realidad los hice yo! — gritó su padre.
Jimin rio mientras tomaba asiento con Jeon.
— Ya, pero yo tuve la idea — refunfuñó.
— Jungkook — dijo el peli rubio — n-no quiero que esto se vuelva incómodo para los dos — confesó — yo... yo quiero
— ¿Seguir molestándome? — preguntó levantando una ceja.
— Si — respondió Jimin tímido — ¿iremos tomados de la mano por ahí?
— ¿Te gustaría eso?
— Sí, también — susurró.
— Entonces hagámoslo — sugirió comenzando a desayunar.
Rumbo al Instituto fueron de esa manera, con sus manos entrelazadas y a decir verdad, Jimin no sabía que pretexto podría ponerle a Taehyung y a Hoseok, quería soltar a Jungkook pero, no podía porque se sentía bien, se sentía incluso mejor que cuando vivían juntos cuando eran pequeños.
Solo lamía con inseguridad su labio inferior conforme se acercaban a su destino.
Jungkook lo observó y se detuvo.
— Entremos cada quién por su lado, ¿vale? y hablemos con ellos en la cafetería — propuso el castaño tomando con delicadeza la mejilla de Jimin.
Igual no importaba tanto, el único sorprendido sería Hoseok, pobre.
— Odio que te des cuenta — chistó Jimin haciendo un puchero.
— Aprendí tantas cosas sobre ti — confesó Jungkook.
— Esto es tan irreal — susurró el peli rubio cuando sus narices comenzaron un beso esquimal.
— Desee hace mucho tiempo estar así contigo — el más alto atrajo el cuerpo de Jimin poniendo una fuerza que volvió loco al peli rubio. — Habría sido más creíble que me sacaras a patadas de tu vida —.
— ¿Estamos locos por sentir esto? Me refiero a qué, no había otra cosa que pelear, herirnos con palabras... y ahora estamos así — los brazos de Jimin rodearon el cuello de Jungkook, besando con delicadeza aquellos delgados labios que tanto le gustaba mirar.
— Estamos completamente locos — sonrió el castaño.
❅
Jamás creyó tener a todos sentados en la misma mesa.
Jin, Yoongi, Taehyung, Hoseok, mirando a ambos chicos con picardía.
— ¿Jungkook? — cuestionó Jimin.
— Le dije lo de la cita — dijo el castaño haciendo que sus amigos soltaran el aire que venían reteniendo desde que se acomodaron en sus lugares.
— ¿Qué? — preguntó Jimin... y Hoseok.
— Ya era hora — interrumpió Jin — me estaba hartando este jueguito. Son horrendos, espero que duren muchísimo tiempo —.
— Concuerdo — dijo Yoongi mordiendo su manzana.
— Bueno, estoy emocionado, quizá podamos ser los amigos de antes — comentó Taehyung viendo a Jimin.
— ¿Me pueden explicar que está pasando? — volvió a cuestionar el peli rubio.
— Yo se lo diré — Yoongi recargó las palmas de sus manos en la mesa y miró afiladamente a Park — Jungkook llora por ti todas las noches desde que te fuiste de su ca-
— ¡CÁLLATE YOONGI! — intervino el castaño a gritos.
— ¡Y TAMBIÉN HABLA DE TI EN LAS FIESTAS BORRACHO! — gritó Jin.
— Jungkook te ama antes que tu a él — soltó Taehyung.
— Imbéciles — regañó Jungkook, rojo hasta las orejas — no son buenos amigos, de ahora en adelante, no cuenten conmigo —.
— No lo haremos — respondieron al unísono encogiéndose de hombros.
— Te decía — habló SeokJin — Jungkook una vez estaba tan ebrio que soltó la sopa, diciendo que le gustas, que amaba cuando te enojabas con él, cuando le gritabas, también tu altura, tus manos y muchas cosas para nada heteros — rieron.
— Esa misma noche Taehyung había ido a mi casa para moler a golpes a Jungkook porque al parecer te había hecho sentir mal con sus palabras de idiota — dijo Yoongi, Jimin miró a Taehyung agradeciendo, porque él realmente no sabía que su amigo lo había ido a defender. — Cuando Tae vio a Kook en ese estado tan miserable no tuvo opción más que quedarse a escuchar...
— Días después Jungkook vino con los tres a hablar como gente civilizada — contó Taehyung — y no fue hasta ayer que SeokJin harto le dijo que tenía que parar y armarse de valor —.
El silenció reinó unos segundos, dejando solo a Hoseok con un signo de interrogación en la cabeza.
— Sabía lo de Jungkook — susurró Jung — pero. ¿por qué no lo de la cita?
— Llevaste a Jimin a descansar — recordó Taehyung.
— Vaya...
— Y-Yo, creo que todos son unos traidores — dijo Jimin intentando no hacer una mueca. Su corazón saltaba como loco y es que no negaba el anhelar tanto un momento así — pero lo dejaré pasar porque Yoongi y Jin creen que Jungkook es un idiota y porque Taehyung iba a defenderme y porque Hoseok me dejó descansar en su casa —.
— Entonces... ¿quieres s-
— ¡AH, ESTÁ SUCEDIENDO! — gritó Jin para luego recargar su cabeza en el hombro de Yoongi.
Todos se rieron y negaron divertidos.
Taehyung hubiera gritado igual pero no tenía el mismo valor que su amigo el peli rosa.
Por otro lado Yoongi y Hoseok dentro de su imaginación podían visualizar la catastrófica pero hermosa relación que tendrían aquellos dos.
Y es que era tonto aquél que no notara la química de Jungkook y Jimin.
— Jungkook, ¿quieres ser mi novio? — se atrevió el peli rubio a preguntar.
— ¡AHHHHHH! — fue el gritó de todos sus amigos.
Jungkook sonrió mostrando su dentadura, sus ojos se hicieron pequeños y pensó que no merecía una persona tan pura.
Jimin merecía el cielo completo y Jeon se aseguraría de hacerlo sentir así.
— Claro que si — se acercó ocultando entre sus brazos ese frágil cuerpo que tanto amaba. — Dejaremos la cita para cuando estemos libres — susurró Jungkook en el oído del peli rubio ocasionando que su piel se erizara.
— No dejarán de gritar, ¿verdad? — murmuró aún escondido en el abrazo de Jungkook.
— Al parecer no — rio.
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El próximo capítulo es medio sad, jshja chaooo
a esto le quedaa muy poco, gracias por leer.
Recuerden que las amo ❅
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