"COME UP TO MEET YOU, TELL YOU I'M SORRY. YOU DON'T KNOW HOW LOVELY YOU ARE. I HAD TO FIND YOU, TELL YOU I NEED YOU, TELL YOU I SET YOU APART"

Regresamos al escondite después de hablar con el Doctor Strange y decirle que haríamos lo acordado en la noche a las nueve, ya que queremos pasar más tiempo juntos antes de que yo olvide todo. Estoy tan triste y sé que Peter también, no podemos asimilar que todo esto va a pasar y que mañana ni siquiera hablaremos o veremos de la misma forma. Para mí será un desconocido completamente.

Peter abrió la puerta de entrada y pasé, después entró y la cerró detrás suyo. Me senté en el sofá de la sala, él lo hizo igual, nos quedamos en silencio un rato sin saber qué decir. Yo lo único que quería era pasar tiempo con él, lo más que podía, hasta que llegase el momento.

- ¿Qué quieres que hagamos? -preguntó en un murmullo, me encogí de hombros, rascó su nuca -¿te gustaría que hiciéramos la cena juntos? ya sabes, como van a ser las cinco debes tener hambre y... Podríamos hacer tu comida favorita.

Lo miré con una pequeña sonrisa y asentí. Ambos nos levantamos yendo a la cocina, donde sacamos todo para cocinar hamburguesas de queso. Peter cortaba los vegetales mientras yo preparaba la carne y el queso, era divertido, bueno, siempre que cocinamos juntos lo es. Hasta me tiró salsa de mostaza en el pelo por accidente pero yo se la regresé echándole lechuga, reíamos mucho en realidad.

- Aquí dice que tiene que cocinarse a unos doscientos diez a doscientos veinte grados... - leí en el empaque donde venía la masa de galletas hecha, ya que también haríamos. - ¿sabes utilizar el horno?

- No, pero de tantas veces que he visto a May quemar la comida creo que lo haré mejor que ella - reí, volteé al bol donde tenía la masa y comencé a hacer figuras echándolas en la bandeja

- ¿Vas a hacer el glaseado o...? - pregunté girando hacia Peter, me quedé callada al ver que tenía puesto un delantal de hello Kitty. Reí a carcajadas. - lo siento, pero te ves ridículo.

- May siempre me dice que el delantal da suerte en la cocina, no te burles de los conocimientos de mi tía - defendió cruzándose de brazos - además, debes admitir que se me ve bien

- Sí, cómo digas. - rodé mis ojos riéndome

Comencé a hacer las galletas mientras Peter preparaba las hamburguesas, las dejé un tiempo en el horno, no demoró casi. Al poco tiempo ya estábamos comiendo hamburguesas, refresco y galletas sentados en la mesa. Tenía mucha hambre ya que el sándwich simple que me hice en el almuerzo literalmente no aguantó nada en mi estómago, además de que ya son casi las siete de la noche.

- Oye, hoy es el baile de primavera en la escuela, ya sabes, como todos los años... - me contó, lo miré - ¿quieres ir?

- ¿Cómo vamos a ir? habrán policías adentro viendo para ver si nosotros llegamos, no vamos a causar un desastre ahí - musité con el ceño fruncido

- En realidad no vamos a entrar al gimnasio exactamente, solo vamos a verlo. Entonces... ¿Quieres? - preguntó otra vez, empezó a jugar con el tenedor y su comida - te invito porque la última vez que fuímos a un baile yo fuí con alguien más. Y también... Bueno, es nuestra última noche juntos - sonrió tristemente

- Claro que quiero - acepté, tomé su mano encima de la mesa

Dejó un beso en mi mejilla dulcemente, después seguimos comiendo, me gusta que Peter quiera ir conmigo al "último" baile que tendremos juntos si el destino quiere.

[...]

Estaba sentada en el césped de una colina cercana al gimnasio de la escuela, donde se veían luces y se escuchaba la música desde aquí. Estos bailes eran los que más demoraban, eran las ocho y yo creo que iba a acabarse en la madrugada. Peter estaba a mi lado sentado también. La inmensa luna llena se veía en el cielo junto con el montón de estrellas. Habíamos venido en el Mustang negro que habíamos robado el otro día, creo que nos sirve de transporte.

Realmente no puedo creer que todo se vaya a acabar en menos de una hora, todo lo que fuimos, todo lo que hicimos, se olvidará, quedará en el aire como una mariposa marchita. Olvidaré a mis amigos, no conoceré a May y mi familia no conocerá a Peter, ni yo a él. Él será el único que recordará todo.

- ¿Te sientes bien? - me preguntó Peter al ver que estaba pensativa, le asentí con una pequeña sonrisa. Se levantó del césped, sacó su teléfono dejándolo en el suelo, llamó a Ned y lo dejó en altavoz escuchando la música del baile desde el celular - ven, vamos a bailar. - lo miré confundida - nunca bailamos juntos, me gustaría intentarlo.

(Multimedia) Sonreí. Me puse de pie poniéndome al frente de Peter, él colocó una mano en mi cintura mientras la otra la entrelazó con la mía. Escondí mi rostro en el hueco de su cuello empezando a movernos lentamente de lado a otro bailando la canción lenta que sonaba. Trataba de aspirar su aroma o al menos el perfume suave que tenía para no olvidarlo. Recosté mi cabeza en su hombro sin poder evitar que algunas lágrimas salieran de mis ojos, mierda, ¿porqué es tan difícil dejar a alguien ir?

