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El trabajo tenía exhausto a Jungkook, después de revisar algunas cosas sobre su compañía. Quería comer algo delicioso y dormir todo el día si fuera posible, pero tenía que terminar todo antes de irse a casa.

Deja sus documentos solo un momento para estirar su cuerpo, su mirada se dirige a los ventanales de su oficina, nota una sombra parada frente a ellos, frunce el ceño y quita sus lentes para tallar sus ojos. Al colocarlos ve que no hay nadie, tal vez ha estaba alucinando cosas, por la luna, necesita unas buenas vacaciones.

Ya eran las once, llegará tarde y no quiere dejar tanto tiempo a su omega. Debe estar preocupado por qué no llega. Deja un momento su computador para llamar a su omega, pero cuando suena se da cuenta que timbra ese tono de llama que Jimin le puso a su móvil para él; una canción de un tal Jungsoo de BTS llamada Euphoria.

Quedó un poco confundido respecto por qué sonó aquí, la puerta de su oficina fue abierta dejando ver al dueño de sus pensamientos, Jimin estaba aquí.

—¿Amor qué haces aquí tan tarde? —se pone de pie para recibirlo.

—Es que quería sorprenderte. No llegabas y supuse que tenías mucho trabajo que hacer con las nuevas campañas. —Le responde de manera tierna, Jungkook se acerca a él.

—No debes salir a esta hora, podría pasar algo y no quiero.

—Descuida, los guardias me trajeron y me vigilaron muy bien. Te traje algo de cenar, cocine para ti, espero que te guste.

Le muestra la canasta que hasta ahora noto. La puso sobre la mesa de su sala, a Jungkook le gruñó el estómago. Amaba la comida de su omega.

—Cariño no debiste molestarte.

—Tengo que alimentar a mi alfa. No quería que comieras cualquier cosa de la calle o restaurantes. Luego yo pago las consecuencias con tus kookpedos.

Jungkook saca la comida mientras se ríe, no negara eso;  era pork katsu curry, con bolas de arroz rellenas de atún con tocino. También una banana milk con galletas de crema y mochis. Todo olía delicioso.

—Mi comida favorita japonesa, gracias amor.

Lo besa, abrazando su cuerpo sintiendo ese dulce amor que solo su omega le puede dar.

—De nada. Come esperaré por ti para irnos juntos.

—Aún tengo mucho trabajo. No quiero que te desveles esperándome.

—Puedo ayudarte, siempre lo hacía cuando tenías trabajo de más. Así puedes terminar más rápido e irnos a dormir.

—¿Estás seguro? Puedes dormir aquí en el sofá si quieres.

Jimin negó.

—Te ayudaré, somos un equipo ¿No?

Jungkook asintió, se sentó en el sofá con su omega en sus piernas. Jungkook amaba esto de Jimin, siempre le ayudaba cuando tenía mucho trabajo, le sorprendía de esta manera que el amaba. Por eso nadie podría compararse con su omega, por qué nadie es digno de acercarse un poco a él.

Era único y solo suyo. Comió todo lo que su omega le trajo, le compartió un poco de mochis, y después que llenó panza, empezaron a trabajar juntos.

—Vamos, amor.

Ambos comenzaron a trabajar. Jimin era muy bueno con los números, también a organizar todo lo de su agenda. Se la pasaron así un buen rato, hasta pizza compraron lo cual lo cual no hacían hace mucho. Jungkook disfruto tener a su esposo con él, amaba verlo esforzarse con todo lo que hace y adora tanto ver su labios en trompita de patito en modo concentración.

También no desaprovechó verle ese voluptuoso trasero. Joder, moría por morderle esas nalgas de durazno que tiene.

¿Y por qué no? ¿Que se lo impide?

Suspiro, tomó la mano de su esposo para sentarlo en su regazo. Antes de que Jimin dijera algo, su esposo beso sus labios en un apasionado beso que le robó el aliento. Sus olores se intensificaron, sabían que iba a pasar porque las caricias de Jeon hacia Jimin hicieron jadear al omega.

—Jungkookie... Estamos en tu oficina. —le dice mientras se acomoda mejor sobre las piernas de su alfa, restregando sus miembros ante el movimiento.

Jungkook mete sus manos dentro de su camisa, tocando su piel cálida mientras besa su cuello.

—No es como que no lo hayamos hecho antes.

—Pero... ¿Y tú trabajo?

—Eso puede esperar, ahora solo quiero tenerte.

Jimin iba a protestas pero en un solo movimiento su alfa lo alza para llevarlo al sofá, donde dejó su cuerpo mientras se colocaba encima de él. Jimin no quería decir que no a esto, amaba cómo su alfa lo toma, como le hace sentir. Abre sus piernas, Jungkook desabrochó su pantalón dejando ver su desnudes. Jimin se mordió el labio quitando la camisa y corbata a su esposo, tocando su pecho y esos bien formados cuadritos que poseé su alfa

Eso causó escalofríos al alfa, esos deditos saben cómo calentarlo.

Jungkook desabrocha su pantalón dejando salir su glande, Jimin estaba excitado, estaba que moría de ganas por tener el glande de su esposo dentro. Jungkook deja besos desde el cuello hasta el abdomen de su omega hasta llegar a su pelvis. Jungkook besa la punta del pene de su omega, saboreando y lamer la puntita, se lo mete a la boca causando que Jimin arqueara la espalda  ante la sensación.

Joder, amaba esto, la boca de su alfa se sentía tan bien que se retorcía del placer. Jungkook bajaba y subía mientras su omega gemía.

—¡Mmg! Kookie...

Gime Jimin. Jungkook lo saca lamiendo como si fuera una paleta, su omega estaba más que listo para él.

