El día de la fiesta llegó. Jimin se miró en el espejo y se sintió nervioso. Estaba a punto de salir a una fiesta donde conocería a mucha gente con dinero, y lo que más le ponía nervioso era conocer a los padres de Jungkook.

Lo que investigo, es que son personas demasiado influyentes. El señor Jeon es conocido por su mirada fría que hace que todos tiemblen de nervios, pero también como alguien simpático. Su esposa, Jeon Yoona, es una mujer demasiado conservadora, alguien buena también y viste siempre a la moda.

Ambos saben muchos idiomas y no hay mucha gente que les impresione. Es por eso que él quiere hacerlo. Quiere impresionar a sus suegros.

Se ajustó el traje hecho a medida que había comprado con Jungkook y se peinó el cabello rubio. Se aplicó un ligero maquillaje y se miró de nuevo en el espejo. Se veía hermoso, como un niño rico mimado.

Su móvil sonó y Jimin supo que Jungkook había llegado por él. Con los nervios a flote, salió de su habitación y se dirigió al piso de abajo. Su padre y hermano lo miraron con la boca abierta al verlo tan hermoso.

—¡Jimin, estás impresionante! —dijo su padre.

—Sí, parece un príncipe —agregó su hermanito.

—Gracias por los elogios. Me siento muy nervioso. —dice Jimin.

Su padre le arregla un poco su cabello.

—Hijo, eres un chico hermoso e inteligente. Se que vas a dejar a los padres de tu novio con la boca abierta. Jamás dudes de ti.

Jimin le sonrió.

—Eso espero. De verdad que me siento muy ansioso.

—Pues relájate. Además, ¿por qué no me habías dicho que tenías novio?

Ahí estaba esa pregunta.

—Es que.... —rasco su nuca— Bueno, es que no sabía si era enserio que él quería salir conmigo. Él es alguien muy popular y yo no lo soy tanto. Así que cuando salimos no sabía si funcionaria, por eso.

Mintió lo mejor que puedo.

Su padre asintió.

—Vale, pero ahora tengo ganas de conocer al suertudo que te tiene por novio.

—Papá no vayas a ponerme en vergüenza. —le pide Jimin.

—No te preocupes. Anda abre la puerta ¿o prefieres que lo haga yo?

Jimin negó y corrió a abrir la puerta. Vio a Jungkook parado en la entrada, vestido con un traje negro que lo hacía ver totalmente sexy y elegante. Jimin se sintió mareado al verlo y se le olvidó respirar. Su corazón está apunto de darle un paro cardiaco.

—Hola. —se apresuró a decir Jimin.

Jungkook al verlo quedó mudó. Jimin es hermoso, joder lucía precioso. Sabía que Park era el indicado, es inteligente y sexy. Joder ¿acaso no se saba cuenta como late su corazón por él?

—Te ves hermoso Park.

Jimin se sonroja.

—También te ves bien Jeon.

Ambos se miran con un destello que ellos no notan. Hasta el señor Park lo notó. El padre de Jimin carraspea y hace que ambos se salgan de sus pensamientos entre ellos mismos.

—Papá, quiero presentarte a mi novio. Este es Jeon Jungkook —dijo Jimin, intentando mantener la calma.

Su padre se acercó a Jungkook y lo saludó cortésmente.

—Un gusto conocerte Jungkook. —Jungkook le correspondió el saludo.

—El gusto es mío, señor Park.

—No sabía que mi hijo salía con un Jeon. Tus padres dan mucho dinero a las investigaciones que realizamos.

—Mi padre dona mucho a muchas beneficias. Pero en especial a las que más cree que hacen algo por el país. Es que una vez soñó con un apocalipcis. Tenía miedo que que los zombis nos invadan algún día. Por eso a mi padre se le metió en la cabeza que debe apoyar a los bioquímicos o farmacéuticos.

El señor Park se rio y Jimin también lo hizo.

—Vaya, quién diría eso. Me has caído bien.

—Es bueno saberlo. Hola, pequeño Jaemin.

Jae saludo a Jungkook chocando los puños.

—Hola, Jungkook.

—Me alegro de verte pequeño.

—También a mi. —le sonríe amablemente.

—¿Ustedes ya se conocen? Miren nada más. —dice el señor Park.

—Tuve el gusto. Además, prometí algo especial para mañana en el cumpleaños de este pequeño amigo. Espero que estés feliz.

—¡Claro que sí! —aplaudió emocionado.

