"TODOS LA ESTÁN MIRANDO A ELLA. PERO ELLA TE ESTÁ MIRANDO SOLO A TÍ"

Bajamos del avión una vez que aterrizó en el aeropuerto de Venecia. Estaba en la fila de la revisión de maletas viendo cómo Brad INTENTA coquetearle a Alaia (recalco la palabra "intenta" ya que ella ni siquiera le presta atención, o si lo hace, simplemente le agradece sin importancia). Rodé los ojos una vez más que los escuché reírse, Dios, no pensé que los celos serían tan fuertes. Es decir, no somos nada, pero yo la sigo amando, debo tener celos.

Me acerqué a Ned que estaba revisando su maleta antes de meterse en la fila. - ¿viste cómo estaban juntos viendo películas? no puedo creer que soporte estar con él - hablé molesto mirando a Brad

- Peter, no es el fin del mundo. Sólo estaban pasando un tiempo divertido, eso significa que vayan a ser algo - me explicó. Ambos volteamos hacia ellos.

- Alaia, ¿podrías prestarme tu teléfono para llamar? el mío quedó sin batería -preguntó Brad, ella asintió y se lo entregó. Besó su mejilla - ¡gracias!

- ¿Porqué hizo eso? - pregunté histérico - él no tiene derecho a besarla así - iba a caminar hacia allá pero Ned me jaló de la mochila y casi caigo de espaldas

- Cálmate, ¿okey? no puedes golpearlo como si nada. Alaia y tú no son nada. - me recordó - además, debes dejarla en paz, ella trata de disfrutar sus vacaciones lejos tuya. Peter, por favor.

- ¿Ya tienes todo, bebé? - preguntó Betty acercándose a él. Le entregó su bolso - aquí tienes lo tuyo

- Gracias bebé. - agradeció mirándola enamorado. Betty sonrió de igual forma y se fue, Ned me miró

Lo miré confundido- ¿y eso qué fue? - pregunté - Ned, se suponía que seríamos dos solteros, yo con un reciente rompimiento. Dijimos que NADA de novias.

- ¿"Nada de novias"? en todo el viaje te la has pasado celando a Alaia, Peter. - rodé los ojos. Abrí mi boca para hablar - no me digas que es tu obligación porque no lo es.

Suspiré.

- Es difícil, Ned. Cuando te enamoras de verdad es complicado, tener una relación ES complicado. Sientes como si todo lo demás no importara y... -volteé a ver a Alaia, que reía con Betty - ella se convierte en tu mundo y en lo único que te interesa enserio.

- Ay, ya deja la cursilería. - se quejó - mejor vamos, deben revisar nuestras maletas.

NARRA ALAIA

Dejé mi maleta al frente de la señora italiana para que revisara mi maleta, la abrió y se encontró con mi traje, pero en forma de maleta. Me miró con una ceja alzada y sonreí nerviosa mirándola. ¿Qué mierda le digo? ¿"ah, es mi traje súper avanzado por si tengo que ayudar aquí en Europa"?

- Cosas de una Stark - me encogí de hombros nerviosa. ¿Qué? no me culpen, fue lo primero que se me vino a la mente

Terminó y cerró la maleta. La tomé y me fuí con Betty y mis demás compañeros. Caminamos por el aeropuerto para salir e irnos, no sé qué haríamos ahora. Salimos del gigantesco lugar llegando a un pequeño bote que nos llevaría a nuestro hotel, me subí con ayuda de un señor amable y le agradecí en Francés. Una de las principales ventajas de ser de Europa es que puedo hablar Francés.

Viajamos por el agua azul de Venecia, todo era muy lindo. Betty se tomaba fotos a cada rato con Ned, creo que ellos dos tienen algo. Volteé detrás mío viendo los edificios pero pillé a Peter mirandome, quitó la mirada enseguida haciéndose el distraído. Quité mi mirada también. Tal vez debería ser menos grosera con él, siento que soy egoísta.

El bote paró en el hotel, al parecer lo estaban remodelando. Bajamos y todos entramos, por accidente, el maestro Harrington pisó un hueco lleno de agua. Al parecer se estaba hundiendo el hotel.

- ¡De acuerdo chicos! ¡vayan a sus cuartos compartidos y prepárense porque iremos al museo de Da Vinci a las tres! - nos gritó el maestro Dell.

