El día tan esperado para Yunho por fin llegó era momento de irse a dónde sería la boda de su adorada tía que le iba a regalar la casa de playa que tenía, ya se imaginaba con Jongho y con sus otros tres amores. Estaba todo listo, se despidieron de los padres del menor y dejaron ahí a Gizer, Honey y Hoho, por esa ocasión no podrían ir.

Sería un viaje de un par de hora sólo porque Yunho no quiso pagar los boletos de avión y tampoco le permitió a su novio hacerlo.

—Tacaño— Murmuró San— ¿Que te costaba pagar ocho boletos de avión?

—¿Que les costaba a ustedes pagarlos?— Devolvió la pregunta— Ustedes creen que yo tengo suficiente dinero para gastar— Todos incluído Jongho asintieron.

—Jeong, estamos llendo a la boda de tu tía que te va a regalar una casa de playa, tú familia tiene dinero de sobra.

—Y la vieja tacaña no nos regaló los boletos— Farfulló— Pero pues ya que, amor ¿Te sientes seguro de querer hacerlo?

—Ya te dije que si— Yunho asintió.

—Sera un viaje aburrido— Se quejó Yeosang— Aún estamos a tiempo de ir al aeropuerto e irnos en avión.

—¿Tienes dinero?— Le preguntó al pelinegro mirándolo por el retrovisor, este bufo— Eso creí.

Como el viaje sería aburrido Yeosang decidió dormir para no fastidiar a su novio y Seonghwa decidió colocarse los audífonos para escuchar música y también abrazó al menos por comodidad de este, Wooyoung y San iban jugando con su teléfono ignorando todo, Mingi y Hongjoong sólo se mimaban lo cual le parecía extraño a Yunho.

—Sabes si te llegas a asustar o algo por el estilo, dímelo y no subimos— Jongho lo miro.

—Todo va a estar bien, tú pareces más preocupado que yo— El pelinegro asintió— No pasará nada.

—Si por alguna razón cayeras no dudes que me lanzaría a salvarte— El menor sonrió.

—Y es por eso que no me preocupo, sé que ahí estarás para mí— Tomo una de las manos del menor para besarla— Te amo.

—Tambien te amo.

[...]

Todos sonrieron al llegar, por alguna extraña razón ya era noche y Yunho había dicho que no tardarían más que un par de horas.

—Ahora dinos que tenemos que pagar para registrarnos— El más alto negó y comenzaron a caminar.

—¿Yunho ya sabe que Jonggie salió con uno de sus primos?— Preguntó Hongjoong.

—No— Respondió San— Y eso será divertido— Murmuró.

Al entrar los recibieron sin problemas después de que Yunho dijera que era sobrino de la novia y dueña del hotel.

—Una habitación para ustedes— Le entrego una tarjeta a Mingi— Otra para ustedes— Y a Seonghwa y San— Los vemos en el almuerzo.

—¿Jongho?— San sonrió, el menor volteó.

—¿Con mi primo?— Jongho se encogió de hombros.

—Me hacías enojar ¿Que esperabas? Si nos vamos a la habitación quedarán cero días— Yunho miro a su primo y después cargo al pelirrojo ¿Para que enojarse si podía estar con su novio?

—No le va a durar— Murmuró San mientras jalaba a su novio— ¿Saliste o algo con algún familiar de Jeong?— Le preguntó a Wooyoung.

—No que yo recuerde...

—Pues mas te vale que recuerdes, por si las dudas— Se detuvo justo dónde habían un par de personas para besarlo.

—No va a cambiar— Murmuró Yeosang—¿Y tú Hwa?— El mayor negó— Te creeré, pero estoy seguro de que llamaste la atención de más de uno.

—La única atención que quiero es la tuya— Murmuró para que solo Yeosang lo escuchará.

—Te amo— Beso su mejilla y lo jaló para irse a su habitación

[...]

Jongho se removió en la cama logrando despertar a Yunho quien estaba por quejarse y pedirle que dejara de hacer eso, pero le resultó extraño pues su novio nunca hacía eso cuando estaba dormido, encendió una lámpara y notó que tenía los ojos cerrados y soltaba pequeños quejidos, estaba teniendo una pesadilla.

—Jonggie, amor— Lo sacudió un poco— Amor despierta— En segundos Jongho se despertó soltando un pequeño grito, se escondió en el pecho del mayor y empezó a sollozar— No pasa nada, fue una pesadilla— El menor negó, lo que había soñado si había pasado— Amor...

—S-soñe cuando m-me arrojó al a-agua p-por diversión— Balbuceó.

—¿Quien?— El pelirrojo lo miro.

—Sunghyuk— Murmuró, Yunho fruncio el ceño al escuchar el nombre de su primo— N-no quiero, perdón.

—No pasa nada, te dije que lo entendía— Beso su frente— Yo le explicó que no podré estar ahí.

—Tú querías esa casa— El pelinegro negó

—Ninguna casa es más importante que tú, estamos hablando de tu bien... Y ese idiota lamentara haber hecho lo que hizo— Jongho no dijo nada prefirió ser mimado.

[...]

Hongjoong se sentó aún lado de la ventana aprovechando que te la un gran espacio para poder sentarse, miraba con gran concentración el mar estaba feliz de tener esa gran vista. Volteó a la cama donde estaba su novio profundamente dormido y sonrió esa vista también le gustaba, se levantó para ir por un vaso de agua y después regresar, por alguna extraña razón no tenía nada de sueño y eso le frustraba un poco, también podía ser porque en la habitación de a lado estaban San y Wooyoung, pero no iba a culparlos en todos sus años de amistad con ellos ya se había acostumbrado a poder dormir con aquellos ruidos.

—¿Almendrita?— Hongjoong se sentó en el suelo a un lado de la cama—¿Por qué estás despierto?

—No tengo sueño, pero tú descansa— Acarició su mejilla.

—Estaras toda la noche solo— Hongjoong negó.

—Sólo duerme Gi— Le sonrió— Descansa.

—Pero no estás aquí aún lado— El mayor rio bajito— Y ya estoy escuchando a San.

—Mejor aprovecha que aún tienes sueño y duerme— Mingi tomo la mano de su novio y la besó.

—No creo lograr dormir— Respondió— Y no me molesta estar contigo despierto.

—Mañana te vas a arrepentir— El castaño negó.

—¿Por qué me voy a arrepentir?¿Por haber estado despierto junto a mi almendrita?— Se sentó en la cama y talló su rostro—¿No te molestan los ruidos de esos dos?— El rubio se encogió de hombros.

—He escuchado cosas peores, con los años me acostumbré— Se levantó del suelo para subir a la cama.

—En realidad ya nada que venga de ellos te sorprende ¿Cierto?

—Que te digo, todo lo que venga a San y Jongho no me sorprende pero por ellos y no me preocupo por Yeosang— Mingi sonrió

—Enseñame a ser como tú— El mayor negó.

—Para eso tendrías que estar en la misma habitación donde están ellos— Mingi reflexionó las cosas.

—Estoy bien así, no quiero traumas permanentes— Hongjoong se rió del menor.

Por horas se la pasaron platicando de cualquier cosa que se le ocurriera a Mingi, gracias a eso Hongjoong ya tenía un nuevo apodo que como los demás le gustó, en algún momento de la noche ambos habían caído profundamente dormidos. El más alto abrazando por la cintura al mayor y este acurrucada en el pecho contrario, ambos disfrutaban dormir lo más juntos posible cuando estaban juntos.