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Jongho suspiró de placer cuando sintió como Yunho succionaba su muslo izquierdo, esos muslos eran la gloria y le encantaban demasiado desde hace un par de minutos que pudo verlos desnudos. Subió para tomar los labios de Jongho con lujuria, siendo un beso rudo desde el inicio las manos del menor se dirigieron al cabello oscuro del mayor, la lengua del mayor entró a la cavidad bucal contraria sorprendiendolo pero siendo bien recibido. Las manos de Jongho se fueron a la camisa del mayor para arrancarla, porque no se iba a detener para desabotonar botón por botón, pues ya había esperado meses para poder estar con el alfa, también era una injusticia que Yunho estuviera vestido y él no.
Yunho rompió el beso, para apreciar al menor que al igual que él respiraba errático y jadeante, giró el cuerpo del omega logrando que este jadeara en sorpresa, dejándolo con el pecho tocando el colchón y su trasero en el aire, se quitó lo que restaba de ropa, y separó las piernas del menor para adentrar uno de sus dedos a su cavidad y prepararlo antes de que su miembro entrará, aunque tuviera tantas ganas de poseerlo en ese momento, prefería prepararlo.
Los primeros movimientos de sus dedos fue en forma de tijeras para dilatarlo y unir un tercer dedo dando así al inicio de profundas y certeras embestidas, se dedicó a buscar el punto exacto dónde Jongho se consumiría de placer, al dar ahí justo en ese punto dónde el menor gimió. Yunho escabullo su otra mano al miembro del omega y masturbarlo, logrando que sus gemidos fueran más seguidos.
—¡Yunho!— El omega soltó el nombre del mayor cuando obtuvo su primer orgasmo de la noche.
—Suena lindo como dices mi nombre— Murmuró cerca de su oído. Le dió unos minutos para que se recuperará, en ese tiempo besó la espalda y cuello de Jongho.
—Ya hazlo— El mayor se acercó a besarlo y alineó su miembro a la entrada de su ahora novio— Espera— Yunho ladeo su cabeza— Preservativo— Murmuró con la poca coherencia que le quedaba.
—¿Dónde están?— El omega señaló el cajón que había en la mesita de noche.
Se estiró para abrir el cajón y dar con los preservativos, al encontrarlos tomo uno y lo abrió cuidadosamente para después colocarlo sobre su extensión.
Entró pacientemente en Jongho hasta estar por completo soltando un jadeo, y un par de minutos después Yunho apoyo una de sus manos en el colchón, para comenzar comenzar movimientos lentos y profundos sólo para que se terminará de acostumbrar a la intromisión en su cavidad, Jongho gimoteo y Yunho los disfruto pero quería que esté gimiera, así que comenzó a ser más certero con sus movimientos.
El alfa sonrió y salió de su interior haciendo a su pareja quejarse, el omega soltó un grito ahogado cuando Yunho entro de nuevo en él siendo ahora sus embestidas profundas y muy certeras, y por ello no demoró en encontrar el punto de su omega. El pelirrojo apretó con fuerza la sábana y encorvó su espalda cuando una vez más su próstata fue atacada, el alfa aprecio cada gemido, jadeo o lloriqueo que su pareja hacía cuando él lo tocaba, el omega empezó con movimiento en su cadera sólo que está vez se mostraba ciertamente urgido.
—Y-yunho— Gimoteo.
El pelinegro sonrió y embistió con precisión dando con su próstata, y Yunho dirigió su mano derecha al miembro del menor y comenzó a bombear sacándole un suspiro, Jongho frunció ligeramente su ceño sabía que estaba por correrse y el mayor también lo supo cuando sintió que la cavidad del menor se contrajo, dicho y hecho el menor se corrió por segunda vez soltando un placentero grito, el mayor sintió un leve cosquilleo poco después que le fue agradable, siguió con sus embestidas aumentando su ritmo, cuatro o quizás seis embestidas y Yunho encontró su final.
Dió una ligera mordida a su hombro izquierdo y después beso su mejilla.
Cuando su miembro volvió a su tamaño normal, salió del interior de Jongho y retiro el preservativo para irlo a tirar.
