Ver esas dos rayitas fue la emoción más agradable para Jimin pues después de muchos años, al fin se había cumplido uno de sus sueños que era ser padre.

Después de lo que pasó con su primer embarazo, se sentía vacío y triste, una soledad que lo abrumó por mucho tiempo, pero ahora la vida le dio una nueva oportunidad de ser el mejor padre del mundo, porque eso es lo que haría de ahora en adelante. Estaba muy feliz, y estaba planeando decírselo a su pareja en cuanto tenga los resultados médicos.

Seokjin lo acompañó al día siguiente que supieron la gran noticia. Jimin se había aguantado las ganas de decirle a Jungkook sobre su embarazo, joder, fue lo más difícil de todo el mundo, de verdad moría por decirle. Pero era mejor esperar y darle una respuesta mejor con la del médico.

—Tranquilo, Jimin. Parece que te vas a desmayar. —Le dice Seokjin mirando como Jimin movía de pierna.

—Es que estoy nervioso y feliz a la vez. —Toca su vientre con una cálida sonrisa— Después de lo que me pasó, qué me enteré que si estoy en cinta me hace querer gritarlo a los cuatro vientos. Siempre quise formar una familia con Jungkook, y ahora parece que no puedo creer tal cosa.

—Seguro que Jungkook también va a estallar en felicidad. Se le nota que te ama demasiado.

—Jamás dejamos de amarnos. Pese a todo lo que nos hicieron, estamos juntos. Agradezco mucho que eligieras a Jungkook como mi entrenador.

—Más bien fue el gimnasio quien me ofreció su recomendación. —Le hace saber a lo que Jimin le mira incrédulo.

—¿Qué?

—Yo recibí la llamada del gimnasio de Jungkook cuando se anunció la pelea. Él mismo me llamó y me convenció. ¿Creí que lo sabías?

Eso sorprendió a Jimin.

—No tenía idea.

—Pues yo creo que jugó una buena estrategia para volverte a ver y mira que lo respeto por hacerlo.

Jimin sonrió como todo enamorado, Jungkook a pesar de su separación se ofreció a ser su entrenador, solo para estar con él otra vez.

—No me dijo nada.

—Supongo que quería mantenerlo en secreto, a lo mejor pensó que dirías que no.

—Jamás hubiera dicho eso, sí me sorprendí cuando lo vi, casi se me sale el corazón al verlo.

—Y ahora van a ser padres, el destino de ustedes dos si que fue paciente y verdadero.

—Es verdad. Lo amo y en cuanto toda la promoción de mi disco se termine, me ocuparé de atender a mi familia.

—Voy a extrañarte —Lo abraza y Jimin le devuelve el abrazo.

—También yo, pero podemos salir, lo sabes. Tal vez vayan a comer a nuestra casa.

—Me encantaría.

Ambos han trabajado desde hace mucho tiempo juntos, es obvio que se van a extrañar el uno al otro. La doctora entra con los resultados.

—Bueno ya tengo los resultados del examen médico. Y efectivamente, usted Joven Park Jimin está embarazado de cinco semanas. Felicidades.

Le entrega el papel de sus análisis, Jimin lo lee confirmando lo que la doctora le dijo.

—Estoy muy feliz, Jungkook va enloquecer.

—Me alegro de la buena noticia. Ahora vamos hablar sobre los cuidados que tiene que tener.

Jimin asintió y escuchó lo que la doctora le dijo. Seokjin apunto todo, las comidas, los chequeos y todo eso. Al salir Jimin guardó la hoja para decirle a su prometido, esperaría hasta la noche decirle con una rica cena.

Mientras Jungkook entrenaba, tendría una pelea en dos semanas y tenía que ponerse en forma. Golpea el saco con suma fuerza, el sudor recorría su cuerpo fuerte, dejando más de un suspiro en las chicas que lo veían. Para nadie era sorpresa que solo vinieran al gimnasio del sexy pelinegro por solo verlo, es tan deseado por cada una de ellas.

Pero ese hombre ya tenía dueño.

Da el último golpe sacó un poco de arena del saco de box.

—Buen golpe, Jeon. Parece que tienes más energía hoy en día.

Jungkook se limpia el sudor y bebe un poco de agua.

—Tengo que entrenar bien para mí última pelea ¿No? Daré lo mejor de mi.

—Los chicos me dijeron que será la última ¿Hablas enserio con eso de reiterarte? Creí que solo era una broma.

—Pues ves que no. Me mudaré en cuanto mi prometido terminé sus promociones de su álbum.

