No sabía en qué momento había decidido salir de su departamento, accediendo a aquella petición.

La señora Kwon, su anciana vecina había tocado el timbre tan insistentemente esa tarde, que él sin percatarse dejó el sobre en la encimera.

Ella se había asustado, pues "Plutón", su gato siamés de diez años. Se encontraba atorado entre los muebles de su hogar. Por lo que recurrió a él para que le ayudase a sacarlo de ahí.

Y claro, él y su devoción por los animales no había dudado en hacerlo. 
Lástima que olvidó aquel sobre. Lástima que ahora la persona que más amaba le estaba gritando, rompiendo cada parte de él.

-¡¿M-mierda por qué me haces esto Taehyung?!

Había regresado a su departamento, luego de que la señora Kwon le regalase una caja de bombones por haber rescatado a "Plutón". Una muerte olvidado entre dos muebles.

Dejando las llaves sobre la encimera, ni siquiera se había percatado de la ausencia del sobre. Prácticamente lo había olvidado y ahora solo estaba concentrado en dirigirse al estar y devorarse aquel festín.

Casi corría de la ansiedad, hasta que una figura conocida apareció de espaldas ante su vista. Jungkook había llegado antes a casa.

Por lo que dejó aquella caja sobre la mesa de centro y se abalanzó a abrazar a su novio.

Apretó a Jungkook contra su cuerpo, sin embargo una tensión le invadió por un segundo. Sintiendo que soltaban su amarre con brusquedad y le miraban con unos ojos que él jamás había visto.

Y ojalá nunca lo hubiera hecho.

-¡¿Qué mierda pretendes?!- Jungkook le gritó, mientras el castaño miraba como este tenía sus ojos hinchados y rojos, cayendo vertiginosamente lágrimas por ellos.

El castaño sin entender abrió sus ojos y su cuerpo comenzó a temblar de miedo.

-¿Q-que ocurre K-kookie?- intentó modular sin parecer nervioso.

El pelinegro que respiraba aceleradamente cerraba sus ojos frustrado, mientras pasaba una de sus manos sobre su cabello. Casi queriendo arrancarlo.

-!¿Qué qué sucede?!-Jungkook le miraba furioso- Eso debiese preguntarlo yo ¿No crees?- El castaño entrecerraba sus ojos, confundido por toda la situación. Sin saber que responder a aquella extraña pregunta- ¿Desde cuándo?

No comprendía, no sabía a qué se refería Jungkook con eso-¿D-desde c-cuando qué K-kookie?

Tartamudeaba sus palabras y sus manos tiritaban de temor.

Una sonrisa burlesca se instaló en el rostro de Jungkook, quien hizo un chasquido con su boca y negó con la cabeza mientras cerraba sus ojos-¿Desde cuándo te acuestas con otro?

El corazón le latió fuerte e inevitablemente se llevó una de las manos a la boca, sintiendo que esta empezaba a salivar- ¿D-de que hablas J-Jungkook? Yo j-jamás he dormido con o-otra persona, y-yo...

-¡Ya deja de mentir!- aquel grito de Jungkook le hizo sobre saltarse e inconscientemente retrocedió unos pasos hacia atrás, mientras llevaba una de sus manos hacia su vientre. Creía que le golpearía y esta acción no pasó inadvertida por el pelinegro- ¡Aaaaah Maldición!

Jungkook se giró sobre si mismo, golpeando la pared a sus espaldas y rompiéndola por la fuerza empleada. Su respiración salía entrecortada, a la vez que un sollozo sin control escapaba de su boca y su mano comenzaba a sangrar.

-C-cariño ¿t-te has last-timado?- Taehyung con preocupación se había acercado hacia él.

-¡No me toques!- el pecho del castaño dolía ante las palabras del chico- Mejor responde mi pregunta ¿Desde cuando?-los ojos de Jungkook le miraban con resentimiento, dirigiéndose a un punto en particular de su cuerpo- Dudo que esa cosa haya llegado sola a tu estómago.

Las manos le hormigueaban, sintiendo que se desmayaría-¿C-cosa?- respondió confundido por aquello.

-Maldita sea Taehyung- la frustración salía cual ácido desde los labios de Jungkook- ¡Demonios! ¡¿Quién te preñó?! ¡¿Quien dejó ese maldito cachorro en ti!?

-¡Tu!- y ya Taehyung no aguantó más su llanto, su corazón doliendo de angustia por empezar a entender el motivo de aquella discusión.

Una estrepitosa risa se escuchó en toda la casa- ¿Pero qué estupidez estás diciendo Taehyung? Soy un omega ¿Acaso me crees imbécil? - Jungkook le disparaba cada oración con lágrimas en los ojos y una mueca de risa y dolor-¿T-tan poca cosa m-me consideras para p-pensar que creeré eso?

Taehyung le miró acongojado, a pesar de que su pecho dolía. Podía entender el conflicto de su novio- N-no amor... n-nunca he pensado e-eso, este cachorro es t-tuyo es...

