Después de la escena de celos en la playa. Jimin y Jungkook decidieron irse a la casa de campo dónde ahora ambos hacían la cena.

Jimin había tenido la idea de comer en el jardín, tendió una sábana en el suave pasto dónde las vista era más que preciosa. Puso varios cojines alrededor, también luces que encontró en la caja del sótano. Las enredó alrededor de los arbustos para darle un toque más estético y romántico.

Había quedado sumamente perfecto.

Después se fue a lavar los dientes y rasurar varias partes de su cuerpo, no quería parecer hombre lobo cuando las cosas vayan más allá. Quería hacerlo bajo una hermosa noche, quería que todo fuese perfecto y por supuesto sería así.

Jungkook, por otra parte, dejó los platos ya servidos para su cena con su novio. Miró fijamente la ventana donde el hermoso sol estaba por ocultarse, era preciosa la vista. Tomó los platos y los llevó afuera dejándolas sobre la manta, el lugar que decoró su novio era perfecto, tenía buenos gustos eso lo debía admitir.

El rubio miró por el ventanal a su novio acomodar los platos, trago grueso y se dio ánimos. Salió acercándose a la manta, Jungkook le sonríe tomando asiento junto a él.

─Espero que te gusten los macarrones con queso y lasaña, también traje vino.

─Se mira delicioso, ¿podemos tomar siendo menores?

─Claro que sí. No hay adultos mirándonos, podemos hacer lo que queramos.

Eso lo dijo en doble sentido, sirvió el vino en las copas entregando una de ellas.

─Esto es tan romántico y cursi como las películas que veo, creo que me gusta ahora que lo estoy viviendo yo. ─Come un bocado de macarrones, estaba todo delicioso─ Está delicioso. Cuando nos casemos espero que me puedas cocinar así.

Jeon trago lo que comía el sólo imaginar una vida a lado del chico que le gusta y quiere, era un sueño para él.

─¿Te quieres casar conmigo? Digo, en un futuro. ─Se atreve a preguntar.

Jimin no se había dado cuenta de sus palabras, querer más que un noviazgo con el hombre que tenía enfrente era algo de mucho pensarlo, no sabía si su amor se terminaría de un día a otro, eran cosas que lo asustaban. Aun así, pensar en que un día todo termine le hacía doler el corazón, él quería estar con él, es el primer chico que le gusto, el primero en todo la verdad.

Una vida juntos ¿sería posible?

─Si seguimos juntos, podríamos hacerlo─ bebió el vino, prácticamente de un solo tragó lo terminó─ Me- me gustas mucho, apresar que te odiaba, ahora me gustas mucho, tanto que me aterra.

Jeon apartó los platos a una orilla del jardín, se acercó a su novio prácticamente quedando encima de él, Jimin no se inmutó, abrazo su cuello mirando esos ojos negros y grandes de su Jungkook.

─A mi también me aterra, pero estoy seguro de que si seguimos juntos en el futuro podremos hacer una familia. Aún somos jóvenes, aún tenemos una vida que descubrir, no sé si cuando me vaya a la universidad al extranjero, tú te canses de esperar y te vayas con alguien más. Es un miedo que me carcome la mente, me duele sólo pensarlo.

Negó rápidamente el rubio, como si en su vida él quisiera hacer eso.

─Si te vas y aún estamos juntos, te prometo esperar por ti. Jamás me cansaré de esperarte porque eres mi kook, mi tormento más dulce. Si en un momento es al revés, te juro y prometo que te fastidiare con todo mi amor hasta que te vuelvas enamorar de mí.

Le dice totalmente seguro. Jeon delinea sus labios esponjosos con su pulgar, un toque sutil que le hizo dar muchos escalofríos al menor.

─¿Tú serás mi dulce tormento ahora? ─Asintió el menor abriendo la boca al sentir la mano grande de Jungkook dentro de su camisa, tocando su suave piel.

─¿Así como tú lo fuiste conmigo?

─Entonces disfrutaré de ser acosado por ti.

Cortó sus palabras con un beso, uno que inicio lento, pero con el pasar de los segundos se intensificó. Se tocan sutilmente, apartando las prendas del otro con sumo cuidado.

Jimin cerró sus ojos dejándose llevar por los toques que su novio le daba, como si fuera la primera vez que le tocaba de manera delicada: bueno así era. Desde la misma posición desabrochó su pantalón de mezclilla, al igual que su bóxer dejándolo desnudo, mientras él le acariciaba cada parte de su pequeño cuerpo.

Fue precioso verlo desnudo, fue perfecto.

Sus manos recorriendo sus muslos, de abajo arriba. Lento y tortuoso para el pelinegro. Abrió su boca dejándose llevar, la noche cayó, sólo los alumbraba las luces de los arbustos y la hermosa luna. Se giró Jimin para poder hacer lo mismo con él, desnudo su cuerpo tan grande, ese cuerpo que lo vuelve absolutamente loco el sólo verlo.