Jungkook camina a su oficina y su amigo le sigue detrás. Se sienta y mira su móvil con un mensaje de su Jimin.

🐣Cariño.
No llegues tarde a casa, preparé una cena especial. Te amo.

Sonrió como un bobo enamorado, su amigo lo noto.

—Jamás esperé verte tan feliz como ahora lo estás. Parece que el idol te robó el corazón.

—Así es, Jaehyun. Por eso cuando me mudé a Busan quiero que te quedes a cargo de este gimnasio.

—¿Qué? ¿Hablas enserio? —pregunta incrédulo.

Jungkook asintió.

—Te hiciste cargo del gimnasio que tengo en Daegu y lo hiciste bien. Ahora que te mudaras aquí a la ciudad, quiero que tú te encargues de él.

—Gracias por la confianza, hermano.

—Te lo ganaste. Vendré a ver qué todo esté bien de vez en cuando. Te encargo muy bien este lugar por favor. Sabes lo difícil que fue para mí empezar esto.

—Lo haré, no te preocupes. Por cierto te llegó esto por correo ayer, no me dio tiempo a dártelo.

Le entrega unos papeles, Jungkook lo abre mirando lo que tanto estuvo planeando estás cinco semanas desde que volvieron de su viaje a Rusia. Sonrió al verlos. Tocan la puerta y él da el pase y entrá Sohee.

—Hola, Jaehyun. ¿Creí que te mudarías en unos días? Me dijeron que ya estás instalado con tu pareja.

—Hola, Sohee. Si es que tuve que venirme antes, ya que mi querido jefe me quería con urgencia aquí.

Sohee mira a Jungkook.

—¿Y eso? —pregunta Sohee.

—Le pedí que viniera antes porque tenía que firmar algunos papeles de contrato para que se quede cuidando el gimnasio.

—¿El será el nuevo jefe? ¿Por qué? —cuestionó curiosa.

—Sí. Yo me mudaré a Busan en cuanto Jimin terminé sus promociones. Dejaré a Jaehyun a cargo del gimnasio. Le tengo confianza.

Sohee bajo la mirada un poco decepcionada. Le sonrió levemente aunque por dentro estuviera destrozada.

—Me alegro por ustedes.

—Gracias, Sohee. —le dice sincero Jungkook.

—Bueno, mejor me voy a entrenar. Solo pase a saludar, con permiso.

Sale dejándolos solos. Jungkook noto su mirar.

—Fue demasiado raro ver a tu ex aún por aquí. —dice Jaehyun.

—Solo somos amigos. Aunque siento que uno no puede desaparecer sus sentimientos de mi. La comprendo y también por eso me voy, quiero que ella no tenga que verme a diario y tener que soportar todos esos sentimientos dolorosos. Necesita avanzar porque fui demasiado idiota con ella cuando salíamos.

—En el amor no se manda, y cuando no es correspondido duele como el carajo. Haces bien. Por lo visto ya compraste una casa cerca de la playa.

Jungkook asiente mirando la casa que compró.

—Fue nuestro sueño desde que éramos novios, a Jimin le gustaba la idea de una casa en playa así que eso le daré, porque también me imagino toda mi vida en ese lugar con él.

Jaehyun tenía los ojos acuosos con esas palabras de su jefe.

—¿Por qué lloras?

—¡Es tu culpa! Eso fue muy romántico. —limpia su lágrima y Jungkook se ríe.

—Firma los papeles, tengo que irme temprano.

Jaehyun firma los documentos, después Jungkook le dice un par de cosas del gimnasio de box. Cuando terminó fue rumbo al penthouse de su prometido.

Jimin terminaba de acomodar la mesa, dejó todo tan hermoso que parecía de restaurante. Claro, con ayuda de Seokjin pudo hacerlo, su manager y amigo tiene buen gusto.

El timbre suena lo cual se le hizo extraño pues su novio tenía acceso. Limpió sus manos y miró por la pantalla al lado de la puerta quién era, sorprendido de ver a Taehyung.

Jimin abre la puerta, ve a Taehyung quien parecía estar nervioso.

—Hola. —Saluda Taehyung con una sonrisa débil.

—Hola.

—¿Puedo hablar contigo de algo? Es importante que te lo diga. Sólo tomará unos minutos.

Le pide, a lo que Jimin asiente. Sabía de que podría tratarse. Lo deja pasar a la sala, Taehyung nota que todo estaba muy hermoso como para una cita. Se sentó en el sofá y Jimin se quedó frente a él.

