Si en algo no se le daba bien a Jeon Jungkook, es la ciencia. Como odiaba esa materia. ¡Él sabía sobre Química! Lo peor es que le encargaron un trabajo sobre Químicos Famosos. No tiene ni la menor idea, pero el trabajo es para el lunes, tiene que exponer y jodida mierda, esto no estaba en sus planes. Tenía que practicar porque de no ser así, perderían su último campeonato en Taekwondo.

—¿Cuál te tocó Jk? —le pregunta Seokjin.

Están en el salón mientras todos comparten sobre los químicos famosos que les dio el profesor de química.

—Marie Curie. No tengo idea de quién es ella. —dice Jungkook.

—Tampoco yo... a mi me tocó un tal Antoine Lavoisier. Ni idea quien es. —dice Seokjin.

Eunwoo se acerca con ellos también.

—Pues a mi me tocó Niels Bohr.

—Tenemos entrenamiento, porque dejarnos 100 hojas sobre estos químicos ¿a quien le importan? —Bufa Seokjin.

—Pues nos jodimos. Tenemos que entregar esto el lunes y con todo lo que tenemos que hacer estará de pelotas. —dice Eunwoo también un poco molesto.

Jungkook se echa para atrás pensado también.

—Pues aunque estemos jodidos, creo que le pediré ayuda a Namjoon. —dice Seokjin con una sonrisa traviesa— No creo que se niegue.

—Por cierto, ¿Enserio te salvo de esos tipos? —pregunta Eunwoo.

—Si... fue como en esos k-dramas donde la chica va a casa indefensa y llegan los malos a querer hacerle daño. Fue genial. Llegó detrás y les dio unos puñetazos. —Suspira cómo tal enamorado— Es mi héroe. Además vamos a salir.

—Vaya, Kim Namjoon te defendió pero quien va a defender a Nam de ti —se burla, Jungkook a lo que Jin lo golpea.

Los amigos se ríen mientras ven el rojo rostro de su amigo.

—Son unos envidiosos. Yo si tengo a alguien que le gustó y ustedes se la pasaran solos.

—Estar solo está de moda. Incluso si tener pareja uno es feliz.

—Sigue creyendo eso Eunwoo. Pero algún día encontrarás a esa persona indicada.

—No lo creo. Así estoy bien.

Jungkook solo escucha a su par de amigos pelear. Pero Jin le acaba de dar una idea. Jimin es listo y tal vez pueda ayudarle con su proyecto.

Cuando dio la campanilla. Fue a por su "novio" seguro está en el salón de robótica. Les dijo a sus amigos que los ve en el almuerzo, quería preguntarle si podría ayudarle hoy para tener el día libre de entrenamiento mañana.

Algunas chicas lo saludaron con caras de enamoradas. Jeon si que es popular. Él lo sabe pero le daba igual serlo o no. Las saludó de vuelta causando sonrojó en ellas. Dio vuelta al pasillo para subir las escaleras cuando ve al ex de Jimin pasar por ahí.

La mirada que le dio fue algo curiosa. Se nota que no le agrada para nada que él sea el novio de Jimin. Se le hizo algo conocido, pero no recuerda de dónde le conoce. Ambos van al mismo lugar. "Joder, no me digas que va a donde su novio" Jungkook estaba seguro que era si. Subió los escalones más rápido dejándolo atrás, ve que él lo imita y Jungkook bufo por eso.

Ese tipo es peor que Hanni, no acepta uno por respuesta. Jungkook llega y ve a Jimin entrar con una caja, parecía pesada. Mingyu intentó ir con él y ayudarle, pero Jungkook corrió hacia donde su "novio" y le gritó llamándole.

—¡Nene! Déjame ayudarte con eso.

Jimin se sorprendió de verlo, pero vio a Mingyu parado ahí y entendió.

—Claro.... Jungkookie. Cuidado esta medio pesada. —le dice con cariño Jimin.

—Esto no es nada para mí. Vamos, hay algo que quiero decirte.

Juntos entraron al salón. Mingyu apretó sus puños y se dio la vuelta para ir por donde vino. Jungkook dejó la caja en el salón mirando muchas cosas robóticas en el.

—Wao... Este lugar sí que es sorprendente. Parece futurista.

Jimin suelta una risita.

