15 años después....

─No quiero hacerlo Yeonjun, que tal si me descubren y me regañan por tu culpa. Mejor, devuélvesela tú no quiero problemas con Soobin.

Se negó rotundamente.

─Vamos Jeonsang, es mi bebito hermoso y sé que si no mira su suéter favorito se pondrá triste ─le hizo un puchero tierno a lo que el rubio se negó.

─Jamás me convencerás de dejarle eso a tu crush, además el profesor no tardará en venir y no quiero meterme en problemas.

Volvió a negarse.

─Por favor, te daré lo que me pidas, sólo déjalo en su asiento plisssss...

Jeonsang arqueo una ceja ante sus palabras.

─¿Me darías tu cómic firmado por Tom Holland a cambio de dejarle eso a tu crush?

Yeonjun abrió su boca indignado, poniendo su mano en su pecho.

─Te estoy pidiendo un favor más, no que entierres a alguien por mí. Por favor sólo hazlo, te prometo que te compensaré mucho, lo prometo.

Suplico poniendo sus ojitos de cachorro a medio morir, y es que cuando a su amigo le hace eso, Jeonsang termina aceptando.

─Bien ─le arrebata el estúpido suéter de arcoíris. Yeonjun lo abrazó besando su mejilla.

─Gracias, te juro que valdrá la pena.

─Eso espero, porque te juro que no te invito a mi fiesta de cumpleaños. ¿Dónde se sienta su noviecito?

─Es fácil, es la banca que tiene un arcoíris, no hay pierde.

─Vuelvo enseguida, pero me debes mucho, ¿eh? ─le señala mientras iba a la salida.

─¡Te amo! ─grito mientras Jeonsang hacía una mueca de asco.

Se dirigió al salón de los de segundo año, el cual estaba en el segundo piso. Subió las escaleras, camino por el pasillo mientras murmuraba una canción, busco el salón, el cual era 2-13A, el cual es el de los más inteligentes. Al llegar entro y noto que no había nadie, ya que se fueron a educación física.

─Qué suerte ─murmuró.

Entró como si nada buscando la susodicha banca del Kim Soobin. Cuando la miro dejó la suerte sobre la silla donde estaba su mochila, se iba a ir, pero miro una nota la cual curiosamente tomo.

La abrió mirando que era una declaración de amor, aunque no tenía quien era el remitente.

─Yeonjun creo que tienes competencia ─se burló, se dio la vuelta, pero chocó contra el pecho de alguien, eso hizo que soltará la nota─ Lo siento, no me di.... ─Sus ojos se abrieron de par en par cuando, noto que chocó con Sung hoon ¡el presidente del consejo estudiantil!

El Pelinegro más alto miró la nota que Jeonsang tiro, el menor quería decir algo, pero no pudo, no sabía qué decir. El Pelinegro leyó lo que decía y sonrió levemente.

─Acepto salir contigo Jeon ─Antes que dijera algo el muy confundido Jeonsang, fue tomado por el mayor para ser besado por él.

Todos en el salón los miraban con la boca abierta, no podían creer lo que estaban mirando. Jeonsang sentía las piernas de gelatina, su corazón sentía taquicardia y sus mejillas se pusieron carmesí.

Sung hoon le sonrió al separarse.

─M-me tengo que ir, adiós.

Jeonsang se separa de él y sale corriendo del salón, mientras el mayor sonríe triunfante de al fin poder tener algo que ver con el lindo rubio. Jeonsang entró a su salón tomando sus cosas, sentía que moriría ahí mismo, necesitaba aire fresco y pensar lo que acaba de pasar.

Además de un problemilla en su entrepierna.

Yeonjun lo miró demasiado preocupado.

─¿Hey estás bien?, ¿qué pasó?, ¿por qué estás así? ─lo miro irse casi de prisa.

─Dile al profesor que me tengo que ir, te veo luego.

─¡Espera! ─grito Yeonjun totalmente confundido.

Miró a su amigo irse corriendo como si tuviera diarrea. Obviamente, todos en la secundaria hablarían de esto, y es que no tardaron mucho en difundir lo que vieron.

Jimin jugaba un poco con su hija, si él y Jungkook tuvieron otra hija después de que Jeonsang cumpliera 12 años. La pequeña tiene 3 años y era una niña muy lista, además que hablaba claro aunque a veces no tanto; su nombre es Somi. Como el de su tía.

─¿Quieres un mini sándwich de mermelada con mantequilla de maní? ─pregunta Jimin a su hija. La pequeña asintió.

