Capítulo 20
—¿Para dónde diablos vas vestido de esa manera?, ¿A misa o que carajo? —Preguntó TaeHyung viendo a Jungkook de pies a cabeza.
—Cuida tu vocabulario TaeTae — le regañó Hyuna de inmediato —Y Kookie va para la casa de Minnie a conocer a su suegro —Dijo sonriendo mientras le arreglaba el cuello de la camisa a su hijo.
—No lo sé Kookie, pareces que te convertirás en sacerdote —Dijo arqueando una ceja.
Jungkook lo miró mal por usar ese estúpido apodo solo para mofarse de él, pero ¿ya qué?, se había acostumbrado a ser llamado de esa manera, y soltó un suspiro.
Pero no podía mentir su amigo tenía razón, estaba usando ropa formal, una camisa con botones y mangas largas Jungkook la odiaba, unos pantalones horribles que no sabía de donde los había sacado su madre, y unos zapatos de abuelo que se veían horrorosos.
Hyo Jong miró a su hijo rascándose la cabeza —Amor sabes que no me gusta contradecirte, pero ese no es nuestro Jk, creo que él debería ser él mismo, un poco más arreglado, pero usando su propio estilo, o le agrada a su suegro siendo él, o no le agrada, y al fin y al cabo Jungkook está saliendo con Jimin no con su padre, yo nunca le agradé a tu padre y llevamos 20 años casados y siendo felices —Dijo encogiéndose de hombros.
Hyuna torció los labios, pero al final accedió —Bien ustedes ganan, pero sabes que tienes que verte bien hijo, la primera impresión cuenta mucho —
Jungkook fue de vuelta a su cuarto a buscar que ponerse, realmente estaba nervioso, bueno para que mentirse a sí mismo, Jungkook tenía miedo, la sola idea de conocer al padre de Jimin le tenía los vellos de punta.
Buscó algo más a su estilo, un jean negro y para no ir tan informal eligió una camisa negra que su madre le había regalado en su cumpleaños, jamás se la había puesto, pero era mejor que la que había elegido Hyuna.
—Uh, ahora parece que vas para un funeral —Canturreó TaeHyung — bueno tiene lógica, el papá de Jimin es militar lo más probable que es no regreses con vida— Se burló.
—Cállate TaeHyung— Gruñó Jungkook entre dientes.
—No exageres TaeTae —Dijo Hyuna —¿Estás seguro que es cómo quieres ir vestido? —
Jungkook asintió ya estando listo, tomó un dibujo que había hecho de Jimin, últimamente disfrutaba mucho dibujando el rostro de su novio y siguiendo los consejos de Jimin quiso usar un poco de color fue mínimo lo que usó, pero por algo se empieza.
Salió de su habitación, si había llegado su hora sólo el destino lo sabría, probablemente estaría muerto para mañana si el padre de Jimin se enteraba de la verdad.
Era algo muy poco probable, pero la atormentada mente de Jungkook no podía dejar de pensar en lo que pasaría, si el padre de su novio se enteraba.
Aunque realmente prefería sufrir él, que hacer sufrir a Jimin.
Jungkook se preguntaba ¿Cuándo dejaría de sentirse así por Jimin? ¿Cuándo diablos dejaría de querer protegerlo? Era estúpido, eso de que el chico malo se enamora del chico bueno sólo pasaba en las historias no en la vida real, pero allí estaba el perdido por Jimin.
¿Por qué el amor es tan raro?
Es que Jungkook no sabía cómo justificar su comportamiento, él era un imbécil todo el tiempo, pero sólo faltaba una mirada de Jimin para dejarlo desarmado y bajar la guardia, simplemente no podía evitar que ese chiquillo con cara de ángel se metiera bajo su piel y cambiará hasta su forma de vestir y sin siquiera pedirlo.
Cuando bajó del autobús y caminó a la casa de Jimin, trató de controlar su respiración y su corazón que latía desenfrenado.
Le tomó más de un suspiro acercarse a la puerta y tocar, para su suerte Jimin fue quien le abrió quedando con la boca abierta.
— Woow te ves muy muy bien —dijo sonriendo con aprobación a su ropa, nunca había visto a Jungkook con una camisa de ese estilo, y la verdad es que se veía muy bien.
— ¿Realmente te gusta? — Preguntó Jungkook.
—Te ves muy guapo Kookie, aunque tú siempre te ves guapo no importa que te pongas — Dijo Jimin con las mejillas sonrojadas.
—Tú también te ves muy bonito— le respondió Jungkook relajándose un poco y acercándose a los labios de Jimin.
El castaño sonrió terminando de unir sus labios en un beso, que no duró mucho pero tuvo un efecto sosegador en Jungkook.
—Te traje esto — dijo mostrando su dibujo rascándose la cabeza.
