Jimin terminaba de dibujar el próximo vestido de novia que entregaría. Sonrió satisfecho porque de seguro a la clienta le gustará mucho lo que hizo para ella. Sale de su oficina y va con ella quien veía los vestidos que ya tenía Jimin en los aparadores. Hacer esto era su pasión, era su todo.

—Termine de diseñar su vestido de novia. Espero que le guste mucho. —dice Jimin sentándose en su escritorio.

—Ya quiero verlo. —dice emocionada la novia.

—Pues este es el diseño. Capture lo que tenías en mente. Los diamantes puedo colocarlos aquí como me dijiste, así se verá el vestido brillante y hermoso. El velo con los pequeños detalles de flores ¿Qué te parece?

—Me gusta mucho. Es como siempre lo había soñado. Definitivamente eres el mejor.

—Muchas gracias. ¿Entonces tomamos tus medidas para comenzar hacerlo?

—¡Por supuesto!

—Muy bien, sígueme.

La mujer fue con Jimin a hacerse las medidas. Después de eso la ayudó a elegir la tela la cual ella misma eligió. Con todo eso terminó su día con una gran sonrisa. Le encantaba su trabajo, hacer felices a las novias eran su especialidad. Esperaba algún día usar un traje a su medida diseñado por él para su gran día. Aunque con lo que estaba pasando y con su bebé todo era complicado.

Dudaba de encontrar algún día un hombre que lo entienda y quiera con su hijo. Será imposible y más teniendo a Jeon como guardaespaldas. Suspiro. El solo pensar en Jungkook le causa escalofríos. Lo que ambos hicieron esa noche trajo la creación de su primer bebé, le emociona ser papá, aunque no con su más grande enemigo. Lo peor de todo es que no siente que lo odia demasiado, Jungkook cambió demasiado.

Eso no justifica lo que hizo en el pasado.

—Nos vamos señor Jimin. —le dice una de sus ayudantes.

—Si que descansen. Nos vemos mañana.

Se despiden dejando solo a Jimin. Cierra la tienda porque está súper cansado. Jungkook quedó de llamarlo para venir por él adónde se supone que vivirá de ahora en adelante. Protestó mucho porque no quería perder el dinero del alquiler de su apartamento, le dijo que el le daría el reembolso de todo, no le quedó más opción que irse con el. Miró su móvil para ve si tiene llamadas de Jungkook, pero no parecía ninguna llamada de él. Tomó sus cosas y se abrigo, quería ir por algo de comer porque su pequeño bebé le estaba exigiendo unas papas con una banderilla cubierta de ketchup.

Los antojos irresistibles que tiene no podían esperar más.

Salió cerrando con llave el lugar. Estaba por dar unos pasos cuando escucha como varias personas bajan de autos negros y con armas. Jimin se alertó porque no sabía qué hacer.

—Vayan por él.

Dijo uno de ellos. Jimin palideció. No dudó en correr pero esos tipos eran muchos y corrían más rápido.

—¡Déjeme en paz! —le gritó.

Intento irse por el camino del parque, había gente por lo general. Solo que justo hoy no había ningún alma rondando por el parque. Sigue corriendo, pero uno de ellos lo atrapa.

—¡Sueltenme! —intentó zafarse de su agarré pero no pudo. Tenía mucho miedo, no sabía quiénes eran estás personas.

—Lo tengo.

Dijo uno de ellos. Se lo llevó a la fuerza, pero Jimin se resistía.

—¡Suéltame maldito hijo de puta! —le grita y le golpea, a lo qué tipo ese no se tentó el corazón y le golpeó en la cabeza, haciendo que Jimin cayera desmayado.

Lo cargo adónde los demás los esperaban.

—Buen trabajo, súbelo a la camioneta. Tenemos que irnos.

—Sí señor.

El tipo aquel subió a Jimin a la camioneta, cerró la puerta y él iba a subir cuando el conductor pisó el acelerador. Todos se quedaron viéndose hasta que unos disparos comenzaron a resonar.

—Matenlos a todos. —dio la orden Jungkook.

Se encontraba molesto. Su gente comenzó a liquidar a todo el que se le cruzará. Esa maldita de Seulgi no se iba a quedar de manos atadas. Sabía que intentaba algo contra él, pero no contra su rubio e hijo. Esa se las pagará muy caro porque con su familia nadie se mete.

