Narrador omnisciente

Alaia tomó la bandeja que se encontraba en la barra de comidas. Le ha parecido muy divertido estar en la escuela de Nueva York, las personas son agradables y ya ha hecho varios amigos. Luego de tomar la comida se dirigió entre las mesas para sentarse, vió a Peter y a Ned sentados en una, se dirigió hacía allá.

— Hey, chica nueva — La llamaron, voltea hacia una mesa a su derecha — ¿quieres sentarte? tenemos curiosidad sobre tí.

Asintió algo indecisa y se sentó al frente de la morena, la cual la mira con una gigante sonrisa en el rostro.

— Soy Liz Toomes, ¿y tú?

— Alaia Stark. — se presentó de igual forma

Mientras ellas hablaban, Peter no podía quitarle el ojo encima a Alaia, quién, por su parte, se encontraba hablando con Liz, el interés amoroso de Peter. O eso cree él.

— ¡Peter! — Peter reaccionó ante el grito de Ned que lo está llamando desde hace un buen rato — ¿me estás escuchando? estás en un estado de shock.

— Sí, sí ¿qué decías? — Preguntó todavía un poco distraído

— El traje de Spiderman está de lujo, pero supongo que el señor Stark no querrá hacerte más mejoras porque a cada rato te regaña por no hacerle caso — comenta comiendo de su yogurth

— De acuerdo... — Peter siguió mirando a Alaia

Ned mira a su amigo y después a la chica, así repetidas veces. Lo mira con picardía. — ¿Te parece linda?

— Es muy... Bonita. — Peter suspiró. El señor Stark me va a matar.

— Deberías hablar más con ella, hombre. Tal vez tengas chance. Sé que la acabamos de hablar con ella pero conocerla desde ya es una oportunidad.

— Ned, una chica rica y linda como ella no se consigue tan fácil. Es como la ley de la termodinámica.

— Deja tus charlas químicas y simplemente hazlo, vamos, inténtalo. — animó — ¿O sigues enamorado de Liz?

— Liz es muy linda, me gusta desde hace un buen tiempo, lo admito. Pero desde que Alaia llegó... No he podido pensar en otra cosa que no sea ella, es como si Liz hubiera desaparecido del universo en un instante y Alaia hubiera tomado su lugar.

— Parecen unos acosadores. — Ambos voltearon a su derecha

En su misma mesa, se encontraba la chica de rizos mirándolos con burla y discreción. A Michelle le hacía gracia molestar a la pareja de mejores amigos ya que le parecían absurdos, ridículos y completamente nerds.

— ¿Y qué te interesa a ti? — Preguntó Ned

— Tal vez porque están hablando más alto de lo normal, y a decir verdad no quiero escuchar más comentarios sobre la muñeca que están viendo, aunque no me importa

— ¿Y porqué te sientas con nosotros si no te interesa? — Preguntó Peter confundido

— Porque no tengo amigos. Además, ustedes son inútiles y escucharlos hablar sobre la nueva barbie de la escuela, es divertido. Nunca tendrás un chance, Peter. — tomó sus cosas y se levantó para irse

Ned suspiró y abrió el paquete de su comida. — Decídete Peter y punto. Aunque no puede gustarte alguien que apenas conociste en la mañana, o tal vez sí— Comió su hamburguesa

Peter regresó su vista a Alaia, quién ya no se encontraba hablando con Liz. Él se asustó, si le pasaba algo a Alaia el señor Stark lo mataba ya que seguramente ya él lo encargó como su guardaespaldas en la escuela y en las calles. Tenía que estarla vigilando con cuidado.

— Iré a hacer algo. — avisa Peter y corre fuera de la cafetería con su mochila

Empezó a buscarla por los salones, también por los baños aunque no pudiese entrar. Alaia no se encontraba por ningún lado. Llegó al último salón, la biblioteca, abrió la puerta e inmediatamente encontró a Alaia sentada en una de las mesas con un libro

NARRA ALAIA

— ¿Qué haces aquí? — Alzé
mi mirada encontrando a Peter sentado a mi frente

— Bueno... Uno de los libros que llevabas esta mañana me llamó la atención y decidí leerlo en el descanso porque no tengo nada qué hacer— murmuré, él asintió. 

Seguí leyendo el libro. Era interesante y tenía partes buenas de lectura, me gustaba.