—¿Qué prometió? —preguntó el señor Park

Jimin responde.

—Traer al hombre araña. Tom Holland.

—Wao… ¿Enserio?

—Pues sí. Espero no incomode con mi regalo. —dice Jungkook.

—Pará nada. Si es una promesa, está bien para mi.

—Creo que deberíamos irnos, se hará tarde. —le dice Jimin.

—Ok. Fue un placer conocerle señor Park.

—Igualmente. Espero hablar contigo en la fiesta.

—Claro que sí señor —dijo Jungkook— Me aseguraré de que Jimin esté a salvo.

—Váyanse con cuidado.

Después de despedirse de sus familiares, Jimin y Jungkook subieron al auto y se dirigieron hacia la fiesta. Jimin se sintió nervioso de nuevo, pero Jungkook le tomó la mano y lo calmó.

—Tranquilo. No te preocupes por nada.

—Lo sé es que es un tanto aterrador para mi. Además, tú te llevaste bien con mi padre. Fue gracioso eso de los zombies.

—Bueno no creí que funcionaria la verdad.

—¿De verdad era enserio eso de los zombis?

—Si. Mi padre una vez soñó que lo perseguían los zombies en un metro y que lo mordieron. Que me dejó en un tren en movimiento mientras él se quedó atrás para no hacerme daño. Ese día se levantó en pijama todo despeinado, parecía un loco y le dijo a mamá que debería donar dinero a los científicos por si hay una invasión zombie.

Jimin tenía la boca abierta, pero se echó una carcajada ante eso.

—¡Vaya que lo cura!

—Ni que lo digas. Fue muy gracioso porque salió a la calle corriendo como si saliera de un manicomio.

Jimin se echó otra carcajada al imaginar aquello.

Jimin se sintió un poco mejor al escuchar las palabras de Jungkook y se relajó un poco. Estaba listo para enfrentar la fiesta y a los padres de Jungkook.

Jungkook sonrió a Jimin mientras conducía hacia la fiesta.

—¿Sabes qué? Cuando termine todo esto, iremos a por hamburguesas. La comida que sirven es insípida.

Jimin se rió y asintió con la cabeza.

—Sí, me encantaría.

Finalmente, llegaron al lugar de la fiesta. Jimin se quedó impresionado al ver el lujoso edificio y los coches de alta gama estacionados en la entrada. Jungkook sonrió y bajó del coche, ofreciendo su mano a Jimin para que bajara también.

Jimin tomó la mano de Jungkook y ambos caminaron hacia la entrada del edificio. Al entrar, Jimin se sintió un poco abrumado por la elegancia del lugar. Había personas vestidas con trajes y vestidos de alta costura, y el sonido de la música y las risas llenaban el aire.

Jungkook le señaló a sus padres, quienes estaban hablando con su hermano mayor.

—Hay que empezar con esto. Ese que está de lado de mi padre, es mi hermano se llama Jung Soo —dijo Jungkook— Y su esposo Minsoo. No me llevo bien con él, pero mi hermano tenía que estar aquí.

Jimin asintió con la cabeza.

—No te preocupes, sabré manejarlo.

Jungkook sonrió y los dos se acercaron a sus padres. Su padre sonrió al ver a su hijo y se acercó a él para abrazarlo. Su madre también sonrió y le dio un beso en la mejilla.

—Al fin llegas hijo.

—Lamento la demora. Había tráfico.

Les dice. Los señores Jeon miraron a Jimin.

—Padre, madre y Jungsoo. Quiero presentarles a mi novio Park Jimin.

—Un gusto conocerlos. —hace una reverencia ante ellos de manera respetuosa.

El señor Jeon sonrió al ver a Jimin.

—Vaya hijo, que hermoso novio tienes. También me da gusto conocerte Jimin.

—Si, hijo. Jimin es un placer conocerte. —le dice la señora Jeon.

—El placer es mío.

Su hermano, Jungsoo, miró a Jungkook y luego a Jimin, con una expresión que parecía un poco desaprobadora. Jimin se sintió un poco nervioso, pero se recordó a sí mismo que no tenía nada que temer.

Jungsoo, el hermano de Jungkook, se acercó a Jimin con una sonrisa condescendiente en su rostro.

—Entonces, Jimin —intervino Jungsoo— ¿a qué se dedica tu familia? Es importante saber si alguien es digno de estar con mi hermano. No lo malentiendas.

