"𝖑𝖔𝖘 𝖈𝖆𝖓𝖎𝖇𝖆𝖑𝖊𝖘"

[𝑢𝑛𝑎 𝑐𝑒𝑛𝑎 𝑐𝑜𝑛 𝑙𝑎 𝑚𝑢𝑒𝑟𝑡𝑒]

"Seremos tres locos en un paraíso"

⌛| 2 años después. 1960 Francia.

-¿Aloo?-contestaba aquella rubia de ojos verdes.

-Señorita Greco.

-Vamos! Dime Kate cariño.-Sonreía mientras caminaba por su gran jardín.

-A llegado esta invitación para usted, viene con su nombre y clave.

Regresa en si para fijar la vista en la sirvienta de la mansión para poder mirar a los lados fijandose que no este nadie más que ellas dos. Saca el cigarrillo de entre sus labios para soltar el humo y tomarla.

-Okey, mira esto quedara entre tu y yo ¿Entendido? Mis padre no deben saber sobre esto, Linda.

-Mhm-tose para desviar su mirada mientras traga saliva-Yo debo notificar todo a sus padres y...

Frunce sus cejas para mirarle con un poco de fastidio, la servidumbre esta para servirle y no para negarle ni preguntarle nada.

-¿Cómo dijiste?-vuelve a dar otra calada para soltarlo de nuevo-Solo te recuerdo quién es la dueña de aquí, me sirves a mi. Y lo lamento, no quiero ser grosera pero ellos no deben saber, te vuelvo a preguntar ¿Entendido?

La de menor estatura solo baja la cabeza para alzarla de nuevo y asentir.

-Lo lamento-se disculpa para seguir su camino.

Toca su tabique mirando la carta con el nombre de su antiguo rival.

"Hajime Kokonoi"

Alza una de sus cejas para poder abrir el sobre el cual contiene un gran texto. Después de aquel gran enfrentamiento se volvieron amigos y socios, de ves en cuando se envíaban cartas solo para contar sus asañas.

Cómo la ves que Hajime le envio una diciendo: "Esta vez gane más de un millón, talvez un día te gane"

Ella solo respondio un sincero "Es bueno soñar"

Siguiendo con la carta, era una invitación. A una fiesta, justo aquí, en el país de la familia de su madre.

-¿Eh?-abre sus ojos al ver en dondé es, obviamente en un lugar muy caro, de los más caros de toda Francia.

De: Hajime Kokonoi.
Para: Kate Greco.

Así es, estoy en francia y... ¿sabes? hay una fiesta que es sobre mis asuntos, bueno necesito una gran acompañante y que mejor si eres tu mi Italiana de ojos verdes.

Ugh parezco de esos tipos que sacan sus coque-
teos de quinta, en fin la dirección es en.

|Calle manzanilla, en las residencias palomas.
La colonia de 1899.

Tendrás que decir un codigo, pero puedes entre-
gar la estampilla del "club" viene en la postal y es especial, tiene algo que las distingue de todas, no la olvides. Espero tu presencia.

El vestuario debe ser victoriano.

Para el día /04/07/1960.

-¡Si!-alza ambos brazos mirando su jardín lleno de mariposas-¡Hay fiesta señores y mañana debo estar fina!

Camina sacandose aquellos tacones haciendo lucir sus piernas blancas y pecosas, dando un aura de felicidad. Sube las escaleras de cristal con apuro su carta entre manos y el corazón en el pecho.

🕙|9:09 pm, Mansión Greco.

La cena esta lista y con ello un gran silencio en la mesa, cómo si fuese una cueva donde el unico sonido es el de los cubiertos tocando aquellos platos de ceramica.

Todo esta servido, el vino, la carne, verduras, sopa y más.

Degustando de esta deliciosa cena, la gran mesa y candelabro sobre de esta, comiendo cómo gente elegante, por qué asi son los Greco.

-¿Hiciste el trabajo del despacho? Kate.-dice su padre mientras mete otro pedazo de carne a su boca.

-Mhgm.

Da un trago a su vino, un vino de textura arenosa, para nada agradable a su boca.

-La siguiente semana tenemos un trabajo importante, tendremos una junta con el Clan, y no quiero errores, ninguna falla.

-No es necesario que me lo digas, siempre hago mi trabajo a la perfección.

Ahora que ella lo piensa, no sabe en que momento la relación con su padre se fue el carajo, si fue por el trabajo con el "clan" o simplemente crecieron.

-Eso espero.

Toma la servilleta para tomarla con tres dedos para limpiar y secar las comisuras de su labio. Se levanta de la mesa para acomodar su silla y sacar un puro.

