━━ meet me at the APT

📍 chaehee's living room, chaehee's apartment, seoul, south korea 

   —Deja los snacks en la alacena —la antes pelinegra apuntó la cocina del apartamento, mientras se encargaba de organizar los cojines en la sala para que se vieran decentes.

De mala gana, Hueningkai rodó los ojos, pero aún así caminó hacia la cocina, empezando a sacar una serie de snacks como patatas fritas, dulces, gomitas y más víveres que Ari había comprado de una gran bolsa de compras, para poder acomodarlas en la alacena del apartamento de su hermana mayor y que fuese habitable por un tiempo. La maknae siguió organizando cosas, con el corazón latiéndole muchísimo pues invitaría a Hyunjin a aquel lugar para que vieran películas o cosas así. Después de que él la llamara y Ari hubiese propuesto que se vieran, se había arrepentido, llorado y luego, se había apresurado a llamar a la persona en que más confiaba a pesar de todo. 

—Entonces, ¿solo verán pelis? —preguntó el chico rubio cruzándose de brazos mientras elevaba una ceja. 

Ari levantó la cabeza de la mesa ratona en la sala y miró al chico en la cocina del apartamento con la cabeza ladeada. 

—Ese es el plan —ella sonrió nerviosamente—. ¿Por qué? 

It's giving netflix and chill —murmuró el chico, levantando las manos. 

Ari ladeó la cabeza de nuevo, con el ceño fruncido, mientras intentaba entender a qué se refería, entonces, su cabeza hizo click y se sonrojó furiosamente. La chica casi rubia tomó un cojín que se había esmerado para que estuviese perfecto y en su lugar y luego se lo lanzó a Kai, quién lo atrapó en el aire. 

—¡¿Cómo vas a decir eso?! —chilló Ari. 

—¡En mi defensa! —empezó Kai, elevando su dedo índice completamente indignado—. ¡Es lo que parece!

La chica hizo un puchero y sentó en el sofá, rendida. Kai, en la cocina, frunció el ceño ante aquella reacción. Si era honesto, esperaba que gritara más, que se enojase más. Era curioso, pensaba Kai, mientras se acercaba al sofá y se sentaba al lado de ella, la primera vez que había conocido a Ari, habían hecho click, porque ella era extremadamente extrovertida, hablaba muchísimo y era ruidosa, eso había sido lo que Hueningkai necesitaba. Él siempre había sido mucho más callado y reservado, pero al pasar tiempo con ella, las mañas se le habían pegado. De todas formas, no dejaba de pensar que algo le estaba pasando a su mejor amiga. Era obvio que el debutar y empezar a recibir tanto hate había apagado su chispa, pero más que triste, se veía nerviosa y preocupada.

Kai pensaba que era Hyunjin.

Para él, Ari era un libro abierto y el estadounidense no pasaba por alto lo mucho que le afectaba cualquier cosa que tuviese que ver con el bailarín de Stray Kids.

—¿Qué pasó? —preguntó Kai mientras giraba la cabeza para ver a Ari.

—Tengo miedo —respondió sin mucho reparo. Cuando se trataba de Kai, ella no lo pensaba mucho—. ¿Viste lo que pasó con Sunmi unnie?

Kai asintió lentamente.

—¿Todo el escándalo con Bangchan? —preguntó en respuesta.

—Mhm —Ari ladeó la cabeza para mirar al maknae de TXT—. Mira, Sunmi unnie y Bangchan son idols impecables y pocas veces han estado envueltos en polémicas, pero eso no quita que ahorita mismo los estén cancelando en twitter y en cualquier red social. Sí, es cierto, salieron juntos, pero ¿qué importa? ¿por qué...?

—¿Te da miedo que te tiren hate porque ahora sí te gusta Hyunjin? —terminó el rubio elevando una ceja.

Ari abrió la boca, la cerró, infló sus mejillas, frunció el ceño y por último se sonrojó hasta la coronilla. La chica cruzó los brazos y se enfurruñó en su lugar.

—Yo no diría que me gusta...