Jungkook lo miró mal, pero antes de que pudiera intervenir, Jimin respondió de manera elegante.

—Mi familia es humilde, pero con buenos estudios. —dijo Jimin con toda seguridad— Mi padre es bioquímico y gana muy bien. Y yo soy un futuro estudiante de la NASA. Hablo 4 lenguas. Sacó buenas calificaciones y soy muy educado.

Jungsoo se quedó callado por un momento, claramente sorprendido por la respuesta de Jimin.

—En estatus social, tal vez no tengamos mucho— continuó Jimin—, pero quiero que sepas que yo amo a Jungkook por quién es, no por su dinero o posición social, por si eso me ibas a preguntar.

Jungsoo se molestó un poco por su actitud.

—Vaya, tienes la lengua refinada. Hacen bonita pareja. —lo dice sin ser sincero.

—Ya basta Jungsoo, eres el mayor comportarte como tal. —Su padre, Gong Yoo, lo regañó.

—Solo bromeó padre. Quería romper el hielo.

—Pues guárdate tus bromas para ti mismo. Tampoco es como que a tu lado tienes a un millonario.

—Cuida tu maldita boca Jungkook.

—Ya basta. Van a arruinar mi humor y le están dando una mala impresión a Jimin. Ambos van a saludar a los invitados y los veo en la mesa en 20 minutos. —les dice su padre.

—Una disculpa Jimin. Nos vemos un rato más. —se disculpa el señor Jeon y se marcha a ver a sus amigos.

—Vamos Jimin, hay un lugar que te quiero mostrar.

Jungkook se retiró y se fue con Jimin a otro lado, buscando un lugar más tranquilo donde poder estar solos. Dejando a su hermano con humor de perros.

Finalmente, llegaron a un balcón con vistas impresionantes de la ciudad. Estaban solos, y Jungkook se acercó a Jimin y lo abrazó.

—Estoy orgulloso de ti. Eres increíble.

Jimin sonrió y se abrazó a Jungkook.

—Gracias. No me iba a dejar por tu hermano. Ya he tratado con gente así.

—Lo bueno es que papá no estuvo tanto de su parte.

Jimin nota su disgusto.

—¿Por qué no te cae bien tu hermano? —le pregunta Jimin.

Este era un tema difícil, pero confía en Jimin, sabe que jamás podría juzgarlo y mucho menos avergonzarse de su pasado.

—Mis padres siempre le dieron preferencia. Desde que nació recuerdo que siempre fue su número uno. En todo lo que él hacía ellos estaban muy orgullosos. Todos sus trofeos en la entrada de nuestra casa para presumir, y los míos... solo obtuve pocos la verdad. Ellos jamás me demostraron estar felices por mi. En ninguna cosa y lo único en lo que logré destacar fue en la música. Por eso ese talento jamás podrá quitármelo.

Escuchar eso le rompió el corazón a Jimin quién le dio su apoyo tomando su mano.

—Eres alguien increíble. Si tus padres no valoran el hijo que tienen están muy mal. Tu hermano se convirtió en un arrogante creído y no me sorprende. Se nota que le cumplieron hasta su último capricho.

—En eso tienes razón. Pero antes si era un buen hermano, no sé qué le pasó desde entonces.

—Solo se tu mismo Jungkook. Ya me impresionante ami.

—Y tú a mi Jimin.

Ambos comparten un agradable momento. Después se fueron a cenar con la familia. Jimin se sentó a lado de Jungkook. El señor Jeon quiso conocer más a Jimin y este les respondió todo lo que quiso saber. Impresionado cada vez más por Jimin. Incluso le contó sus metas de trabajar en la Nasa.

Jimin encajó muy bien con los Jeon, incluso el hermano de Jungkook no volvió a decir más. Lo que le parecía raro era que la pareja de Jungsoo. Parecía serio, un poco nervioso. No sabía qué pasaba, pero miraba mucho a Jungkook.

La cena transcurrió bien, con la familia Jeon charlando y riendo juntos. Pasaron algunos minutos cuando Jungsoo interrumpió la conversación diciendo que tenía buenas noticias.

—Familia, ya que estamos cenando juntos quería decirles algo muy importante. —Comenta mientras toma las manos de su esposo.

—¿Qué es lo que pasa? —insiste su padre.

La pareja se mira y ambos sonríen.

—Pues, padre, madre, Jungkook y Jimin; quiero decirles que Minsoo y yo, vamos a ser padres. Vamos a tener un bebé.