Se miraron un par de segundos para acercarse y besar con lujuria y pasión. Recorrieron todo su cuerpo con besos, dejando pruebas del delito en sus muslos, torso, pelvis, clavículas y cuello. Jeon tomó un condón que tenía en su pantalón. Jimin sabía lo que venía, por eso en el baño se preparó él mismo con sus dedos para no perder el tiempo, estaba muy caliente e impaciente por sentirlo dentro.

─Tengo que prepararte, bonito. ─Susurro besando su cuello, pasando su lengua por su mandíbula.

Jimin negó.

─Y- ya lo hice por los dos, sólo tienes que entrar y listo.

Jeon mordió el cuello delicado de su novio sacándole un jadeo.

─Mi bonito travieso, eso me encanta. ─Se colocó el condón en su grueso falo. Jimin lamió sus labios por inercia.

Jungkook entró de una sola estocada, Jimin arqueo la espalda, aferrándose a su ancha espalda. Fue magnífico y doloroso. Palabras como Fuck, god, no tardaron en salir de su hermosa boca. Jeon le daba tan duro que Jimin arrancaba pastito del césped ante las estocadas, disfrutando de las estrecheces de su novio, disfrutando que al fin ambos unían sus cuerpos.

Jimin se aferraba, se sentía en la galaxia, le hacía ver cosas que solamente él podía hacerle ver y sentir. Beso, su cuello, sus delgados labios los cuales mordió para callar sus gemidos. Jungkook lo tomó por el cuello embistiéndolo más y más fuerte, Jimin no podía respirar, pero le encantaba a la vez. Lo abrazo con sus piernas escuchando el chapoteo de sus nalgas contra sus testículos.

Música perfecta.

─Mmg... ¡Más! ─pidió gimiendo.

─Mi bonito... Te amo.

La palabra te amo salió al fin, Jimin sabía el significado, todo lo que él sentía en todo ese tiempo era un te amo atorado en su corazón, así que él también lo dijo.

─Te amo también, kookie.

Un siempre palabra volvió loco sus jóvenes corazones.

Salió de él para voltear su cuerpo, quedó boca abajo el menor. Levantó un poco sus nalgas dónde dio varias nalgadas dejándolas con la marca de sus manos y dedos. Eso le éxito más, no tardó en volver a penetrarlo para embestir más y más.

Pasa ser su primera vez, lo hacían con mucha experiencia.

El menor se aferraba a la manta sobre él, de su boca salía un rastro de saliva, su novio daba en ese punto que lo enloquecía, estaba muy adentro. Jeon beso su espalda baja, dando mordidas en toda su piel, como siquiera arrancar su carne. Lo volvía loco, todo de su novio lo volvía loco.

Su cuerpo estaba sumamente sudado, el del menor también. El éxtasis que sentía fue tan grande que dejaron salir el gruñir más grande que pudieron dar. El orgasmo se hizo presente en sus cuerpos, Jeon se vino dentro del condón, y Jimin sobre la sabana.

Estaban sumamente agotados, Jeon cayó en la espalda de su rubio recuperando la respiración. Salió de él, quitó el condón haciendo un nudo para tirarlo. Jimin se dio la vuelta demasiado cansado, tenía la intención de acostarse sobre su pecho y dormir, pero fue alzado como tal Princesa por Jungkook. Completamente desnudos al aire libre, que bueno que no tenían vecinos.

─¿Adónde me llevas?

─A la habitación, no pensaste que te dejaría dormir en el jardín ¿verdad?

El menor negó. Fue dejado sobre la cama, ahora sí se acurruca sobre el pecho del pelinegro siendo abrazado por este.

─Te amo, Jeon Jungkook. Mi fastidioso y Dulce Tormento.

─Te amo más, Park Jimin. Mi chico celopata y extremadamente adorable.

─Ahora estoy seguro de que quiero estar contigo el resto de mi vida. ─Murmuró, se estaba quedando dormido.

─Y yo estoy seguro de que quiero formar mi familia contigo─ Le dio un suave piquito a sus labios rojizos y esponjosos para caer completamente dormido junto a él.

Sin duda su primera vez sería la primera de todas la que vendrían. Esas promesas de un futuro tal vez se harían realidad. Ellos se amaban y así como era de fuerte su amor, llegarán a formar una hermosa familia.

Del odio al amor, sólo hay un paso. Jimin fue testigo de eso, pues se enamoró de su Dulce Tormento.

{🐰🐥}

7 años después.

Un hermoso jardín repleto de tulipanes y rosas blancas, hacían ver tan mágico aquel lugar donde contraria matrimonio la hermosa pareja.