—Bueno, te atrae y quieres salir con él.

—No es que quiera salir con él... —Kai bufó—. Mira, te lo pongo así: Hyunjin es como..., bueno, como el pastel.

—¿Pastel? —el rubio alzó ambas cejas.

—Ajá, pastel —ella suspiró—. A ver, yo me siento atraída al pastel, eso no significa que siento la necesidad de salir con un pastel.

—Sin embargo, lo invitas a una cita secreta en el apartamento de tu hermana mayor —ella abrió la boca, lista para defenderse, pero Kai se apresuró en seguir hablando—. Además, acabas de confirmar que te gusta. Veo fallas en tu lógica, Riri.

—Que no me gusta —dijo, pero ni ella misma se lo creyó.

Un silencio denso cayó sobre ambos. Ari tenía ganas de hacerse bolita mientras mil pensamientos la ahogaban en su cabeza. No sabía que sentía con respecto a Hyunjin. Constantemente, su mente volvía una y otra vez a la cita que habían tenido en esa cafetería y el simple hecho de pensar en eso, hacía que su corazón se sintiera caliente y que sus labios no dejasen de sonreír. Pero tan solo se habían visto una vez y, aunque hablaban a diario, ¿sería suficiente para decir que le gustaba Hyunjin?

Estaba confundida y muy asustada. Tenía miedo de las reacciones del público, tenía miedo de perjudicar a las demás chicas de WONDER y, sobre todo, miedo de que Hyunjin ni siquiera pensara en ella de esa forma. Él decía que ella era su celebrity crush, pero de ahí a realmente conocerla y pensar en quererla de verdad, había un largo camino.

—Tienes cara de que estás pensando cosas deprimentes —Kai le dio un golpecito en la frente—. No te mates esa cabecita tuya. Hoy solo disfruta tu cita y si terminan en otras cosas...

—¡No sigas por ahí, Kai Kamal Huening! —la chica chilló con horror cubriendo sus orejas, mientras el rubio soltaba una carcajada.

—Ya, ya —él calmó sus risas—. Como si no quisieras, sucia.

—¡Ya bastaaa!

Kai sonrió suavemente al verla tan roja como un tomate. Se sentía medianamente feliz de verla regresar un poco a su estado de ánimo normal, gritando, riendo, siendo la batería de BigHit. El rubio de dejó caer sobre el respaldo del sofá, mirándolo de reojo a su mejor amiga quién aún luchaba con las cuelas de la vergüenza por los comentarios que había hecho. Huening le dio un pequeño empujón amistoso con el hombro, llamando su atención. Quería ser un buen amigo, quería apoyarla, demostrarle que estaba ahí para ella.

—Hey, Riri —llamó. La pelirrubia giró la cabeza hacia él con un puchero en los labios—. Si estás tan preocupada por lo que piensen los demás... ¿qué hay de lo que piensas tú? 

El puchero en los labios de la cantante se desvaneció en una mueca de sorpresa por el repentino cambio de tono. Pocas veces Kai se ponía de aquella forma, serio, con voz suave, como si hablara de un tema sumamente importante. El hecho de que su mejor amigo tomase aquella situación como un tema importante le hizo sentir un picor en los ojos.

—¿Qué quieres decir? —preguntó Ari, parpadeando varias veces. Kai aún no había dicho nada sentimental y ella ya quería ponerse a llorar. Era ridículo.

El maknae tomó uno de los cojín que tanto se habían esforzado en acomodar y lo retorció entre sus manos. También se ponía un poco nervioso cuando hablaban de temas importantes.

—Quiero decir que tú eres la única que puede decidir si vale la pena todo este lío. ¿Te hace feliz hablar con Hyunjin? ¿Te emociona verlo? Si la respuesta es sí, entonces déjate de tonterías y disfrútalo. La gente siempre va a hablar, Riri, pero ellos no tienen ni idea de quién eres en realidad —el silencio se instaló por un momento mientras Ari procesaba las palabras de Kai, entonces él decidió continuar—. Sé que es delicado para ti, pero... si es lo que realmente quieres, deberías arriesgarte. Conozco a Hyunjin, es un buen tipo y por el live de 3RACHA, se nota que si le gustas.