Sus padres lo felicitan llenos de emoción. Jungkook también se alegró por ellos, aunque lo que vio hace tres años... no dejaba estar tan feliz por ellos. Aún así fingió.

Jimin los felicito.

—Un Jeon en camino. Que alegría saber estás buenas noticias hijo.

—Gracias padre. También estamos felices de esta gran noticia.

—Sí hijo, felicidades. Sin duda me harás abuela.

—Gracias por sus buenos deseos.

La familia estaba feliz celebrando. Justo entonces, un encargado de la fiesta se acercó a la mesa y le dijo al señor Jeon que el cantante principal no había llegado debido a un imprevisto.

—¿Cómo? Pero era la cereza del pastel para la fiesta. Dios mío ahora que voy hacer.

—¿Qué pasa querido?

—Que no llegó el cantante principal. Era un acto que quería presentar.

El señor Jeon se molestó y dijo que no sabía de dónde sacarían a un cantante para reemplazarlo.

Fue entonces cuando Jimin le dijo al señor Jeon que Jungkook cantaba bien.

—Jungkook canta bien. ¿Por qué no le da la oportunidad de hacerlo?

Toda la familia volvió a ver a Jungkook quien no sabía qué hacer.

—¿Qué? Mi hermano no lo creó. Seguro espanta a todos aquí. —dijo Jungsoo.

—Él canta hermoso. Vamos Jungkook sé que puedes hacerlo. —lo anima Jimin.

—No lo creo, amor. —la palabra amor salió por sus labios haciendo que el corazón de Jimin latiera con mucha prisa— No soy un cantante profesional.

—Hijo, canta. Necesito tu ayuda. —le dice su padre confiando en su talento— Si Jimin te ofreció es que lo haces espectacular.

Jungkook ante la mira de todos, al final accedió. Aún temiendo quedar mal.

—Lo haré.

Jimin le dio ánimos a Jungkook y lo acompañó al escenario. Jungkook estaba nervioso, estaba frente a una gran multitud de personas que lo miraron curiosos. Su padre lo presentó, dijo que su hijo menor cantaría una hermosa canción para iniciar el baile.

Los presentes lo miran. Todos esos ojos encima de él esperando a que comience. La canción comenzó y Jungkook aún nervioso miró a Jimin, quien le sonrió y eso quitó todo nerviosismo.

Jimin me daba tranquilidad. Jimin le dio fuerza para todo y eso le hizo pensar que tal vez gusta de ese chico al que apenas conocía. Si, será una locura, pero si su corazón late tan rápido con solo verlo, definitivamente siente atracción por él.

Era bonito, listo, lo entiende y hace que su mundo gire más de lo que debería hacer. Si, Jimin le gusta.

Lost Star salió de sus labios y con un sentimiento, que dejó a todos con más boca abierta. La canción que eligió fue una que había escrito su padre, y el señor Jeon se sorprendió al escucharla. Pues escribió él cuando soñaba con ser una estrella de la música. Todos aplaudieron y Jimin se sintió feliz por su novio.

La voz de Jungkook llenó el salón y todos se quedaron en silencio, escuchando la hermosa canción. El señor Jeon se puso de pie y aplaudió, sonriendo de oreja a oreja. La señora Jeon también aplaudió, con lágrimas en los ojos.

Jimin se sintió orgulloso de Jungkook y se acercó a él para abrazarlo.

—Lo hiciste muy bien —le dijo Jimin al oído. Jungkook sonrió y abrazó a Jimin, sintiéndose feliz y aliviado.

Jungsoo se quedó sorprendido al ver que su hermano cantaba mejor que bien.

Jungkook se separó un poco de Jimin quién le miraba diferente.

—Sabía que podrías.

—Gracias por confiar en mí.

—Cómo no hacerlo. Cantas precioso.

Abrazados mirándose uno con el otro, ambos tuvieron ese click que se escuchó en sus corazones. Ambos se acercaron más y más hasta que unieron sus labios en un beso que hizo que los fuegos artificiales salieran.

No sabían que había sido eso, pero les gustó un poco demasiado.

La fiesta continuó con Jungkook como el centro de atención, y Jimin a su lado, sonriendo y disfrutando del momento. La noche había sido un éxito, y Jimin sabía que siempre recordaría esta noche especial con Jungkook.

En especial ese beso que ahora inició todo.

Espero que les haya gustado y comienza el romance Aaaa!! Que viva el amor.

Nos vemos.