─Si papi.

─Iré a prepararlo ─Se levanta del sofá yendo hacia la cocina, en eso escucha la puerta ser azotada, a lo que el rubio mira a su hijo venir demasiado exaltado─ ¿Jeonsang que pasa amor?

El rubio abrazó a su padre con todas sus fuerzas, sentía mucha vergüenza, de verdad la sentía además de nervios. Jimin estaba preocupado, jamás había visto a su hijo de esa manera.

─¿Cariño qué pasa?, ¿por qué estás así?

─Papá... es que no sé cómo decirlo, me da vergüenza de sólo pensarlo.

Jimin no sabía que hacer, su hijo, estaba muy afligido. La pequeña Somi tenía un pucherito en sus labios delgados, mirando a su hermano mayor.

─Tranquilo amor, dime qué fue lo paso, ¿alguien te hizo algo? ─negó el menor de manera rápida─ ¿entonces que fue?, cuéntame amor, te prometo que te ayudaré, pero no puedo hacerlo si no me dices nada, me estás preocupado.

Jeonsang sale de su escondite mirando directamente a su padre, tenía las mejillas super rojas y además que tenía un problema en su entrepierna, Jimin entendió un poco.

─Oye, tranquilo, eso es normal, mira...

─Fue súper vergonzoso, sé que nadie me vio, pero me dio mucha vergüenza, además que todo fue por su culpa que esté así, él me besó y pasó ─Ahora su Jimin no entendía nada.

─¿Alguien la provocó? O sea que....

Asintió Jeonsang. Decirle estas cosas a tus padres era más que penoso, su padre Jimin era un poco más brusco y directo, no estaba seguro si decirle estás cosas.

La puerta volvió a sonar dejando ver a Jungkook llegar del trabajo, la pequeña Somi corrió a abrazar a su papá quien la cargo gustosamente.

─Hola mi princesa, ¿me extrañaste?

─Si papi y muchote. ─estiró sus bracitos para demostrarle a su padre cuánto lo extraño.

Jungkook sonrió ante la ternura de hija que tenía.

─Yo también soy princesa. ─beso, su mejilla y miró a hora a su esposo, quien tenía a Jeonsang abrazado─ ¿pasó algo?

Somi respondió.

─A mi hermanito lo besaron y vino llorando.

─¡Tú cállate chismosa! ─Somi le sacó la lengua mientras su padre la dejaba en el suelo.

─No le digas a si a tu hermanita, sé que estás furioso, pero no es motivo ─le regaña Jimin.

Jeonsang toma sus cosas y se va a su habitación molesto; Somi se siente mal ahora. Jungkook no entendía un carajo ¡Qué rayos pasaba en esta casa!

─¿Qué pasó?, ¿por qué Jeonsang está así?

El rubio suspira un poco acercándose al mayor.

─Jeonsang fue besado por un chico y eso le provocó una erección. Está muy avergonzado y no me dijo más, no sé bien cómo pasaron las cosas, ¿quieres ir a hablar con él?, creo que te tiene más confianza a ti.

Le quitó su saco y maletín, esperando su respuesta.

─Yo hablaré con el amor, no te preocupes ─beso sus labios y fue arriba para ir adónde su hijo.

Jungkook definitivamente estaba furioso y un poco desconcertado, no sabía con qué intenciones beso ese chico a su bebé, y provocar algo como una erección. De verdad que no podía imaginar algo como eso.

Siempre ha hablado de estos temas con su hijo, sabía que podía pasarle más no tan pronto y por un beso, aunque lo entendía.

─Cariño, soy yo ábreme hijo, quiero hablar ─toco su puerta más no se escuchaba nada─ Jeonsang abre hijo, quiero saber que paso. Prometo darte mi mejor consejo.

Insistió, pero su hijo no quería abrir y pensó en rendirse hasta que el seguro se quitó y la puerta se abrió. Jungkook entró mirando a su hijo boca abajo en su cama, se adentró para cerrar la puerta y tomar asiento junto a él.

─¿Quieres hablar de esto?, te prometo que no le diré nada a tu papá Jimin, sólo queremos saber que paso. ¿Quién te besó?

Jeonsang salió de su escondite para mirar a su padre a los ojos, sentía pena de decirle, lo que su pobre y desenfrenado corazón le hacía sentir.

─Es... Complicado papá.

─Yo sabré entender. Confía en mí amor, soy tu padre yo prometo no decir nada fuera de lugar ¿ahora dime qué pasó?