La menor volvió a hacer un puchero y luego se lanzó a los brazos de su mejor amigo. Si era honesta, eso era lo que necesitaba: alguien que le abriera los ojos.

—Me hace feliz —murmuró finalmente, su voz apenas un susurro. 

Kai sonrió satisfecho al escuchar aquella respuesta y pasó un brazo por su espalda, acercándola un poco y correspondiendo el abrazo. 

—Entonces no lo pienses tanto. Solo vive el momento, ¿vale? Y si ese chico no te trata como mereces... bueno, ya sabes dónde encontrarme. 

Ari dejó escapar una risita suave y se separó del rubio, jugueteando con sus dedos de forma nerviosa. Ella infló sus mejillas y luego suspiró.

—Gracias, Kai. No sé qué haría sin ti. 

—Probablemente hubieses huido y dejado al pobre chico plantado. 

Ambos se rieron, y aunque el nerviosismo de Ari no desapareció del todo, el peso en su pecho se alivió un poco.

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ARI'S PHONE 📱

05:45 PM ⏰💬👤... 📶 35%🔋

💬 tienes nuevos mensajes!

wnd in FIREEEEEE!$%!!&%!! • hace 15m
sunnieshine 💫: oigan, alguien baje y calle a los loquitos esos

sunnieshine 💫: quiero deprimirme en paz

bae 🤪: cuales?

bae 🤪: si son los de al lado no quiero, esos me dan miedo

soyita 🍣: boba

soyita 🍣: los únicos que hacen ruidos en el edificio sons tubatu

bae 🤪: cuales teletubis?

sunnieshine 💫: yo creí que la tonta era sooha

soyita 🍣: me siento extremadamente ofendida

bae 🤪: bro 💀

txt + wnd = CAOS • hace 5min
yeonjunnie 🦊: sunnie, estás bien?

soobin 🐰: es que tu eres bobo?

soobin 🐰: obvio no está bien

gyunnie 🧸: oigan, sunmi me procupa

dance maniac 💃: felix dice que no le contesta ni a chan

miss rapper 🤬: y tú desde cuando te hablas con felix?

dance maniac 💃: somos amiguis

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txt + wnd = CAOS
HOY
5:50

yeonjunnie 🦊
sunnie, estás bien?

soobin 🐰
es que tu eres bobo?

obvio no está bien

gyunnie 🧸
oigan, sunmi me
preocupa

dance maniac 💃
felix dice que no le
contesta ni a chan

miss rapper 🤬
y tu desde cuando te
hablas con felix?

dance maniac 💃
somos amiguis

sassy maknae 😈
sunnie no está bien

se quiere deprimir

yeonjunnie 🦊
alguna está en
la casa?

para que se fije
si sigue viva

miss rapper 🤬
ari es la que está
allá

kaicito 🐧
estaba*

leeduh 🤘
NO BASTA LOS
BEBÉS

😭😭😭😭😭😭

QUÉ PRECIOSOS

yeonjunnie 🦊
SUNMIIII

leeduh 🤘
adiós perras

tae (no de bts) 🐿️
por qué sunmi se va?

leeduh 🤘
t quiero tanto tae

ahora si

adiós perras 

soobin 🐰
yo iré a verla 

miss rapper 🤬
nadie va a hablar de
que los dos maknaes
estar por fuera de casa

kaicito 🐧
no

cállate 

igual, yo ya me regreso
soobin-ah no me va a
regañar hoy

ya dije 

dance maniac 💃
y ari?

sassy maknae 😈
* crjjj crjjjj *

oigan, los estoy per... o 

estoy p...ndo por... tunel

* sin señal * 

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Hyunjin había recibido un mensaje de Ari quizás una media hora atrás. Era un solo mensaje sin nada más que una ubicación adjunta y un emoji de calavera. Él tampoco había querido alargar la conversación más de lo necesario, por lo que ni siquiera había respondido el mensaje. Claramente, él no tenía su pase para conducir, por lo que muy a regañadientes le había pedido a Chan que lo llevara, desconfiando de cualquier taxi que pudiera hacerlo. No quería que nadie supiera de sus planes, era cierto, pero entre esas o que un taxista loco lo asesinara, prefería que Chan supiera de sus planes.