-¡¿M-mierda por qué me haces esto Taehyung?!-el pelinegro se quejaba y tocaba su rostro frustradamente -¿N-no te das c-cuenta que m-me duele? Ya deja de mentir.

'También me duele" pensaba Taehyung, quien intentaba controlar los estremecimientos de su cuerpo y el frío que había comenzado a sentir-N-no te estoy m-mintiendo K-kookie...

-Sabía que no podrías s-soportarlo ¿sabes?-el pelinegro dijo, mientras miraba perdido hacia los ventanales de su departamento- Siempre t-tan frágil y vulnerable. P-pese a todo lo que i-intente...sabía que terminarías acudiendo a un alfa.

Taehyung se aproximó hacia él intentando tomar de su brazo-¡No hay n-ningún alfa J-jungkook por favor c-cree en mi!- el pelinegro le empujó hacia atrás, soltando su agarre suavemente sin intención de causarle daño-¡S-siempre has sido tu! ¡Nam, N-nam te lo p-puede explicar! ¡Él...

-No metas a nuestros amigos en esto ¿O es que acaso es con él con quien te has estado acostando? -Taehyung detuvo su respiración junto a su llanto, sin saber que responder-Yo me iré ahora. Ya he guardado algo de ropa, la demás la vendré a buscar en unos días mas. Tu te puedes quedar aquí, el departamento siempre ha sido tuyo.

-¡Nooo Jungkook no me hagas esto! -el castaño había caído a los pies del pelinegro, aferrándose a sus piernas- ¡Es nuestro c-cariño, todo lo q-que hay aquí es nuestro!

-No hagas esto mas difícil Taehyung-Jungkook soltó sus manos y avanzó hacia la puerta, tomando aquella mochila- Te entregaré las llaves en unos días.

-Por favor...- Taehyung habló tirado en el suelo y sujetando su vientre.

-Adiós Taehyung - el pelinegro se giró, mientras tomaba la perilla de la puerta y abría esta. Se detuvo repentinamente hablando -Y dile a ese alfa que se haga cargo de su cachorro, que no sea un cobarde ahora.

Y salió de allí. Dejando a Taehyung sin detener su llanto, con unas ganas inmensas de vomitar de dolor y una caja de bombones jamás abierta.

♥

El cansancio parecía querer matarlo, siendo sus ojos los que ardían al entrar tanta cantidad de luz en aquel lugar.

Lo cierto es que las semanas no habían calmado para nada, el sufrimiento que la ausencia del castaño en sus días.

Las ojeras se marcaban bajo sus ojos, dándole una imagen lúgubre al contrastar con su blanca piel.

Sabía que debía enfocarse en su próxima sesión, montar lo que faltaba y dedicarse a solo disparar.

Pero en su mente solo se reproducía la imagen de Taehyung llorando, arrodillado sobre la alfombra de su antiguo departamento.

Él aquel día había cerrado la puerta, pero estuvo prácticamente una hora sentado apoyándose contra esta. Su rostro se empapaba de lágrimas oyendo al chico tras la pared, el que no había dejado de llorar ni siquiera hasta el momento que decidió levantarse e irse.

Su cuerpo lucho con su razón, pues quería entrar por esa puerta y abrazar a Taehyung. Decirle que todo estaría bien mientras secaba sus lágrimas.

Mas nada lo estaría.

Había conseguido que Yoongi le recibiera en casa desde ese día. Y el pelimenta no había podido negarse cuando le vio tan destruido frente a él. Aun así cuando su novio había corrido minutos atrás hacia el departamento de Taehyung.

Yoongi había sido su amigo al igual que Namjoon desde la secundaria. Siendo los tres bastante unidos e incondicionales. Incluso después de que el pelinegro se presentara como omega, su relación se había vuelta mas fuerte contrariamente a lo pensado.

Se habían dejado de ver cerca de dos años, debido a que Jungkook en una incipiente carrera como fotógrafo había viajado a vivir a Seúl junto a Taehyung.

Jamás pensaron que sus caminos se volvieran a unir tan abruptamente, cuando aquel día Taehyung había llevado Jimin a su casa. Un bonito omega pelirosa que se había convertido en alguien muy cercano para el castaño en esa agencia de modelos.

Un omega que no era nada mas ni nada menos que el novio de Min Yoongi. Quedando todos muy sorprendidos el día en que se reunieron los cuatro en aquella cafetería y Jungkook no había dejado de pensar la mañana que debía ser una coincidencia de nombres.

Pero no se trataba de ello, pues su amigo de años le estaba abrazando felizmente por que el tiempo los volviese a encontrar. Mientras Taehyung y Jimin reían de las casualidades que el destino, se atrevía a trazar en sus vidas.

El pelinegro suspiró pensando en aquellos días. No dejaba de pensar el como se debería estar sintiendo el castaño en esos momentos. Ya que ese cachorro no solo había acabado con su relación, si no que también seguramente lo hacía con la carrera de Taehyung en el modelaje.