—¿Jamás viniste aquí? ¿Al menos para curiosear? —le pregunta a lo Jeon negó.

—No, jamás. Es que con los entrenamientos y mis cosas jamás me dio curiosidad sobre todo este lugar.

—Pues de ser así, quieres ver en que trabajo.

—Joder claro que sí. Impresioname Park.

Jimin se inclinó hacia adelante, ansioso por compartir su idea.

—Estoy creando una prótesis inteligente para ayudar a las personas que han perdido una mano o dedos.

Jungkook se sorprendió.

—¿Una prótesis inteligente? ¿Cómo funciona?

Jimin sonrió.

—Bueno, la prótesis está diseñada para ser controlada por el cerebro del usuario. Utiliza sensores y algoritmos avanzados para detectar los impulsos nerviosos del cerebro y traducirlos en movimientos precisos.

Jungkook se quedó boquiabierto.

—Eso es increíble. ¿Cómo logras que sea tan precisa?

—Bueno, he estado trabajando en eso durante meses. He utilizado una combinación de técnicas de aprendizaje automático y diseño de control para crear un sistema que pueda aprender y adaptarse a las necesidades del usuario.

Jungkook se inclinó hacia adelante, fascinado.

—Eso es genial. ¿Y cómo se controla la prótesis?

Jimin sonrió. Le gustaba que Jungkook se interese por sus cosas.

—La prótesis se controla mediante un dispositivo de interfaz cerebral que se coloca en la cabeza del usuario. El dispositivo detecta los impulsos nerviosos del cerebro y los envía a la prótesis, que entonces se mueve según las instrucciones del usuario. Les es más fácil, como si ellos tuvieran sus dedos o mano.

Jungkook se quedó en silencio durante un momento, asimilando la información. Luego, se rio.

—Jimin, eres un genio. Esto es increíble. Podrías ayudar a mucha gente con este invento.

Jimin se sonrojó.

—Gracias, Jungkook. Estoy emocionado de mostrar mi proyecto en la feria de ciencias. También quiero hacer algo más con él. Quiero que esto llegue a la Nasa para que personas que tengan incapacidad para ir al espacio, puedan cumplir su sueño y viajar con ayuda de esto.

Jungkook asintió.

—Estoy seguro de que ganarás el primer premio. Esto es algo que puede cambiar la vida de las personas. Y si es tu objetivo, no creo o tengo dudas que lo vas a conseguir. Eres un gran cerebrito.

—Lo sé, también me tengo fe. Aunque aún hay cosas que tengo que pulir.

Dice mientras toma varias cosas que Jungkook no sabe que son. Eso le recordó a lo que venía.

—Por cierto, tengo algo decirte, más bien pedirte.

—¿Qué pasa?

—¿Tienes algo que hacer después de clases? Necesito tu ayuda en algo.

—No tengo nada que hacer, ¿qué pasa? —le dice Jimin.

—Puedes ayudarme con mi trabajo. Es una investigación, es sobre Químicos Famosos y me tocó una tal Marie Curie. Lo quieren para el lunes y quiero entrenar mañana.

—No se oye complicado.

—Bueno para ti por que eres un genio. Pero yo soy un simple mortal. Vamos, en verdad necesito ayuda.

Le hace un tierno puchero que Jimin no pudo evitar sentir empatía por él.

—Ok, solo vas a mi casa porque tendré que quedarme a la junta sobre lo del viaje. ¿Te veo a las 4?

—¿No quieres que te espere? Puede que ese loco lo haga. Venía a hacia acá, es probable que lo haga.

—No te preocupes, puedo con ello.

—¿Seguro?

Jimin asintió. Ve que en el cabello de Jungkook hay una basurita, se acerca a él para quitarla pero sin percatarse que se acercó de más. Jungkook noto sus lindas pecas sobre sus mejillas, sus ojos almendrados y sus labios esponjosos. Eran suave. Lo pudo comprobar cuando lo besó y es que besarlo fue fantástico.

Jimin también se dio cuenta de cosas que no había detallado de Jeon. Sus ojos negros y sus lunares en sus labios delgados, la linda cicatriz en su mejilla y su bonita nariz. De verdad que los rumores sobre que era guapo no eran mentira, si lo es. Pero también en sus rumores decían que es un badboy aunque él no creía en ellos, menos ahora que están fingiendo ser pareja.

