Narrador Omnisciente:

Estabas de lo más tranquila en tu cama, ya eran las 10 de la noche y tenías que ir a dormir.

Estas tan plácidamente dormida cuando tu tono de llamaba empieza a molestar.

Miras la pantalla y vez el contacto de tu novia, ¿que le habrá pasado? Fue lo primero que llegó a tu cabeza.

Feliz Cumpleaños!! -

Se escucho un grito de felicidad desde el otro lado de la línea

- Solecito todavía no es mi cumpleaños

Le respondiste bajito, y con dulzura para que no se sintiera mal

Claro que si! Mira la hora -

Alejaste el teléfono de tu oreja y efectivamente era las 12 am, osea que ya era tu cumpleaños.

- Gracias pero no tenías que llamar a esta hora

Eso no es todo!! -

Escuchaste como algo chocó contra la ventana de tu cuarto, te levantaste y viste a tu novio afuera de tu casa.

Arreglate y sal, te tengo una sorpresa -

No te dio ni tiempo de contestar ya que te había colgado.

Te pusiste lo mas cómodo que encontraste, y una vez saliste a escondidas de tu casa Yuuji te recibió con un abrazo y un beso.

Te empezó a guiar, y sin darte cuenta estaban subiendo una colina.

Y en la cima viste como había una manta en el suelo, y junto a este una canasta.

- Te acuerdas de la carta - avergonzaba asentiste - Este es tu regalo de cumpleaños -

Este se sentó en la manta y te hizo una seña para que te sentaras entre sus piernas.

Sacó de la cansaste un termo con dos tazas y después un topper.

Te sirvió una taza de chocolate caliente, y sacó del topper unas galletas que parecian estar un poco quemadas.

Seguramente el las había hecho, después de bajo el cierre de su chaqueta y los junto a los dos con ella.

Alzaste la mirada al cielo y pudiste ver una lluvia de estrellas.

- Según el pronóstico habría un lluvia de estrellas, espero te guste tu regalo de cumpleaños -

- Gracias Yuuji... -

Uniste sus labios con los tuyos en un beso tierno. Definitivamente de todas las cosas que él rosita había hecho por ti esta era la mejor.

...

Un mes había pasado desde tu cumpleaños y... Las cosas no iban nada bien para Yuuji, estaban a tan solo dos dedos para la ejecutar al rosita

Yuuji estabas más nervioso que de costumbre. Todavía no sabia como darle esta noticia a su novia.

Estaba tan distraído con sus misión o simplemente prestandole atención a su novia que no se dio cuenta que él tiempo pasó rápido.

Gojo, Megumi y Nobara habían aconsejado al chico que hablara del tema con su novia.

Pero este se negaba rotundamente.

- Y si.. Me deja después que le cuente - volvió a poner otras excusa el rosita -

- Itadori, _____ te ama y dudo que te odie o te deje - habló el azabache -

- Pero.. -

- Ya callate mocoso - le regaño Sukuna que ya se había cansado de las excusas de su recipiente -

- Hoy iras a su casa no? - pregunto Nobara -

- Oh si, le dije que quería hacer dulces con ella y aceptó -

- Solamente dile y ya - habló aburrido Megumi -

Mientras tanto tu estabas frente al computador buscando lugares bonitos donde hacer un día de campo.

Mañana harían un año de novios, y como excusa le dijiste a Yuuji que te ayudara a hacer dulces.

Claro todos ellos tendrían que ser guardados.

No querías ir al cine, pensaste en la posibilidad de ir a jugar videojuegos, pero la descartaste, ya que siempre terminaba ganándole al rosita y este se deprime.

Prácticamente tu tiempo se fue buscando en lugares o actividades que hacer con tu novio.

Dieron las seis de la noche y Yuuji había llegado a tu casa.

Le abriste y lo recibiste con un abrazo y un beso como te costumbre, y los dos fueron a la cocina.

A Yuuji le pusiste un mantel que decía "la mejor mamá del mundo"

Y tu te colocaste el opuesto el que decía "el mejor papa del mundo"

Empezaron a cocinar pero notaste como tu novio estabas distraído, paraste todo lo que estabas haciendo lo llevaste a la sala osea hablar.

- Y me vas a decir -

- El que? - pregunto confundido el rosita -

- Has estado actuando extraño, ¿donde quedó mi novios bromista? - preguntaste -

- Es que... - se rasco la nuca nervioso - tengo algo que decirte -

- Dime tengo tiempo - este no se noto muy convencido y solo agachó la cabeza - Solecito, te voy a apoyar en cualquier problema que tengas, solo no cargues con todo tu solo -

Este alzó si vista y te vio con una sonrisa para después tomar aire y empezar a hablar.

- Verás hay algo sobre las Maldiciones que no te dije - habló este y la chica novio su cabeza tipo búho en modo de confusión - Cuando tengan todos los dedos... Pues me... -

Si última frase no lo pudiste escuchar bien gracias a que hablo muy bajito.

- Solecito no te escuche -

- Me van q ejecutar! - exclamó sin miedo alguno -

Ella abrió los ojos de par en par al escuchar la decoración de su pareja.

- ¿Q-que? -

- Me van a ejecutar - volvió a decir pero sollozando - Y-yo no q-quiero dejarte s-sola -

Este te abrazo con fuerza, no te quería soltar por nada del mundo empezaste a acariciar su cabello en forma de consuelo.

Tu hombro cada vez se estaba humedeciendo aún más, ver quebrar a Yuuji fue como una punzada al corazón.

Y fue cuando explotaste con el y lloraste junto con el, querías ser fuerte, querías ser fuerte por el.

Pero el solo pensar en la palabra "ejecutacion" y que eso tenía que ver con Yuuji era demasiado.

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