Estaba algo inseguro el menor de decirle, aunque al final lo hizo confiando en las palabras de su papá.

─Es que estábamos en clase y Yeonjun me pidió que le regresará un suéter a su crush, yo no quería al principio, pero fui porque él me pidió el favor. Cuando llegué a su salón, deje el suéter y encontré una nota en la mesa de ese chico, que decía que le gustaba y que moría por besarlo, pero... ─aquí venía lo que tanto le tenía en vergüenza─ Llegó el presidente de clase quién es... el chico que me gusta y me beso. Yo fui besado por él y eso me hizo sentir vergüenza y además tuve una erección, más vergüenza tuve y me fui corriendo.

El Pelinegro tenía sus ojos abiertos de par en par al escuchar esa historia. Sonrió un poco acariciando su cabello, no podía creer que esto se volviera a repetir con su hijo.

─Bueno, lo de la erección es natural hijo, es la persona que te gusta y debió ser muy duro para ti teniéndolo de esa manera. Comprendo un poco tu situación, me pasó lo mismo con tu papá, sólo que él nunca lo supo.

─¡¿De verdad?!

Jeon asintió.

─De hecho me pasó lo mismo que a ti. No sé si te conté esto, pero cuando yo y tu papá Jimin empezamos andar, justo pasamos por lo mismo. Él fue a dejarle una nota de amor a Hoseok, de parte de tu tío Taehyung, pero se equivocó y me la dejó a mí. Yo tomé la oportunidad y acepté sus sentimientos porque él me gustaba mucho, lo bese en medio del salón y él salió corriendo, justo como tú.

Jeonsang tenía su boquita abierta sin poder creerlo, su papá pasó por lo mismo.

─¿En serio papá?

─Sí. Fui conquistando a tu padre poco a poco hasta que logré casarme con él y tener esta hermosa familia ─acaricia la mejilla de su hijo, era la viva imagen de su padre Jimin─ Si en tu caso él te gusta, hablen, si ya dio el paso con el beso inténtalo amor. Y por la erección, ¿él la notó? ─negó el menor─ Bien, no lo comentes, jamás se lo dije yo tampoco a tu padre.

Ambos rieron y Jeonsang se abrazó a su papá, de verdad era el mejor padre del mundo, también su papá Jimin.

La puerta de su habitación fue tocada dejando ver una cabellera rubia asomarse, ellos se separaron del abrazo.

─Cariño, alguien te busca.

─¿Quién es papá?

-Es Sung hoon.─
El rubio se sintió nervioso, pero su padre tomó su mano para tranquilizarlo.

─Voy.

Se puso de pie y fue hacia la entrada para hablar con el mayor. Tanto Jungkook y Jimin corrieron hacia el balcón para ver a su hijo, es que no podían creer que su pequeño dejo de ser su bebé.

─¿Puedes creer que se repitió nuestra historia de amor con nuestro hijo? ─cuestiona Jeon a su esposo.

─Lo sé, mi hijo le pasó casi exacto lo que a mí ─se abrazó a su esposo, quien no dudó en besar su mejilla─ Los escuché, ¿por qué jamás me dijiste que tuviste una erección cuando me besaste? ─inquirió.

─Porque es vergonzoso, era el presidente estudiantil, entiéndeme amor ─suspira mientras veía aquel chico que se parecía un poco a él entregarle una rosa a su hijo─ Creo que es un buen chico.

─Se parece a ti, igual de atractivo.

─Pero yo lo soy más ─vieron a Jeonsang decir que sí y después se abrazaron. Jungkook volteo a su esposo para poder besarlo─ Te amo, Jeon Jimin.

El rubio le sonrió.

─Te amo, Jeon Jungkook.

─Mi rubio bonito.

─Mi presidente tonto.

Rieron ambos para volverse a besar, demostrándose que aún se amaban con la misma intensidad que como la primera vez, al igual que ciertos jovencitos, los cuales empezaban su historia de amor.

Somi sonrió feliz admirando a sus padres, ella también besa a su oso de peluche.

¿Qué extraño no? La historia se volvió a repetir, ahora con su hijo mayor.

Esto fue dulce tormento.

Este es el Epílogo, se que tarde pero aquí está.
La verdad me gustó cómo quedó, la historia se volvió a repetir con su hijo Jeonsang.

Las amo y por aquí dejo esta hermosa y corta historia.
Bye.... ❤️♥️