"IF WE'RE CAUGHT IN A WAVE. BABY, WE'LL MAKE A WAY. YOU COULD PUT AN OCEAN BETWEEN OUR LOVE, LOVE, LOVE. IT WON'T KEEP US APART."

Peter y yo nos sobresaltamos un poco al escuchar un grito asustado proveniente de la planta inferior. Morgan. Corrimos fuera de mi habitación y bajamos las escaleras con rapidez, paré en seco haciendo que el chico chocase contra mi espalda, los policías que estaban al frente de nuestra familia dejaron de apuntarles a ellos para apuntarnos a nosotros. Terminé los escalones y me coloqué al frente de mi hermana, la cual abrazó mis piernas con miedo.

- ¡Manos arriba! - habló un hombre con su arma hacia nosotros. Le quitó el seguro - ¡he dicho manos arriba!

- Atención a todas las unidades, tenemos a los sospechosos bajo margen en la casa número setenta y dos de la calle Morphy - murmuró otro hombre en su walkie-talkie llamando refuerzos.

Me quise mover un poco pero todos me apuntaron enseguida, Peter puso un brazo al frente mío. Una idea llegó a mi mente al ver mi traje en la entrada, detrás de ellos.

- Morgan. - la llamé en un pequeño susurro. Me miró - presiona el botón de mi reloj, ahora.

Ella hizo caso a lo que le dije, mi traje vino volando, golpeó a los policías tumbándolos al suelo y se colocó en mi cuerpo enseguida. Me acerqué a uno al ver que quería disparar y le pegué en la cabeza dejándolo inconsciente como los demás.

- Patrulla 206, ya vamos en camino - escuché que hablaron en el comunicador. Lo pisé destruyéndolo.

- Debemos irnos, la policía viene. - habló Happy. Caminó por el pasillo y abrió la puerta trasera dejando ver el inmenso bosque - síganme, tengo un plan. Pero tendrán que correr.

- Okey, Morgan, tendrás que sostenerte - le avisó mi novio subiéndola a sus hombros. Encendió los lanzadores en sus muñecas.

- ¿Y nosotros cómo iremos? - preguntó tía May confundida. Miré a Pepper y ella asintió.

Fue corriendo hacia la habitación, duró unos dos segundos y después volvió con su traje que le había fabricado mi padre. Escuché las bocinas de los autos de la policía, tomé a Happy de los hombros sin avisarle y salí volando de casa. Detrás mío venía Pepper con May y Peter con Morgan. Volé entre los árboles para llegar al lugar que el guardaespaldas me indicó, me detuve y bajé al suelo.

- ¡Ay, Dios mío! ¡no volveré a hacer eso nunca! - gritó eufórico y asustado, rodé los ojos, los demás llegaron. Suspiró para tranquilizarse. Se acercó al suelo y quitó hojas que tapaban una... ¿Escotilla de metal?

- ¿Qué se supone que es eso? - preguntó Peter robándome las palabras de la boca, con mi hermana en sus brazos

- Esta pequeña fortaleza la construyó Tony durante estos cinco años que pasaron por el chasquido, quiso tener una entrada de emergencia por si pasaba algo. - nos contó

- ¿Cómo es que ni yo lo supe? - preguntó la rubia confusa

- Lo hizo a escondidas, mami. - respondió Morgan. La miré con el ceño fruncido - papi me contó que la estaba construyendo, fue una promesa de los dos.

Happy dió varias vueltas a la escotilla y se abrió, dejando ver unas escaleras un poco oscuras. Las bajó. Nosotros fuímos detrás de él, cerré la escotilla detrás mío una vez que entramos.

- Esta mierda está tan oscura, no veo nada.

- ¡Peter Benjamín Parker, ten más respeto!

- Lo siento, May.

Reí. Las luces se encendieron, el gordito abrió otra puerta de metal que había al frente y pasamos. Era un lugar muy grande, con luces en el techo, muebles, había una cocina y una sala con televisión, videojuegos y todas esas cosas. También habían cuatro puertas apartadas que supongo que eran las habitaciones. Era todo un piso. Era un apartamento bajo tierra.

- Guau... - exclamó May sorprendida mirando todo a su alrededor - ¿cómo es que nadie ha encontrado este lugar?

- Tony lo hizo sin autorización del gobierno, para que no tuvieran registros de la vivienda y así pudiéramos utilizarlo en una situación como esta. Es nuestro escondite por ahora. - contestó Happy

- Qué escondite tan loco... - murmuró Peter a mi lado

Me quité mi traje, caminé por el lugar al igual que los demás. Me acerqué a la cocina, todo estaba bastante limpio y como nuevo, abrí la nevera, que había sido construída por mi padre para que los alimentos no se pudrieran hasta por casi un año, estaba repleta de comida. Salí de la cocina, bajé las pequeñas escaleras de madera para entrar a la sala, donde Morgan se puso a ver televisión.