—Jungkook. Jimin está a salvo, sube al auto que seguro querrá verte cuando despierte. —le dice su amigo y guardaespaldas Hoseok.

—Asegúrense que todos sean calcinados. No quiero que la policía investigue. Las cámaras también.

—Lo haré, no te preocupes. Vete.

Jungkook subió al auto y condujo a su hogar. Mientras toda su seguridad terminaba el trabajo, limpio y sin dejar testigos. Aquí nada pasó.

Cuando llega a su mansión baja deprisa, tenía que saber cómo estaba su Jimin y su hijo. Dios lo estaba matando el miedo de pensar que algo malo les pasó por su culpa.

—¿Dónde está Jimin? —le pregunta a su hermano menor.

—Está en la habitación que preparaste para él. El médico está con él.

—Gracias New.

Ambos subieron las escaleras deprisa. Jungkook abrió la puerta viendo a su lindo rubio con una gasa en su cabeza, eso le preocupó bastante.

—¿Cómo está? —se puso a su lado tomando su mano.

—Él está bien, fue un duro golpe el que recibió pero nada grave.

—¿Y mi hijo? El bebé que él espera, ¿está bien?

—Si, señor Jeon. El bebé está bien. Solo que el joven necesita reposo, al menos dos semanas. El susto pudo causarle problemas, así que es mejor que descanse, que no se estrese por nada y tome este medicamento. Todo estará bien, no se preocupe.

Jungkook sintió alivio de escuchar eso.

—Muchas gracias.

—Si presenta cualquier problema, no dude en llamarme. Con permiso señor Jeon.

El médico se despide.

Jungkook siente el aire volver a sus pulmones, se odiaría solo de pensar que algo malo me pasase a su Jimin. Jamás se lo perdonaría.

—Mi cuñado está bien, deja de respirar raro Jungkookie. —se burla New.

—Claro que estoy preocupado. Él es muy importante para mí como para no estarlo.

—Se nota. ¿Quieres que cuide de él? Tienes que ir a ver a Zee para lo de su ”misión” Sabes lo gruñón que es cuando tardas mucho.

Dice con voz traviesa. Jungkook le mira mal pues sabe que su hermanito está embobado con su mejor socio.

—Te tomaré la palabra, cuidalo mientras tanto. Si pregunta por mi dile que volveré más tarde. —suspira no queriendo irse. Quiere quedarse con él y explicarle que tal vez su vida será muy diferente de ahora en adelante.

No sabía cómo saldrá eso teniendo encuenta que le odia, ahora más que nunca le odiara más.

—Tranquilo, Jungkookie. Verás que lo tomará bien cuando sepa quién eres en verdad.

—Ese es el problema. Por favor, cuando despierte me avisas.

—Lo haré. Vete o llegarás tarde.

—Yoongi también vendrá con Hoseok. Si llego Taehyung por favor no dejes que ande de fisgón o de metido, sabes cómo es.

—Lo haré, no te preocupes. Taehyung no me cae bien. No dudaré en darle otra paliza.

Se cruza de brazos haciendo un lindo puchero. Jungkook se levanta y le revuelve su cabello.

—Portate bien.

—Yo siempre.

Mira a Jimin dándole un beso en la frente, New sonrió al ver a su hermano de esa manera. La primera vez que lo ve así de feliz, aunque sabe que no es correspondido. Sabe in poco sobre su historia, por eso aunque sabe que su hermano hizo mal, el no tuvo la culpa de todo lo que pasó ese día. Se marchó dejándolos solos, New se encargó que nadie entrara hasta que despertara lo cual hizo muy bien.

Pasó una hora cuando al fin Jimin comenzó a despertarse. Abrió los ojos poco y se intentó sentar mirando a su alrededor, le dolía un poco la cabeza, no sabía dónde estaba o qué había pasado, hasta que recuerda y entra en pánico.

—¿Dónde estoy? —murmura para el mismo.

Trata de levantarse de la cama, en eso entra alguien con un bandeja de comida. Jimin se paraliza, tenía miedo.

—Despertaste, me alegro que sea así. Te traje comida deliciosa porque quiero que tomes tu medicamento y...

