Mientras los días pasaban tu relación con los chicos no mejoraba.

Tu lugar con Baji y Chifuyu ya era ocupado por Kyoko, ya no se dirigían la palabra.

Si al caso sólo un "Hola" o un "gracias y de nada" era triste ver como por una enfermedad de amor, tu amistad de años se había derrumbado.

Y aunque quisieras negarlo, sabias que te dolía, el ver como te habían cambiado tan fácilmente.

Además que tus problemas respiratorios cada vez era más y más graves. Por otro lado eras una de las personas más odiadas por Kyoko.

Aveces sentías una mirada penetrante en clases, y no hacia falta voltear a ver quien era, estaba claro que esa mirada de odio era de Kyoko. Cada vez que tenia la oportunidad de echarte en cara algo lo hacia. 

Y por otro lado aveces sentías aquella mirada de preocupación de Baji, este sin duda alguna seguía hablándote, pero ya no en persona, si no por mensaje y solo para saber como ibas con tu enfermedad. 

- Bien siguiente pareja para el proyecto - hablo el maestro - 

Desde hace rato no dejaba de dictar las parejas para hacer un proyecto, solamente ibas a poner atención cuando pasara tu nombre. 

- la señorita _____ y la señorita Kyoko - 

Las voltearon a verse incrédulas, hacer un trabajo juntas eso iba a resultar mal. Ibas a pedir un cambio de pareja pero la risa de Baji se había hecho presente. 

Este que estaba al tanto de la situación sabia que tu y Kyoko ahora mismo era la peor pareja posible. 

Y al termino de las clases intentaste buscar a la chica, pero no estaba por ningún lado, y cada vez que acababa una clase y empezaba otra en ese lapso de tiempo igual lo intentaste, simplemente te estaba ignorando. 

Y al termino de las clases volviste a buscarla, pero el problema era que ahora estaba con Chifuyu y Baji. 

Necesitabas hablarle, pero no te atrevías a ver a tu amor no correspondido a los ojos. La paciencia se te acabo, y fuiste justo al grupito de tres, solo para hablar con Kyoko. 

Llegaste hasta ella y colocaste una mano en su hombro haciendo que esta misma volteara a verte. 

- Necesitamos hablar - dijiste evitando ver a tus antiguos amigos - 

- Disculpa, ahora no puedo - 

- No te estoy preguntando... Te estoy diciendo que hay que hablar!! - 

Esta iba a responderte pero la jalaste alejándola de su grupo para hablar en otro lado con ella.

- Bien, donde haremos el trabajo - 

- En mi casa, a las 6 - hablo irritada - Lleva una cartulina e información, yo pongo lo demás -  

Esta se fue sin decir nada al igual que tu, cada uno tomando caminos diferentes, llegaste a tu casa, sola como siempre. 

Y era costumbre llegar a tu casa con Baji y Chifuyu, estos de inmediato atacaban tu cocina, y cuando encontraban algo que quieran los dos, los gritos no faltaban. 

Y ahora silencio abundaba en la casa, fuiste directo a la cocina por algo para comer, y lo único que se habían fijado tus ojos era helado. 

Sin darse cuenta empezó a llorar, siempre sus amigos se peleaban por el helado, y al final siempre te lo quedabas tu. 

Y nuevamente aquellas ganas de toser se apoderaron de ti, te dirigiste al baño lo mas rápido para escupir en lavabo. Cada vez escupir mas pétalos de flores y cada vez tenían mas sangre, sin mencionar que aveces se te iba el oxigeno. 

Subiste a tu habitación, te bañaste y cambiaste con algo cómodo para hacer nada, bueno nada hasta que den las seis. 

Y sin darte te habías quedado dormida, menos mal te habías levantado quince minutos antes de las seis, te colocaste unos jeans, y una sudadera, jalaste tus cosas. 

Corriendo llegaste a casa de Kyoko, esta te abrió la puerta y te guió hasta su sala para empezar con el trabajo. 

Ninguna hablaba o iniciaba una conversación, lo único que querían era acabar el trabajo lo mas rápido posible. 

- Hablaste con Chifuyu - hablo de repente - 

- No - respondiste seca - 

- Te dije que se estaba muriendo y no haces nada! - exclamo enojada ante tu respuesta - 

- Si esta muriendo es por tu culpa no mía -  respondiste lo mas tranquila posible - Después de todo tu le gustas -  

- Que no!! - exclamo Kyoko seguido de un golpe en la mesa - Tu le gustas!! el me lo confeso! Se juntaba conmigo para pedir consejos... el te quiere a ti!! Deja de dudar! Nunca había visto a Chifuyu tan enamorado!! - 

De pronto las ganas de toser volvieron, tomaste un pañuelo que llevabas contigo y te lo colocaste en la boca expulsando los pétalos. 

- Si vine aquí para que me gritaras, mejor me retiro - 

Te levantaste dejaste la cartulina con tu información y saliste de aquella casa, caminaste a paso lento hacia tu casa mientras por tu mente resonaba las palabras de Kyoko. 

"El te quiere a ti" "Tu le gustas" "Nunca había visto a Chifuyu tan enamorado" esas simples palabras tenían mucho significado y con ello confundía mas tus sentimientos. 

Las dudas de si de verdad el motivo de su enfermedad eras tu, y preguntas como "¿de verdad le gusto?" eso era lo único en lo que pensabas. 

Y para cuando llegaste encontraste esa caballera negra que era imposible que no lo reconocieras. 

- Por fin llegas peque - hablo Baji -