Los años pasaron tan deprisa para Jimin y Jungkook: quienes aún seguían juntos, después de que su amor surgió en la preparatoria. Ambos se hicieron promesas en aquella casa de campo, dónde la hermosa noche y luna fueron testigos de su amor. Unieron sus cuerpos esa noche, ahora unirían sus almas en matrimonio.

Fueron tantos momentos felices que estos dos tuvieron. En toda su larga relación, y aunque no fue perfecta, hubo peleas, lágrimas, risas, molestias y reconciliaciones. Hubo perdón, amor y sexo por supuesto. En una relación nada era como los cuentos de hadas, pues eso se demostró cuando Jeon se graduó del instituto para estudiar en el extranjero, Jimin se quedó solo por 4 años en espera de su gran amor. Fue el reto más complicado, aún así se veían en vacaciones o fiestas navideñas.

La distancia fue dura, pero más no imposible.

Ahora que estaban de nuevo juntos. No perdieron el tiempo y decidieron unir sus vidas en sagrado matrimonio. Sus padres, los de ambos. Les dieron su permiso para contraer nupcias, sabían lo enamorados que sus hijos estaban, eso se demostró por tantos años: y bueno, además de que una de sus "Muestras de amor" salió Jimin embarazado.

Los padres de Jungkook estaba que no cabían de la felicidad, pero los de Jimin le regañaron, pero después le felicitaron pues serían abuelos. ¿Se preguntarán qué pasó con los padres de Jimin? pues ellos se divorciaron, decidieron sólo ser amigos y hasta el momento se quedaron así. El hermano de Jungkook: Seokjin. Le pido perdón a su padre y volvió a la familia siendo aceptado por Margot, ella nunca le tuvo rencor. Ahora Seokjin era inseparable de la más pequeña de los Jeon.

Taehyung y Hoseok también su relación duró mucho más de lo que esperaba Jimin. Ellos ya tenían un hijo de nombre Jaehyung, apenas tenía unos meses de haber nacido, ellos se casaron antes que Jae naciera. Fue hermoso para Jimin ver casarse a su mejor amigo, ahora le tocaba a él.

Se miraba el espejo sumamente nervioso, su traje color blanco con las solapas negras. El ramo en sus manos y su pequeña corona de flores adornando su cabeza.

Al fin llegó el momento que tanto soñó.

Su madre entró en compañía de su suegra quienes no evitaron mirar con sus ojos acuosos a Jimin quien lucía totalmente hermoso.

Parecía un ángel.

─No creí llegar a ver a mi hermoso hijo de esta marea, creo que voy a llorar─ Dice la señora Park mientras Margot negaba con la cabeza.

─Te entiendo, también quiero llorar al ver lo hermoso que está mi yerno, además que mi hijo se casa, es algo para llorar de alegría.

─Definitivamente. ¿Estás listo? cariño, sé que debes de estas muriéndote de los nervios ─Toma sus manos entre las suyas para transmitirle esa tranquilidad que su hijo necesitaba.

─Sí que me muero de los nervios mamá, no todos los días se casa uno. Siento que voy a vomitar y no es por mi pequeño Jeonsang. ─Toca su vientre con las sensaciones de las mariposas revoloteando por todas partes: de seguro su hijo jugaba con ellas.

─Mi nieto las causa, te vas a casar mi amor, es un gran paso para los dos.

─Tu madre tiene razón Jimin, es algo hermoso lo que sientes, es la euforia en tu cuerpo. Sé que sientes, me pasó exactamente lo mismo, casi me desmayo de no ser porque mi madre me supo controlar. ─ríe al recordar eso.

Jimin también lo hace.

─Lo sé, sólo que no puedo evitarlo. Me caso con el amor de mi vida, eso es para poner los vellos de punta, al fin está pasado. ─Mira su anillo de compromiso, ese que le dio cuando hacían el amor en un hotel lujoso en París, fue sumamente mágico.

─Jungkook debe de estar igual o peor que tu cariño, esto también debe ponerlo de nervios, él te ama tanto cariño.

Eso lo sabía perfectamente el rubio, él lo amaba tanto, todos esos años eran prueba de ello.

─Vamos cariño, ya es hora.

Jimin asintió y tomando la mano de su madre salió de la pequeña habitación. Respiro profundo, sus piernas le temblaban, su corazón latía tan fuerte que parecía que era lo único que escuchaba. Su padre estaba justo al frente, le tendió su mano para poder entregarlo en el altar.

─Respira hijo, de lo contrario irás al hospital. ─bromeó.

─Papá tus chistes no me calman. Estoy temblando, mira.

─Ya lo note. Mira al frente y ve a la persona que espera por ti, ahí en el altar. Está peor que tú. ─Eso hace sonreír a Jimin, relajándose un poco─ Sé muy feliz mi niño, no dudo que lo harás, pero te deseo lo más puro de todo corazón.

