«𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 𝗇𝗎́𝗆𝖾𝗋𝗈 𝗌𝗂𝖾𝗍𝖾»... [𝖮7]

❝𝗥𝗲𝘃𝗲𝗹𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝘀𝗶𝗹𝗲𝗻𝗰𝗶𝗼𝘀𝗮𝘀❞

La noche caía lenta y pesada, como un telón que apenas deja entrever lo que ocurre tras bambalinas. Jennie estaba sentada en un pequeño café del centro, jugando con la cucharilla de su té mientras su mente vagaba en un torbellino de pensamientos. Había recibido el mensaje de Lalisa hacía unas horas, pidiéndole que se reunieran. A pesar de la aparente neutralidad en las palabras, Jennie sabía que aquella conversación era inevitable, y su pecho se apretaba con una mezcla de ansiedad y anticipación.

Cuando Lalisa finalmente apareció, irradiando esa seguridad característica que parecía envolver todo a su alrededor, Jennie sintió que el tiempo se detenía. Llevaba un atuendo sencillo, pero había algo en la forma en que sus movimientos parecían fluir con naturalidad que le robaba el aliento. Sin embargo, la expresión en su rostro no era tan ligera como de costumbre. Había una seriedad, una carga que Jennie no podía ignorar.

━ Hola ━ dijo Lalisa, tomando asiento frente a ella. Su voz era suave, pero no cálida, como si estuviera cuidadosamente medida.

━ Hola ━ respondió Jennie, intentando mantener la calma. ━ Gracias por venir.

━ Supongo que era necesario ━ comentó Lalisa, clavando sus ojos en los de Jennie. ━ Hay cosas que debemos aclarar, ¿no crees?

El silencio que siguió fue breve, pero lo suficientemente incómodo como para que Jennie sintiera un nudo formándose en su garganta. Tomó un sorbo de su té, más para ganar tiempo que por necesidad, y luego dejó la taza con un leve tintineo.

━ Supongo que sí ━ admitió, finalmente, bajando la mirada. ━Lisa, yo…

━ Espera ━ interrumpió Lalisa, alzando una mano con delicadeza pero firmeza. ━ Déjame empezar yo.

Jennie asintió, nerviosa, mientras Lalisa se recostaba ligeramente en su silla, cruzando los brazos frente a ella.

━ No puedo negar lo que siento ━ comenzó Lalisa, sin rodeos. ━ Desde el primer momento en que comenzamos a hablar más, hubo algo… algo que no puedo ignorar. Me atraes, Jennie. No solo físicamente, sino… de una manera que no sé cómo explicar.

Jennie sintió un escalofrío recorrerle la espalda. Las palabras de Lalisa resonaban con una honestidad que pocas veces había experimentado.

━ Lisa ━ murmuró, tratando de interrumpir, pero Lalisa levantó la mirada, obligándola a callar.

━ Déjame terminar ━ dijo, con un tono que no admitía discusión. ━ No puedo negar que hay algo entre nosotras. Lo siento cada vez que estamos cerca, cada vez que te veo. Pero hay algo más que no puedo ignorar.

Jennie tragó saliva, sintiendo cómo la tensión se acumulaba en el aire.

━ Sé que estuviste con mi hermano ━ soltó Lalisa, finalmente, y aunque su tono no era acusatorio, sus palabras cayeron como un martillo.

Jennie se tensó, apartando la mirada, incapaz de enfrentar los ojos de Lalisa.

━ No fue…━ comenzó a decir, pero se detuvo. ¿Qué podía decir realmente? Cualquier explicación sonaría vacía.

━ No estoy aquí para juzgarte ━ continuó Lalisa, su voz más suave ahora. ━ Sé que las cosas con Jungkook no eran serias. Y sé que no estoy en posición de reclamar nada. Pero no puedo evitar sentirme… incómoda.

Jennie levantó la mirada, sorprendida por la franqueza de Lalisa. Había esperado reproches, tal vez incluso un enfrentamiento, pero lo que encontró fue algo completamente diferente.

