"DICEN QUE SI CONOCES A LA PERSONA CORRECTA EN EL MOMENTO EQUIVOCADO, LA VIDA VOLVERÁ A JUNTARLOS"

NARRA ALAIA

Cerré la puerta fuertemente una vez que llegué a mi habitación, me quité mis sandalias tirándolas por donde sea y comencé a caminar en círculos sin saber qué hacer. HE BESADO A PETER. ¿Cómo pude hacerlo? tengo novio, me siento una completa perra por haberlo hecho, soy tan estúpida, nunca debí hacerlo. Y tampoco sé por qué lo hice, solamente fue un impulso pero también me sentí muy cómoda, como si hubiera sido una situación que había vivido antes pero la cual no recuerdo.

Bufé molesta, me tiré en mi cama y grité en la almohada con frustración, ¡soy una perra! ¡literal y oficialmente lo soy! me besé con otro chico sabiendo que tengo novio, y no sé qué hacer, en mi cabeza se supone que no me gusta Peter pero mi corazón me dice otra cosa, no sé qué pensar. No puedo con esto. ¿Cómo le diré a Spiderman? no, no quiero terminar con él, me gusta mucho. Pero tampoco puedo engañarlo de esta manera.

Brais se subió a mi cama y ronroneó mirándome, mordí mi labio mirándolo. Acaricié su pelaje blanco y suave con rapidez para tratar de pensar, tengo que aclarar bien mis sentimientos, saber qué es lo que quiero y qué está pasando conmigo porque no entiendo cómo es que Peter y Spiderman tienen tanto impacto conmigo de una forma que me hace sentir familiar. Pero no sé cómo.

Escuché un leve sonido, por lo que volteé de inmediato a la ventana viendo a Spiderman colgado ahí. Me entró el pánico. ¿Qué debo hacer? ¿abrirle o no? no estoy preparada aún para decirle lo que pasó pero tengo que hacerlo, ¡DIOS, CÁLMATE ALAIA! Me dí una cachetada mental, me levanté de mi cama descalza y fuí hacia la ventana, la abrí y mi novio entró. La cerré nuevamente y volteé a verlo.

- Ví que ibas caminando por las calles como si te estuvieran persiguiendo, quise ver qué había pasado - anunció - ¿estás bien?

- Mmmm, en realidad... Debo hablar contigo sobre una cosa muy importante que enserio no puedo dejar pasar así como así-murmuré, asintió. - verás... Sabes que te dije que iba a ir a una fiesta de un amigo de mi amigo Peter, y sí fuí, pero... No, vas a odiarme si te digo.

- No, nunca te odiaré aún así haces algo que me pueda romper el corazón. - negó, ladeó su cabeza - puedes decirme, tranquila, está bien.

Suspiré. - estábamos jugando a "siete minutos en el paraíso" y me tocó con Peter, por accidente... Lo besé.

No dijo nada, solamente se quedó mirándome como si lo que le había contado fuese lo más natural del mundo. Tengo un poco de miedo a su reacción, no he visto a Spiderman enojado y tampoco quiero hacerlo.

-En serio lo lamento, fue mi culpa, entiendo que no quieras estar conmigo pero es que ni yo misma sé por qué lo hice - continué - nunca quise hacerlo, si quieres terminar esto, hazlo. Lo entenderé.

Soltó una risa. Eso era lo que menos esperaba.
- ¿Quién dijo que voy a terminar contigo? Alaia, por favor. Entiendo a la perfección que nuestra relación no es del todo buena, no estamos seguros de nuestros sentimientos, y enserio lo comprendo. Pero por eso estamos juntos. Para saber qué sentimos el uno por el otro. Aunque obviamente siento un poco de enojo.

- Uh, eh... -susurré. Rasqué mi nuca sin saber qué responderle, me había tomado por completo de sorpresa, pensé que me gritaría o algo así. - d-de acuerdo.

-Pero solo te diré que debes tener más cuidado; y si sientes algo por él, házmelo saber. Después de todo, si quieres terminar con esto, puedes decirme. Debo darte espacio. Es tu decisión.

- Okey... - acepté confundida. - aún así, quiero decirte que en verdad lo siento. No debo hacerlo.

Me acerqué poco a poco a él y pasé mis brazos por su torso abrazándolo con delicadeza, él me correspondió. Me quedé unos segundos ahí, sin decir ni una palabra, solo quedándome en este pequeño espacio. Supongo que esta es una pequeña prueba que me puso la vida.