─Gracias papá.

Le abraza, dejando un poco sus nervios detrás.
La música de violín resuena, pues su novio contrato a su primo Jeon Jaemin, un hermoso rubio que es toda una celebridad por tocar tan hermoso el violín, está casado con el primo mayor de Jungkook: Jeon Juggkook, además de sus hermosos hijos, los cuales eran cuatro.

Agradeció solo llevar uno en su abultado vientre.

Jungkook sentía un nudo en la garganta, mirar a su hermoso prometido venir de blanco, tomado del brazo de su suegro, era una imagen perfecta. Sintió que valió la pena cada momento a su lado, cada segundo de sus vidas.

Quererlo desde adolescentes y amarlo como el adulto que ya era.

Llegó a su lado, tomó su mano para besarle el dorso, se sonrieron uno con el otro.

─Estás hermoso mi amor.

─Tú no te quedas atrás, estás más elegante que nunca.

─Es un día especial, me caso con el amor de mi vida. ─Le dice divertido.

─Qué suerte tiene tu futuro esposo. ─Le sigue el juego.

─Yo soy el afortunado.

─Eso es verdad.

Se ríen sólo entre ellos. El padre empieza la misa mientras los demás miraban con pequeñas lágrimas en los ojos, la hermosa unión de ambos.
La ceremonia fue hermosa, pero llegó el momento de decir sus votos para colocarse sus anillos.

─Por favor, digan sus votos el uno con el otro, poniendo sus anillos, diciendo las palabras correctas. Hagan su promesa de amor eterno. ─El padre le acercó el micrófono a Jungkook.

Jungkook tomó el anillo, se lo colocó en su dedo anular para decir:

─Yo, Jeon Jungkook, prometo amarte y respetarte hasta que la muerte nos separe. Quiero pasar el resto de mi vida contigo, como te lo prometí en ese viaje a Jeju, dónde ambos nos prometimos amarnos en un futuro. Ahora esa promesa se cumplió. Por eso acepta este anillo como prueba de mi compromiso y de mi amor.

Jimin tiñó sus mejillas de rojo, miró el hermoso anillo en su dedito, no evitó que una lágrima se le saliera.

─¿Park Jimin acepta a Jeon Jungkook como su esposo, para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?

─Acepto, claro que sí. ─dijo eufórico, prácticamente dando saltitos.

Ahora el padre le puso el micrófono a Jimin.

─Yo Park Jimin, prometo amarte y respetarte hasta que la muerte nos separe. Cumplí esa primera de siempre amarte y lo voy a hacer hasta viejitos. Te odie en su momento, pero me enamoré con el pasar del tiempo. Fui terco y muy molesto, pero heme aquí, casándome con mi tormentoso e insistente amor de mi vida. Te amo, Jungkook jamás dejaré de hacerlo, lo prometo.

─¿Jeon Jungkook acepta como esposo a Park Jimin, para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?

─Acepto. Con todo mi amor, acepto.

─Con el poder que me confiere, los declaro Esposos. Puede besar al novio. Que el amor que se prometieron, se cumpla hasta el final de sus días.

La familia empezó a aplaudir, Jimin prácticamente se colgó del cuello de su novio para besarlo. Algunos se rieron por lo divertido que fue.

Jungkook tomó su ancha cintura para profundizar aquel beso tan hermoso y lleno de emociones. El vientre abultado los separaba un poco, Jimin sintió una patadita que lo hizo quejarse.

─¿Estás bien amor? ─dijo preocupado.

─Si, sólo que me pateó fuerte. Creo que está celoso. También te amamos Jeonsang, te amo mi bebito.

Jungkook junto a sus frentes, deslizó su mano a dónde su hijo se encontraba.

─Te amo Jeonsang, cuando nazcas te prometo llenarte de besos y abrazos. Ahora sólo quiero besar a tu papi.

Le dio otra patadita, pero un poco más leve. Jimin derramó una lágrima.

─Creo que dijo que sí. ─Miro a los ojos a su esposo ─Vuelve a besarme mi amor, mi Jungkookie.

─Siempre mi amor, siempre.

Volvieron a unir sus labios, a pesar de que la familia los miraba, para los recién casados no había nadie más que ellos dos y bueno, su hijo.

Su mundo, su burbuja.
Dónde una nota los unió, y su amor floreció

Gracias Kim Taehyung por obligarme a dejar esa nota, porque si no fuera por él, Jungkook jamás se hubiera atrevido a hablarle.

Fin...

Aquí termina esta hermosa historia.
Se que fue cortita, pero bonita.

Espero que les haya gustado, nos vemos en la próxima historia.

Las amo y gracias por estar aquí en cada capítulo.

🐻❤️