Sin mentir, se sentía como un niño puberto cuyo padre llevaba a su primera cita. Lo cual era vergonzoso.

Demasiado vergonzoso.

La ubicación que Ari le había enviado, era en un conjunto residencial. A Hyunjin se le había bajado la presión y había sentido su estómago caer al piso cuando había pensado que era el apartamento de WONDER y estaría ahí, con ella, y 4 chicas que lo asesinarían si algo malo le pasaba a la menor. Luego recordó que Ari había dicho algo sobre el apartamento de su hermana mayor, por lo que descartó su primera opción y entendió que pasarían la tarde en uno de esos apartamentos con ella, pero solos. El bailarín y rapero sentía que en cualquier momento bajaría la ventanilla del auto y vaciaría su estómago por completo, por no mencionar la poco ayuda que le daban las miraditas que le lanzaba Chan desde el asiento del piloto, el australiano esperaba lo peor de aquella cita. Hyunjin apostaría su tratamiento de cabello por eso y ganaría, estaba seguro.

—¿Qué? —espetó Hyunjin, por fin girando la cabeza para mirar a su líder.

Pero Chan fingió una expresión de sorpresa.

—Yo no he dicho nada —se excuso mientras le daba una mirada fugaz a través de sus lentes de sol y regresaba a la carretera.

—No, pero hasta acá puedo sentir tus ganas de hacerlo —el pelinegro bufó con desgana, desviando la mirada hacia el cristal—. Habla antes de que te estalle la vena en la frente.

Chan abrió la boca completamente indignado, luego frunció el ceño y se esforzó en calmarse. Era cierto, a veces se le marcaba una vena en la frente cuando se estresaba muchísimo o quería hablar de algo pero no lo hacía. Odiaba que, para los demás chicos, aquella cualidad fuese tan transparente. El mayor soltó aire y chasqueó la lengua.

—No metas mi vena en esto —bufó. Hyunjin supo que si no hubiese tenido ambas manos en el volante, le hubiese señalado con el dedo índice.

El pelinegro rodó los ojos.

—Ay, ¡pero si la tienes ahí! Tenía que mencionarla.

—Sí, pero... —Chan infló las mejillas, dándole una mirada de reojo, evaluando la situación de nuevo—. ¿Qué necesidad de mencionarlo? —preguntó haciendo su voz más aguda y encogiéndose de hombros. Hyunjin intentó refutar, pero el mayor volvió a interrumpir—. ¿Qué necesidad? No había.

Hyunjin volvió a rodar los ojos, mientras suspiraba, declarándose vencido. Chan rio de forma triunfante al ver que el más alto se había quedado en silencio luego de esa minúscula discusión amistosa. Entonces, el menor miró a Chan con indignación, mientras abría la boca.

—¡Oye! —el menor espetó, mientras fruncía el ceño y apuntaba al mayor con un dedo, casi haciendo una pataleta—. ¡No me cambies de tema, anciano! ¡Dime lo que me ibas a decir!

El pelinegro pudo ver a su líder cerrar los ojos solo por un segundo, pues seguía conduciendo y era peligroso cerrar los ojos. Chan soltó aire y sacudió levemente la cabeza.

—Tan cerca, pero tan lejos —murmuró entre dientes el mayor, para luego reír por lo bajo, mientras frenaba en un semáforo—. No quiero parecer un papá protector, pero ya que insistes... llevas, ya sabes...

—¿Qué? —Hyunjin estaba perdido.

—Ay, no te hagas —Chan lo miró con reproche, pero los ojos negros bañados en confusión le hicieron hacer una mueca—. Protección, Hyunjin-nah, no es tan difícil.

Pero Hyunjin solo se sintió aún más perdido.

