27

Yeosang, San, Mingi y Wooyoung miraron extrañados a Yunho desde que había llegado estaba  actuando muy extraño y ellos estaban curiosos por saber que le ocurría.

—¿A este que le pasa?— Preguntó Mingi al menor.

—Trata de verse intimidante— Murmuró— Pero yo creo que se ve muy lindo— El pelinegro lo miro y alzo una ceja— Si sigues siendo lindo— Pellizco sus mejillas.

—Amor— Reprochó— Trato de ser intimidante, no puedes decir que me veo lindo y después jugar con mis mejillas.

—Nada me hará cambiar de idea, eres muy tierno— Siguió jugando con sus mejillas ignorando los reproches de su novio, nada haría que él dejara esos suaves cachetitos.

—Jongho— Yunho fruncio el cuando el menor dejo sus mejillas para prestarle atención a Bomin.

—¿Jongho?¿Ya no soy tu bebé?— Yunho se desconcertó.

—Deja eso para después, se me olvidó el trabajo— La sonrisa del pelirrojo desapareció.

—¿Qué? Choi Bomin dime que estás jugando porque de lo contrario volverás a ser virgen— El rubio chilló.

—Esto ya es divertido— Murmuró Yunho mientras le quitaba la comida a Yeosang.

—Tú también volverás a ser virgen si te sigues comiendo mi comida— El pelinegro comenzo a quitarle la comida a Mingi.

—No es mi culpa, Eric también olvidó su parte del trabajo— A Jongho le apareció un tic.

—Corre Choi porque si te alcanzo desearas jamás haberme conocido...

—Y ojalá jamás lo hubieras conocido— Murmuró su novio.

—¡Y dile lo mismo a Eric! Ya vuelvo amor— Besó su frente y se fue a seguir al rubio.

—Es una ternura, ahora sí puedo seguir siendo intimidante.

—No lo eres— Bramó San—¿Aún no superas lo de Bomin?

—Fueron novios...

—¡Por dos días! Deberías tratar de llevarte bien con Bomin, Jongho lo hizo con Ahin— Mingi asintio a lo que Yeosang dijo.

—Fueron casos distintos, no me voy hacer amigo de ese... Tengo demasiados motivos para no querer ser amigo de Bomin

—¿Cómo cuáles?— Cuestionó San mientras comía con tranquilidad.

—No pienso seguir hablando—San y Yeosang negaron.

[...]

Jongho dejo su tazón de cerezas en la mesita del centro y envío a Honey a jugar con Hoho para mirar a su novio quien le estaba haciendo muecas al teléfono.

—¿Que pasa?— El mayor lo miro y negó— Yunho.

—Una de mis tías se va a casar y nos está invitando, también mi mamá me está obligando.

—¿Que tiene eso? No le veo nada malo— Murmuró.

—La señora tiene un gran yate y ahí se va a casar, a fuerza quiere que te lleve— El menor asintió un poco sorprendido— No podía hacer algo normal— Jongho se levantó.

—Podemos ir, ya pasó un año creo que está bien— Yunho negó.

—Gordi, yo podré querer esa casa en la playa junto al yate, pero sobre todo quiero tu bien— Beso su frente— Total sus matrimonios no duran mucho, se va a volver a casar.

—Tu familia es extraña, ¿Quién regala casas por ir a su boda?

—La única que tiene demasiadas propiedades— El menor lo miro— Pero no pasa nada, no necesito una casa en la playa y un yate cuando te tengo a tí— Lo tomo para sentarlo en su regazo.

—Mis cerezas— Yunho le alcanzó el tazón y se lo entrego.

—Sigo sin comprender ¿Por qué te las comes solas?

—Asi me gustan— Respondió para después meter una cereza a su boca— ¿Dónde está Mingi?

—¿Por qué quieres saber?— Jongho se encogió de hombros.

—Es raro que no esté aquí a esta hora— Murmuró— Podemos ir a la boda de tu tía, tú me vas a cuidar y yo confío en tí.

—¿Estás seguro?— El pelirrojo asintio— Le diré a mi tía que ni se le ocurra dar la casa en la playa, amor ya tenemos otra casa— Jongho sonrió y se acurrucó contra él.

—Jongho necesito un favor— El menor volteó a ver al castaño.

—¿Tiene que ver con Hongjoong?— Mingi asintio— Te escucho— Murmuró mientras metía otra cereza a su boca.

—Les aviso que estoy aquí— Jongho beso la mejilla de su novio.

—Bueno dime qué necesitas, aprovecha que estoy de bueno humor— Yunho bufo, el menor sólo sonrió—¿Entonces?

—Me da algo de vergüenza decirlo frente a Jeong, de por sí contigo— Jongho asintio creyendo de que se trataba.

—Que interesante, ya decía yo que por algo me necesitabas a mí, vamos de compras— Se levantó para ir a dejar si tazón de cerezas.

—Robaste la atención de mi novio, tú no estarás invitado a la casa de playa.

—No tienes una casa en la playa para empezar— El mayor rodó los ojos.

—La tendré, en unos días será mía y de mi gordi— Mingi alzo una ceja— También de Gizer, Honey y Hoho.

—Yunho vamos, tengo que acompañar a Mingi para que le compré algo a Joongie— El pelinegro asintió.

[...]

Wooyoung negó al ver cómo su novio quería vestirlo para ir a visitar a su madre.

—Bichito, te tienes que ver más guapo para mi mamá— El pelinegro negó, no había forma de que se vistiera con ropa que no era de su agrado— Bichito.

—San, te amo pero no me voy a poner algo que no es de mi agrado, ni siquiera para tener una buena presentación— El pelirosa bufo— Lo lamento dulzura.

—Bueno pero si mi mamá te dice vago no busques mi apoyo— Se cruzó de brazos.

—Siento que tu madre tiene tus encantos y los de Chan...

—¿Y tú cómo conoces los encantos de Chan?— Alzo una de sus cejas.

—Es tu mellizo no es muy difícil deducir que tienes cosas en común.

—Chan y yo no somos tan iguales, hay demasiadas cosas en las que no coincidimos— Wooyoung sólo sonrió y beso su mejilla— Bueno, debemos estar listos porque mi mamá tiene un conflicto con la impuntualidad, quizás también por eso se divorcio de mi papá.

—¿Y quién no? Tu papá nos dice a las cinco y llega a las seis— El mayor sonrió.

—Aun debo conseguirle novia, no quiero que se quede solo el resto de sus días, así como él quiere que nosostros seamos felices, nosotros queremos que el sea feliz con alguien.

—¿Cómo le estará llendo a tu hermano con Junhui?

—Ni idea, espero que bien, por cierto mi mamá es algo rara tiene sus momentos divertidos así como sus momentos serios, si ella se muestra indiferente ni trates de hacerla reír o te aborrecera y yo no quiero que eso pase— Tomo sus mejillas para besarlo— Y no menciones a Jongho, ya sabes no le cae bien.

—Entiendo.

—Bichito, si no le llegas a caer bien te prometo que no volveremos a comer con ella— Wooyoung asintió— Te amo.

—Tambien te amo dulzura, bueno debemos terminar de arreglarnos— San le sonrió para asentir y terminar de vestirse.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top