Taehyung no sabía por dónde comenzar, pero tenía que tener el valor de cerrar esto de una vez por todas.

—Siento mucho lo de tu madre. —Empieza a decir— Lo supe por las noticias y también siento no decirlo antes.

—Está bien. De todos modos estaba ocupado. ¿A qué has venido realmente? No creo que solo sea por eso.

Taehyung negó.

—Yo... No sé cómo empezar, pero creo que debes tener unas grandes disculpas de mi parte por todo el daño que te hice en el pasado. —traga grueso mirando a Jimin con arrepentimiento— Jimin... Yo te traicione. Todas esas veces que tu madre daba contigo durante tu relación con Jungkook, yo le decía. Créeme que lamento tanto todo eso, pero ella me hizo un trato que no pude rechazar. Sabes que mi hermano en ese tiempo fue diagnosticado con cáncer y no teníamos el dinero para su tratamiento. Así que me ofreció pagar el tratamiento de mi hermano solo si le decía sobre ti y Jungkook.

Jimin ya sabía todo eso, pero lo dejó continuar.

—Al principio creí que solo era algo leve, pero cuando supo lo de tu embarazo, creo que ahí me di cuenta de lo que realmente planeaba tu madre. Me arrepentí mucho de todo lo que te hice, incluso cuando me sentí atraído por Jungkook. Confundí su apoyo a mi situación que me enamoré de él. Fue cuando me di cuenta de lo mal amigo que estaba siendo porque mientras tú estabas castigado, yo salía con Jungkook sin que él supiera mis intenciones.

Taehyung intentó tomar las manos de Jimin, pero él las apartó.

—Fui una basura contigo y con Jungkook y no sabes cuánto lo siento. He estado con la culpa desde hace años, no podía más. —Limpia sus lágrimas, y Jimin dejó salir un suspiro— Lamento haberte alejado de Jungkook y de querer robarlo para mí por tontos sentimientos. También siento mucho lo que pasó hace semanas, sobre la foto tuya con Jungkook.

—¡¿Qué?! ¿Fuiste tú quién la subió a internet? —le pregunto incrédulo.

Taehyung asintió.

—Lo siento tanto, me dio mucho coraje tus palabras en el pesaje que no puede contenerme. Pero me arrepentí después. Lo siento Jimin. Mis disculpas son sinceras.

Jimin se tuvo que controlar para no darle otra buena bofetada, se puso de pie y Taehyung lo miró curioso hasta que se dio cuenta que Jimin le abrió la puerta para que se fuera. Taehyung se levantó, sabía que Jimin jamás le perdonaría esto.

Antes de que Taehyung se fuera Jimin dijo:

—Mi madre me confesó todo. —Taehyung se detuvo y lo miró— Me dijo que aceptaste por la situación de tu hermano y comprendo, estabas en suma desesperación. Puedo perdonarte eso, pero no lo demás —Lo miró dolido— Saber que mi mejor amigo aprovecho esto para estar cerca de mi novio, fue bajo ¿Qué clase de mejor amigo eras?

—Jimin...

—Eres la personificación de traidor. Porque en vez de decirme todo, pudimos planear algo, sin que perdieras la ayuda de tu hermano. Odio todo eso que intentaste camuflar con arrepentimiento ¿Pero porque hasta ahora me dices esto?

—No fue fácil, Jimin.

—¡Carajo Tae! —le grita— Tuviste el descaro de sabotearme en mi relación, pero lo que más me dolió fue que cuando quede embarazado, no tuviste los pantalones de darme la carta que Jungkook me dejó después de que mi madre hiciera lo que hizo con él. ¡Lo mandó a prisión un año! Y no me dijiste nada en ese tiempo. —Jimin no quería llorar, pero sus ojos se pusieron acuosos— Perdí a mi bebé por culpa de mi madre, necesitaba a mi novio a mi lado en ese momento de dolor ¿Y que hiciste? Nada. Te quedaste callado porque tal vez podrías tener una oportunidad con Jungkook, no por tu hermano, por Jungkook. Eres un mal amigo, y no quiero volverte a ver en mi vida. No me dirijas la palabra. Ni siquiera a Jungkook, porque él me dijo que tú lo querías para que fuera tu entrenador. Eres tan patético. Ni siquiera ahora dejar de estar entre los dos.

Taehyung se sentía mal, se lo merecía. Se merecía este desprecio de ex amigo, aunque Jimin no lo odia como cree hacerlo.