- Y otra cosa Kate, me contarón que tienes amigos extrangeros ¿Y una fiesta? No, debes consentrarte en los negocios de la familia.

-No soy una niñata de 16 años, no me das ordenes sobre que hacer con mi vida.-suelta un suspiro para dar un bocado a su comida-Y le llamas negocios familiares a cosas ilegales? Que interesante Padre.

Al igual que su padre toma una servilleta limpiando su boca para relamer sus labios y levantarse asi tomando camino a las afueras de su casa.

-Kate.

La voz de su padre le para asi que solo gira su cabeza para mirarle de reojo.

-Te recuerdo que lo hago por nuestro bien.

-Claro, por nuestro bien.-suelta con burla.

Camina haciendo sonar sus tacones y abriendo la puerta de cristal que da justo a la terraza donde se mira el jardín.

Se recarga en aquél balaustre de concreto el cuál tiene forma de piezas de ajedréz, mira hacia arriba. El cielo negro y la Luna brillante.

Aveces el cielo puede dar mucho miedo, no siempre es de un color azul celeste el cuál te puede dar tranquilidad, o incluso cuándo es gris no da tanto miedo, pero el verlo negro da tanta profundidad que puedes sentir cómo este intenta comerte.

Pero para eso se encuentra la Luna o el Sol, siempre estan ahí para darle ese pequeño brillo.

Estira su brazo para quedar justo al frente del satélite brillante, cierra su puño y lo abre de nuevo para mirar su palma. El sereno de la noche, pegando con su cuerpo brindandole un escalofrío.

Es entonces que recuerda el juego de hace dos años, cuándo fue a las vegas por "trabajo" asi recordando a aquellos dos hermanos.

Toca su cara para sonreir, ahora que piensa lo que les dijo esa ves le da un poco de vergüenza, siente un pinchaso en el corazón lo cual le saca una sonrisa.

-Estarán con él?

Se pregunta así misma refiriendose a la fiesta de mañana.

Muerde su uña pensando en que debera ponerse, o que debera hacer, cómo debera comportarse. Pero siempre llega a su conclusión, no debe cambiar nada por encajar, solo va a vivir.

El sonido de un Buhó llama su atención, asi que mira hacia abajo buscando de dondé viene.

Viene de la fuente que esta en medio del jardín, son dos Buhós. Camina bajando las escaleras tomandose del barandal, y camina lento para no asustarles.

A muchas personas les daría miedo, pero para ella son cómo unos lindos gatos, son muy parecidos.

El sonido del agua corriendo por ahí y la brisa dando un toque más fresco.

Una ves toma asciento en la barda de la fuente pasando su mano por el agua para después acercarla a uno de los dos Buhós.

-Eres lindo sabes?-habla mientras intenta acariciarle.

El pequeño Buhó gira su cabeza mientras emite su sonido, acerca su cabeza a la mano de la chica olfateando, pero lo que temía pasa.

Es mordida.

-¡Ah! Que carajos te pasá.

Dice mientras soba su dedo, el Buhó mayor le mira mientras inclina su cabeza así hechandose a volar.

-Diablos.

Se levanta y camina hacia las mismas escaleras para poder adentrarse a las instalaciones de su gran mansión.

Recorriendo la casa y adentrandose por muchos pasillos mirando los distintos cuadros de su familia pegados en la pared, otros muchos siendo de animales o incluso de arte "futurista", esos siendo los más caros que ha llegado a comprar.

Abre la manija de la puerta de su habitación para cerrarla una vez ya entró.

Camina a su ropero para sacar un blusón de tela de algodón color palo de rosa, un color sumamente claro. Toma aquel cepillo para desenredar su corto cabello.

Estando descalza camina hasta llegar a su cama y así apagar las luces.

Envolviendose en la comodidad de las sabanas y en lo suave de aquella almohada, girando entre ellas para encontrar una posición que más le sea comoda.

Ya girada hacia el lado derecho de la cama donde tiene vista a su balcón mirando lo bien reflejada de la luz Lunar.

Sus cortinas siendo de un color claro blanco dando la apariencia de ser casi transparentes, dejando ver muy bien el balaustre el cual tiene algunas plantas enredadas junto a unas cuantas flores saliendo de sus tallos.

Pone ambas manos debajo de su cabeza para cerrar sus ojos y dar respiraciones profundas.

Una vez su abuela le ha contado que dar cinco respiraciones profundas son suficientes para caer en un sueño eterno, asi que siempre lo hace antes de dormir.

Relaja su cuerpo sin mover ninguna extremidad, para poder caer en sueño profundo, tan profundo cómo el mar.