Y si bien el castaño no adoraba su vida como modelo, pues siempre amo las letras y la escritura, esperando algún día desarrollar sus habilidades para literatura. Era la profesión de modelaje, que desempeñaba desde los diecinueve años, la solventaba todos sus gastos.

Taehyung era quien sostenía su hogar. A sus dos abuelos maternos.

El pelinegro pensaba en aquello y se sumía en una angustia. Solo esperaba que él alfa padre de ese cachorro, se hiciese responsable de todo lo causado.

-¿Ya estás listo?- una grave voz detrás suyo le hizo sobresaltarse.

Yugyeom, un joven alfa de veinticinco años que le miraba con una sonrisa en sus labios.

Le había conocido al llegar a Seúl, habiendo hablado unas cuantas veces con anterioridad a través de correos. Yugyeom había encontrado en él un gran talento para la fotografía y tras haber visto su portafolio, no tenía dudas que le quería en su agencia.

Misma agencia donde Taehyung había encontrado un trabajo provisorio de modelo, luego de que todos se interesaran en él tras apreciarlo en las fotografías de Jungkook. Trabajo provisorio que poco a poco fue convirtiéndose en una prometedora carrera en el modelaje.

Taehyung era sencillamente hermoso, mostrando aptitudes innatas para posar ante un lente fotográfico, sin necesidad de actuar demasiado.

-Si, creo que tengo listo el set- respondió Jungkook nervioso por la presencia del alfa. Era evidente que se sentía incómodo y a la vez disfrutaba de su cercanía. Eso le atemorizaba.

Había sentido su aroma a café desde que le conoció y su lobo se había sentido demasiado cómodo al mirarle. Posiblemente se trataba de su destinado, pero a pesar de eso Jungkook siempre tuvo solo ojos para Taehyung.

Una cosa era lo que su lobo le pedía y otra lo que su corazón le exigía. Y él amaba a Taehyung.

-Eres excepcional Jungkook. Te ha quedado fantástico -dijo Yugyeom mientras se observaba cada detalle del ser fotográfico.

El pelinegro sintió sus latidos acelerarse por aquel halago, recriminándose mentalmente por aquello-Gracias-dijo tímidamente.

El alfa se dedicaba a mover una que otra cámara de aquel lugar-Disculpa Jungkook, se que tal vez no deba preguntar pero- y el pelinegro no quería que lo hiciera- ¿tu sabes de Taehyung? He estado intentando comunicarme con él pero no ha respondido mis llamadas por semanas. Y la información que me ha dado Jimin es casi nula.

El lugar se fundió en un frío e incómodo silencio ¿Cómo podría decirle que Yoongi no le dejaba de hablar de lo mal que se encontraba el castaño? Que incluso él mismo no soportándolo mas le había enviado un mensaje, pidiéndole que no intentase mas convencerle. -Y-yo no se nada de él. 

El alfa suspiró y se frotó los ojos- Entiendo, es solo que no me gustaría perderlo como modelo, pues Taehyung es perfecto- Jungkook inconscientemente asintió, claro que él sabía que lo era. -Pero si sigue sin comunicarse con la agencia, creo que me veré obligado a acabar su contrato.

Tomando aire el pelinegro pensó que era lo mejor para él y para Taehyung. De lo contrario se encontrarían inevitablemente y Jungkook no sabía que podría provocar aquello.

-¿Ustedes terminaron no es así?-Yugyeom le preguntó. A lo que el pelinegro no deseando hablar mucho del tema, solo asintió con la cabeza. -Y debo suponer que no ha terminado bien ¿cierto?

Jungkook en la insistencia de aquel alfa le respondió secamente -Para nada.

-De verdad lo lamento. Ustedes se veían realmente bien juntos. Sinceramente espero que con el tiempo todo mejore para ambos.

Y aunque las palabras de Yugyeom sonaban tranquilizadoras, el pelinegro no se sentía de tal modo. Es que el escuchar hablar del término de su relación, solo le hacía confirmar que todo había acabado.

-Jungkook- habló de pronto el alfa- Se que luego de esta sesión terminarás tu jornada- Yugyeom sonaba un poco nervioso ¿Quisieras tomarte un café conmigo luego de eso?

El pelinegro lo pensó, no sabiendo si eso era tan buena idea. Pero por otra parte necesitaba distraerse, pues su cabeza y pensamientos le estaban dañando mas de lo debido.

-Esta bien.

♥

Sus manos se aferraban a las mantas de su cama, sintiéndola fría desde semanas.

Sus ojos vagaban perdidos hacia ningún punto en específico. Había bajado notoriamente de peso, pues su estómago se había cerrado debido a la tristeza.

Jamás pensó que aquella noticia hubiese gatillado de ese modo en ellos.

Kim Taehyung, omega, 21 años

Presencia de gonadotrofina coriónica

Embarazo positivo

Namjoon le había dicho que había posibilidades de aquello, cuando el le había contado sus síntomas en una de sus consultas. Mas no creyó que fuese su caso.