A Jimin se le iluminaron los ojos al verlo — ¡Está muy lindo Jungkook!, pusiste una mariposita en mi nariz, y es azul gracias de verdad — Chilló abrazándolo.
Jungkook correspondió al abrazo con una sonrisa, realmente amaba ver a Jimin sonreír, pero lo que definitivamente más amaba era ser él, el motivo por el que Jimin sonriera.
En ese momento una tos fingida se escuchó— Creo que las visitas no se hacen en la puerta — una voz severa habló detrás de ellos.
Jimin se soltó del abrazo y miró a su padre, que tenía puesto el uniforme militar, y abrió sus labios asombrado, conociendo las intenciones de su padre.
Hacia un rato Park Yong Hwa estaba vestido de manera normal, sólo se puso el uniforme para intimidar a Jungkook.
Y vaya que lo logró, Jungkook se puso pálido tragando saliva —B-buenas t-tardes— tartamudeo un poco.
—Buenas tardes, así que tú eres el novio de mi Jimin —dijo examinándolo de pies a cabeza.
—Si papá él es...
—Creo que tu novio puede presentarse el mismo —dijo con seriedad— ¿No es así? — preguntó mirando los ojos de Jungkook.
—Si...
—¿Si? -
Jungkook volvió a tratar grueso —Si señor, soy Jeon Jungkook, un gusto conocerlo—
—Lástima no poder decir lo mismo, tenía la esperanza que mi Jimin no tuviera novio al menos hasta cumplir sus treinta — dijo soltando un bufido.
— ¡Papá! —Exclamó Jimin apenado.
—Querido, ¿Qué haces? — Preguntó la señora Park detrás de su esposo.
—Le doy la bienvenida a la familia al novio de nuestro hijo, cariño—
La señora Park sólo sonrió negando con la cabeza — ya vamos pasen la cena está lista —Dijo llevándose a su marido.
Jimin tomó la mano de Jungkook dándose cuenta que estaba frío —¿Estas bien Kookie? —
Jungkook asintió por inercia, no porque realmente lo estuviera, diablos jamás en su vida se había sentido tan intimidado con sólo una mirada.
El señor Park era un militar experto, tenía esa aura de seriedad y una mirada calculadora, que daba a entender que siempre estaba un paso delante de todo, y Jungkook sentía que su suegro podía ver a través de sus ojos y escudriñar su mente, ¡Mierda! Eso le puso la piel de gallina.
Siguió a Jimin hacia el comedor, sólo la pequeña manito de su novio lo mantenía en la realidad y le daban la seguridad de no salir corriendo, además Jungkook no era un cobarde.
Pero a veces los cobardes sobreviven... le dijo su mente con la estúpida voz de Starscream resonando en su cabeza.
Cuando se sentaron la mirada del señor Park se clavó en él — Así que... ¿A qué te dedicas muchacho? —
—Estudio, señor —respondió Jungkook.
—¿Eres miembro de una pandilla? —
—Papá claro que Kookie no pertenece a ninguna pandilla— lo defendió Jimin de inmediato.
—No estaba hablando contigo Jimin, y no pediste permiso para hablar — Dijo Yong Hwa.
Jimin entrecerró sus ojos su padre se estaba pasando, y no quería que asustara a su novio.
Jungkook se aclaró la garganta —No soy miembro de ninguna pandilla, ¿Por qué la pregunta puedo saber señor? —
Yong Hwa se encogió de hombros— Eres muy joven, pero veo que tienes muchos tatuajes y vestido todo de negro ¿eres roquero o emo? —
—El rock es de mis géneros musicales favoritos, pero no pertenezco a ninguna banda, me gustan los tatuajes, mis padres tienen una tienda de tatuajes y realmente creo que etiquetar a una persona como pandillero o emo, simplemente porque tiene la piel tatuada o su forma de vestir es una forma injusta de juzgar, según como mis padres me educaron tatuar es una manera de expresar el arte— Jungkook por primera vez habló con firmeza.
Park Yong Hwa sonrió satisfecho con la respuesta, quería que el novio de su hijo fuera un joven con carácter.
—Ya veo — dijo entonces — Jimin me contó que sabes dibujar, ¿eso es cierto? —
Jungkook asintió —Si — su suegro arqueo una ceja —Si señor —corrigió entonces el pelinegro.
— ¿Piensas dedicarte a eso entonces?, Jimin me dijo que han hablado algo de estudiar arte o diseño—
Jungkook que apenas había probado la comida dirigió su mirada a su novio, Jimin le dio una mirada de disculpa y le hizo un pequeño puchero.
—Aún no lo sé, es algo que debo hablar con mis padres, les dije que les ayudaría en la tienda —
—Debes decidirte rápido, están a pocos meses de graduarse — dijo serio el padre de Jimin.