—¿Quién eres tú? ¿Que estoy haciendo aquí y necesito una explicación? —toma la lámpara para defenderse, cosa que causa gracia a New.

—Deja eso, se artes marciales y tengo varias cuchillas que te puedo lanzar sin que te des cuenta. —Jimin pretendía no ceder y New saca una de sus cuchillas especiales para hacerle ver qué no metía— ¿Quieres ver?

—¿Dónde estoy? Tengo miedo. —le responde.

Baja la lámpara pero la mantiene cerca. No podía confiar en el, ni siquiera recuerda mucho.

—No te haré daño, estás a salvo. Estás en la casa de Jungkook, bueno parecer sinceros, estás en tu casa.

Deja la comida aún lado y Jimin entiende mejor las cosas, aunque un poco más confundido que antes.

—¿De Jungkook? ¿Estoy en su casa? —pregunta Jimin.

—Si. Él te trajo aquí antes que esos tipos te hicieran algo. Deberías comer algo, el médico dijo que necesitas energía.

Jimin se toca el vientre con temor a preguntar si algo malo pasó, pero New lo supo contestar su duda.

—Tu bebé está bien, no tienes nada de qué preocuparte. Tienes un buen golpe, pero nada efecto.

—Gracias, adiós. —sintió alivió.

—Aunque tienes que mantener reposo durante dos semanas, fue recomendación del médico por el bien de tu bebé. Los medicamentos también son importantes, así que tomalos.

—¿Dónde está Jungkook? Quiero hablar con él.

—El llegará un poco tarde. Fue a ver a alguien. No te preocupes no tengas miedo, soy su hermano menor, un gusto conocerte soy Jeon Nunew, aunque puedes solo decirme New.

—Mucho gusto. No sabía qué Jungkook tenía hermanos.

—Bueno... Digamos que no soy de todo su hermano, soy su hermanastro aunque él me quiere como tal.

—Ya veo.

—Come todo esto y toma el medicamento, volverá en un rato más. Por favor, no te levantes mucho, recuerda que tienes que mantenerte en reposo.

—Sí, gracias.

New le sonríe para luego irse de la habitación. Jimin no quería ser desagradecido con lo que le trajo, además todo se miraba maravilloso. Comió un poco de pescado, el caldo de pollo, la fruta y todo lo demás hasta dejar los platos limpios. Se sorprendió de haber comido todo, pues desde hace tiempo que está en dietas para no engordar, aunque ya estando embarazado no importaba mucho, su panza sería grande y sus antojos irresistibles.

Tomó el medicamento y después de un rato se quedó dormido otra vez.

Jungkook llegó con varias cosas y entre ellas una bolsa con cosas de bebés. Había olvidado que las había pedido especialmente para su hijo, aunque todavía fuese un cacahuate, no está demás empezar con sus regalos para su hijo, y claro, también para Jimin.

Al entrar a su mansión vio a Yoongi con Hoseok, ambos estaban tomamos de las manos, mirándose con amor. Cómo deseaba que Jimin le perdonará y ellos también disfruten de un amor así, porque a pesar de su error, él jamás dejó de amarlo, Jimin siempre será el único en este maldito planeta que al que ame.

Tal vez no será fácil, pero quiere volver a conquistar su corazón.

Ve a su hermano bajando de las escaleras en pijama tallando sus ojos.

—¿Qué haces despierto a esta hora? Son las tres de la mañana. —le pregunta Jungkook.

—Desperté sólo para decir que que Jimin está bien, despertó y se alteró un poco.

—Joder.

—Descuida, le platiqué un poco todo y se quedó más tranquilo, aunque le tienes que decir la verdad. Hará preguntas y yo no soy quien debe decirle todo.

—Lo sé... —rasca su nuca frustrado— Solo que no es fácil decirle que tengo líos con la mafia. Que soy un maldito Mafioso.

—¡¿Qué tú eres qué?!

New y Jungkook voltean a ver a un Jimin sorprendido y molesto.

Esto se pondrá mejor además que poco a poco la historia del pasado se aclarara.

Pobre Jungkook. Va tener que dar buenas explicaciones.
Espero que les haya gustado el capítulo.

El hermano de Jungkook es el actor Nunew.