- ¿Cómo haremos para dormir? - preguntó Pepper - solo hay cuatro habitaciones, nosotros somos seis.

- Dos grupos pueden dormir en parejas. - respondió Happy - tú vas a dormir con Morgan en una, May en otra, yo en otra y Peter y Alaia en una.

- No veo problema en compartir habitación. - dijo el arácnido encogiéndose de hombros sin importancia - pero... ¿Y nuestra ropa? no tenemos nada de pertenencias aquí.

- Los dos podemos ir por las cosas de todos, tendremos cuidado con la policía en nuestros hogares - le expliqué. Asintió.

- Okey... Se está haciendo de noche, más específicamente las siete así que... ¿Tienen hambre? puedo cocinar para todos - propuso el guardaespaldas

- Yo te ayudaré. - se ofreció tía May. Nos miró. - ustedes pueden ir adaptándose al lugar mientras cocinamos

Ambos se fueron a la sección de la cocina. Yo me senté en el sofá para empezar a tratar de distraer a mi hermana de los problemas.

[...]

Estaba en mi nueva habitación viendo mi teléfono, no tenía nada qué hacer. Eran las diez de la noche. Morgan y los demás ya se encontraban durmiendo, Peter está cepillando sus dientes en el baño luego de ponerse su pijama (que son sus pantalones y la camisa básica que tenía puesta), mi pijama era mi short y una blusa cualquiera por no tener nada aquí.

Mi novio salió del baño una vez que acabó, dejamos la puerta abierta por si acaso pasaba algo. Se tiró a mi lado en la cama, boca arriba, mirando al techo. Yo me quedé todavía sentada mirando las noticias, todo era sobre nosotros.

- ¿Crees que esto mejore? - pregunté sin apartar la vista de mi celular.

- No puedo prometerte nada. Realmente no sé si podremos estar tranquilos aunque sea un minuto del día - murmuró aún con su vista al techo

Apagué el aparato y lo dejé en el mesón de al lado, también apagué la linterna dejándonos a completa oscuridad en la habitación. No habían ventanas ni nada por lo que no había luz. Apoyé mi mejilla con mi mano poniéndome de lado.

- Gracias por cuidar de Morgan - susurré mirándolo. Giró su vista hacia mí un poco.- las cosas están difíciles últimamente con esto

- Oye, no hay problema. - tomó mi mano libre entrelazándola con la suya - ustedes son lo que más debo proteger en este momento con los problemas que hay.

Sonreí sin mostrar mis dientes.

- ¿Quieres ir a la escuela mañana? - preguntó - podríamos hablar con Ned para que sepa dónde estamos y no le diga nada a la policía. Es seguro que van a interrogar a algunas personas conocidas nuestras.

Asentí. - ¿porqué crees que la policía quería a May, Pepper...? - pregunto confundida - se supone que nos están persiguiendo a nosotros, no a ellos

- Lo más probable es que crean que nos ayudaron a "construir" los proyectores para matar a Beck - murmuró. Suspiró. - tenemos que encontrar una forma de declarar nuestra inocencia

- No creo que sea tan fácil...

- Mejor cambiemos de tema - propuso, me sonrió levemente con dulzura - hablemos de nosotros, hace tiempo que no lo hacemos, ¿sabes?

- ¿Y de qué quieres específicamente que hablemos de nosotros? - pregunté alzando una ceja

- Vamos a contarnos cosas, para olvidar todo lo que hicimos hoy - pausó - como por ejemplo... ¿Cuántos novios tuviste en Londres?

- ¿Enserio quieres saber eso? - asintió - Peter... - me callé e hice una mueca negando con mi cabeza - supongo que unos cuatro desde los catorce años.

- Mmmm, interesante... - me dió una expresión de interés. Rodé los ojos. - ¿y con ninguno has llegado a tener casi tener relaciones?

- ¿Sabes qué? vayamos a vamos a dormir, ya me aburrí con estas preguntas.

Me dí la vuelta tapándome con la sábana blanca de la cama poniéndome de lado, dándole la espalda, sentí que Peter también se acomodó y se acostó a mi lado. Me quedé unos segundos en silencio.

- Y no, no he llegado tan lejos con nadie más que no sea contigo.

Escuché que rió levemente, sus brazos abrazaron mi cintura por detrás, pegó mi espalda a su pecho. Cerré mis ojos empezando a dormir y pronto sentí la respiración de mi novio contra mi nuca.