—Me gustas mucho— Murmuró el menor mientras se acurrucaba en el pecho del alfa.
—Y tú a mí también me gustas mucho.
En ese momento no pasaba por su mente decirle que era estéril.
[…]
Yunho entró a su casa no había ruido así que suponía que su hermano ya se había ido a la universidad, aunque no lo vio cuando fue a dejar a Jongho.
—¡Jeong Yunho!— El mayor pego un pequeño brinco—¡¿Cómo se te ocurre no llegar?!
—Creí que había quedado claro, ¿Cómo dormiste?— Yoobin bufo.
—No, no quedo claro, pensé que llegarías no pude dormir bien— Golpeó su pecho— Pero ahora dime ¿Le dijiste?
—¿Qué?— El menor frunció el ceño desconcertado.
—Sobre que eres estéril— Yunho abrió un poco sus labios, ya decía él que se le estaba olvidando algo.
—Lo olvide, no era lo más importante en ese momento— Su hermano ladeo su cabeza— Cosas que tú no debes saber.
—¡Ya soy un adulto!— Puchereo— Tengo la misma edad que Jongho y soy dos meses mayor.
—Yunho— El mayor nego— Bien, pero Yunho en verdad debes decirle, es algo importante.
—Si ya lo sé— Yoobin bufo.
—Lo sabes— Musitó— Entonces si lo sabe ¿Por qué no se lo dices ahora mismo?
—Él está en clases ahora— El menor abrió sus ojos y corrió a su habitación.
—¡¿Por qué no me lo dijiste cuando llegaste?!— Grito desde su habitación.
No le respondió sólo se fue a buscar comida para él porque tenía un poco de hambre y espero a su hermano porque claramente lo iba a llevar. No entendía porqué de pronto era tan complicado hablar sobre que era estéril con Jongho, en Gwangju no le importaba en lo más mínimo, pero ahí era realmente difícil.
—Ya vámonos— Yunho tomo sus llaves y salió después de su hermano— ¿Cómo no pudiste llamarme?
—Supuse que ya estabas allá— El menor gruñó.
—¡Fue tu culpa! No estuviste aquí y se me complicó dormir— El alfa sonrió.
—¿No que ya eres un adulto?— Yoobin abulto sus labios.
—Lo soy, sabes ya sé cómo no extrañarte cuando no estés en casa— El mayor lo miro aprovechando que el semáforo estaba en rojo— Quiero un novio.
—Ya te dije que esa cosa no sirve para nada, y ni craes que si llegas a tener novio yo te dejaré sólo— El omega armó un berrinche— Te compraré un peluche y confórmate.
—¡Eres malo!
—Como digas, ya llegamos.
Yoobin puchereo y no le quedó de otra más que bajar, notó que su hermano igual bajo del auto y fue un poco extraño, pero al ver a Jongho entendió.
—Me estás quitando a mi hermano— Murmuró cuando Yunho abrazo al menor y no a él— Tú si me vas a decir que pasó anoche.
—Sólo nos hicimos novios— Yunho sonrio y beso la frente del pelirrojo.
—¿Y por qué tienes chupetones? Yuyu también tiene— La pareja se miró y sonrió en complicidad.
—Ya deja de estar de entrometido y vete a clases— Yoobin abulto sus labios y se alejó.
—Yo debo ir con él— El mayor asintio y se inclino a besarlo.
—No le comentes nada aunque insista o haga berrinches— Jongho sonrió.
—No te preocupes por eso— Lo beso de vuelta— Ya debo irme, te veo más tarde.
Yoobin se hizo presente de nuevo y le pidió a Jongho que se adelantará porque quería comentarle algo a su hermano.
—¿Ya le dijiste?
—Si me sigues insistiendo no habrá peluches, ni dulces— El menor lo miro aterrado.
—¡Eres un mounstro! Pero si habrá novio...
—Ya vete a estudiar— Yoobin le mostró su lengua y comenzó a alejarse— Eres un niño.
—¡Y tú muy viejo!— Yunho negó mientras sonreía, adoraba a su insistente y mimado hermano.
Se hizo lo que se pudo ^.^
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