Una delicada mano le acariciaba la frente, sintiendo el calor del cuerpo de su amigo abrazarle por la espalda. - Ya es hora de que comas algo Tae- le dijo Jimin, intentando que el castaño se motivase a levantar de la cama.

Lo cierto era que el peli rosado había estado cada día e incluso noches, acompañando a Taehyung. Y Taehyung agradecía tener a un amigo con él, debido a que estaba lejos de sus abuelos y sin Jungkook.

-Quiero sacarlo de mi- habló de golpe el castaño. Y Jimin quien antes se encontraba recostado a su lado, ahora le miraba desde arriba y con los ojos muy abiertos.

-¿Q-que estás diciendo Taehyung? -el peli rosa no creía haber escuchado bien.

-T-tal vez si ya n-no está Jungkook...

-Espera Tae-le detuvo Jimin- ¿Esto es por ti o por Jungkook? - el castaño se mantuvo en silencio sin mirar a su amigo-Créeme que no dudaría en apoyarte si esa fuese tu decisión. Pero dime ¿de verdad tu no quieres a ese cachorro?

Un gimoteo se escuchó de parte de Taehyung, quien no pudo evitar que su pecho se oprimiese al pensar aquello. Por supuesto que quería a ese pequeño ser que se estaba formando dentro de él. No podía odiarle cuando había tanto amor de por medio. Su vida estaba ahí, su historia y la de Jungkook. La de ambos.

-Y-yo lo q-quiero pero...

- ¿Pero qué Taehyung?

¿Es que por qué debía doler tanto? ¿Por qué aquello tan bello había acabado en esto?

-J-jungkook me e-envió un mensaje d-días atrás- el castaño pasó saliva por su garganta, sintiendo como sus ojos iban soltando lagrimas- Diciéndome q-que dejase de insistir en l-lo nuestro. Q-que dejase de m-meter mentiras en la c-cabeza de Y-yoongi ¿Él está a-allá no es asi?

Jimin le dio una mirada compasiva. Le lastimaba ver a su amigo así y su lado omega empatizaba con su triste abandono-Aaah...Es que Yoongi está igual de sobrepasado con esta situación, pero no debió involucrarse. Y si él...no te puedo mentir Yoongi le dejó quedarse allá -asintiendo con su cabeza Taehyung le devolvió la mirada. De alguna manera agradecía que Jungkook no estuviese solo- Pero escúchame Taehyung...tú no estás haciendo nada incorrecto ¿está bien?. No debes dejar que esto te supere. Hazlo por ti y por esa pequeña cosita que está creciendo en ti.

El castaño respiró profundo y le dio una leve sonrisa, a lo que Jimin se acercó a besarle la frente.

-Yugyeom me habló hoy por la mañana- dijo de pronto el peli rosa- Él m-me ha dicho que... acabó con tu contrato Tae.

Taehyung asintió-Era esperable, ni siquiera me he aparecido-Ni deseaba hacerlo, no tenía el ánimo de ver a Jungkook.

- ¿Cómo lo harás con el dinero para tus abuelos?- la preocupación se sentía en las palabras de Jimin-Digo ahora estas solo, con un bebé en camino y sin trabajo. Tu sabes que puedes contar conmigo y con Yoongi para lo que sea cariño- dijo mientras acariciaba su cabello.

Sonriendo el castaño le tomó de la mano, gesto de agradecimiento por todo lo que hacía por el su querido Jimin-Tengo algunos ahorros que pensaba ocupar más adelante esperando estudiar...pero bueno, al menos tengo para vivir por un tiempo. Y gracias Jimin, de verdad que no tienes la necesidad de estar aquí conmigo soportando todo esto. Pero agradezco que lo hagas.

El peli rosa le sonrió-Tae, tu sabes que te he tomado un montón de aprecio. Casi te siento como un hermano- Taehyung sonrió, él también lo sentía así-Y como tu hermano, deberé preocuparme mucho por ese pequeño sobrinito o sobrinita ahí dentro tuyo - le dijo mientras tocaba gentilmente su vientre y ambos reían.

♥

Se encontraba nervioso y sus manos le sudaban de forma excesiva. Lágrimas secas se marcaban sobre sus mejillas, pues había estado llorando en la consulta con Namjoon.

Necesitaba de Jungkook. Necesitaba que le dijese que todo estaría bien.

Su vientre ya de tres meses comenzaba recién, a formar una pequeña curva en sobre su abdomen. Y él no había dejado de acariciarle durante todo el camino a la agencia.

Pequeño bebé.

Debía hablar con Jungkook, su lobo pedía por el padre de su bebé en esos momentos. Namjoon le había aconsejado eso, en cuanto se percató de la condición del cachorro. Aunque debido a su situación actual, no sabía que era mejor para la estabilidad de ambos.

Esperaba el número color azul indicara que ya había llegado al piso de su estudio en aquella agencia. El ascensor parecía ir muy lento, contrario a sus pulsaciones que iban demasiado rápido.

