cigarretes.

          Mira de soslayo la avenida a su lado. Y suspira, como la ha hecho desde hace un par de meses. Busca con la mirada los rayos reflejados del sol que si bien tienen una armonía intacta al colarse por los árboles que le permiten observar de mejor manera aquel atardecer, brillante y cálido.

          Calada. Una tras otra.

          El viento de Hawkins es fresco, tan fresco y ligero que no puede evitar sentir culpa por lo que va a hacer, ¿acaso su padre alguna vez sintió culpa por su madre? Piensa, y la respuesta nunca llega, esperanzado da otra calada para bajar la tensión que se ha formado en su cuerpo. Es liberador y a su vez es un instinto de supervicencia que lo hace querer más y dar ese ligero paso que lo llevará a dónde sea.

          El viento piena sus cabellos y desea por una vez en su vida no ser tan presuntuoso y tener ese lindo cabello corto, las chicas lo elogian al tener sexo, los hombres lo envidian pero, nadie sabe ese secreto interno que parece que a veces sale a relucir, su madre amaba su cabello tan suave y rubio, Billy. Otra calada al cigarro. La tensión baja pero su mirada perdida en aquel lago le hace querer dar el siguiente paso, el cigarro le abre y cierra algo en su mente, como si de una cortina se tratase. Y otra calada.

          La orilla del puente está oxidada puede oler el aroma a metal viejo, y sostiene de manera más fuerte el barandal, siente un rasguño en su palma izquierda pero no duele o arde lo suficiente para poder opacar ese inmenso dolor en su pecho que crece con forme pasan los días, tan profundo que se pregunta si es real. Se balancea unos instantes, cuando la brisa comienza a ser mas fuerte el sonido sordo de los árboles que golpean entre sí se confunden con los de su corazón golpean en las paredes de su pecho.

          ¿Y si...?

          La caída no lo mataría, pero al menos sería una manera de liberar dolor.

          El humo del cigarro pega en su rostro y nisiquiera ha notado que el cigarro ya no tiene tabaco y está a medio terminar. Se siente caliente en sus labios y la tensión aumenta, un paso más. Sólo uno.

          Cuando siente ser tomado por su brazo derecho, un agarre fuerte, cálido. Voltea bruscamente a encarar el rostro de la persona que lo detiene, es entonces que mira a él, a Steve la princesa.

          —Billy,—su nombre suena suave en la voz aguda de Harrington. Lleva consigo esa camiseta azul que hace resaltar por completo su piel blanca, Billy piensa que Steve es bonito (siempre lo ha hecho) pero, eso está mal eso es de maricas Billy.—Billy, no saltes.

          Billy busca algo en su mirada, no sabe qué es, pero los ojos cafés de Steve que le miran entre sorprendidos y con tristeza le cuasan algo en el corazón que comienza a latir como si un montón de caballos galopearan en su pecho. Harrington le aigue sosteniendo y no sabe porqué aun no lo ha corrido, su agarre es firme pero no lo lastima, los rayos del sol le bañan y puede mirar ese brillo que sola vez lo ha visto, en su madre.

          —Billy—hay suplica en la voz de Steve.

          Y no sabe cómo o por qué. Pero, Harrington le sostiene entre sus brazos, y ni si quiera se percata que hay un llanto, y lágrimas. El agarre de Steve es cálido, el llanto aumenta y es cuando se percata que el llanto es suyo y tiene las mejillas completamente mojadas, moja la camisa de Harrington. Siente sus piernas temblar y Billy piensa que en cualquier momento estará a punto de caer, el cuerpo de Steve le da soporte y no sabe como pero Harrington le ha tomado de la mano y ha hecho que suelte el cigarro a medio terminar.

          No le molesta. Los dedos de Harrington se acomodan entre los suyos sosteniendolos con fuerza. Estoy aquí escucha decir a Harrington. Después, intentando no hipar se separa del abrazo y Billy... Mierda, Billy mira directamente los orbes castaños de Harrington, son brillantes, grandes y profundos. Son bonitos y expresivos.

          El ire se le ha ido, y es entonces que piensa que ya no le harán falta los cigarros, sino los bonitos ojos de la princesa Steve.

He aquí en primer capítulo. Espero les guste.