CAPITULO 006

ᴱˡ ᵖᵃʳᵗⁱᵈᵒ ʸ ᵘⁿᵃ ¿ᶜⁱᵗᵃ?

Hoy era el día, por fin el ansioso partido, la cancha vibraba con la energía. Desde que llegamos, la emoción se sentía en el aire, y aunque yo no era fanática del fútbol, el ambiente me contagiaba.

Mientras esperábamos que empezara el partido. Valeria fue a buscar algo de tomar, y yo, sin mucho que hacer, saqué mi celular y abrí TikTok. Deslicé la pantalla sin mucho interés hasta que un video apareció. Era un edit de Cristiano Junior, con la canción de Una Noche en Medellín.

—No puede ser —murmuré, entre sorprendida y divertida.

El video mostraba sus mejores jugadas, su sonrisa confiada y algunas fotos de él con ese porte que parecía de modelo. Y claro, los comentarios estaban llenos de chicas muriendo por él.

"Lo que es ser hijo de CR7 y encima estar guapo, Dios mío."

"Si Cristiano Jr. me mirara así, yo me desmayo."

—¿Qué tanto ves? —preguntó Valeria, regresando con dos botellas de agua.

—Nada importante —dije bloqueando el celular de inmediato.

Pero mi mente seguía en el video. No podía negar que Junior tenía su encanto. Y más con ese aire de chico seguro que sabía lo que hacía.

El silbato sonó y el juego comenzó. Desde el primer minuto, ambos equipos demostraron por qué estaban allí. Santiago estaba jugando increíble, pero el equipo de  Al-Nassr no se quedaba atrás.

Mis ojos seguían cada movimiento de Santiago, sintiendo orgullo por él. Pero, sin quererlo, también terminaban buscando a Junior en el campo.

—Admite que estás viéndolo a él —susurró Valeria en mi oído con una sonrisa burlona.

—Estoy viendo a mi hermano —le respondí, pero ella rodó los ojos.

—Claro que sí, Mariann, y yo nací ayer.

Me reí, negando con la cabeza. Pero era imposible no notar a Junior en el campo. Su habilidad con la pelota era impresionante, y cada vez que el balón llegaba a sus pies, el estadio parecía contener la respiración.

Los jugadores de ambos equipos estaban  enfocados en la pelota, moviéndose por el campo como si todo dependiera de este momento.

— ¡Falta sobre Cristiano! — gritó el comentarista.

Una falta clara de un jugador del equipo de mi hermano detuvo el juego por un instante. El árbitro se acercó y mostró una tarjeta amarilla al jugador, que se quejó visiblemente, pero no hubo discusión. Cristiano se preparaba para cobrar el tiro libre.

El, se puso en posición y levantó la pelota disparando hacia la portería. El balón voló como una flecha, pasando por encima de la barrera de jugadores. El portero saltó con todas sus fuerzas, pero fue inútil. El gol fue perfecto,

Pero un gesto, el  levantó la cabeza, buscó entre las gradas y me vio. Con su dedo apuntó directo hacia mí. Me señaló. No había dudas. Era para mí. Después me mando un beso volando. Y en ese momento, todo en el estadio parecía parar. La multitud seguía celebrando, pero de alguna manera, todo se centró en mí. Él me había dedicado ese gol.

—Dios mío, ¿qué fue eso? —susurré para mí misma.

Valeria, prosesaba lo que acaba de pasar

—Mariann algo que no me hayas contado por qué definitivamente Cristiano Junior está detrás de ti —dijo sorprendida

Los ojos de la gente en el estadio se movieron hacia mí. mi hermano, todos. Parecía que todo el mundo me miraba. La tensión se podía cortar con un cuchillo. Entre miradas curiosas, unas más sorprendidas que otras, yo sentí cómo las personas comenzaban a prestarme más atención.

Mire hacia las gradas de más abajo y vi a Georgina mirandome , pero su expresión era de pura sorpresa

El partido estaba en 4-3, y ya casi llegábamos al final del segundo tiempo. La tensión era real. Al-Nassr iba ganando y veia a mi hermano algo tenso

Después del partido, bajamos a la zona donde estaban los jugadores. Santiago vino directo hacia mí y me abrazó fuerte.

—Jugaste increíble —le dije con una sonrisa.

—Gracias, aunque me habría gustado ganar.

—Lo hiciste excelente —agregó mi madre, dándole un beso en la mejilla.

—Estuvo bueno eso gol santiago—meciona Valeria acercándose

—Gracias val—Dice el sonriendo

Tomé mi celular en mano pero alguien me lo arrebata

—¿Por cierto Mariann qué fue eso eh?—Dice con tono atrevido—Lo vi todito, son pareja o que son

—Santiago, no somos nada, sólo fue algo estúpido que hizo—Dije mirándolo

—Asi entonces ¿Qué pasó, Mariann? ¿Acaso Cristiano Jr. vio a mi hermana y dijo '¡Gol!'?—Dice sobresaltado—Ten cuidado

—Tendre cuidado, ahora me das mi celular gracias—Dije quitándole mi celular de su mano

El se dio media vuelta y se fue junto con Valeria, algo no me cuadra de estos dos.

Empezé a  revisar mi celular y en ese momento sentí una presencia a mi lado.

—Entonces... si ganaba, ¿ibas a salir conmigo o no?

Mi piel se erizó. Reconocí la voz al instante.

Me giré y ahí estaba Junior, con su uniforme de Al-Nassr, el cabello un poco despeinado por el partido, pero con la misma sonrisa segura de siempre.

—¿Perdón? —fingí no entender.

—Tu aceptaste,si yo ganaba tú aceptabas salir conmigo.

Me crucé de brazos, fingiendo pensar.

—Mmm… no recuerdo haber aceptado.

—Pero no la negaste —dijo, inclinándose apenas hacia mí, su tono bajo, como si fuera un secreto solo entre los dos.

Junior volvió a mirarme con una ceja levantada, como esperando mi respuesta.

Suspiré y fingí desinterés.

—Está bien, una salida no suena tan mal.

Una sonrisa satisfecha apareció en su rostro.

—Me alegra que lo veas así.

Se inclinó levemente, como si fuera a susurrarme algo más, y por un segundo sentí su aliento cerca. Mi corazón latió más rápido, pero justo cuando pensé que iba a decir algo, se separó con una sonrisa divertida.

—Quiero presentarte a alguien—Menciona el mientras toma mi mano

—¿Espera que?—Pregunte

—Ya verás—Dice sonriendo

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