La comida siguió su curso siendo bastante incómoda y llena de tensión, las preguntas de parte de Park Yong Hwa tenían a Jungkook sudando la gota gorda.
Sobre todo cuando empezaron a hablar sobre prestar el servicio militar.
—Se me ha ocurrido algo, me gustaría que hicieras un dibujo de mí — Dijo de repente el señor Park haciendo a Jungkook atorarse y toser.
—Claro señor, sólo necesito una foto suya — respondió Jungkook al aclararse las garganta.
—¿Para que necesitas una foto mía?, ¿me estás diciendo que no eres capaz de dibujarme gravándote mi rostro? —
—No es eso señor, sólo es para que los detalles queden bien, me gusta que mis dibujos queden lo más perfectos como sea posible—
—Eso es bueno, a mí también me gusta que las cosas se hagan de la mejor manera—
—Creo que es hora del postre, ¿me ayudas querido? — dijo la señora Park tratando de salvar a Jungkook de preguntas incómodas.
—Quiero conocer más a mi yerno, ve tu Jimin, ayúdale a tu madre a traer el postre—
Jimin se levantó refunfuñando, pobre de su Kookie, cuando terminará la cena lo llevaría a su habitación y le daría muchos besos, su padre se estaba pasando un poco demasiado.
—Jungkook, ahora si dime ¿Eres serio con mi hijo? —
—Sí, sí señor— contestó Jungkook, porque esa era la verdad, ahora su relación con Jimin iba muy en serio, aunque faltaba el detalle de contarle la verdad a Jimin.
Sólo pensar en eso le hacía temblar.
—Me parece bien que vayas en serio con mi Jimin, es mi único hijo ¿sabes?, no me gustaría verlo sufrir—
Jungkook asintió sus piernas por debajo de la mesa estaban temblando— Trataré de hacer todo lo que esté en mis manos para hacerlo feliz—
—Yo soy militar como lo has notado, soy capitán, tengo influencia en las fuerzas armadas, se cómo rastrear a alguien, y manejo muy bien las armas, ¿sabías que el tiempo te da la suficiente experiencia como para hacer pasar un homicidio por suicido? —le contó.
Jungkook no era tonto, claramente su suegro la estaba diciendo, que si le hacía daño a Jimin lo buscaría hasta debajo de las piedras y lo que vendría después no sería nada bonito.
¿Por qué diablos se demoraban tanto con el postre?, se preguntó sin saber que decir, removiéndose en su asiento.
El postre llegó y Jungkook lo comió lentamente aunque en realidad, no le supo a nada, sólo quería irse a casa.
Terminaron la cena y el señor Park se levantó de la mesa tendiéndole la mano a Jungkook —Cuida bien de mi hijo—
—Lo haré, señor — Dijo Jungkook sin dudar estrechándole la mano.
Jungkook se excusó para irse, diciendo que después no encontraría un autobús, Jimin lo acompañó hasta la puerta, ante la mirada atenta de su padre.
—Lo siento Kookie —dijo Jimin con un puchero —mi papá es un poco sobreprotector conmigo, pero le caíste bien lo sé —
Jungkook se río con ironía— Si eso fue caerle bien, imagínate si le hubiera caído mal —Dijo sarcástico.
—Se porta así porque no te conoce bien, pero cuando se dé cuenta que eres un gran chico que me quieres, y me proteges va a empezar a bajar la guardia ya verás— Dijo pasándole sus brazos por el cuello.
El Pelinegro le rodeó la cintura, y acercó sus labios para un beso, Jungkook sentía que su cuerpo estaba lleno de adrenalina y se estaba relajando en el beso.
—¡Jimin no sabía que necesitarás tanto tiempo para despedirte de tu novio! —la voz del señor Park los interrumpió haciéndolos separar.
—Es mejor que me vaya— Dijo Jungkook
—Nos vemos mañana Jungkookie— Dijo Jimin con una sonrisa.
Jungkook no pudo evitar robarle otro beso.
Empezó a alejarse de la casa dejando salir el aire lentamente, al menos seguía vivo y en una sola pieza, bueno ya conocía a su suegro y sabia a lo que se enfrentaría de ahora en adelante.
Jimin entró a la sala con los brazos cruzados haciéndole un puchero a su padre — ¿Por qué te portaste así con Jungkookie?, lo vas a espantar —se quejó.
—Fue justamente por eso que me porté así con él, si se espanta de mi es porque no es el indicado, pero al parecer el chico tiene carácter, tiene mi aprobación—
Jimin sonrió y abrazó a su padre, estaba feliz ahora sólo faltaba convencer a Jungkook de inscribirse en la Universidad e ir juntos a Seúl y su vida sería perfecta.
Hola mis amores bellos hermosos preciosos los amo un montón espero que les haya gustado.
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