Pasan unos minutos, tres minutos. Siente su cuerpo relajado cómo una hoja, su mente comienza a poner atención en cada parte de su cuerpo.

Es extraño.

Sentir todas las partes de su tomo, desde la punta de su pie hasta la punta de su nariz, sentir un pequeño musculo, el cómo recorre la sangre o incluso sentir los latidos del corazón.

Ahora si duerme su mente, cómo si solo la apagara, para poder sentir lo que es el descanzo.

Las horas pasan, las nubes se mueven, el frío se acaba y la Luna se esconde.

El Sol aparece.

Los cantos de aquellos pajaritos sonando desde que la tenue luz solar se muestra, despertando a la servidumbre.

Un nuevo día comienza, y este con toquidos sobre la puerta de nuestra rubia favorita.

El "toc, toc" se escucha despertando a la chica.

-Adelante.

Responde apenas en un sonido audible para la persona que esta fuera de esa puerta de madera.

Se escucha el sonido de un rechinido, la puerta es abierta.

-Señorita Kate, el desayuno esta listo.

-En un momento voy, gracias.

Responde para estirar su pierna fuera de la cama y sentarse, siempre tuvo el buen habito de despertar en cuanto alguien le dice, o incluso si nadie lo hace, siempre despierta temprano.

Alza ambos brazos abriendo las palmas de sus manos estirandose cómo un lindo gatito.

Da un bostezo y parpadea lentamente adaptandose a la luz.

Camina hacia su gran ropero para sacar la ropa del día, hoy tiene que salir y hacer compras, es una noche importante.

Unos tacones blancos junto a un vestido lila, un sombrero color crema, lentes oscuros y claro no olvidemos su bolso.

-Mamá saldré regresare en unas horas.-avisa caminando a la puerta de salida.

-Con cuidado, sabes cómo son las cosas ahora.

-Losé, mis guarda espaldas vienen conmigo.

Al salir completamente de aquella mansión el viento hace que su vestido se alze un poco junto a sus cabellos rubios.

Es una mañana fresca, y hoy es mi día, bueno a decir verdad todos son míos.

Al sentir el viento por mi cuerpo me hace suspirar pues siempre es una sensación tan divina, recorre toda mi suave piel.

Al escuchar los marchos de mi caballo giro un poco la cabeza para poder mirar mi transporte, un carruaje muy precioso. Mi
pura sangre ingles es un tipo de caballo tan elegante que podría dejar atónito a cualquiera que le mire.

Al decir verdad es un caballo macho muy extravagante, siempre hay que hacerse notar, no hay tiempo para las penas.

Al parar frente mío el cochero baja para poder abrirme la puerta.

-No te preocupes, puedo hacerlo.-hablo abriendo la pequeña puerta para poder entrar.

Por su parte solo asiente y vuelve a su puesto.

Al cerrar abro la pequeña cortina para poder mirar hacia afuera, el carruaje comienza a moverse y escucho el relinchar del mismo.

Con forme vamos en el camino las diferentes casas se hacen ver, los autos, carruajes e incluso una que otra tienda.

En general me gustan más las tiendas del centro de la ciudad, las prendas son divinas, y claro que más caras pero el dinero es lo de menos.

Al llegar lo primero que hago es poner mi sombrero y ajustarlo para poder los pies en la loza lisa.

-Martín, ire allí.-señalo y me asiente-Por favor cuida a Hudson.

Le pido refiriendome al caballo, subo a la banqueta para poder entrar a una tienda de mis favoritas.

Al entrar la campana suena haciendo que me miren asi que solo doy media sonrisa.

-Kate.-me saluda la jefa de ahí.

-Camile es un gusto verte de nuevo.

Saludamos de beso en la mejilla, lo que hace después es tomarme de los hombros para mirarme fijamente.

-¿Evento especial?

-Me conoces.-admito haciendo mi cabeza hacia un lado-Una fiesta, es para hoy lo crees!

-¡No! ¿De verdad? Demonos prisa, ven cuentame.

Me guía a una sala que es V.I.P por lo que tomamos asciento en los sillones de terciopelo.

-Un vestido victoriano, me gustaría en color verde, dime ¿Tienes?

Al decir lo último suelta una risita tocando su nariz para mirarme alzando ambas cejas.

-Vaya... si que sabes lo que quieres.

-Claro.

-Tengo vestidos victorianos y casualmente en esta situación si, tengo de color verde.

-¡Perfecto!-aplaudo delicadamente sin hacer tanto ruido-Quiero probarmelo.

-Lo traere, dame unos minutos.

Asiento cruzando mis piernas para mirar toda la tienda, es una tienda llena de vestidos perfectos.