—Estás mojado cariño, demasiado y solo para mí. —mete sus dedos haciendo tijera dentro de su húmeda entrada.

—N-no digas eso, me da vergüenza. —Jeon se ríe, se coloca en medio de las piernas de su omega. Juega un poco con él, queriendo meter solo la puntita y sacarla después, Jimin se moría de ganas de tener su grueso falo dentro— No juegues por favor.

—Me encanta que supliques. Me encantas solo tú.

—¡Jungkook!

Gime al sentir el falo de su esposo dentro, joder, amaba cómo expande todo dentro de el, como toca su punto y lo hace gritar de placer. Las embestidas eran lentas, Jeon amaba ver disfrutar a su omega con cada una de ellas, amaba verlo rebotar ante sus movimientos lentos y fuertes mientras lame sus tetillas.

Era para él una fantasía rebotarle, ver sus pechos hacerlo ante el movimiento, eso volvía loco a su lobo y a él.

Jimin escucha el chapoteo, toma del cabello a su alfa para estampar sus bocas. Mordió los labios de su esposo, esos finos labios que han besado cada sentimiento de su cuerpo, rasguño un poco su hombro ante el placer otorgado. Disfruta de ser penetrado, adora como lo toma, como lo besa, como lo estimula al grado de no parar de gemir su nombre, de ahogar sus gemidos y gritos descontrolados. Jungkook sabía cómo le gusta y joder no se cansaba de tenerlo dentro, de disfrutar de follarlo porque ser destinados era una ventaja más a sus placeres carnales.

Los roles se cambian y ahora era Jimin quién saltaba frenético ante el glande de su esposo. El sudor caía por su frente, no podía parar de penetrarse, Jungkook le ayuda un poco más, siendo rudo al mover sus caderas de esa manera.

Jungkook beso sus hombros, ve su marca, no puede evitar sacar sus colmillos y clavarlos en el cómo todas las veces que lo hacen, porque haciéndolo hace que follarlo sea más excitante para los dos. Jimin grita ante el dolor y placer al mismo tiempo, no deja de dar saltos, siente más la conexión y escucha los pensamientos sucios de su alfa. Jungkook lo tomó de su hermoso cabello blanco para atacar sus labios carnosos.

Ambos estaban llegando al clímax, a Jimin le dolían las piernas y estaba por correrse. Pero paró a último momento, sacó el falo de su alfa para hincarse y meter todo el miembro de su alfa a su boca. Subía y baja, disfrutaba tocar sus bolas y no parar de hacerlo, Jungkook gemía ante lo rico que se siente su boca en su glande, solo su omega sabe cómo ponerlo en aquel punto de su gloria de alfa, y mierda, era jodidamente caliente tenerlo así.

—Vamos amor, más.

Jimin hizo caso y lo hizo más rápido, metió y sacó de su boca aunque estaba ahogando y sus lágrimas salieron ante la sensación de ahogamiento, y es que era grande y ancho, apenas podía meterlo todo a su boca. Jungkook estaba llegando a su clímax, Jimin acelera más sus movimientos. Su alfa deja salir un gemido de placer al dejar salir todo su semen en la boca de su omega. Jimin se lo saca de la boca por lo que le brota un poco de semen en la cara, mierda, para Jeon eso fue magnífico y sucio.

Jimin sé corre también manchando la alfombra de su semen. Jungkook sonríe satisfecho, recuperando la respiración del orgasmo.

—Ven aquí mi amor.

Lo levanta, colocándolo en sus piernas y abrazado su delgado cuerpo. Besa sus labios un momento, ambos estaban agotados ante tal acción.

—Manche tu alfombra. —le susurra entre los besos que se daban.

—No importa, la cambiaré. ¿Estás bien?

Su omega asintió.

—Si, solo estoy cansado.

—Déjame limpiarte y nos vamos a casa. Quiero hacerte el amor una vez más.

—Nuestro cachorro pensará que hay un terremoto ahí dentro.

Jungkook toca su vientre, joder, aún no se la cree que será papá.

—Bueno, tener sexo le ayuda hacer fuerte. Estoy seguro que lo agradecerá.

—Mentiroso, como sabes eso.

—Lo leí. —le roba un besito para después ponerse de pie e ir por los pañuelos que tiene en su escritorio. Jimin no desaprovecha verlo desnudo, su alfa si que tiene un cuerpo sexy, un trasero firme que solo él tiene la dicha de nalguear— Mañana terminaré esto, de todas maneras ya casi está hecho.

Lo limpia de su carita, también lo viste y en menos de un par de minutos ya están cambiados, listos para irse.

—Gracias por ayudarme amor y por la comida.

—Soy tu omega, siempre vas a contar conmigo. —lo abraza, Jungkook besó su nariz de botoncito.

—Lo sé, amor. Por eso te amo demasiado. Que eso siempre te quede claro.

—Y yo a ti mi alfa, siempre te voy amar solo a ti.

—Vamos a casa amor.

Ambos salen de la oficina, se despiden de los guardias no sin antes tirar la alfombra, no quiere que la de limpieza vea eso. Al subir a su auto, no se percatan que alguien está apuntando un arma hacia ellos, lo tenía en la mira sin embargo se arrepiente cuando ve que el omega saca un pequeño traje de bebé.

Los ve marchar, pierde su oportunidad. Tal vez solo dejará pasar esto está vez, pero para otra ocasión no estará tan seguro.

Eunwoo se marcha, listo para su siguiente movimiento.

Se puso hot la cosa jejeje espero que les haya gustado. Se que por el momento agradecerán la paz. Solo por ahora 😈