—¿Protección? ¿Protección para qué? —preguntó con extrañeza—. ¿Sirve una mascarilla? —de su bolsillo sacó una mascarilla negra—. Es todo lo que tengo para protegerme de los paparazzi.

Chan arrancó de nuevo, cuando el semáforo irradió luz verde. Al escuchar la respuesta de Hyunjin, palmeó su frente con fuerza. Él realmente le diría que con eso bastaba y zanjaría el tema ahí. Sin embargo, debía admitir que si le preocupaba un poco que aquellos dos se juntaran en una casa, sola, donde pasarían juntos y tendrían la libertan de hacer cualquier cosa. Chan pensaba que Hyunjin no era tonto, pero en aquellos momentos necesitaba asegurarse porque le hacía dudar si estuvo equivocado y, en realidad, si era tonto.

—Esa no —respondió—. La otra.

Fueron solo un par de segundos para que Hyunjin por fin pudiera entender a qué se refería Chan. Fue la mirada insistente y el tono precavido lo que le hizo alzar muchísimo las cejas y luego sonrojarse hasta la coronilla.

—¡No! ¡Iugh! —chilló Hyunjin—. ¡¿Cómo vas a pensar eso?! Yo a Ari no la tocaría así, al menos no ahora y ¡menos en el apartamento de la hermana! —se estremeció ante el pensamiento—. ¿Qué clase de depravado crees que soy?

Chan arqueó una ceja, claramente escéptico. No quería dar a entender que ambos eran unos adolescentes sin control, aunque quizá, Ari si lo fuese, pues a penas le faltaban unos meses para cumplir los 20 y ella era quién lo había invitado.

—Solo estoy cubriendo todas las posibilidades —el mayor maniobró el volante, girando a la izquierda—. Mira, no quiero ser el tipo que tenga que consolarte si algo sale mal, ¿vale?

Hyunjin se cruzó de brazos, enfurruñado, mientras Chan se reía bajo su aliento.

—Esto no es una cita así —murmuró Hyunjin—. Solo vamos a ver películas. O jugar juegos de mesa. Te juro que no pienso tocarla de otra forma.

—Claro, lo que tú digas —Chan le lanzó una mirada lateral llena de burla, disfrutando cada segundo del sufrimiento del más joven.

Hyunjin se mantuvo en silencio, ignorando los posibles comentarios que su líder pudo haber soltado por lo bajo. Ya tenía demasiado con toda la situación como para ponerse a pensar en escenarios calientes con la chica que lo tenía hecho un manojo de nervios en el asiento del copiloto del auto de Chan. Él tamborileaba con sus dedos sobre su rodilla, mientras se esforzaba en mantener su mente (que ahora notaba era mucho más activa y creativa de lo que pensaba) fuera de momentos comprometedores con la menor.

—¿En qué piensas? —se burló Chan—. Estás rojo.

—Por amor a Dios —se quejó Hyunjin en un lamento bajo—. Déjame en paz, de verdad. Por favor.

El resto del camino, que en realidad no era demasiado, ambos se mantuvieron en completo silencio. Hyunjin se lo agradeció mentalmente a Chan, pues realmente no iba a soportar más ahí si el mayor seguía cuestionándole sus motivos e intensiones con Seo Ari. Debía ser honesto, por mucho que ella le pareciera atractiva, lo que sentía era especial, era algo que le sacudía el corazón y lo dejaba sin aliento. No se veían mucho porque era casi imposible para ambos encontrar un momento donde estuvieran libres o simplemente donde pudieran salir sin arriesgarse a ser descubiertos y tener un escándalo de citas como Sunmi y Bangchan, pero él sabía que cada vez que la veía en fotos o en videos, sus mejillas se coloreaban de rojo y se sentía feliz. 