━ Lisa, yo… no sé qué decir ━ confesó Jennie, con un susurro. ━ Lo que pasó con Jungkook no significa nada para mí ahora. Ni siquiera estoy segura de por qué pasó.

━ No tienes que explicarlo ━ respondió Lalisa, con una leve sonrisa que no llegó a sus ojos. ━ Solo necesitaba decírtelo. Quería que lo supieras porque, a pesar de todo, no quiero que esto…━ hizo un gesto entre ambas. ━…sea una mentira.

Jennie asintió lentamente, sintiendo cómo las palabras de Lalisa se hundían en su pecho.

━ Lisa, lo último que quiero es herirte ━ dijo, con sinceridad. ━ Y si esto significa que necesitas tiempo o espacio, lo entiendo. No quiero presionarte.

Lalisa se inclinó hacia adelante, apoyando los codos en la mesa y entrelazando las manos. Sus ojos, tan intensos como siempre, se suavizaron un poco mientras miraba a Jennie.

━ No quiero alejarme de ti ━ admitió, finalmente. ━ Pero tampoco puedo pretender que esto no me afecta. Así que, por ahora, creo que lo mejor es que dejemos las cosas… en el aire.

Jennie sintió un dolor punzante en su pecho, pero asintió.

━ Si eso es lo que necesitas ━ dijo, con una voz apenas audible.

Lalisa asintió también, pero su expresión mostraba que la decisión no le resultaba fácil. Ambas permanecieron en silencio durante unos minutos, cada una perdida en sus propios pensamientos, mientras el bullicio del café seguía a su alrededor como un recordatorio de la realidad.

━ Gracias por ser honesta ━ dijo Jennie, finalmente, rompiendo el silencio.

━ Es lo mínimo que podía hacer ━ respondió Lalisa, esbozando una pequeña sonrisa.

Cuando ambas se levantaron para marcharse, Jennie sintió que algo había cambiado. La conexión seguía allí, pero ahora estaba teñida de una complejidad que no sabía si sería capaz de manejar. Mientras observaba a Lalisa alejarse, supo que aquello no había terminado. Apenas era el comienzo de algo mucho más profundo y peligroso.

La tarde caía sobre la ciudad con una tibieza que parecía calmar el espíritu, aunque el interior de Taehyung estaba lejos de estar en paz. Había accedido a pasar el día con Jungkook en el pequeño estudio de arte al que este último solía acudir para despejarse, un espacio inundado de luz natural y con un aroma a pinturas y madera vieja que invitaba a quedarse. Para Taehyung, estar cerca de Jungkook había dejado de ser una experiencia neutral hacía tiempo; algo en su presencia le desconcertaba, lo hacía sentirse observado de una manera que era al mismo tiempo inquietante y adictiva.

━ ¿Seguro que no quieres intentarlo? ━ preguntó Jungkook, extendiéndole un pincel y una paleta de colores. Su sonrisa era amplia, casi infantil, pero había un brillo en sus ojos que Taehyung no podía ignorar.

━ No soy bueno en esto ━ respondió Taehyung, negando con la cabeza. ━ Prefiero observar.

━ Eso dices porque no lo has intentado ━ insistió Jungkook, dando un paso más cerca, lo suficiente como para que Taehyung sintiera el calor de su cuerpo. ━ Ven, te enseño.

Antes de que pudiera protestar, Jungkook tomó su mano y la guió hacia el pincel. El contacto fue eléctrico, una descarga que recorrió a Taehyung desde la punta de los dedos hasta el fondo de su pecho. Se quedó inmóvil, demasiado consciente de la cercanía de Jungkook, de cómo su aliento apenas rozaba su mejilla mientras le explicaba algo sobre los trazos y la mezcla de colores.

━ ¿Ves? No es tan difícil ━ dijo Jungkook, pero su voz sonaba más baja ahora, casi un susurro.

Taehyung asintió sin decir nada, incapaz de concentrarse en otra cosa que no fuera la línea de la mandíbula de Jungkook, el modo en que sus labios se curvaban ligeramente al hablar. Algo en su interior le gritaba que se alejara, que aquello era peligroso, pero sus pies parecían enraizados al suelo.