Namjoon le había dicho que lo mejor era presentarse con aquellos exámenes que le había estado realizando tiempo atrás. Así el enfrentar a Jungkook sería más fácil y no les llevaría nuevamente a una discusión. Para nada recomendada en su estado.

Pero él deseaba confiar en que no terminaría de esa manera otra vez. Es que de verdad debía sentir que estaba ahí con él. Abrazarle y sentir su aroma.

Las puertas del ascensor de abrieron y el camino con pasos inseguros al no escuchar nada. Le buscó por varias de las salas de montaje, intentando no hacer mucho ruido por si este se encontraba trabajando, sin desearle interrumpir. Aunque la angustia le subía por los pies, sintiéndolos hormiguear.

Oyó unas risas en una de las salas, de la cual claramente podía distinguir la del pelinegro. Su corazón se oprimió.

Avanzando con un poco de temor, su lobo se inquietó y extrañamente quiso huir de allí. Pero Taehyung no le dejaría, a pesar del terror que pudiese estar sintiendo.

Se apoyó en el marco de la puerta, encontrando con su mirada a dos pequeñas figuras. De las que claramente podía identificar a su hermoso omega. Había pintado su cabello, un hermoso color tiente rojo que le sentaba tan bien a su blanca piel.

Hermoso.

Mas su alma pareció estrujarse al ver como alguien le acariciaba el rostro y le besaba tiernamente los labios.

Su lobo comenzó a llorar y Taehyung no se había percatado cuando ya tenía humedecidas sus mejillas.

Jimin una vez lo había mencionado casi sin querer. Yugyeom estaba saliendo con Jungkook, más él le ignoró pretendiendo no haber escuchado sus palabras.

Mas ahora el verlo, le estaba lastimando cada partícula de su cuerpo.

Aquellos dos, parecían no darse cuenta y seguían aquel coqueteo, regalándose besos que el castaño muchas veces había compartido con el omega.

Su vientre dolió y sin poder evitarlo un pequeño sonido salió de su boca, llevando su mano sobre su estómago.

De pronto esos oscuros ojos le estaban mirando alarmados.

-T-tae...-había dicho Jungkook avanzando instintivamente al ver la extraña actitud del castaño.

Taehyung intentaba mantener sus ojos en él -¿Y-yo puedo ir al baño?

Un preocupado Jungkook asintió, dejándole pasar.

Su corazón latía con fuerza.

Hace meses que no le veía y Taehyung seguía igual de bonito como siempre. Y aunque le pudo ver más delgado, también aprecio aquel pequeño montículo sobre su estómago.

Miró a Yugyeom que le había estado observando, claramente alarmado al igual que él por todo aquello.

-¿T-tú crees que nos vio? - dijo de pronto el alfa.

-Y-yo no lo se- y en el fondo de él esperaba que no. Sabía lo inseguro que era Taehyung y el verlo ahí con un alfa inevitablemente iba a dolerle. Al igual que él le había dolido meses atrás.

Sin embargo su lobo le exigía que no lastimase al omega. Sintiendo la necesidad de regresar el tiempo y aferrarse al pasado.

Más él no podía hacer aquello. No cuando tanto le había costado salir de eso.

Él no estaba haciendo nada malo. Él solo continuó con su vida. Aquello que Taehyung mismo había decretado al acostarse con otra persona.

Con un alfa.

Yugyeom era gentil con él. Llenando espacios que se habían vaciado cuando se alejó del castaño.

Él debía ser feliz.

Pero entonces ¿Por qué seguía doliendo tanto?

-¿No crees que se ha demorado?-dijo Yugyeom mientras no dejaba de dar vueltas en aquel salón, mostrando evidente nerviosismo.

Los minutos habían pasado y evidentemente Jungkook se había percatado de eso. Pero no quería demostrar inquietud por la tardanza de Taehyung en aquel baño.

Se aproximó a la puerta y tocó suavemente, sin tener respuesta. Por lo que tocó un poco más fuerte-¿Taehyung estás bien?-Sin embargo el castaño parecía no escucharlo allí adentro-¡¿Taehyung?!-el silencio era abrumador, por lo que comenzó a forzar la puerta-¡Voy a entrar!- su lobo atormentado comenzó a aullar y Jungkook creía que lloraría sin saber la razón. Finalmente la puerta cedió.

Taehyung se encontraba afirmado en el lavamanos y con sus pantalones de tela en el suelo. Mientras que Jungkook podía ver que un líquido carmín corría por sus piernas.

El castaño le miró con sus ojos llorosos-C-creo que estoy sangrando.

♥

Las semanas habían pasado como un torbellino, agobiando sus pensamientos al límite de no saber que hacer con su vida.

Casi no dormía por las noches, insomnio que le había llevado a la obligación de ausentarse al trabajo. Una licencia psicologica que decía «estrés» con letras mayusculas.

El sueño jamas había sido un problema en su vida, mas ahora debía recurrir a pastillas para conciliarlo. Pero siempre a momento de despertar, recordaba aquellas horribles pesadillas en las que aquella escena se repetía una y otra vez.