Hyunjin sentía que su día estaba completo cuando miraba sus notificaciones y veía que ella le había escrito. Incluso si era una estupidez, incluso si era el link de un reel sobre que la persona cuyo nombre empiece con h te debe un helado, él estaba feliz. Porque Ari era amiga de Hueningkai y aún así le había enviado el reel a él. Era ridículo, pero cualquier cosa que ella hiciera, lo hacía feliz. Tuvo que detenerse en su línea de pensamientos, antes de que le diera un para cardiaco debido a que Chan había pisado el freno suavemente y el auto se había detenido frente a un conjunto residencial bastante bonito y cercado. 

—Bueno, llegamos —dijo el mayor, apagando el motor.

Hyunjin tomó aire profundamente y asintió, como reasegurándose a si mismo que todo estaría bien. El pelinegro bajó del auto, abriendo la puerta primero, con una seguridad fingida. De nuevo, el nudo en su estómago apareció y podía sentir sus manos sudar. ¿Qué le estaba pasando?

—Gracias, papá —soltó con sarcasmo mientras bajaba.

—De nada, hijo. Diviértete y no me hagas abuelo tan pronto —respondió Chan sin perder el todo divertido, ganándose un gruñido frustrado de Hyunjin.

—Eres insoportable —murmuró mientras cerraba la puerta de golpe.

Chan bajó la ventanilla, todavía con una sonrisa divertida en los labios.

—Llámame si necesitas algo —Hyunjin le dio un side eye, causando que la sonrisa de Chan se agrandara más—. Hablo en serio, Hyun. Fuera de chistes, cualquier cosa, me avisas. 

La mirada del más alto se suavizó un poco y asintió con la cabeza, asegurándose de despedirse del líder con una sacudida de manos. Giró sobre sus talones y se acercó al celador del edificio. El hombre lo miró de pies a cabeza, Hyunjin tuvo miedo de que lo reconociera, pero con solo murmurar el apellido Seo, el hombre le cedió el paso dentro del conjunto residencial. Después de revisar unas 10 veces, el mensaje de Ari, encontró la torre y el apartamento al que debía subir. De todas formas, rectificó otras 6 veces para asegurarse de que estaba yendo en la dirección correcta y no se perdería. 

Al subir a la piso 25 de la torre 3, el chico tocó el timbre, reprimiendo una sonrisa cuando escuchó un chillido del otro lado de la puerta, imaginándose qué podría haber estado haciendo Ari para chillar por escucharle llegar. Después de escuchar un par de golpes dentro del apartamento, la puerta se abrió de golpe, dejándole ver a una chica mucho más baja que él, con aquellos ojitos cafés mirándole como si fuese la mismísima gloria encarnada. Ari llevaba unos shorts de jean, junto a un hoodie verde. Sin embargo, lo que llamó su atención fue su cabello, que antes era de un negro denso, ahora era de un tono rubio arenoso. 

—Eres rubia —se encontró diciendo, olvidando el saludo que había practicando desde que recibió el mensaje con la dirección. 

Para su sorpresa, Ari soltó una carcajada sonora y se corrió a un lado, permitiéndole el paso. Tan pronto entró pudo notar un ligero aroma a lavanda que lo relajó un poco, también pudo ver una mesita corrida con las cosas que encima, regadas por el piso. Pudo imaginarse a Ari tropezando con eso antes de abrir la puerta y casi suelta una carcajada.

—Algo así —la cantante se encogió de hombros. La voz de Ari lo sacó de sus pensamientos y regresó la vista a ella—. Pretendo tener el cabello de otro color, pero tenía que acararlo para primero. 

Hyunjin asintió con la cabeza. 

—¡Oh! ¡Antes de que lo olvide! —dijo mientras rebuscaba en su mochila con entusiasmo—. Traje videojuegos: Super Mario Party, Mario Kart, y como sé que te gustan, también Resident Evil 2 y 3 Remake. Ah, y... ¡wow, lindo apartamento!

Ari, que había estado ocupado viendo al chico que sacaba todo de su mochila con el entusiasmo de un niño pequeño, solo pudo sonreír aún más, sintiendo su pecho calentarse al verle. Eran tan adorable que podría besarlo. 

—No conozco el videojuego wow, lindo apartamento. Podemos empezar por ese.

Hyunjin infló las mejillas, finiendo estar indignado. 