━ Creo que ya entiendo ━ dijo finalmente, intentando tomar el control de la situación.

━ ¿De verdad? ━ Jungkook lo miró directamente, sus ojos oscuros sosteniendo la mirada de Taehyung con una intensidad que lo desarmó.

El silencio se extendió entre ellos, cargado de algo que ninguno de los dos se atrevía a nombrar. Fue Jungkook quien dio el siguiente paso, soltando el pincel y la paleta para tomar suavemente el rostro de Taehyung entre sus manos.

━ Taehyung ━ murmuró, su voz apenas audible. ━ ¿Puedo…?

No terminó la frase, pero no era necesario. Antes de que Taehyung pudiera responder, Jungkook cerró la distancia entre ellos y lo besó.

El beso fue suave al principio, casi inseguro, pero rápidamente se transformó en algo más profundo, más urgente. Taehyung sintió que el suelo desaparecía bajo sus pies, como si el mundo entero se redujera a ese momento, a la forma en que los labios de Jungkook se movían contra los suyos, a la presión de sus manos todavía en su rostro.

Cuando finalmente se separaron, ambos estaban sin aliento. Taehyung abrió los ojos lentamente, encontrándose con la mirada de Jungkook, llena de algo que no pudo identificar de inmediato.

━ Lo siento ━ dijo Jungkook, rompiendo el silencio. ━ No debí…

━ No lo sientas ━ interrumpió Taehyung, su voz más firme de lo que esperaba. ━ Yo también…

Se detuvo, incapaz de terminar la frase. No estaba seguro de qué significaba aquello, de lo que sentía realmente, pero sabía que no quería que terminara ahí.

Jungkook sonrió, esa sonrisa torcida que siempre parecía contener un secreto.

━ Entonces no lo lamentaré ━ dijo, y esta vez fue Taehyung quien cerró la distancia, capturando sus labios en un segundo beso, más seguro, más decidido.

En ese instante, todo lo demás desapareció: el estudio, la luz de la tarde, incluso el peso de las preguntas que inevitablemente seguirían. Taehyung se permitió perderse en el momento, en la calidez de Jungkook, en la sensación de que, aunque fuera solo por un segundo, todo estaba bien.

Cuando finalmente se separaron de nuevo, Taehyung se quedó mirándolo, su mente una maraña de pensamientos y emociones.

━ Esto…━ comenzó a decir, pero no sabía cómo continuar.

━ No tienes que decir nada ━ dijo Jungkook, tomando su mano con delicadeza. ━ Solo quería que supieras cómo me siento.

━ Yo…━ Taehyung vaciló, pero finalmente apretó la mano de Jungkook en la suya. ━ Esto es nuevo para mí.

━ Para mí también ━ admitió Jungkook, y había algo en su tono que hizo que Taehyung sintiera que estaba siendo completamente sincero.

El momento fue interrumpido por un ruido lejano, el sonido de la puerta principal abriéndose. Ambos se separaron rápidamente, demasiado conscientes de que estaban en un lugar público.

━ Deberíamos irnos ━ dijo Jungkook, y aunque su tono era casual, había una chispa en su mirada que no pasó desapercibida para Taehyung.

━ Sí, claro ━ respondió, pero mientras recogían sus cosas, no pudo evitar que su mente volviera una y otra vez a lo que acababa de ocurrir.

A medida que caminaban juntos hacia la salida, Taehyung sintió que algo dentro de él había cambiado. No estaba seguro de qué significaba todo aquello, pero una cosa era clara: ya no podía ignorar lo que sentía por Jungkook. Sin embargo, lo que no sabía era que aquel momento era solo el comienzo de algo mucho más complicado. Y aunque su mente estaba llena de preguntas, había una que no podía dejar de hacerse: ¿qué secretos ocultaba Jungkook detrás de esa sonrisa que parecía invitarlo y advertirle al mismo tiempo?

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Ⓒ︎𝖧𝖨𝖲𝖳𝖮𝖱𝖨09