Y la imagen de aquel castaño mirandole con sus piernas ensangrentadas.

Ese día su pie derecho no dejaba de agitarse mientras estaba sentado en aquella sala de espera. Aquel olor a naftalina le hacían sentir nauseas, jamás le habían agradado visitarlos.

Veía personas moverse de un lugar a otro y pacientes que esperaban atención. Mas hace más de una hora no tenía información de Taehyung y su estado.

-Ya tranquilo Jungkook- había sonado la voz de de Yugyeom a su lado. Juntos habían corrido con el castaño hacia el hospital mas cercano aquel día. Siendo el mismo Jungkook, quién le había tomado entre sus brazos hasta llegar a dicho lugar.

Taehyung lloró todo el camino, mientras se sostenía del sweater que Jungkook llevaba puesto ese día. Y el pelirojo no pudo ignorar aquel aroma a merengue y frambuesas, aquella esencia que el castaño ponía para él todas las mañanas.

¿La habrá puesto para él? Se preguntaba. Sintió un poco de remordimiento por el haber dejado de usar la suya meses atrás.

Ya no había necesidad de aquello.

-Gracias Yugyeom- habló de pronto sin dejar de mirar hacia el suelo-Se que esta situación es incomoda. Aun así no dudaste en conducir hasta aca- sus palabras eran sinceras. El alfa poseía un carácter noble y eso tranquiliza al pelirrojo.

-No tienes porque agradecerlo Jungkook. Habría hecho eso por cualquiera- le sonrió mientras tomaba su mano.

-Familiares del paciente Kim Taehyung- una joven mujer salía de una de las blancas puertas.

Jungkook se levantó rápidamente quedando frente a ella- ¡A-aquí!Nosotros s-somos sus a-amigos...-habló no pudiendo evitar que su voz decayera en aquellas ultimas palabras.

-Buenas noches. Les informo que hemos logrado estabilizar al joven Kim- ambos asintieron, mientras Jungkook movía sus manos nerviosamente- Él efectivamente tuvo un leve desprendimiento de placenta, por eso el sangrado- el pelirrojo sentía que toda esa situación le están asfixiando- Su bebé es muy pequeño, por lo tanto debe hacer todo el reposo posible. Y también sería bueno que mantenga a su alfa con él, ya que su omega muestra indicios de abandono que podrían estar perjudicando al desarrollo normal del cachorro ¿ustedes saben si él tiene a su alfa presente?- un silencio incomodo se hizo entre ellos, a lo que la enfermera supuso que era un tema delicado y decidió no ahondar en aquello.

Por otra parte la mente se Jungkook iba y venía con esa última pregunta.

¿Abandono? ¿Qué acaso Taehyung no estaba con el padre de su cachorro?

-Ahora lo mejor es que descanse. En unos momentos mas termina el horario de visitas, por si quieren verlo antes de eso. Con permiso y buenas noches- diciendo aquello la mujer se retiró caminando hacia el pasillo.

Ese día Jungkook había quedado paralizado luego de aquello, debiendo ser Yugyeom quien le motivase a verificar el estado del castaño.

Su lobo se sentía roto, como si el hecho de ver a Taehyung de ese modo solo le hubiese hecho retroceder todo lo que había avanzado con el lobo de Yugyeom.

No entendía aquellos sensación tan extraña que sentía en su pecho, angustiandolo y volviéndolo inútil.

Y si pensó que el ingresar a la habitación le habría de calmar, pues se equivocó.

Observando una habitación donde habían cuatro camas, cada una con un omega en estado. Y tal vez mas de alguno con un cachorro perdido, lo que dedució por el gran olor a tristeza que alcanzo a percibir su olfato. Siendo su mismo lobo omega, quien se lamentaba empatizando con el dolor de los demás. Singularmente de uno, que se encontraba recostado de lado, en una cama que para Jungkook parecía muy fría.

El pelirrojo se aproximó cauto para no invadir a ninguno de los omegas en aquel lugar. Todos acompañados por sus compañeros alfas. Bueno, todos menos uno.

El castaño miraba ido hacia ningún punto en específico, notando Jungkook que este tenía sus nariz y ojos rojos debido al llanto.

-Taehyung- esa voz hizo temblar a el castaño, quien se negaba a mirarle producto de la mezcla de sentimientos que tenía- Nos informaron que debías descansar para que el cachorro crezca saludable- Taehyung asintió - Hablé con Jimin, el ya bien en camino.

El castaño inclinó un poco su cabeza para mirar al ahora pelirrojo. Jungkook estaba asustado, lo veía en sus ojos.

-G-gracias-y de verdad lo hacía. No podría imaginar que habría pasado si hubiese tardado en llegar al hospital.

El ambiente entre ellos era extraño, una sensación de incomodidad e incertidumbre. Y anhelo, demasiado anhelo.

-Taehyung t-tú... ¿qué andabas haciendo hoy en la agencia?-Jungkook hizo un breve silencio-No se...parecía que buscabas a alguien.