Ambos sintieron esa conexión. Ambos sentían esas mariposas en el estómago, sin embargo aún sentían que era algo inesperado. Ambos carraspean sonrojados, con el corazón latiendo aún 20%.

—Nos vemos a las cuatro. —dice Jungkook mientras toma sus cosas.

—Vale, nos vemos.

Jungkook sale del salón mientras Jimin se echa aire en el rostro por lo que pasó. Tal vez haberlo besado fue mucho para su pobre corazón.

Más tarde cuando todos salieron de clases. Jungkook tomó su mochila para ir a la casa de Jimin. Llevó su laptop y algunas botanas que quiere darle, baja las escaleras y ve a su madre hablar por teléfono, escucha el nombre de su hermano y ella se emociona.

Jungsoo siempre ha sido el favorito de sus padres. El siempre fue el más estudioso y el que más consienten. Jungkook se sintió como un hijo al que hacen a un lado. De todos modos si de algo tienen ventaja es que el podrá hacer lo que él quiera cuando tenga que hacerlo. Aunque tal vez no es tan fácil como parece.

Fue a su auto y subió. Parece que lloverá hoy así que es mejor que la moto. Jungkook condujo y llegó a la casa de Jimin en su auto, ansioso por ver a su novio. Pero cuando bajó del auto, se sorprendió al ver a Mingyu parado en la acera, mirando hacia la casa de Jimin.

Jungkook sintió un escalofrío recorrer su espalda. Esto ya era demasiado. Mingyu ya se estaba volviendo aterrador. Jungkook se acercó a él, su corazón latiendo con ira.

—Oye Mingyu, ¿qué estás haciendo aquí? —preguntó Jungkook, su voz firme y autoritaria.

Mingyu se volvió hacia él, con una sonrisa inocente en su rostro.

—Solo venía a saludar a Jimin. ¿No puedo?

Jungkook se rió, su risa llena de desdén.

—¿Saludar a Jimin? Ya pareces un acosador. Deja de hacer esto, Mingyu. Estás asustando a Jimin y yo no lo permitiré.

Mingyu se encogió de hombros, su sonrisa desapareciendo.

—No es de tu incumbencia. Es normal que quiera verlo.

Jungkook se acercó más a Mingyu, su voz baja y amenazante.

—Sí, es de mi incumbencia. Soy el novio de Jimin y no permitiré que tipos como tú lo asusten. Acaso no puedes aceptar que no te quiere ni ver.

—¿Así que te hablo de mi? Vaya, para hacer eso tiene que tener aún presente.

Jungkook chasqueó la lengua.

—Soy su novio, no te menciono hasta que llegaste aquí otra vez. Déjame dejarte claro esto, deja de estar vigilando a mi novio. El no quiere saber nada de ti por que me tiene a mi. Deja de estar hostigando como un maldito enfermo, y como su novio te advierto que si no me haces caso te partiré la cara ¿escuchaste?

—Quiero ver que intentes.

—No me tientes...

Mingyu se mantuvo en silencio, su rostro pálido y tenso. Jungkook se dio cuenta de que Mingyu estaba empezando a perder el control, y se preparó para defenderse si era necesario. Pero en eso salió Jimin quién fue a ver si Jungkook llegó, pero lo que miró lo a sust.

Fue rápido con ellos porque parecía que se matarían en cualquier momento.

Jungkook estaba por darle una paliza de no ser porque escuchó la voz de Jimin.

—¿Jungkookie todo bien? ¿Qué está pasando aquí?

Pregunta acercándose a su novio ignorando a Mingyu quien le saludó. Era más que obvio que no se iba a rendir, pero esto ya llega a dar miedo.

—Lo siento, bonito. Me entretuve con un maniático. —Mingyu bufo.

—Vamos adentro, prepare algo para los dos en lo que estudiamos. Y por favor Mingyu, deja esto que da miedo.

—Pero Jimin…

Lo ignora.

Ambos se marchan a la casa de Jimin quién lo deja pasar. Jungkook suelta un suspiro mientras echa un vistazo al lugar. Es bonito, moderno y muy cálido. Se nota buen ambiente.

—Mimi ¿quién es? —una pequeña vocecita se percató al final del pasillo de la cocina.