Nos entregó una llave. Betty tomó mi mano y subimos hacia las escaleras para buscar nuestras habitaciones.

[...]

Estábamos en una gigante plaza al frente del museo, habían muchas personas y pequeños puestos de pintar y esas cosas típicas de Venecia. Le pagué a un señor para que dejara jugar con las palomas junto con Betty, me gustan las palomas. Varias de ellas se subieron a mis brazos y me hacían un poco de cosquillas, y sí, otra vez ví a Peter mirándome desde lejos, pero después se fue.

Se acabó el tiempo de jugar con las palomas. Betty se fue con Ned. Decidí ir a explorar un poco. Me metí por los callejones viendo un montón de tiendas hermosas donde vendían collares, pulseras, etc. Salí del callejón llegando a un pequeño puente poblado de gente y encontré a Peter caminando con una bolsa en la mano. ¿Debería hablarle? quizás sí, quizás no. Me maldigo a mí y a mi cuerpo impulsivo

- Hola. - saludé llegando a su lado, él enseguida escondió la bolsa y abrió los ojos un poco mirándome - ¿qué haces?

- Emmm... Nada. - murmuró sonriéndome nervioso - ¿y tú? ví que... Brad te hablaba en todo el camino aquí desde que se encontraron en Nueva York

- Sólo me preguntaba cosas sobre tecnología y eso - me encogí de hombros. Empezamos a caminar por el pequeño puente

Un hombre con varias rosas en la mano se cruzó en nuestro camino, Peter lo miró confundido sin saber entender lo que decía. - grazie, signore (gracias, señor) - le hablé. Él asintió y se fue

- ¿Sabes hablar Italiano? ¿desde cuándo? - preguntó el arácnido con el ceño fruncido

- ¿Te tengo que recordar que soy de aquí de Europa, Peter? - le pregunté de regreso con una sonrisa obvia

Seguí caminando dejándolo atrás, él se apresuró y me siguió. Llegamos a la orilla del puente donde había un agua hermosa, me agaché y la toqué sintiendo su temperatura relajante. Ví que empezó a salir espuma de ella de un momento a otro y fruncí el ceño, miré al frente.

De un momento a otro el agua explotó y todos empezaron a gritar y a correr asustados. Me levanté y me eché para atrás al ver que una criatura gigante se formaba. - ¿qué es eso? - pregunté a Peter asustada

- No lo sé pero tienes que irte y sacar a todos de aquí. - me respondió. Ned llegó con nosotros

- ¿Y tú qué harás? ¿dónde está el traje? - preguntó el gordito mirándolo

- Dejé el traje en el hotel, Ned.-contestó - váyanse. Ya. Alejen a todos del agua.

Le hicimos caso y salimos corriendo, esa cosa de agua estaba aumentando cada vez más y destruía todo. Mis compañeros y yo corrimos por los callejones tratando de huír lejos de aquél lugar para refugiarnos. No podía ayudar, si exponía a mi traje o a mí, pondría en peligro a mis conocidos.

- ¿Qué es eso? - gritó una chica del grupo señalando al cielo

Miramos y había un hombre con capa roja volando con una burbuja en su cabeza, voló alrededor del mounstro lanzando rayos verdes. Seguimos corriendo cuando la cosa gigante de agua empezó a pelear otra vez, fijé mi vista en el reloj de piedra y ví a Peter (sin su traje) poniendo telarañas para que no se cayese. Se estaba esforzando demasiado. Me alejé un poco de la gente.

- Karen, manda propulsores a la torre del reloj en la plaza en dirección oeste, ya. - hablé rápido por el comunicador en mi oído

- Enseguida, Alaia. - cortó la comunicación

Regresé con mi grupo y en un segundo habían propulsores dando fuerza por el lado en que estaba Peter, nadie se dió cuenta de ello ya que estaban concentrados viendo al nuevo superhéroe en acción tratando de derrotar al gigante de agua. Después, el mounstro se desvaneció volviéndose agua normal. Todos empezaron a gritar y a aplaudirle al hombre que había aparecido de sorpresa. Yo simplemente suspiré y pasé una mano por mi cabello.

Creo que sí fue buena idea haber traído mi traje al viaje.

Dos capítulos en un día porque no he actualizado :v

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