Fuerzas

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(Día 6 del MixCember: semana Fluff: Hurt & Comfort)

Superman cae redondo en el asfalto como consecuencia del terrible y devastador golpe del peligroso Metallo, y se hunde en la piedra del suelo mientras la gente huye despavorida del lugar y resuenan alarmas a lo lejos que han saltado en los coches.

La kriptonita del dicho villano le deja paralizado, tendido en el suelo y respirando con dificultad mientras intenta recuperarse lo más rápido posible del impacto.
No es hasta que escucha una voz familiar entrar por sus oídos que empieza a volver en sí.

-¡Superman! -le gritan desde lejos y el superhéroe reconoce al instante que se trata de la brillante Lois Lane, que se ha acercado a atenderle a diferencia de todas las demás personas- ¿Estás bien, tienes kriptonita incrustada?

La pregunta que hace es inevitable de realizar puesto lo mucho que ha tardado en abrir los ojos y mostrar signos de que no estaba plenamente inconsciente.

-No... -responde con algo de dificultad mientras intenta levantarse.

De forma irónica, y es que aunque se supone que es Superman quien tiene súper fuerza, consigue ponerse de pie gracias a la ayuda y fuerza que Lois le presta.

La vista de sus ojos se va volviendo rápida y progresivamente más nítida.
Observa el rostro de Lois, sus valerosos ojos que al mismo tiempo le transmiten ese mismo valor a él y que le hacen recordar por lo que lucha. Mágicamente recupera todas sus fuerzas con ese brillo único y especial en la mirada de la intrépida periodista.

Sin embargo, muy a su pesar ahora no tiene tiempo de pararse a charlar con Lois y agradecerle su altruista ayuda; ya lo hará más tarde cuando deje su capa y vuelva a casa para darle un beso en la mejilla a su novia nada más entrar por la puerta, pero ahora sólo puede mostrar ese agradecimiento en silencio para volver a volar y retomar el combate y su lucha, que aunque esté caracterizada por unas de sus mayores debilidades, posee una profundidad ideológica y moral de la propia figura de Superman.