Separé mi rostro lentamente de su hombro mirándolo, él lo hizo igual. Besé sus labios en un leve roce, pero Peter lo intensificó metiendo su lengua en mi boca. Pasé mis brazos por su cuello sin dejar de bailar. Dejé de besarlo para recuperar aliento, sentí su respiración en mi oído.

- Peter... - lo llamé, él se apartó de mi cabeza un poco mirándome - ¿quieres...?

Él me sonrió y asintió. Se separó de mi cuerpo, cogió el teléfono del suelo guardándolo y tomó mi mano para ir al auto que estaba a pocos metros lejos de nosotros. Los dos nos metimos en la parte trasera.

Inmediatamente me subí a su regazo besándolo, él me siguió apretando mis caderas en sus manos, quité su camisa dejándome ver su abdomen marcado. Besé su cuello mientras acariciaba su torso y él jadeaba y desabotonaba mi blusa roja. Pronto me la quitó y la tiró al suelo del coche, hundió su cabeza en mi pecho y lamió mis pechos por encima del sostén. Mordí mi labio apretando su cabello.

Alzé mi falda negra bajando mi interior, Peter desabrochó la correa de su pantalón no sin antes buscar el condón, bajó su jean hasta sus pies, me senté en todo su regazo, entró en mí lentamente y comencé a moverme mientras él me ayudaba sosteniéndome de la cintura. Me agarré del asiento fuertemente.

- P-Peter... - gemí cerrando mis ojos, chillé un poco cuando tocó mi punto

Seguí con mis movimientos, lo besé ahogando nuestros gemidos en nuestras bocas, acarició mi espalda con sus manos y masajeó mi trasero lentamente. Dejó de darme embestidas lentas para darme duras, besó mi cuello y pude sentir que me hizo chupones no tan grandes pero sí bastante fuertes. Grité cuando sentí correrme de una vez por todas, Peter dió dos embestidas más y suspiró indicando que ya había acabado también. Me bajé de su regazo y recosté mi cabeza en su hombro respirando, él se acomodó el pantalón poniéndoselo bien.

Media hora después

No sé en qué momento ya estaba conduciendo al interior de la ciudad para ir donde el Doctor Strange, ya estábamos cambiados e iba adelante en el asiento co-piloto. Miré por la ventana viendo los edificios con luces y algunas tiendas aún abiertas por ser veinticuatro horas. Ya eran las nueve. El coche se detuvo y me bajé, Peter entrelazó su mano con la mía y entramos al edifico otra vez.

- Veo que llegaron a la hora exacta - habló Doctor Strange al notar nuestra presencia, se acercó un poco mirándonos - ¿están listos?

- ¿Podemos hablar? - pregunté señalando con los ojos a mi novio, él asintió. El hombre se fue a otra habitación para dejarnos solos. Volteé a ver al arácnido - Peter... Quiero que me prometas algo.

- Sí, lo que sea. - aceptó sin problemas girando hacia mí. Suspiré.

Bajé mi mirada un poco - Peter... Si no te llego a querer de la misma forma en que te quiero ahora, quiero que busques a otra chica. - murmuré

- ¿Qué? - susurró

- Sé que será difícil que yo vuelva a contigo... Por favor, si no te quiero, busca a otra chica. Quiero que seas feliz y no estés triste por mí - lo miré a los ojos - por favor.

- Pero... ¿Y si no quiero rendirme por tí? - preguntó - Alaia, yo nunca podría pensar en otra chica que no seas tú.

- Entonces conquístame otra vez. - le sonreí tristemente - vuelve a ser ese chico lindo que me cuidaba por las calles de Nueva York siendo Spiderman, ve a visitarme en las noches, dime cosas bonitas. Lo que sea. Ya me conquistaste así una vez, ahora hazlo de nuevo.

Asintió. Me abrazó fuertemente, yo le correspondí cerrando mis ojos para sentir su tacto. Me separé de su cuerpo y sequé las lágrimas que amenazaban con bajar de mis ojos, quité mi collar de mi cuello y se lo mostré en mi mano.

- Tenlo - se lo entregué - cuando pienses que es el momento correcto, puedes dármelo, te prometo que me gustará tanto como la primera vez que me lo diste.

Sonrió y lo guardó en el bolsillo de su pantalón. Me dió un beso en los labios dulce, yo se lo devolví, fue corto. Me separé de su rostro y sonreí con tristeza mirándolo. Doctor Strange regresó y se puso al frente de nosotros.

- ¿Listos? - preguntó. Asentimos. - recuerda Peter, no puedes hablarle de esto a nadie, si lo haces puedes hacer una ruptura en el tiempo y volver a este presente

- No lo haré, mantendré el secreto, lo juro. - prometió

- Espero puedan encontrarse otra vez, hacen una muy linda pareja y sé que a Tony les encantaba verlos juntos - nos sonrió, me sonrojé un poco con nostalgia - aquí vamos.

Hizo un movimiento de manos y el amuleto que tenía en su cuello se abrió dejando ver la gema del tiempo, cerró sus ojos y su cabeza empezó a moverse demasiado rápido. Me recordó a el día en Titán. De la gema empezó a salir una luz verde. Giré mi cabeza viendo a Peter y él a mí.

- Te amo - susurró mientras sus ojos se cristalizaban poco a poco

- Yo también te amo.

Entrelazó su mano con la mía, la luz explotó de un momento a otro cegando nuestras vistas y ví todo oscuro en un segundo.

Genteeee, habrá sexta temporada wuwu.