Al poco tiempo Spidey se tuvo que ir, se despidió de mí. Yo me quedé en mi cuarto un poco más tranquila, pero ahora tenía que arreglar las cosas con Peter y explicarle bien o darle a entender las cosas. Después de un rato me puse mi pijama, cepillé mis dientes, mi cabello y me acosté en mi cama para dormir de una vez por todas. Brais se tiró a mi lado, pasé mi mano por su pelaje muy suave sintiendo su tacto, sentí mis ojos pesando por lo que poco a poco los cerré.

- Y no lo sé, quizás, Peter no me quiere de la misma forma en que yo lo hago. Tal vez invitó a Liz al baile porque es mejor para todos.

- ¡Hey, bonita!

- Y perdí, perdí demasiadas cosas. Cinco años desaparecida y cuando regreso estoy sin mi familia, sin amigos, si mi padre, sin Peter. Pero eso solo me hizo más fuerte.

- Tengo un plan para que Alaia vuelva conmigo, bueno, terminamos pero la sigo queriendo como desde el día en que la conocí.

- Yo quiero hacer esto contigo, solo contigo.
- Sí, yo también quiero hacerlo, bonita.

- Y si no te quiero, busca a otra persona. Otra chica que te haga sentir todo lo que yo no pude. Y si no quieres, vuelve a conquistarme con palabras bonitas, ya lo hiciste una vez, ahora hazlo de nuevo.

- No sabía qué regalarte cuando cumplimos tres meses de novios así que... Lo compré ahora. Estoy seguro que te gustará mucho.

- Te amo, Alaia.

Me desperté de repente sintiendo mi cuerpo completo erizarse y mis manos sudando, me senté en la cama y pasé mis manos por mi cabello.¿Qué había sido todo eso? ¿por qué de un momento a otro escuché tantas voces en mi cabeza diciendo cosas diferentes? Por inercia toqué mi cuello, pero no sentí nada, por un momento sentí algo delicado en esa parte que desapareció como el polvo. Pero ¿qué me está pasando?

[...]

NARRA PETER

Era la una de la tarde y estaba caminando por las calles de Nueva York. Hoy es sábado. Me encuentro yendo hacia la casa de Alaia, necesito hablar con ella siendo Peter Parker, tiene que explicarme por qué me besó. Aunque una parte de mí está conforme con la explicación que le dió ayer a Spiderman, pero no del todo. Solo espero que esté sola para que podamos hablar bien, no quiero incomodarla. Entré al bosque y caminé por la orilla de la carretera, no llevaba mochila, solamente mi teléfono. No quiero ir tan pesado. Salí del bosque una vez que llegué a la casa, la cual me acerqué.

Me quedé parado en el pórtico, dudando si tocar o no, pero si no lo hago me arrepentiré después. Dí varios toques en la madera y esperé un rato, comencé a mover mi pie con nerviosismo. Iba a tocar de nuevo pero la puerta se abrió, Alaia me miró con un poco de asombro, tenía puesto una linda blusa de flores y unos shorts, supongo que para estar en su casa.

- Emmm, hola... - la saludé, rasqué mi nuca con nerviosismo - vine a hablar contigo sobre lo que pasó ayer, ¿p-puedo pasar?

Vió hacia el interior de la casa y me miró de nuevo - no creo que este sea el momento indicado, Peter. Estoy ocupada. ¿Podría ser en otra situación? quizás mañana.

- Uh, claro, no pasa nada. Entiendo si tienes cualquier inconveniente ahora. -acepté bajando mi mirada. Asintió, empecé a darme la vuelta para irme.

-¿Quién está buscando, Alaia? - escuché, volví a mi sitio viendo a Pepper al lado del ella, me miró y sonrió - Peter, qué bueno es verte de nuevo

-¿Se conocen?

- Sí, él era el chico del que tu padre hablaba todo el tiempo. Tenía pasantías con él. Siempre fue un buen chico. -contestó, la castaña frunció el ceño mirándome. Debe estar enojada porque no le dije de la conexión que tenía con el señor Stark - ¿qué haces ahí? ven, acompáñanos a almorzar.

- No, Pepper, no quiero ser molestia en serio - me negué enseguida

- ¿Molestia? claro que no, eres como parte de la familia, ven, hicimos alas de pollo con puré - me hizo una seña con la mano, le hice caso y entré a la casa, Alaia cerró la puerta detrás nuestra.

