Ximena entró a la biblioteca donde se encontraban Memo y Marifer escribiendo sobre los recuerdos de sus compañeros; al entrar se encontró con los chicos hablando con Paulina, así que decidió irse y esperar afuera del lugar. Paulina no era de las personas favoritas de la pelinegra. Observó a Memo salir del lugar, así que le habló.

━ ¡Memo! ¿Qué onda?

━ Hola... ¿Quieres ir por un jugo?

━ Uhm... si, si quiero.

El par se sonrió; ambos pasaron lo que quedaba del descanso juntos.

━ Ah, oye. No te preguntamos sobre tu recuerdo.

━ No te preocupes, yo hago el escrito y si quieres tú lo traduces.

━ Va.

Divisó a cierto castaño fuera de la preparatoria, se acercó a este y tomó valentía.

━ Memo, hola.

━ ¿Qué onda? ━le dio una sonrisa de lado.

━ ¿Vas a hacer algo esta tarde?

━ Ahm... Sí, iré al video club con Marifer, para hacer lo de inglés.

━ Ah, está bien ━la sonrisa de la chica cayó haciendo una mueca; apreció el auto de su madre━. Que te diviertas, Memo, adios.

Lidia se extrañó al ver a su hija entrar al auto con evidente aflicción en el rostro.

━ ¿Todo bien, hija?

━ ¿Eh?, ah sí. Solo estoy cansada.

La mayor, no convencida, solo asintió. No quería preguntar nada más para no hacerla sentir mal; prendió la radio, escuchando así las canciones de su cantante favorito, José José. Miro como el entrecejo de Ximena se fruncia al escuchar las letras del príncipe de la canción. En la mañana siguiente, la azabache aún estaba un poco distraída ante los pensamientos de que Memo estuviera con Marifer. Aunque sabía que no llegaría a pasar nada, ya que estarían en el trabajo del novio de ella, no pudo evitar sentirse mal.

Las clases transcurrieron con normalidad; Memo esta vez se sentó al lado de Ximena, pudiendo notarla algo decaída. Al salir de la escuela, miró a la pelinegra con sus audífonos puestos mientras movía su cabeza delicadamente al ritmo de la melodía. Él sonrió absorto ante la figura de la baja.

━ Ximena, ¿Estás bien?

Le tocó suavemente el hombro de la contraría para así llamar su atención, algo que sí logró.

━ ¿Pasa algo? ━respondió al terminar de quitarse los auriculares.

━ Ehm... ¿Estás bien?

━ Sí, ¿por qué no lo estaría?

━ Es solo que... estuviste callada todo el día.

━ Ah, sí. Ayer terminé todo lo de historia. Sólo estoy cansada ━mintió, pero estuvo a poco de no hacerlo al mantener contacto con aquellos orbes azules━. Pero, ¿y ustedes? ¿Ya terminaron los escritos? Si quieres los ayudo a hacer las historias.

━ No, estuvo súper raro. Marifer dijo que fuéramos a su casa. No quería estar en el Video Club. ¿Sabías que a ella también le gusta Caifanes?

━ ¿Ah, sí? Que bien.

La azabache hizo una mueca. Sabía que Caifanes era una banda muy reconocida en esos años. Tampoco se sentía del todo cómoda al saber que él fue a la casa de ella. Se enojaba con ella misma; sabía que ni debía frustrarse. Solo eran amigos, pero el simple hecho de pensar que él también convivía más con el resto le hacía sentir excluida, ya que ésta no sabía cómo acercarse a los demás.

━ ¿Te gustaría ir a mi casa? ━los ojos de Ximena se abrieron abruptamente; Memo tomó valentía━. Te quería invitar ayer, pero surgió lo de la composición. Además, aún no me has dado tu escrito.

━ Este... Ahm... Pensé que irías con Marifer ━el chico tímido nego━. Mhm... Entonces sí, nos vemos en la tarde.