—Ja ja. Que graciosa que eres. 

—Lo sé, me lo dicen seguido —la pelirrubia asintió, solemne—. Ahora, ponte cómodo y empecemos con algo que podamos jugar los dos. 

—¿Qué cosa? 

Ari le miró como si fuera la cosa más obvia del mundo. 

—Vamos a empezar conmigo pateándote el trasero en Mario Karts —Ari levantó ambas cejas, sintiéndose orgullosa de su comentario. 

Pero, para la sorpresa de la menor, una sonrisa ladeada y de superioridad apareció en los labios de Hyunjin, quién la observaba como si él supiera algo que ella no. 

—Si eso te deja dormir por la noche...

Ari rodó los ojos, pero no dijo nada más. Antes de siquiera empezar a jugar, ambos se pusieron manos a la obra y trataron de acomodar la sala lo mejor que podían sin distraerse demasiado. Claramente no funciono, pues Hyunjin lanzó un comentario sobre lo bajita que era Ari cuando ella le pidió ayuda para bajar las persianas de la sala, lo que ocasionó que ella le lanzase un cojín y en cuestión de minutos se encontrasen ambos correteando por la amplia sala del apartamento de la hermana mayor de la cantante, lanzándose cojines y riendo. En algún punto, Hyunjin la tomó de las manos, agarrándole las muñecas y obligándole a soltar su siguiente proyectil, el cojín cayó a los pies de Ari y ella levantó la cabeza para mirarle. Su cabello estaba desordenado y su respiración agitada, rastros de las carcajadas aún la perseguían, por lo que se encontraba sonriendo de forma adorable. 

Hyunjin tragó saliva de forma nerviosa. 

—Tienes demasiada buena puntería para ser tan pequeña —se burló, en tono bajo. 

Ari se encogió de hombros. 

—Se lo atribuyo a mis horas invertidas en apuntar zombis a la cabeza —respondió. 

—¿Me acabas de llamar zombi? —Hyunjin soltó en tono indignado, tirando un poquito de Ari, aún sosteniéndole las muñecas. 

—¿Y si lo hice? —la menor soltó una risita adorable entre dientes. 

Para aquel punto, Ari ya no podía negar que una corriente eléctrica le recorría el cuerpo, incluso ante el más mínimo rose entre ellos. Iniciaba justo ahí, donde los dedos del mayor se cerraban de forma delicada y suave sobre sus muñecas y terminaba bajándole por la espina dorsal, quería negarlo, pero mirar a Hyunjin a los ojos la llenaba de una sensación especial. Se sentía feliz, en paz y segura. 

¿Podía decir ya que probablemente le gustaba Hyunjin y le gustaba muchísimo? ¿O todavía seguía siendo delicado? 

Hyunjin abrió la boca responder, pero se vio interrumpido cuando el teléfono sonó y ambos saltaron asustados, apartándose de inmediato y casi tropezando con todos los cojines que habían quedado regados por el suelo. 

—Debe ser la pizza —Ari habló, tratando de recuperar la compostura. 

—¿Pediste pizza? ¿Cuándo? 

—Mientras lloriqueabas por tener que mover el sofá. Que, por cierto, aún no haz hecho —Ari soltó con simpleza, girándose y yendo a contestar el teléfono con línea directa al portero.

—¡Oye! —Hyunjin la miró con horror—. ¡Yo no lloriqueo!
































este capítulo me lo saqué de la manga porque no iba a ser nada así jskdkjsdjksd anyways, la vdd es que cualquier interacción hyunri de esta historia, me alegra el día, así que no me quejo, pero bueno. espero que les haya gustado el cap jeje

en fin, estaba pensando en ahondar un poco más en las chicas de wonder. atp creo que ya saben que sunmi y chan van a tener su propia historia y por eso es bad reputation duology, pero luego me sentí mal por sooha y dahae, aunque no voy a sacarles historias, quería saber si querían más de ellas o nel kdkjdkjsd 

les quiero un montón y muchas gracias por leer, son los mejores lectores

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