Su corazón se encogía al escucharle hablar, es que había extrañado tanto su voz.

-S-si...yo andaba b-buscando a Jimin. Pero me c-confundí de p-piso- mintió. Como iba a decirle que en realidad le buscaba a él y que era obvio que jamás se equivocaría de piso, cuando Jungkook siempre le esperaba en el piso cuatro luego del trabajo.

Pero le vio tan feliz aquella tarde en el estudio. Y aunque siempre Taehyung sintió recelo hacia Yugyeom, él en el fondo sabía que era un buen alfa. Y aunque le doliese aceptarlo, tal vez aquel era el destino de su ex pareja.

-T-tae...-habló un tanto intranquilo Jungkook y el corazón de Taehyung latió la escucharle llamarlo de esa manera- ¿T-tú estás bien?, es decir... ¿Tu a-alfa está contigo?

El castaño apretó la sabana que le cubría, sintiendo un nudo atravesar su garganta.

"Tu alfa"

El pelirrojo le preguntaba por alguien que no existía. Una imagen del padre de su cachorro. Esa imagen que estaba de pie frente a él con su hermoso cabello pintado de rojo.

Es que era obvio, Jungkook jamás dejó de pensar que él le había sido infiel con alguien más.

¿Cómo podría haber hecho aquello? Cuando le amaba con cada célula de su cuerpo. Tanto que estaba dispuesto a dejarle ir, con tal de que sea feliz.

Aunque esa felicidad sea con alguien más.

Era imposible negarlo. Jungkook había logrado avanzar, sin él.

Sin ellos.

-S-si...él debe estar por llegar- y aquello bastó para enterrar lo que alguna vez ambos tuvieron. Todo lo que los había envuelto durante ocho años- Jungkook, muchas gracias. Dio a Yugyeom que también le agradezco a él.

Jungkook asintió, percibiendo que algo se rompía en él, mientras su lobo le arañaba por ir a abrazar al omega que tanto amaba.

Más ese día no pudo hacer nada más, aunque sus manos se calcinaran por tocarle.

Aquel omega al que prometió proteger con su vida desde que era un adolescente, ahora le pertenecía a alguien más. Y debía dejarle ir.

Más ahora en la soledad de su habitación, lo único en lo que pensaba era en Taehyung. Recordando su imagen tan vulnerable hace unas semanas atrás.

Como no iba a pensarle si Yugyeom le había dicho que el castaño tenía un olor diferente aquel día. Que su aroma de merengue y frambuesa, parecía mezclarse con el de Jungkook.

Recostado sobre la cama que le había prestado Yoongi, escuchó unos fuertes golpes que venían desde la puerta que rompieron sus pensamientos.

Quiso ignorarlos, sin embargo, cada vez se escuchaban más fuertes como si fuesen golpeados con furia.

-¡Jungkook abre esa maldita puerta! ¡Sé que estás ahí! -reconoció aquella voz, sintiéndose furioso mientras corría a abrir.

-Hola Nam, que agradable llegada la tuya-digo de forma irónica. Llevaba tiempo que no veía a su amigo y su lobo estaba un poco molesto debido a las suposiciones que tenía.

Kim Namjoon, uno de sus mejores amigos de la infancia junto a Yoongi. Medico de gran renombre en Corea, especializado en omegas. Y potencial padre del cachorro de Taehyung, por ende su alfa.

- ¡¿Jungkook que mierda crees que estás haciendo?!- el alfa pelirrubio entró directo a la casa y desafiante se paró frente al omega.

El pelirrojo le miró sorprendido, agitándose instintivamente debido a la ira que estaba provocándole la situación-No sé de qué hablas Namjoon.

-¡Hablo de Tae Jungkook!- el alfa realmente estaba furioso, Jungkook lo podía oler-¡¿Qué pretendes con él?!

La sorpresa le tomó desprevenido y comenzó a frustrarse sin entender hacia donde iba la conversación-¡¿Taehyung?! ¡Yo no tengo nada que ver con él si eso te preocupa!

-¡Claro que me he dado cuenta de ello Jungkook! ¡Si le he visto todas las consultas solo o con Jimin!

El omega le miraba extrañado, ahora sí que no estaba entendiendo nada- ¡No entiendo que estás hablando! ¡¿Qué tiene que ver esto conmigo cuando tú eres su alfa?!

Namjoon abrió los ojos entre sorprendido y espantado - ¡¿Qué estupidez estás diciendo Jungkook?!

El pelirrojo chasqueó su lengua, negando con la cabeza-¡Lo que escuchaste Nam! ¡Ya no tienes por qué mentir! ¡Sé que eres el alfa de Taehyung! ¡Sé que tú le has preñado!

Es que los últimos días Taehyung hablaba todo el día de Namjoon, asistiendo a su consulta más ocasiones de las necesarias. Lo que le hizo cruelmente confirmar sus sospechas, al momento de saber que el omega esperaba un bebé.