Pronto Ximena olvidó aquello que le empezaba a abrumar, se arregló lo mejor que pudo y utilizó su perfume y labial de costumbre. Lidia sería quien la llevara a casa de Palacios; cuando ambas emprendieron camino, notaron cómo el hogar del chico estaba relativamente cerca del suyo.

━ ¿Segura de que es aquí, hija?

━ Si, Ma.

━ Hmm, está bien. Diviértete, pero no mucho.

━ Solo vamos a hacer la tarea de inglés, Ma.

━ ¿Segura? ━la contraria asintió━. Bueno, llámame cuando quieras que te recoja.

Al entrar al domicilio notó que era demasiado grande. Lo que le impresionó fueron los diversos aparatos que se veían en el lugar. Los jóvenes entraron al cuarto del castaño.

━ Muchacha, veo que ya llegó. Mucho gusto, soy Pascual.

━ El gusto es mío, soy Ximena.

━ Bueno, ahí estoy para lo que necesiten.

Ambos asintieron, viendo al mayor irse del cuarto. Ximena sacó las cosas que creía necesarias para comenzar con los escritos.

━ Bien, ¿qué te parece si yo hago una mitad y tú la otra? ━el castaño aceptó━. Si quieres yo hago la de Erick.

Mientras el par hacían aquellas anécdotas de sus compañeros sentados en el suelo, recargando su espalda al pie de la cama, Memo no pudo evitar desviar más de una vez la mirada de su libreta a la azabache. La concentración de la chica le hacía sonreír; a su parecer se veía linda, frunciendo el entrecejo al centrarse en su trabajo.

━ Ah, por fin termine lo de la lagartija ━la chica se estiro haciendo que sus huesos tronaran ante la estiración━. ¿Cómo vas, Guille?

━ ¿Eh? Ah... yo ya termine.

Tartamudeó al olvidarse por completo que tenía la mirada en Ximena; un leve rosaceo se presentó en sus mejillas.

━ Oye, ¿y tú que vas a escribir en tu trabajo?

━ Bueno, está un poco dark.

━ A ver, dime.

━ Cuando cumplí 10 años, mis papás me hicieron una fiesta de cumpleaños. Había globos, pastel y un payaso que me daba mucho miedo... Yo no quería estar ahí. Yo no quería una fiesta de cumpleaños. Y los niños que estaban ahí ni siquiera eran mis amigos. Y eso me enojo, me enoje mucho. Se me hizo un nudo en la panza. Pero ni quejarme.

━ ¿Por? ━estaba atenta a todo lo que le decía.

━ Porque no lo hicieron con malas intenciones. Pero desde ese día... he sentido ese enojo. Y no lo he podido soltar. Y cuando pienso que ya se fue es cuando regresa más fuerte... ━ambos se quedaron en silencio, pero no uno incómodo━. ¿Está muy dark, verdad?

━ ¿Qué? No, te entiendo. Hay días en los que no me soporto ni yo, y cuando pasan esos días. Escucho música y me olvido de todos ━el castaño sonrió al ser entendido.

━ Es como Yuri para Pascual. Dice que lo cura todo.

━ Bueno, ya deberías enseñarle a Caifanes ━el par soltó una risa.

Ximena puso su cassette de Caifanes en la reproductora de Memo; ambos bailaban al compás de la melodía de "Cuéntame tu vida" mientras cantaban a todo pulmón. La ojicafé notó como del suéter de Memo se asomaba del brazo aquella pulsera que le regaló el primer día que se conocieron; ésta sonrió. Mientras tanto, Guillermo no pudo evitar enbobarse ante la figura de la contraria; sus ojos azules brillaban de admiración por Ximena.

Al día siguiente, la mitad del grupo de ventas se encontraba reunido donde siempre: en el árbol. Ximena movía su pie derecho de arriba abajo.

━ ¿Donde están? ━Alex preguntó.

━ Se están tardando mucho ━la azabache miró a un lado, encontrando al tumulto.

━ ¿Donde están los trabajos?