Jungkook ve a un pequeño niño venir con un plato de galletas. Joder, es super tierno a los ojos del pelinegro. Se parece mucho a Jimin, una versión chiquita de él.

—Jae, ven quiero presentarte a alguien. —le dice a lo que mira al pelinegro. Primero se esconde detrás de su hermano, pero después ve que el pelinegro tiene un llavero de spiderman— No tengas miedo.

—¿Spiderman? —señala con su dedito a lo que Jungkook asintió.

—Si, es mi personaje favorito. He visto todas sus películas y también lo conozco ¿Quieres ver? Tengo una foto con él.

Jaemin, el hermanito de Jimin, corrió hacia Jungkook con una sonrisa en su rostro. Tenía solo 4 años de edad, pero ya era un gran fanático de Spiderman.

—Si quiero ver tu foto con Spiderman. —dijo de manera tierna y tiró de su manga del suéter.

Jungkook se rio y sacó su teléfono para mostrarle la foto a Jaemin. Jaemin se quedó sorprendido al ver la foto y se rio de emoción.

—¡Wow! ¡Eres amigo de Spiderman! —dijo— Jaemin, con los ojos brillantes de emoción.

Jimin se rio y se acercó a ellos.

—Jaemin, no es que Jungkook sea amigo de Spiderman, es que simplemente tiene una foto con él —dijo Jimin, sonriendo.

Jaemin miró a Jungkook con una mirada seria.

—¿Puedes hacer que venga a mi fiesta de cumpleaños? —preguntó Jaemin, con una voz llena de esperanza.

Jungkook se sorprendió y miró a Jimin, que se encogió de hombros.

—Lo siento, Jaemin, pero Spiderman está ocupado. —dijo Jimin.

Jaemin se puso triste y miró a Jungkook con una mirada suplicante.

—¿Por favor? ¿Puedes intentarlo? —preguntó Jaemin, con una voz llena de emoción.

Jungkook no sabía qué decir, pero esa mirada tan tierna le daban ganas de no negarle nada.

—Bueno, lo intentaré —dijo—Jungkook, sonriendo—Pero no te prometo nada, Jaemin.

Jaemin se rió de emoción y se abrazó a Jungkook.

—¡Gracias! ¡Te quiero! —dijo Jaemin, con una voz llena de emoción.

Jimin miró a Jungkook con una mirada sorprendida.

—Jaemin es muy desconfiado, pero parece que te ha tomado cariño en solo pocos minutos —dijo Jimin, sonriendo.

Jungkook miró a Jaemin, que estaba abrazado a su pierna.

—Me parece que sí —dijo Jungkook, sonriendo.

En ese momento, la madrastra de Jimin, Hanna Song, llegó a la habitación.

—Hola, ¿eres amigo de Jimin? —preguntó Hanna, mirando a Jungkook con curiosidad.

Jimin soltó lo que tenía que soltar.

—Bueno de no decirlo será raro, porque vamos, es su novio y si Mingyu abre la boca se descubriría su mentira.

—Es... es mi novio, Jeon Jungkook —soltó Jimin, sonriendo.

Hanna se sorprendió y miró a Jungkook con una sonrisa.

—Encantada de conocerte, Jungkook —dijo Hanna, extendiendo su mano.

—Encantado de conocerla, señora Song. —le devuelve el saludo Jungkook.

Después de la presentación, Jaemin se despidió de Jungkook y se fue con su madrastra. Jimin y Jungkook se miraron entre sí y se sonrieron.

—Bueno, parece que todo salió bien. —dice Jimin.

—Sí, parece que sí. Tu hermanito es muy tierno y lindo.

—Lo sé, es todo mi querer. Vamos a estudiar, ¿de acuerdo? Se hará más tarde.

Juntos, Jimin y Jungkook se fueron a la habitación a estudiar, mientras que Jaemin y su madrastra se fueron a preparar la comida.

Al llegar a la habitación del rubio. Jeon se sorprendió al ver todo lo que ahí habitaba. Joder, parecía la habitación del futuro. Todo estaba lleno de cosas de robótica y algunas herramientas, monitores con cosas que parecían de Hacker.

—¿Estás seguro que quieres ser ingeniero de mecatrónica? Esto se ve como la guarida de Tony Stark. —le dice Jungkook.

Jimin niega sonriendo.

