Era otra mañana en el Clan del Rio pero el ambiente no se sentía como siempre, todos estaban muy tensos por lo ocurrido un día atrás, incluso Dientes de Tigre sentía culpa por lo que había echo y sentía cierta tención sobre sus hombros, el había informado al clan del lo ocurrido y cualquier tipo de sospecha recaería sobre el. Zarpa de Espina ya se encontraba despierta hace mucho, pero no se quería mostrar ante el Clan, no se sentía para nada bien de su nuevo labor en el clan aunque parecía que su hermano se la pasaba en grande ya que Estrella Sucia le dio ya una aprendiz, Pequeña Pluma, al parecer ese mismo día le darían su nombre de Aprendiz y le entregarían su entrenamiento a su hermano, pensar en eso le hizo desenvainar las garras y raspar el suelo de la cueva con ellas haciendo un desagradable chillido a lo que Vainilla Nocturna le miro algo irritada.

—Encogió las orejas con algo de irritación— Sabes, Zarpa de Espina, yo se que tal vez ser curandera se ve mal ahora, pero estoy segura que te gustara—le aseguro con una sonrisa algo inquietada—

—La aprendiza solo le devolvió una mirada casi sin expresión—...Solo es que extraño a Garra Candeal..—termino de decir, no pensaba tanto en ese tema pero en el fondo le dolió la perdida de su mentor—

Vainilla Nocturna se le quedo mirando un rato, con una mirada algo consoladora, ya que conocía ese dolor, las dos habían perdido a sus mentores, a sus guías y sabia como dolía, conseguías un lindo vinculo con ellos y luego solo.. se iban al Clan estelar para reencontrarte con ellos en quien sabe cuantas lunas, le señalo con la cola la boca de salida de la guarida, señalando que fuera a ver a su mentor, algo a lo que ella no se atrevió a ver, ver a su mentora muerta, no había salido desde que le contaron para verla, pero algo le decía que ella debía verlo. Zarpa de Espina asintió y salió de la guarida donde se encontraba Estrella Sucia y Golpe de Luna al lado del cuerpo de Garra Candeal. 

—Los ojos de Golpe de Luna se abrieron como platos— Oh... eres tu Zarpa de Rosa.. ven—movió la cola hacia su dirección diciéndole que vaya a su costado. Zarpa de Rosa solo se sentó a su lado con la cola enroscada en sus patas— Siento tu perdida.. como sabes esto tambien es mi perdida después de todo — dijo con los ojos algo llorosos y voz ronca— 

La miro a los ojos y entrecerró sus ojos intentando imaginar lo que le había pasado a su mentor pero los termino abriendo rápidamente al sentir la zarpa de Estrella sucia sobre su hombro, este le miraba con una cara apenada y orejas caídas para atrás, pero no mantuvo esta mirada mucho tiempo y se acerco a la roca alta poco a poco intentando mantener el equilibrio sobre sus zarpas, la gata solo miraba la lucha de su líder que parecía un ratón asustadizo en ese estado.

—Levanto sus orejas y miro a su Clan desde la roca antes de alzar la voz— Todos los gatos lo suficientemente mayores acérquense a la roca alta.. tengo que anunciar... algunas cosas—maulló con el tono de voz un poco más alto de lo deseado. Todos los gatos se acercaron mirándose entre ellos y susurrando algunas cosas entre ellos. Al lado del cuerpo de Garra Candeal pasaron Corazón de Paloma y Luna plateada con un par de palabras alentadoras al par de gatas y algunos lametones reconfortantes en la espalda— Como todos saben, Garra Candeal a muerto... así que mi deber es elegir otro lugarteniente..—dijo con voz algo ronca— Lu-luego de pensarlo decidí que Corazón de Paloma será la próxima lugarteniente del Clan del Rio— termino de decir con la voz algo entrecortada, tenían que tener lugarteniente para es misma noche ya que seria la asamblea y no podían verse débiles ante otros clanes lo cual no le había dado tanto tiempo de asimilar ni de pensar mejor. Corazón de Paloma se acerco con la cola en alto a la roca y los gatos maullaron su nombre

¡¡¡Felicidades Corazón de Paloma, Felicidades!! 

—Se reincorporo y trago algo de saliva— A-además.. voy a nombrar a uno de nuestros aprendices guerrero finalmente luego de un gran entrenamiento y así mismo le entregare a su primera aprendiza—con la cola señalo a Pequeña Pluma y a Zarpa Podrida los cuales se acercaron para recibir sus nombres— Ahora eres Zarpa de Pluma y tu serás conocido como Cola Podrida, se que serán un dúo de mentor y aprendiz extraordinario y dejo en tus zarpas Cola Podrida, la enseñanza de esta pequeña— termino de anunciar a lo que los gatos empezaron a maullar sus nombres en coro—

¡¡Zarpa de Pluma y Cola Podrida!!

Todos menos Zarpa de Espina que se había acomodado al lado de su mentor fallecido sin importarle los maullidos de fondo ni cuantos nombramientos hubieran, ella solo quería estar al lado de su mentor esa vez pensando que nunca lo volvería a ver y que tal vez era su culpa de alguna manera, ella siempre arruinaba todo.