━ Ahorita llegan ━contestó Daniela ante la preocupación de Tenoch y el resto.

━ ¡Hola! ¿Ya están los trabajos? ━llegó Mariana junto con Diego.

━ Si, en un rato.

━ Ay, ya mero suena la campana ━habló entre dientes la rubia ante la respuesta de Ximena.

━ Ustedes tranquilos, hay un pequeño retraso, pero nada grave.

━ A ver si sí llegan ━el novio de Mariana contestó━. Porque si no, todos van a querer su dinero, ¿verdad? ━la multitud respondió un alunisono "si".

━ Si vienen. Vienen tarde, pero vienen, ok. No hay porque armar un escandalo.

━ Si, flaco, tranquilo. Dani tiene razón.

━ ¿Qué hacen, muchachos? ━la maestra Ilse hizo acto de precencia.

━ Na... Nada, aquí conviviendo.

━ Si... estabamos hablando sobre el último capítulo que salió de Dragon Ball.

━ Si, si. Todos somos amigos ━nuevamente la muchedumbre confirmó.

━ ¡Qué bien! Bueno... Pues nos vemos en el salón. Ya quiero ver sus tareas.

Todos miraron a la docente irse para después voltear al unisono al grupo de venta. Los cuatro bajaron las cabezas. Marifer se hizo paso entre el gentío para poder llegar con su círculo de amigos.

━ ¡Marifer! ¿Donde están los trabajos? ━Ximena miraba por encima del bullicio, mientras el moreno le cuestionaba.

━ No los hicimos.

━ No estamos para bromas Marifer ━siguió Tenoch.

━ Fue mi culpa. Nos distrajimos...

━ ¡Ay, guey!

━ Tranquilo Tenoch, aún no llega Memo ━Ximena trató de mantener calmado al moreno.

━ No te preocupes, yo hablo con ellos.

━ ¿Y qué les vas a decir? ¿Que sus promedios van a bajar? Velos, son lo peor que esta escuela puede ofrecer.

Ximena se mordía los labios. No sabía si decir lo que había ocurrido la noche anterior. Tenía miedo de ser juzgada o incluso regañada.

━ A ver, va a ser muy raro que seamos los únicos que precenten el trabajo.

━ ¡Nos van a acachar!

━ Tranquilos... Ahm... A-aun no llega Memo ━los tres miraron a Ximena, quien se encojió en su lugar.

━ ¿Algo sabes? ¡Y no nos dijiste nada!

━ Eh... Eh... Este, ayer fui a su casa. Hizimos los trabajos juntos.

Tartamudeó la chica al ver la mirada de Tenoch, Daniela miró a la pelinegra con una sonrisa y el resto suspiró aliviado. El bullicio aumentó al no obtener respuestas de parte del grupo.

━ ¡Queremos los trabajos, culeros!

Ya faltaba menos de un minuto para que cerrasen el portón y el grupo se desesperó.

━ A lo mejor si me dan una pluma, puedo improvisar.

━ ¿Una pluma?

Los gritos de todos sonaron por el lugar. El grupo estaba más que asustado.

━ ¡Ahi viene, Memo! ━Ximena gritó al notar a su amigo━. ¡Memo!

Sonrió al ver como este alzaba su mochila amarilla mientras toda la multitud gritaba su nombre. Los del negocio suspiraron aliviados, ya que todo el grupo pudo presentar su escrito sin ningún otro problema. Al finalizar la clase, cierta chica se encontró con Guillermo.

━ ¡Memo!

━ Hola.

━ Nos salvaste a todos ━se sonrieron━. Gracias, Memo. Eres un héroe.

Sin que el contrario predijera, Ximena se paró de puntillas y plantó un dulce beso en su mejilla; ambos se sonrieron con sus cachetes rojos.

╰──────--NumberEight Notes─➢

Debido a situaciones académicas, estos últimos meses no podré ser tan activa en cuanto a publicar los capítulos; trataré de ser constante, pero no prometo nada.

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