— ¿Alaia?— Peter me llamó, le miré — me preguntaba si algún día nosotros podriamos... Estudiar química en nuestras casas, en la mía no ¿en la tuya?.

— No sería un problema, me encantaría.

— ¿T-Tu padre no se molestará? — Preguntó con algo de miedo

— Mi padre no es entrometido con mis cosas jamás. No te preocupes, todo estará bien y no interrumpirá — lo miré a los ojos, dí mi sonrisa más sincera

Noté que las mejillas de Peter se tornaron levemente de un color rojizo, haciendo que las mías también se pongan así al comprender lo que estaba pensando.

— Pero claro que no iremos a hacer nada malo, simplemente haremos tarea, estudiar y listo. — susurré con bastante vergüenza

La campana de las clases sonó.

— Será mejor que me vaya. — Dije recogiendo mi mochila con la mayor rapidez del mundo — Adiós.

Empecé a caminar e intentar de ahí con la vergüenza siguiéndome. Trataba de no voltear para atrás para ver a Peter, lo que había dicho se salió de contexto demasiado y creo que di a entender otra cosa. Gracias campana.

[...]

— ¡Alaia! — Me llamó papá desde la sala del penthouse. Cierro mi libro de ciencias levantándome del sofá y asomé mi cabeza un poco para mirarlo

— Estoy haciendo una tarea muy importante, ¿sucede algo? — Pregunté confusa.

— Vístete bien y quítate esos pantalones anchos, alguien vendrá a visitarnos.

— ¿Es de negocios o...?

— Digamos que es un viejo amigo de la empresa. Viene a cenar. Hubieron problemas entre nosotros así que te agradezco que no preguntes nada acerca de nuestros negocios.

Asentí, papá sabe que soy muy curiosa. Me dirigí a mi habitación y busqué un vestido que ponerme, al terminar de alistarme, escuché voces en la sala de la casa y caminé afuera. Un hombre alto, de cabello rubio, ojos azules y con traje se encontraba hablando con mi padre

— Alaia, ven aquí. — Me indicó papá al notar mi presencia detrás de la pared

Me paré a su lado, al frente del hombre. Él me miró con curiosidad. No lo sé pero algo en él se me hacía conocido o quizás simplemente lo ví en una revista famosa o algo así.

— Ella es Alaia, mi hija, acaba de regresar de Londres con Elena, la mujer de la que te hablé — me presentó papá — Alaia, él es la visita que te dije. Es un amigo mío y trabajamos juntos desde hace varios años.

— Un gusto.

— Soy Steve Rogers. Tony y yo somos socios... Nuestras empresas trabajan juntas. — Se interrumpió a sí mismo, me pareció bastante extraño pero no le di importancia

Asentí. Regresé a mi habitación como papá me lo pidió y me acosté en la cama completamente aburrida a seguir con la dichosa tarea que tenía. Estaba por cambiarme con la pijama cuando un mensaje llegó a mi teléfono. Me senté en la cama y revisé.

¿Haces algo?  - Peter.
09:23 pm ✔✔

Sonreí al preguntarme cómo conseguiría mi número. Tal vez preguntó a alguien sobre mí.  Admito que Peter es extraño e inquietante, hace cosas que no me convencen del todo además de que se comporta de forma rara.

Papá está con un hombre llamado Steve Rogers en la sala. Debe ser importante de lo que están hablando. Estoy con la tarea.
09:27 pm ✔✔

¿Steve Rogers? Su conversación a de ser buena
09:29 pm✔✔

Supongo...
09:30 pm✔✔

Alaia, yo me preguntaba si te gustan los cómics, ya que te gusta leer...
09:32 pm✔✔

Sí, un poco de eso, ¿porqué?
09:41✔✔

Quería regalarte algunos porque... Sé que te gustan las cosas que en cierta parte a mí me gustan también. Y pensé que sería una buena idea darte algunos de mis mejores cómics.
09:47 ✔✔

Eh... Sí, claro ¿por qué no? es muy amable de tu parte, Peter. Me encantaría
09:50✔✔

Bueno,entonces... Te las llevaré algún día
09:51✔✔

Okey, no hay problema... Debo terminar la tarea de mañana, perdón, buenas noches.
09:55✔✔

Buenas noches :)
10:00✔✔