—Pues quiero manejar varios campos en este mundo, así que si.

—Creo que lo vas a lograr.

Jimin y Jungkook se sentaron en la mesa de estudio, rodeados de libros y papeles. Jungkook miró a Jimin con una expresión de confusión.

—¿Qué es lo que tienes que exponer de Marie Curie?

—Tengo que exponer algo sobre ella. Pero no tengo idea quién es.

Jimin se rió y se inclinó hacia adelante.

—Marie Curie fue una científica polaca-francesa que descubrió los elementos radio y polonio —dijo Jimin— Fue la primera mujer en ganar un Premio Nobel y la primera persona en ganar dos Premios Nobel en diferentes campos. Me sorprende que no sepas de ella. 

—Wao... Seguro que en ese tiempo ella no debió tenerla fácil en ese campo dirigido por hombres.

—Es verdad. Pero ella no se rindió. Presta atención y escribe esto. —Jungkook le hizo caso y estaba listo para anotar—. Marie Curie estudió en la Universidad de la Sorbona en París, donde conoció a su futuro esposo, Pierre Curie. Juntos, investigaron la radiactividad y descubrieron dos elementos nuevos: el polonio y el radio.

En 1903, Marie y Pierre Curie recibieron el Premio Nobel de Física, junto con Henri Becquerel, por sus investigaciones sobre la radiactividad. En 1911, Marie Curie recibió el Premio Nobel de Química por sus trabajos sobre el radio y el polonio.

Además de sus logros científicos, Marie Curie también fue una defensora de la educación de las mujeres y trabajó para promover la igualdad de género en la ciencia. Su legado continúa inspirando a científicos y científicas de todo el mundo.

Jungkook anotó todo y creó el propio sobre lo que quiera exponer. Tenía el tema y se le hizo más fácil gracias a Jimin.

Los dos chicos se quedaron estudiando durante un rato, compartiendo información y risas. Pero luego, Jimin miró a Jungkook con curiosidad.

—Jungkook, ¿cómo conociste a Tom Holland? —preguntó Jimin.

Jungkook se recostó en su silla.

—Mi papá me llevó al estreno de Spiderman sin camino a casa —dijo, Jungkook—Ahí lo conocí.

Jimin se sorprendió.

—¿Eres cercano a tu padre? —preguntó Jimin.

Jungkook negó con la cabeza.

—No mucho. Solo ve en mí un posible sucesor para su empresa, nada más. No voy a negar que frío conmigo, porque no lo es, es buen padre, pero hace cosas sin saber mis gustos. Cree que es mejor encerrarse en una oficina que los sueños que yo tengo.

Musito triste porque su padre jamás entenderá su mundo. 

—¿No quieres eso? —preguntó Jimin.

Jungkook negó con la cabeza de nuevo.

—No, porque odio tener que pasar toda mi vida en una oficina. Mi sueño es ser cantante. La música me gusta mucho.

Jimin se sorprendió de nuevo.

—¿Cantas? —preguntó Jimin.

Jungkook asintió con la cabeza.

—Sí, canto. Y he compuesto algunas canciones. No son la gran cosa, pero me esfuerzo en ellas.

Jimin miró a Jungkook con interés.

—¿Puedo escuchar una? —preguntó Jimin.

—No lo sé.

—Vamos Jungkook, quiero oírte cantar. Créeme que si lo haces bien, termino lo que te falta de tu exposición.

Jungkook se rió y se inclinó hacia adelante.

—Tentadora la proporción, esta bien. —dijo Jungkook— Voy a cantarte una canción que compuse hace poco.

Jungkook comenzó a cantar, su voz suave y melodiosa llenando la habitación. Jimin lo observa con admiración, su corazón latiendo rápido al escuchar la canción.

La canción era hermosa, con una melodía que parecía hablar directamente al corazón de Jimin. Jungkook cantaba con pasión y emoción, su voz expresando todos los sentimientos que Jimin había estado experimentando desde que lo conoció.

Cuando Jungkook terminó de cantar, Jimin aplaudió emocionado.

—Eso fue hermoso —dijo Jimin, su voz temblando con emoción— Eres un verdadero artista, Jungkook.

—Gracias. —se sonrojó ante el halago de Jimin.

Ambos se miraron otra vez con ese sentimiento creciendo en sus pechos. ¿Será que....?