-Una botella de champagne para la señorita de aqui-ordena mirandome-Que sea rapído.

Suelto una risa nasal viendo cómo es que el chico que viene con la botella titubea un par de cosas.

-Dame la copa.-me la entrega-Ahora ¿puedes servirme?

-C-claro.

Al servirme doy un pequeño trago.

-Te lo agradezco.

Esto hace que el tiempo de espera sea más ligero, la champagne no es mi favorita pero aún asi disfruto de lo que llegan a brindarme, a esto se le llama aprovechar.

Calculo uno 20 minutos en lo que llega de nuevo Camile.

-¿Es lindo no?

Me pregunta mostrando el vestido, inmediatamente mis ojos se abren sorprendidos por lo que ven, es el vestido perfecto.

-Estoy jodida.-las palabras salen de mi boca, asi que la tapo y emocionadamente vuelvo a hablar-¡Me encanta!

-¡Es hora de que te lo pruebes mujer!

-Enseguida.

Me levanto sacudiendo mi vestido para ir a los probadores, comienzo a quitar mis prendas hasta quedar en las interiores.

Dos chicas junto a Camile comienzan a colocarme el vestido cuidadosamente, la tela se siente tan suave y ligera, esto es de ensueño.

Comienzan a abrochar el corset de tiras sacandome un ligero suspiro.

Al terminar me guían hacia uno de los espejos grandes al mirarme me quedo cómo estupida.

Es decir tan sorprendida, las diferentes capas, tonos de color y el cómo se mueve de una manera tan elegante cuando doy un ligero paso.

Deja ver mis claviculas y parte de mis antebrazos, cubre mis piernas hadta un poco arriba de mis tobillos, necesito unos tacones ¡urgentemente!

-Carajo es precioso, no puedo dejar de mirarme.

-Esta sera tú noche Kate, sin duda alguna.-me dice mirando el reflejo.

-Me lo llevo.

-Sobre eso...

-¿Te preocupa el precio? Por favor-agito mi mano ironicamente-No me importa el precio, solo dime cuanto es y te lo pagare.

-Entendido.

Da una seña a sus trabajadoras por lo que rapidamente se acercan a mi para ir de nuevo a las probadores donde quitamos el vestido.

Me dan mi espacio para cambiarme en lo que empacan el mismo.

Al salir y empujar la cortina me dirigo a recepción donde es que pagare. Saco mi bolsa y me entregan la caja con un moño.

-600 euros linda.

Saco el dinero de mi bolso y lo entrego.

-Quedate con el cambio, ¡muchisimas gracias!

Salgo mirando mi carruaje para caminar hacia el y dejar el vestido dentro del mismo.

Lo unico que me queda es buscar unos tacones adecuados junto a unos accesorios.

Al dejar las cosas en su lugar camino cruzando la calle agarrando mi sombrero pues el viento puede hacerlo volar.

Entro a un lugar de zapatería donde tienen modelos exclusivos y de mis favoritos. Es hermosa la sensación de encontrar lo que realmente te gusta.

-Buenos días.-entro saludando con mi mano derecha-Busco unos zapatillas de gamuza, con un tacón alto.

-Mhm, claro, acompañeme.

Al seguir su paso miro los diferentes zapatos que se encuentran en las estanterías, no hay mucho pero démosle una oportunidad ¿No?

-Tenemos estos-con su mano muestra los de una estantería "exclusiva".

-Ya veo... Me gustarían unos un poco más gruesos. Son para un evento especial.

Le miro hacer una mueca asi que optó por hablar.

-¿Es tan difícil? No sé preocupe, gracias.

-¡Espere! Tome asiento.-pasa por una cortina, buscando modelos o al menos es lo que pienso.

-Hah.-tiro mi cabeza hacia atrás soltando un suspiro mientras espero. La música reproduciendose es pegadiza.

Unos cuantos minutos pasan y la mujer llega con una caja para mi.

-Espero sean de su agrado.

Su reverencia me hace soltar una risa seca.

Al abrir la caja me encuentro con los tacones más precioso que mis ojos han visto.

-Son perfectos ¿Cuánto quieren por ellos?

-Cuestan 50 Euros.

-Ponlos en una bolsa bonita, me los llevare. ¿Cuál es tu nombre?

-Rachel.

-Rachel, no tenemos todo el día.-con una sonrisa la miro desde abajo- Vamos para que los pague.

Estamos a tan solo unas horas.

Koko... Estoy ansiosa por verte.

Cap cortito pq en el siguiente se vendra lo bueno buenooo, regrese y tal vez con nuevos fanfics.👀