—No hay nada que puedas arreglar, te confíe muchas cosas Taehyung y mira como me pagaste. Incluso con la foto de mi relación con Jungkook. Me quitaste el derecho de ser yo quien le dijera a mis fans que tengo una relación con Jungkook. ¿Viste el caos que formaste? Los comentarios negativos de esos que se llaman mis fans. Joder, esas mierdas me afectan, por qué sabes perfectamente que sufrí amenazas de muerte en mis conciertos y me haces eso para rematar la traición. Aléjate de mi y mi futura familia, porque aunque hiciste todo eso y querías volver hacerlo, me voy a casar con Jungkook.

Le muestras el anillo de compromiso antes de cerrar la puerta dijo:

—Ya puedes ir a contarlo a los chismes. No vuelvas más por aquí, haz tu vida lejos y no me involucres. Adiós Kim Taehyung.

Cierra la puerta recargándose en ella. Soltó un par de lágrimas, le dolía todo lo que tuvo que sufrir por culpa de Taehyung y sus artimañas. Lo perdono solo por lo de su hermano, no por lo demás. Era obvio que no cambiaría, porque si ya traicionó una vez, lo volvería hacer.

Era su mejor amigo, su alma gemela. Y ahora... No hay más que decir.

Se limpió las lágrimas y quitó toda esa aura triste y oscura. Hoy le dirá a su prometido que serán padres y es algo que lo llenó de energía esto no le echará a perder su gran noticia. Corrió al baño a darse una ducha, se arregló solo un poco.

Cuando su prometido llegó, Jungkook sonrió al ver qué todo estaba hermoso. Había velas, rosas, la mesa que estaba frente al gran ventanal le dejó sin palabras.

—¿Cariño?

Jimin sale de la cocina, lucía hermoso con la camisa blanca de botones y sus pantalones negros. Jungkook dejó la botella de vino en la mesa.

—Wao... Te luciste amor. —le dice Jungkook tomando su cintura para robarle un beso.

Jimin coloca sus manos en el pecho de su novio, sonriendo.

—Tenía que lucirse porque hay dos grandes noticias que quiero darte.

—¿Así? ¿Cómo cuáles?

—Pues creo que la primera si te la diré.

—Vamos amor, no me dejes con la incertidumbre.

—Es que si te cuento las dos noticias no querrás cenar, porque estoy seguro que me llevarás a la cama. —lo mira con descaro a lo que Jungkook le hace un puchero.

—Por favor, nene. Sabes lo curioso que soy, no me dejes así.

Jimin no estaba seguro si decirle, pero es que ni él se aguantaba las ganas de darle la noticia.

—Está bien, pero vas a cenar. Me esforcé mucho para ello.

—Lo prometo.

—Bien. La primera noticia buena fue que el CEO me dijo que va a adelantar mi álbum en dos días.

—Eso es una buena noticia, amor. ¿Por qué tan pronto?

Jimin jugó con el arete de su novio, ahí venía la otra noticia.

—Es que le dije que adelantemos el álbum y las promociones porque no podré hacerlo después.

Jungkook frunció el ceño.

—¿Por?

—Porque pondría en peligro mi embarazo. —se alejó un poco mirando como Jungkook abrió los ojos de par en par.

—Espera ¿Tú estás...

—Si. —rodeo su cuello besando sus labios— Vamos a ser padres , estoy esperando un bebé.

Jungkook no sabía ni como reaccionar, ¿joder era en serio?. Alzó a Jimin dándole vueltas mientras el castaño reía sin parar, Jungkook le llenaba de besitos tiernos por todo su rostro y labios. Estaba demasiado feliz.

—¡¿Qué?! Amor por dios. Es la mejor noticia del mundo, la mejor que me pudieran dar. —acuno sus mejillas y soltó algunas lágrimas.

—Yo también estoy muy feliz Jungkookie. Después de todo lo que pasamos al fin tendré la familia que siempre soñé a lado del hombre que amo.

—También soñé con este momento, una familia con mi Jimin, mi chico descarado y tierno.

Jungkook lo abraza llorando de felicidad, es que no se podría creer que será padre. Jimin es su más grande tesoro, su más grande amor. Al fin podrían ser solo ellos, ya no había nadie quien lo separe.

Ambos celebraron la llegada de una gran etapa en su vida con la llegada de su bebé. Ya les toca a ser felices al fin. La pareja cenó y fueron a la cama a hacer el amor, bueno, Jimin no podía quedar más embarazado y Jungkook se aseguró de complacer a su futuro esposo.

La noche terminó bien, ahora les toca la tercera etapa de su relación; ser padres.

El final llega niñas.