Caminé detrás de la rubia mientras mi supuesta novia me seguía, llegamos al comedor, donde estaban sentados Happy y Morgan almorzando. La pequeña, al verme, lo hizo durante mucho tiempo que me hizo hasta sentir mucho más nervioso. Es la misma mirada con el ceño fruncido que me está dando Alaia en mis espaldas. Creo que viene de la familia Stark.

- Peter, tenía mucho tiempo sin verte desde lo que pasó en Europa en tu viaje escolar con Spiderman- exclamó el guardaespaldas - ¿cómo estás?

-Bien, creo... -murmuré.

Me senté al lado de Morgan, que seguía sin quitarme la mirada de encima. Pepper se fue a la cocina para traer un plato. Alaia se sentó a mi otro lado, Dios, tener las miradas de las Stark encima mía se siente como si me estuvieran ahogando o matando. La rubia regresó y puso el almuerzo a mi frente, le agradecí comenzando a comer al igual que los demás.

-Mami, ¿quién es él? - preguntó Morgan mirando a su madre con curiosidad -¿es el novio de Alaia?

La nombrada casi se ahoga con su refresco al escuchar lo que dijo su hermana, y lo admito, casi se me pasa el bocado de pollo que me había metido en la boca.

- ¿Qué? no, cariño, no lo es. - le negó la rubia - es un amigo de la familia, es el chico de las pasantías que tu padre y yo te habíamos contado, ¿recuerdas?

Abrió su boca sorprendida y me miró con una sonrisa - ¿eres el mocoso? - sonreí por el apodo y asentí - papi hablaba mucho de tí, nos decía que eras muy inteligente y que le gustaría mucho que pasaras tiempo con nosotros. Y que estuviste con él cuando se fueron a Alemania.

-Sí, fue muy divertido estar allá con el señor Stark y Happy. Fue un viaje para aprender más sobre los temas de las pasantías. - afirmé/ mentí. La guerra civil con Capitán América fue una locura.

- ¿Y cómo se conocieron Alaia y tú? -preguntó el guardaespaldas

- Somos compañeros en química. - respondimos al unisono, ambos nos miramos de reojo

- Oh, que interesante - musitó mirándonos

En el transcurso del almuerzo Happy y Pepper me preguntaban muchas cosas, hasta me sentía como en un interrogatorio, aunque la mayoría eran de mi relación con Alaia. Ayudé a Pepper a llevar los platos a la cocina, donde Morgan me siguió y de nuevo empezó a hacer muchas cuestiones a las cuales respondía. Es una niña muy curiosa.

Después de todo el show de preguntas, me despedí de la familia, Alaia va conmigo a la puerta teniendo la excusa de que "me acompañaría". Salí al pórtico y ella igual, la miré. Solo nos quedamos en un silencio incómodo, ambos nos sentimos así después de habernos besado ayer como si fuésemos leones hambrientos, aunque no me molesta, ya lo hice muchas veces. Hasta he pasado a más de eso.

- Supongo que tendremos que hablar otro día ya que adivinaré que no quieres charlar con toda tu familia. - hablé antes de que ella lo hiciese

- En parte, sí. Pero no entiendo por qué no me dijiste que tenías pasantías con mi padre, sé lo que pasó y eso, aún así tenías que contarme. - exigió cruzándose de brazos

- Lo siento, es que si te contaba sentía que me verías de otra forma y empezarías a hacer preguntas sobre todo eso. No quería que te sintieras mal. - rasqué mi nuca

- Sí, ya lo sé... - suspiró. Dió la vuelta y entró a su casa, me miró antes de cerrar la puerta - podemos hablar mañana, ¿qué te parece reunirnos?

- Uh, sí, claro. P-podríamos hablar después sobre el lugar de encuentro y eso- acepté - adiós.

Me sonrió levemente y cerró la puerta de su hogar. Yo giré mi cuerpo comenzando a caminar para irme a casa. Bueno, no fue una mala visita, pude ver a Alaia y quedar con ella, también me dí cuenta que hay cosas en la amistad mía y de Alaia que todavía no cuadran por completo en la palabra "amigos".

¿Más ideas para la trama? estoy pensando en muchas cosas y quiero seguir la historia como va, me gustaría mucho que me ayudaran en algunas ideas que tengan🖤 que no sean de villanos porque de eso ya tengo muchos, más bien de la relación entre Peter y Alaia.