El alfa le miraba con la boca abierta y sumido en un silencio. Cerrando sus ojos mientras pasaba una de sus manos sobre ellos-Taehyung me menciono algo de que no le habías creído hace meses atrás, pero jamás pensé que llegarías a esto.

Jungkook miró hacia otro lado, este tipo de conversaciones no las quisiese tener en aquel momento.

- ¿Tú sabes lo valioso que eres para mí Jungkook? ¡Tú y Yoongi son como mis hermanos maldición!-el alfa se giró y golpeó la pared- ¿Me creerías capaz de involucrarme con la persona que amas? ¿Crees que yo haría algo así?

El pelirrojo estaba serio y no quería responder a eso, pues a Namjoon no le agradaría lo que iba a decir.

El alfa sin obtener respuesta se giró y le encaró, tomándole del cuello-¡Responde maldita sea!

-¡No lo sé Namjoon! ¡Ya no sé qué creer!-le dijo con lágrimas en los ojos, mirando que el alfa también había empezado a llorar.

El pelirrubio le soltó, tratando de calmar su impotencia por todo aquello- T-taehyung hoy se enteró del sexo d-de su cachorro sabes. Pero llegó s-solo una vez más...así que pregunté por ti-Jungkook solo miró hacia otro lado, afirmando sus dos manos sobre un mueble en aquella sala-¿Por qué sabes que ha estado a-asistiendo solo a sus chequeos? Porqué yo no soy su alfa Jungkook...y tampoco tiene uno.

Una punzada se instaló en su pecho, haciendo sus manos puños y enterrando sus propias uñas en ella-No entiendo nada de esto Nam ¿Qué pretendes que crea? ¿Qué Taehyung es inocente y no se acostó con nadie? Porque déjame decirte que "eso" no llegó solo a su vientre.

-"Eso" es tu cachorro Jungkook.

Una carcajada vino a su boca sin poder contenerla-Soy un omega Nam, eso es imposible ¿Quieres hacerme sentir un tonto al igual que Taehyung?

-Taehyung es especial.

-Oh créeme que lo sé-respondió sarcástico el pelirrojo.

El alfa negó con la cabeza, mientras buscaba algo en su bolsillo -Antes de que Taehyung confirmara su embarazo, yo le estuve haciendo unos exámenes. Tu omega estuvo con náuseas y vómitos Jungkook y su vientre dolía por eso acudió a mí. Yo le hice unos estudios, pero él se negaba al igual que tú a creer-estiró una de sus manos para entregar aquel papel al omega, quien reticente lo recibió.

El pelirrojo lo miró intentando procesar sus palabras-Él nunca me dijo acerca de eso...

-Es porque no quiso ilusionarte y como te dije antes, incluso él mismo no lo consideraba posible-Jungkook sintió su respiración agitarse, no podía ser verdad-Luego que tuve los resultados que lo confirmaban, un pequeño feto estaba alojado en su útero. No me preguntes como, ustedes de alguna forma lo hicieron y Taehyung hizo posible que tu cachorro sobreviviese en aquel lugar-las manos del omega comenzaron a temblar y su lobo solo empezó a asumir la razón por la que no dejó de llorar durante todo ese tiempo-Taehyung estaba asustado ¿y sabes lo que le dije aquel día? Que no debía preocuparse, pues tú estarías con él-el alfa miró hacia el techo con una mueca de risa, que rápidamente se transformó en una de dolor-Él solo asintió y básicamente me ha mentido todos estos meses. Hasta hoy q-que sin darse cuenta m-me ha dicho que ustedes ya no e-están juntos y...

Namjoon no pudo evitar llorar, él había visto como Taehyung se había ido apagando durante los cinco meses que llevaba su embarazo. Su parte humana y lobo se sostenían solo de aquella vida que crecía dentro de ellos.

El pelirrojo respiraba agitado, llevando sus manos hacia sus ojos intentando limpiar aquellas lágrimas que estaban cayendo irremediablemente. Girándose y pegando un grito desgarrador, mientras un llanto de dolor comenzaba a salir de su boca.

El alfa sin poder contenerse le tomó y abrazó. Una infinidad de emociones pasando a través de ellos.

-¡Maldición Namjoon!-el omega se estremecía bajo sus brazos, sintiendo un desconsuelo consumirle los huesos-¡Le falle maldita sea!-Taehyung no le había mentido, más él no le creyó aquel día. Lo había lastimado. A ambos. A él y su pequeño bebé- ¡¿Dime como deja de doler?! ¡Me duele Nam, me duele!- Jungkook se aferraba a los hombros de su amigo, mientras el llanto no cesaba. Difícilmente lo haría ese día.

-Debes calmarte Jungkook- le dijo mientras no dejaba de sostenerlo. Namjoon sabía que su amigo de había equivocado y el daño que había causado tardaría en sanar. Pero él le amaba, a él y Taehyung. Y sabía de la forma devota en que ellos se amaban. Se debían otra oportunidad. Por su pequeño cachorro, pero sobre todo por ellos mismos -Tu bebé te necesita.

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